PASTORAS????

PASTORAS????

  • SI . LA BIBLIA LO APOYA

    Votos: 5 14,3%
  • NO. LA BIBLIA NO LO AUTORIZA

    Votos: 17 48,6%
  • SI. MI EXPERIENCIA LO ABALA

    Votos: 2 5,7%
  • NO . MI EXPERIENCIA HA SIDO MALA

    Votos: 1 2,9%
  • SI .NO HAY NADA QUE LO IMPIDA

    Votos: 8 22,9%
  • NO.CONSIDERACION PERSONAL

    Votos: 3 8,6%

  • Votantes totales
    35
  • Encuesta cerrada .
Pero, hombre, Malcom.
¿A que se debe esta animadversión contra la mujer?
¿De que se trata: de sectarismo o simplemente es una cuestión de misoginia.
Citas la Carta a los Corintios. Bien, pero resulta que el mismo que escribió Corintios escribió Galatas donde en 3:27-28 afirma que todos los que han sido revestidos en Cristo han eliminado las diferencias y entre ellas destaca la de que NO HAY HOMBRE NI MUJER por lo que si tu haces una distinción es que te falta el revestimiento. Te falta ser revestido de Cristo.
Donde Pablo inspirado por Dios dice que no hay dintición tu te permites distinguir al 50% (por lo menos) del cuerpo de Cristo. ¿Con que autoridad? ¿La tienes? ¿Donde la has adquirido?
Te olvidas, además, que el Hombre (Adan) fué creado varon y hembra. Luego tanto el varon como la hembra son el hombre.
¿No has leido esta frase? Bienaventurado el que no se condena a sí mismo en lo que aprueba.
Toma nota
 
LOS ÁNGELES


Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza, por «causa de los ángeles».

Aquí concluye otro motivo de su razonamiento el apóstol por el cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza. El motivo, según nuestra traducción, son los «ángeles».

Y, ¿QUIÉNES SON «ESTOS» ÁNGELES?

Escribe D. E. Trenchard en su comentario de la Epístola: «¿Quienes serían los ángeles de la última parte del versículo? Los más de los expositores sanos recuerdan la intervención de los ¿ángeles en los momentos cumbres de la redención... Según ellos, la frase significa que la modestia de las mujeres y su sumisión puede ser objeto de interés para seres angélicos que se hallen invisiblemente en el acto del culto. Puede ser así. pero hemos de tener en cuenta que «ANGELOS» quiere decir «MENSAJERO» en asuntos terrenales, de modo que la frase podría ser «A CAUSA DE LOS MENSAJEROS». pues nada hay en el contexto que exija que se trate de mensajeros celestiales. Sabemos que muchos siervos de Dios pasaban de una iglesia a otra en la época apostólica cumpliendo diversos ministerios. Con una palabra análoga y en un caso concreto, éstos se llaman «MENSAJEROS DE LAS IGLESIAS Y GLORIA DE CRISTO» (2 Co.8:23). Estos siervos de Dios provenían de iglesias donde las mujeres se portaban con recato y modestia y les sería motivo de escándalo al ver a las hermanas de Corinto tan emancipadas... Preferimos esta explicación porque nada sabemos de las reacciones de los ángeles celestiales en tales casos, y si podemos deducir cual sería el efecto en siervos del Señor que visitaban las iglesias en Corinto».
Pero insistiendo en que la palabra ANGELOS tiene efectivamente otro significado además del conocido «ángel del cielo», podemos citar a continuación entre otros, a los siguientes pasajes:

«Cuando se fueron los MENSAJEROS (angelon) de
Juan...» Lucas 7:24
«Envió MENSAJEROS (angelops): sus discípulos) delante
de él». Lucas 9:52
Santiago 2:25 dice que Ranab «recibió a los MENSAJEROS
(angelops) y los envió por otro camino».
2 Corintios 12:7 Pablo utiliza esta palabra para definir al aguijón que tiene en la carne, «un mensajero (angelos) de Satanás» .
Lucas 7:27; Marcos 1:2 y Mateo. 11: 10, aludiendo en todos el/os con la palabra mencionada a Juan el Bautista, como enviado o mensajero precursor de Jesucristo.

