Amado hermano Mapzero. Recibe mis saludos, mi amor y mis bendiciones.
Amado hermano, lo primero que hay que hacer es separar el mal del pecado. Muchos confunden esto.
El mal es inherente al ser humano, porque el ser humano es un ser imperfecto. Nuestro mundo es imperfecto. Todo el universo es imperfecto, pero eso no significa que el mal deba ser algo que no podamos dejar atrás, no hay que olvidar las palabras de Jesús cuando dijo: "Sed perfectos, asi como nuestro Padre, es perfecto", lo que significa que el mal si, se puede derrotar, porque tanto el ser como todo el Universo, deben encaminarse hacia la perfección; esa es la meta de esta creación. Con esto descartas de inmediato las cuatro preguntas que componen la "paradoja de Epicuro"
Técnicamente el mal significa: Ser inconsciente de la Ley divina, el no hacer la voluntad de Dios.
Mientras que el pecado significa: No cumplir con la Ley divina, el no hacer la voluntad de Dios, en forma consciente.
En ambos casos se establece como prioridad el conocimiento de la Ley divina: el ejercer la voluntad de Dios.
Mientras el ser esté inconsciente de ejercer la Ley (el ejercer la voluntad de Dios), será un productor del mal, pero el mismo mal le servirá de guía o de maestro (pues por ello vivirá errando), y el error le irá mostrando o enseñando, lo que se debe hacer o no hacer.
Pero como Epicuro centra su paradoja en Dios, es muy necesario aclarar que el ser humano fue creado con el don de adoración (amén de otros donde entra también el don de sabiduría por el cual puede pensar, razonar y discernir), lo que le ha permitido (desde siempre), buscar a Dios. Más aún, Dios permitió que su Hijo viniese a este mundo a revelar la Verdad y a entregar el Reino de Dios, a todo hombre (genérico), lo que se conoce como "Salvación". mediante la salvación Dios, ha llegado y llega al hombre, sin la necesidad de que el hombre busque a Dios.
Como Dios y su reino están en el interior del hombre, el hombre puede acceder a él y recibir toda la Verdad que necesitará para ascender al Cielo, la morada del Padre. Cuando llegue a esa morada, el hombre habrá alcanzado la perfección. Así el Mal y el Pecado, habrán sido derrotados para siempre.
Con amor: junegofe
YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA.