No amigo, estás equivocado, primero y principal es el orden de los eventos....
Por ejemplo, no puedo aplicar la administración que Dios hace a través de su Iglesia, al tiempo cuando esta no existía antes de Pentecostés, un error común, que vemos hoy en día, es cuando se extrae fraudulentamente el uso del diezmo, propio de la administración mosaica y lo aplican a la Iglesia, siendo que quién está presente es Cristo en medio de nosotros (Mt.18:20).
Y en este caso puntual, la Iglesia, al figurar como la futura Esposa del Cordero, es humillada por el uso del diezmo porque en que cabeza cabe ¿Que el Esposo le esté cobrando diezmos a su Esposa?
Asi mismo ocurre con los eventos proféticos, tienen un orden que no pueden ser alterados por la ignorancia o perversidad del hombre religioso.
La segunda venida del Señor en las nubes del cielo, con poder y gloria, está relacionada con Israel y las naciones gentiles... y ocurre al final de la semana 70 de la profecía de Daniel... de manera que hay que esperar la reconstrucción del templo judío, su profanación y luego la Gran Tribulación después de la mitad de la semana, la cual finaliza con la segunda venida del Señor.
Nada del orden de estos eventos, tienen que ser asociados con la Iglesia y su arrebatamiento, pues no pertenecen a la profecía, la Iglesia es un misterio escondido desde los siglos en Dios, igualmente el arrebatamiento masivo de los redimidos por Cristo, antes de la Gran Tribulación, es otro misterio.
Te presente un cuadro de los picos proféticos, ni aun así logras entender nada.
La Iglesia y su arrebatamiento, nada tiene que ver con la profecía.