También en esta ocasión, el sentido se aclara cuando la palabra se traduce como mensajeros. Es decir, aquellos creyentes colaboradores que traían a las iglesias las instrucciones apostólicas ya verbales o escritas.
Además, para ampliar la claridad del texto, podemos considerar que la traducción que se hace de la preposición «DIA» en otras partes de la Biblia se aplica en diferentes términos, tales como:
Marcos 7:29 «A causa de...»
Romanos 4:23 «Con respecto a...»
1ª Corintios 4:10; 2a Corintios 4:5 «Por amor de...»Juan. 7: 13. !I 15:3 «por...»

Tal vez la queja que motiva la inclusión de estos párrafos en su carta fuese que algunos predicadores. que habían visitado la iglesia de Corinto habían trasladado a Pablo su preocupación por la actitud reticente de algunas mujeres casadas que lamentaban tener que cubrirse para desarrollar su ministerio público de oración o predicación en la asamblea y aunque guardaban la tradición, temían que en breve pudiesen dejar de hacerla.
A todos los griegos les gustaba progresar en el conocimiento de cualquier cosa a través del debate y la discusión, donde partidarios y detractores aportaban sus mejores argumentos. En este caso, y fieles a la idiosincrasia de su cultura nacional debatían acaloradamente. Los más progresistas en ésta materia alegaban que el empleo del velo representaba simplemente una discriminación para las mujeres casadas respecto a los varones, sus maridos. Dicho en sentido popular algo así como: «Si nosotras nos tenemos que cubrir cuando oramos o predicamos en público, pues que se cubran ellos también, y si no quieren cubrirse ellos ¿por qué lo vamos a tener que hacer nosotras?»
La intervención de Pablo apela ahora al amor, o al respeto, (como ya lo había hecho en temas como «la sangre» o «lo sacrificado a los ídolos») solicitando una actitud de templanza y humildad en las mujeres «profetas» (predicadoras) principalmente por causa o por amor a «los mensajeros» que les visitaban frecuentemente ministrando la Palabra, y que estaban habituados a las costumbres de otras iglesias y lugares.
Pablo exhorta a las mujeres «profetas» casadas que «hablaban y oraban» en la congregación, diciéndoles que deberían seguir mostrando sobre su cabeza la «señal de autoridad» de su marido, no tanto por ellas, ni siquiera por la congregación sino para quedar facultadas dentro de un testimonio correcto en el ejercicio de su ministerio, ante los inconversos y también delante de otros creyentes que visitaran la iglesia. Además, la mujer casada tenía que mostrar conforme a la ley (Romanos 7: 1-3) la sujeción a su marido, preservando de este modo la reputación de él, y de sí misma.
Algún lector pensará que debiera añadir algo más para concluir que no se trata de ángeles celestiales. porque muchos otros reputados creyentes si que han asumido que aunque efectivamente la palabra ANGELOS abarca ambas posibilidades, y ellos han entendido que tiene referencia a ángeles y no a mensajeros. Pues bien, el mismo apóstol Pablo, y en la misma epístola que estamos considerando alude a que bajo su opinión personal, los apóstoles han sido los últimos puestos por Dios como espectáculo entre otros a los ángeles. No es probable entender que pueda el apóstol contradecirse en la misma epístola diciendo que también las esposas siguen siendo espectáculo para ángeles'.
Por otra parte, como el mismo Jesús enseñó a los saduceos, en el cielo no existen las relaciones matrimoniales que Dios estableció para esta primera fase de nuestra existencia. Al contrario, los ángeles no se parecerán a nosotros en nuestra forma de vida actual, sino que nosotros seremos como ellos. Luego pensar que las esposas manteniendo sobre si mismas la señal de autoridad de sus maridos pueda tener un valor pedagógico respecto a una conducta angélica apunta a nuestra razón de que sea algo cuando menos improbable.
Sin embargo si alguno quiere ver un ejemplo de un complicado entramado teológico que de este texto escribieron reputados comentaristas como Crisóstomo, Hammond, Alford y Bengel, no puede por menos que echar las manos a la cabeza. (Bengel dice que «al rechazar el velo, la mujer puede de un salto en la oración pública superar al hombre y a los ángeles»; Hammond dice que «los ángeles se deleitan de la subordinación decorosa de las varias «clases de adoradores» de Dios, siendo el porte y el vestido externo de la humildad interna que los ángeles saben que es lo más agradable al Señor»; Bengel también dice que la mujer por ser más débil necesita especialmente de la intervención de los ángeles, por eso hace bien en no ofenderlos y debe ser más cuidadosa). ¡Que os parece!
Esta forma de pensamiento tuvo su introducción en el cristianismo más antiguo a través de los escritos de un intolerante Tertuliano (l60_233 d.c.). quien tras reconocer que estas cuestiones se vivían en las iglesias dentro de un ambiente de libertad personal, aprovechó su prestigio de brillante abogado romano, sus indudables conocimientos, y su dialéctica contundente para influir en sus contemporáneos obispos de menor nivel intelectual que él, sobre la necesidad de declarar como paganos y perjudiciales muchos aspectos de la vida normal de los cristianos. ("Todavía, hasta muy recientemente, entre nosotros, cualquier costumbre estaba con indiferencia comparativa admitida a la comunión" reconoce en "De venand virgin", y concretamente sobre el velo en las solteras añade que hasta entonces: "La materia había quedado en opción para que cada virgen se velase o se mostrase según hubiese escogido, así como para casarse que no se está obligado ni prohibido. La verdad se había considerado satisfecha con hacer un pacto con la costumbre"). Basándose casi siempre en Juan 16: 12,13, defendiendo que todas aquellas normas eran las que Jesús había indicado que el Paracleto comunicaría a la Iglesia, y que no pudo enseñar a causa de que no eran capaces de asimilarlas. Como llegó a pensar que Montano era el espíritu del Paracleto prometido, toda la teología bien radical de aquel "carismático" personaje le llevó a un rigorismo extremo y sectario, que además encajaba muy bien con su carácter y personalidad.
Fue autor de una prolífica literatura, llamada por Lactancio como "ingeniosas oscuridades" y por Agustín como "estudiadas tinieblas"; donde además de ocuparse de las cuestiones del color del pelo, del peinado, del vestido del matrimonio, del velo de las mujeres cristianas, propagó muchas otras ideas que pueden ser calificadas de pre-romanistas, y sus escritos fueron la base de erráticos conceptos que más tarde y de forma paulatina arraigaron en un cristianismo ya muy separado de la doctrina evangélica y que representa un canto a la intolerancia y contra la libertad de vivir el evangelio en los principios consagrados por Jesucristo y sus apóstoles. Es una pena que en el día de hoy todavía se invoque a este autor en medios cristianos evangélicos para conceder a su pensamiento y a su inconsistente exégesis sobre los textos que estamos tratando una validez casi de carácter apostólico, olvidando que fueron sus escritos los que la Roma del Concilio de Trento empleó con más reiteración para oponerse a las tesis de la Reforma.


