Hola, que la Paz del Señor sea con todos vosotros.
Verán, me gustaría debatir sobre María, pero la María bíblica, la sencilla, la humilde, la que en verdad nos es mostrada en la Escritura.
Esta María que apenas vemos nada escrito, pero que oculta una gran verdad para en verdad recibir a Cristo, al igual que ella, en nuestras vidas.
¿Qué pido?... honestidad, sencillez, y tacto fino. Es decir, no ir ni hacia los dogmas, ni hacia las creencias populares, ni hacia ciertas tendencias institucionales o denominacionales, no, sino a hacia la María que nos brinda la Escritura.
¿Para qué?... para descubrirla, para en verdad ver cual es su lugar hoy en la Iglesia.
¿Cómo?... muy sencillo, no ir más allá de lo que en el N.T. está escrito. Centrarnos en cada línea, en cada párrafo, en cada expresión, aunque son pocas, que de ella tenemos en la Escritura.
¿Quienes?... todos los que se sientan capaces de no mirarse así mismos, todos los que puedan evitar el ir más allá de lo que está escrito, todos cuanto en verdad quieren descubrir a Cristo en María.
Así pues, en sencillez y humildad, les invito. Espero que antes de participar, antes tan siquiera de hablar, mediten si serán capaces de poder ayudar a descubrir quien es y en verdad María a tal cual Dios mismo por medio de Su Palabra nos la muestra.
Un saludo, y que la gracia de Nuestro Señor Jesucristo, el Amor del Padre, y la Comunión del Espíritu Santo sea con todos vosotros.
PD. Tengan en cuenta que claramente estoy diciendo que el deseo es ir más allá de todo cuanto de ella, en estos foros, se ha debatido hasta el momento. Espero que bien entiendan.
Verán, me gustaría debatir sobre María, pero la María bíblica, la sencilla, la humilde, la que en verdad nos es mostrada en la Escritura.
Esta María que apenas vemos nada escrito, pero que oculta una gran verdad para en verdad recibir a Cristo, al igual que ella, en nuestras vidas.
¿Qué pido?... honestidad, sencillez, y tacto fino. Es decir, no ir ni hacia los dogmas, ni hacia las creencias populares, ni hacia ciertas tendencias institucionales o denominacionales, no, sino a hacia la María que nos brinda la Escritura.
¿Para qué?... para descubrirla, para en verdad ver cual es su lugar hoy en la Iglesia.
¿Cómo?... muy sencillo, no ir más allá de lo que en el N.T. está escrito. Centrarnos en cada línea, en cada párrafo, en cada expresión, aunque son pocas, que de ella tenemos en la Escritura.
¿Quienes?... todos los que se sientan capaces de no mirarse así mismos, todos los que puedan evitar el ir más allá de lo que está escrito, todos cuanto en verdad quieren descubrir a Cristo en María.
Así pues, en sencillez y humildad, les invito. Espero que antes de participar, antes tan siquiera de hablar, mediten si serán capaces de poder ayudar a descubrir quien es y en verdad María a tal cual Dios mismo por medio de Su Palabra nos la muestra.
Un saludo, y que la gracia de Nuestro Señor Jesucristo, el Amor del Padre, y la Comunión del Espíritu Santo sea con todos vosotros.
PD. Tengan en cuenta que claramente estoy diciendo que el deseo es ir más allá de todo cuanto de ella, en estos foros, se ha debatido hasta el momento. Espero que bien entiendan.