Re: ¿Que mal hay en comer animales estrangulados?... Hechos 21:25
Es claro que la prohibición de comer estrangulado es de antiguo, de los judíos porque la sangre debía derramarse en tierra, lo cual significa que la muerte más probable para cualquier animal de consumo sería el degollamiento y posteriormente el desangramiento.
Los gentiles que se convertían nunca tuvieron tales prohibiciones, se les invita pues a apegarse a una costumbre que mantendría a judíos y no judíos en calma.
Ahora ¿Es una prohibición de DIOS o es provisional?
La respuesta:
1Corintios 9:20-23
Con los judíos me he hecho judío para ganar a los judíos; con los que[1] están bajo la Ley, como quien está bajo la Ley —aun sin estarlo— para ganar a los que están bajo ella.
Con los que están sin ley, como quien está sin ley para ganar a los que están sin ley, no estando yo sin ley de Dios sino bajo la ley[1] de Cristo*.
Me he hecho débil con los débiles para ganar a los débiles. Me he hecho todo a todos para salvar a toda costa a algunos.
Y todo esto lo hago por el Evangelio para ser partícipe del mismo.
En la mentalidad de Pablo es válido hacerse aceptable, emular para arrastrar a la conversión a las personas.
1Corintios 8:8-13
No es ciertamente[1] la comida lo que nos acerca a Dios*; ni va a faltarnos por no comer, ni va a sobrarnos por comer.
Pero tened cuidado que esa vuestra libertad no sirva de tropiezo[1] a los débiles.
En efecto,[1] si alguien te ve a ti, que tienes conocimiento, sentado a la mesa en un templo de ídolos, ¿no se creerá autorizado por su conciencia, que es débil, a comer de lo sacrificado a los ídolos?
Y por tu conocimiento se pierde el débil: ¡un hermano por quien murió Cristo!
Y pecando[1] así contra vuestros hermanos, hiriendo su conciencia, que es débil, pecáis contra Cristo*.
Por tanto, si un alimento causa[1] escándalo a mi hermano, nunca comeré carne para no dar escándalo a mi hermano.
Es claro que la prohibición de comer estrangulado es de antiguo, de los judíos porque la sangre debía derramarse en tierra, lo cual significa que la muerte más probable para cualquier animal de consumo sería el degollamiento y posteriormente el desangramiento.
Los gentiles que se convertían nunca tuvieron tales prohibiciones, se les invita pues a apegarse a una costumbre que mantendría a judíos y no judíos en calma.
Ahora ¿Es una prohibición de DIOS o es provisional?
La respuesta:
1Corintios 9:20-23
Con los judíos me he hecho judío para ganar a los judíos; con los que[1] están bajo la Ley, como quien está bajo la Ley —aun sin estarlo— para ganar a los que están bajo ella.
Con los que están sin ley, como quien está sin ley para ganar a los que están sin ley, no estando yo sin ley de Dios sino bajo la ley[1] de Cristo*.
Me he hecho débil con los débiles para ganar a los débiles. Me he hecho todo a todos para salvar a toda costa a algunos.
Y todo esto lo hago por el Evangelio para ser partícipe del mismo.
En la mentalidad de Pablo es válido hacerse aceptable, emular para arrastrar a la conversión a las personas.
1Corintios 8:8-13
No es ciertamente[1] la comida lo que nos acerca a Dios*; ni va a faltarnos por no comer, ni va a sobrarnos por comer.
Pero tened cuidado que esa vuestra libertad no sirva de tropiezo[1] a los débiles.
En efecto,[1] si alguien te ve a ti, que tienes conocimiento, sentado a la mesa en un templo de ídolos, ¿no se creerá autorizado por su conciencia, que es débil, a comer de lo sacrificado a los ídolos?
Y por tu conocimiento se pierde el débil: ¡un hermano por quien murió Cristo!
Y pecando[1] así contra vuestros hermanos, hiriendo su conciencia, que es débil, pecáis contra Cristo*.
Por tanto, si un alimento causa[1] escándalo a mi hermano, nunca comeré carne para no dar escándalo a mi hermano.