Pablo Blanco. “Mujer y Biblia”. Editorial Clie. Cap 8
 
La mujer guiada por el Espíritu y con un llamado especial se prepara (puede ser en un seminario) En mi comunidad hay una joven pareja que estudiaron los dos en el seminario Biblico y é hace varios años enseña la palaba a veces en la comunidad y su esposa me pidió que orara por ella que iba a predicar el domingo ella no es pastora pero sirve en la alabanza junto con el grupo pués hay como 3. No nos ponemos velo aqui como que no se acostumbra y estoy de acuerdo con los comentarios en que no se discrimina a la mujer para enseñar llevar la palaba etc. Hay cuestiones culturales que también creo que son viables y a libertad fuimos llamados.

Respeto las otras opiniones y que Dios los siga bendiciendo.
 
También predica una vez al mes un hermano que no ha ido al seminario per es guiado por el Señor y ama y estudia la Palabra bastante.
El trabaja de tiempo completo en una empresa pero lo hace con alegría y voluntariamente sin viviendo de lo que gana en su trabajo que lo ocupa mucho tiempo.
 
Vaya enseñanza

Vaya enseñanza

Originalmente enviado por: Elisa
Menos mal que Marìa no callò , y llevò el mensaje de la resurrecciòn de Cristo , a los varones , que por esas fechas , seguìan debajo de las camas .

