Si lo relacionamos con el sexo, jamás podremos comprender lo que es el amor
El sexo es un apetito de nuestro cuerpo carnal, como el hambre o la sed - continuamente estamos viendo como se comercializa el sexo,
y de que manera,es el detonante de los abusos a menores y las violaciones aberrantes. por lo tanto, el amor es otra cosa.
27. «Pero yo os digo a los que me escucháis: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os odien,
28. bendecid a los que os maldigan, rogad por los que os difamen
¿ De que manera podemos llevar a cabo estas cosas ? - Jesús lo dice:
.
29. Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite el manto, no le niegues la túnica.
30. A todo el que te pida, da, y al que tome lo tuyo, no se lo reclames.
31. Y lo que queráis que os hagan los hombres, hacédselo vosotros igualmente.
No devolver golpe por golpe, ni devolver ofensas al que nos ofende, no pleitear por cosas poco importante, el manto y la túnica representan nuestra posición social, si alguien nos la rebata, no es motivo para reclamar, los títulos y cargos, no nos hace mejor persona, - es pura vanidad.
En cambio, hacer el bien sin mirar a quien - es cosechar amigos.
32. Si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Pues también los pecadores aman a los que les aman.
33. Si hacéis bien a los que os lo hacen a vosotros, ¿qué mérito tenéis? ¡También los pecadores hacen otro tanto!
34. Si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores prestan a los pecadores para recibir lo correspondiente.
35. Más bien, amad a vuestros enemigos; haced el bien, y prestad sin esperar nada a cambio; y vuestra recompensa será grande, y seréis hijos del Altísimo, porque él es bueno con los ingratos y los perversos
Por ejemplo, si una persona se arrepiente de su mal comportamiento, Dios no tienen inconveniente en perdonarlo, puesto que Jesús, vino precisamente por los pecadores y no por los justos.
.
36. «Sed compasivos, como vuestro Padre es compasivo.
37. No juzguéis y no seréis juzgados, no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados.
38. Dad y se os dará; una medida buena, apretada, remecida, rebosante pondrán en el halda de vuestros vestidos. Porque con la medida con que midáis se os medirá.»
La maldad de una persona, no nos da el derecho de hacer lo mismo, porque caeríamos a su mismo nivel. porque la justicia no es lo mismo que la venganza
Es muy difícil, pero con la ayuda de Dios, podemos, - no nos apartemos de Dios y El no se apartará de nosotros.
El sexo es un apetito de nuestro cuerpo carnal, como el hambre o la sed - continuamente estamos viendo como se comercializa el sexo,
y de que manera,es el detonante de los abusos a menores y las violaciones aberrantes. por lo tanto, el amor es otra cosa.
27. «Pero yo os digo a los que me escucháis: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os odien,
28. bendecid a los que os maldigan, rogad por los que os difamen
¿ De que manera podemos llevar a cabo estas cosas ? - Jesús lo dice:
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29. Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite el manto, no le niegues la túnica.
30. A todo el que te pida, da, y al que tome lo tuyo, no se lo reclames.
31. Y lo que queráis que os hagan los hombres, hacédselo vosotros igualmente.
No devolver golpe por golpe, ni devolver ofensas al que nos ofende, no pleitear por cosas poco importante, el manto y la túnica representan nuestra posición social, si alguien nos la rebata, no es motivo para reclamar, los títulos y cargos, no nos hace mejor persona, - es pura vanidad.
En cambio, hacer el bien sin mirar a quien - es cosechar amigos.
32. Si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Pues también los pecadores aman a los que les aman.
33. Si hacéis bien a los que os lo hacen a vosotros, ¿qué mérito tenéis? ¡También los pecadores hacen otro tanto!
34. Si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores prestan a los pecadores para recibir lo correspondiente.
35. Más bien, amad a vuestros enemigos; haced el bien, y prestad sin esperar nada a cambio; y vuestra recompensa será grande, y seréis hijos del Altísimo, porque él es bueno con los ingratos y los perversos
Por ejemplo, si una persona se arrepiente de su mal comportamiento, Dios no tienen inconveniente en perdonarlo, puesto que Jesús, vino precisamente por los pecadores y no por los justos.
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36. «Sed compasivos, como vuestro Padre es compasivo.
37. No juzguéis y no seréis juzgados, no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados.
38. Dad y se os dará; una medida buena, apretada, remecida, rebosante pondrán en el halda de vuestros vestidos. Porque con la medida con que midáis se os medirá.»
La maldad de una persona, no nos da el derecho de hacer lo mismo, porque caeríamos a su mismo nivel. porque la justicia no es lo mismo que la venganza
Es muy difícil, pero con la ayuda de Dios, podemos, - no nos apartemos de Dios y El no se apartará de nosotros.