Amada hermana Elisa
Me gusta tu comentario pues lo tenia en mente ,antes de leer tu comentario , efectivamente Jesus usó de una manera preciosa a Maria para enseñarles a los otros (varones incluido) el mensaje de la resurrección de jesus .¡¡Que mensaje más glorioso!! . Que cosas tiene el Señor uso ¡una mujer! . Bendito sea su nombre .

A cuantas a usado a lo largo de toda la historia y usará para su Gloria hasta u venida .

Sigo teniendo paz que el pasaje polemico en cuestion se basa a la autoridad como "gobierno" de la Iglesia NO SOBRE LOS MINISTERIOS . Con la base siempre de "someterase los unos a los otros " y "considera a tu hermano como superior a ti mismo"

En Cristo .Manel
 
Re: Vaya enseñanza

Re: Vaya enseñanza

Originalmente enviado por: AraceliyManel
Amada hermana Elisa
Me gusta tu comentario pues lo tenia en mente ,antes de leer tu comentario , efectivamente Jesus usó de una manera preciosa a Maria para enseñarles a los otros (varones incluido) el mensaje de la resurrección de jesus .¡¡Que mensaje más glorioso!! . Que cosas tiene el Señor uso ¡una mujer! . Bendito sea su nombre .

A cuantas a usado a lo largo de toda la historia y usará para su Gloria hasta u venida .

Sigo teniendo paz que el pasaje polemico en cuestion se basa a la autoridad como "gobierno" de la Iglesia NO SOBRE LOS MINISTERIOS . Con la base siempre de "someterase los unos a los otros " y "considera a tu hermano como superior a ti mismo"

En Cristo .Manel

Asì es hermano-a : Y si tenemos en cuenta el contexto socio-cultural de la zona donde el Señor encarnò , nos queda mas claro aùn el uso que hizo de nosotras como mensajeras y aùn como apostoles de su mensaje . En aquella cultura ¡ ni para adorar a Dios se reunìan hombres y mujeres !
 
Originalmente enviado por: Tobi
Pero, hombre, Malcom.
¿A que se debe esta animadversión contra la mujer?
¿De que se trata: de sectarismo o simplemente es una cuestión de misoginia.
Citas la Carta a los Corintios. Bien, pero resulta que el mismo que escribió Corintios escribió Galatas donde en 3:27-28 afirma que todos los que han sido revestidos en Cristo han eliminado las diferencias y entre ellas destaca la de que NO HAY HOMBRE NI MUJER por lo que si tu haces una distinción es que te falta el revestimiento. Te falta ser revestido de Cristo.
Donde Pablo inspirado por Dios dice que no hay dintición tu te permites distinguir al 50% (por lo menos) del cuerpo de Cristo. ¿Con que autoridad? ¿La tienes? ¿Donde la has adquirido?
Te olvidas, además, que el Hombre (Adan) fué creado varon y hembra. Luego tanto el varon como la hembra son el hombre.
¿No has leido esta frase? Bienaventurado el que no se condena a sí mismo en lo que aprueba.
Toma nota

Bendiciones hermano Tobi.

Sin la idea de polemizar y dado que parecen quererse perfilar dos bandos ¿me permites terciar?

Por un lado tenemos hermanos piadosos y bien intencionados que opinan que la mujer si bien es espiritualmente igual ante los ojos de Dios y no hay diferencia espiritual entre hombre y mujer, pero consideran que en el orden de Dios para las iglesias se establce un orden que no es sino reflejo del perfecto orden de Dios en su creación, Su palabra y en todo cuanto el Señor buenamente ha dispuesto.

Dios ha usado el utencilio que El en su sola potestad ha deseado usar en el momento que El lo ha determinado, sea un niño como David, una mujer como María, o un hombre como Gedeón. Eso en realidad se vuelve minusculo ante la grandeza de Dios, pues no fue en realidad Maria, ni Devora, ni Moises, ni David que en cuanto a su sexo, fuerza, color de piel o cualquier otro atributo humano pudies merecer la bendición tan grande de ser un instrumento en Sus preciosas manos. Dios ha usado lo mismo hermanos que hermanas y esto es algo que todos admiramos, reconocemos y glorificamos a Dios por ello.

No creo que hasta aqui alguien piense en "hombre ó mujer". Todos somos iguales pues ciertamente "no hay hombre ni mujer", "judio o griego", "libre o esclavo", en la perspectiva divina, venimos siendo igualmente diminutamenet humanos y humildemente debems todos reconcoerlo.

Todos tenemos derecho a entrar a un determinado lugar, pero es posible que solo uno de nosotros traiga consigo la llave, todos tenemos derecho a opinar, pero posiblemente solo uno de nosotros ocupara el cargo de presidente en una reunión. Todos tenemos derecho de hablar, pero seguramente habremos de hacerlo todos en un órden; se espera que el hombre haga ciertas labores, no proque la mujer no lo puda hacer, pero es preferible que sea el hombre quien cargue los pesados ladrillos de una construcción por ejemplo y la mujer cuide entre tanto de la prole con su ternura y los dones que Dios le ha dado, quizas sea mejor para la pareja especializarse cada uno en una labro determinada y asi ambos salir adelante...bueno, eso se espera. Se espera de ella que los de a luz y los amamante; en este sentido no somos iguales sino que mas bien somos iguales espiritualmente hablando pero fisicamente no.

Por alguna razón que desconozco Pabló se percató de algo que sucedia entre la manera o forma de comportarse de la mujer de Corintio y aun sabiendo él que "no hay diferencia", establece una diferencia "de orden" ye stablece un par de concepts, ordenanzas o mandamientos apra que suceden mejor las cosas dentro de aquella congregación, ahora bien ¿estamos completamenet seguros que esto no tiene ya mas aplicablidad para otra congregación ni o otros tiempos?

Es decir, si tu y yo estubiésemos en la iglesia de Corintio y hubiésemos escuchado estas palabras de nuestro herman Pablo ¿siquiera las cuestionaríamos, debatiriamos o hariamso una encuesta o votación? Yo por mi parte no creo que seria algo para debatirse pues supongo nos es la posición de Pablo resultado de una observación de algo espirtual que él ha visto aunque yo no lo hubiera visto en aquel momento o comprendiera por completo.


Por otro lado tenemos hermanos y hermanas piadosos, amorosos y temerosos de Dios que se les ahce un mero acto de misiogeneria cuando otro hermano ha comprendido, creido o entendido que es mejor por ejemplo que la mujer este calalda o sujeta o que use velo por ejempo. Esto me parece un poco aventurado, me aprece es aventurar una acusación "sexista" contr aun hermano igualmente valioso que opina que es mejor hacer tal como expresa Pablo, que entiende que las cosas no han cambiado tanto en cuanto a la naturaleza humana desde hace dos mil años y que ha optado por prevenir cualquier desorden procurando al menos que su mujer lo considere antes de que esta predique por ejempo algun mensaje en una congregación determinada, cuanot ms ocupe o prteneda ocupar el puesto de pastora.

Aquiero quiero aclarar un puento, muy paritcular que tiene que ver con mi aoprta anterior pero creo es necesario hacer. En mi congregaicón tengo un precioso pastor, varón ungido de Dios y tiene a su preciosa mujer, a la que cariñosa y amorosamente le llamo "pastora". Pues Dios hizo al hombre (genericamente hablando) "varon y hembra los formó", es decir ambos somos "un hombre", el uno parte de la otra parte y creo no hay diferencia en cuanto al valor de uno o del otro; el uno no es mas valioso que el otro, esto sería una tejiversación de las cosas.

Ciertamente la sumisión natural de la mujer, su recato, prudencia, ternura y demas virtudes y extraordinarios dones le han hecho "dar el lugar" en muchas cosas menudamente a varones despiadoados que a lo largo de la historia y la sociedad ha sometido al mas debil y no solo a la mujer sino tambien al niño y no solo a estos dos sino al mas pobre y no solo a todos estos sino que siempre el mundo intentará establecer "un orden" que no es conforme a "la ley del Amor" que solo es posible en Cristo Jesús, sino que malevólamente se ha establecido conforme a "la ley del mas fuerte"

Finalmenet quiero comentar que asi como fisicamente no somos iguales, parece que mentalmente tampoco lo somos y no me refiero a intelectualmente en absoluto, en este sentido somos idénticos. Por una razón biológica el hombre utiliza uno solo de sus hemisferios en sus decisiones, decisiones que parecieran "logicas" y la mujer emplea siempre ambos; pareciera como que la mujer considera mas y mejor muchas cosas con respecto al varón, parece ser que la manera de pensar de la mujer esta muy intimamente relacionada con el corazón y sus sentimientos, asi es que mientras el hombre parece "no tentarse el corazón", la mujer considera y "guarda todas estas cosas en su corazón".

Lamentablemenet esto le ha acarreado, por su nobleza, fragilidad natural y demas virtudes, que el sistema del "mundo" se haya aprovechado tantas veces de ellas y esto si que es una injusticia...pero hablamos de la iglesia del Señor, no del mundo, asi es que debemos tener aun mas recato a fin de dilucidadr el mejor modo de comportarnos en la reunción de los santos.

No deja de sorpenderme la virtudes tan grandes, el valor tan alto, la perfecciónde Dios ha expreado al hacer a la mujer y le doy garcia a Dios de estar rodeado de una fmailia predominatemente femenina pero aun con todo no encuentro una explicación "logica" para que el hermano Pablo nso declare en las escrituras lo que declara respecto al orden de Dios.

Bendiciones.
 
Fe de erratas

Fe de erratas

Disculpas hermano Tobi, pero tengo muchos errores de tecla; es un viejo conflicto entre mi mente y mis manos.
 
Respuesta para Malcom

Respuesta para Malcom

Esta es una respuesta a la intervención de Malcom:

Estimado amigo:

Respondiendo a su artículo, me permito replicarle lo siguiente:

Primero, la epístola a los corintios la escribe Pablo desde Efeso, a causa de una problemática concreta. Las cosas que le contaron y una carta que recibe de la iglesia (1Cor. 1:11; 11:18 y 7:1), y responde a una problemática local concreta: que hay grupos y rivalidad por el liderazgo, que se tolera la inmoralidad, que algunos comen lo sacrificado a los ídolos, que otros tienen relaciones con prostitutas, que algunos se emborrachan en los ágapes, que las reuniones son un escándalo de desorden, que otros no creen en la resurrección e incluso que Pablo está cuestionado como apóstol.

Pablo responde a la problemática local para poner orden en un grupo que estaba creciendo en cantidad (Hch. 10:18), y debemos considerar que esta iglesia es sumamente joven. Los más veteranos tienen 5 años de creyentes cuando Pablo escribe, pero la mayoría no alcanza los tres años y medio (la segunda etapa del ministerio, tras la visión) y están en un proceso de enseñanza tanto los hombres como las mujeres, y ahora solos, pues tanto Pablo como Aquila y su mujer, Timoteo y Silas se han ido a Efeso, y queda como más instruido Estéfanas, a quien no le hacen mucho caso. Sucede tambien que por las costumbres sociales las mujeres tienen mucha menos instrucción que los varones. Si la mayoría de ambos sexos sería analfabeta, entre las mujeres lo serían casi todas. Los padres de entonces no invertían mucho en educar a las hijas porque siendo muy jóvenes se casaban, se iban de casa, se llevaban una dote económica y no servían para el progreso familiar propio. Pero los hijos varones quedaban bajo la autoridad del paterfamilias y de su instrucción podía sacarse un provecho.

Una parte importante de las reuniones se dedicaba a la instrucción de los nuevos creyentes y simpatizantes en la doctrina cristiana pero, salvo los escasos judíos de la congregación que estaban familiarizados al menos con el Antiguo Testamento y la LXX, los gentiles partían de menos de cero por su trayectoria pagana, politeísta e idólatra. En esa etapa de la iglesia, en la que carecían de las escrituras del nuevo testamento, la exhortación y enseñanza se hacía por la providencia del espíritu de profecía.

Así en estas reuniones, muchas mujeres casadas que asistían con sus maridos, interrumpían el orden de las reuniones haciendo comentarios ó preguntas, lo cual iba contra las costumbres locales de que en presencia de sus maridos las mujeres se dirigiesen a otras personas en público. Lo honesto y lo legal era que las mujeres casadas preguntasen a sus maridos y estos formulasen las preguntas por ellas y las enseñasen. Y esto es lo que Pablo escribe. Pero esto no tiene nada que ver con el ministerio de las profetisas en el desempeño de su don, porque estas no estaban aprendiendo nada, ni siendo instruidas, sino desarrollando ya un ministerio reconocido en la iglesia. Así las mujeres creyentes casadas, que tenían conocimiento y profecía, podían profetizar, simplemente teniendo la cabeza cubierta que era otro requisito social que mencionaba un poco antes Pablo en la misma epístola (1cor. 11:5). Y para las solteras, Pablo escribe tambien en esta epístola que no tiene ningún mandamiento de parte de Dios (1Cor. 7:25), y para las viudas, les pone como ejemplo su propio ejemplo (1Cor. 7:40). En este preciso capítulo 7, la cuestión que marca la diferencia en el servicio a la causa de Cristo radica en el estado civil, no en el sexo de la persona, a causa de que tanto los hombres como las mujeres casados contraen mutuas obligaciones en razón de su matrimonio que les restringe en un ministerio más consagrado (1Cor. 7:32-34)

Situados ya en el contexto de la epístola, encontramos otra cuestión de debate en el texto, al que apela Malcon: ¿Qué es los que se hace en todas las iglesias de los santos según 1Cor. 14:33?:

a) Profetizar todos uno por uno, y sujetar a los profetas el espíritu de profecía porque Dios es Dios de orden, ó
b) Que las esposas no hablen en las congregaciones, y que pregunten en casa a sus maridos.

Encontramos traducciones en ambos sentidos (las que ponen el punto en confusión, y las que ponen el punto en santos), lo cual solo añade confusión al asunto.

Cuando persiste una duda sobre un texto, debe tratarse con cierto cuidado y no pontificar, ni basar sobre el una conclusión radical. Debemos saber además en algunos manuscritos el texto de los versículos 34 y 35 están colocados después del versículo 40, y yo me inclino por pensar en mi modesta opinión que así fueron escritos por Pablo, pero puedo estar equivocado.

Si fuese así, y el versículo 36 fuese a continuación del 34, este tendría más coherencia a que en el lugar que ocupa ahora, porque parece sería una continuación que refuerza la instrucción de Pablo sobre el ejercicio profético en la congregación, viniendo a decir que los corintios no son los únicos que reciben revelación de parte de Dios, ni que la transmiten (el ejercicio de los dones se produce también en todas las iglesias de los santos), y en las otras no sucede lo que está sucediendo en Corinto. Pero situado en el lugar que aparece en nuestras Biblias, el versículo 36 tiene un muy difícil encaje.

En segundo lugar, la clave aclaratoria de este texto (vers. 34 y 35) está en la frase: Como la ley lo dice. ¿Qué ley? ¿La de Moisés, la ley natural, la de Cristo? ¿Dónde lo dice? Si Pablo menciona que esto es de acuerdo con lo que dice la ley, es vital saber de que ley se trata.

Descartamos: La de Moisés porque ni lo dice, ni los gentiles (los sin ley) estuvieron nunca bajo ella, ni los cristianos están bajo ella. ¿La ley de Cristo? Tampoco. De hecho la mujer samaritana habló a los hombres de Cristo y Jesús no corrigió esa conducta, al contrario, la destacó delante de los discípulos varones. La ley natural tampoco enseña tal cosa a los seres humanos a través de la conciencia. De hecho esto solo se le ocurre pensarlo al que tiene un prejuicio con el texto, pero no tiene ningún efecto sobre personas que ignoran las Escrituras. Y si todos, hombres y mujeres, naciésemos con esa ley en nuestra conciencia tendría efectos bien diferentes, y el Espíritu Santo no debía dar profecía a las mujeres, porque por ejemplo en Pentecostés profetizaron delante de todo el pueblo en Jerusalén. Luego, solo puede referirse a la ley civil imperante en aquel lugar, casi con toda probabilidad por motivos.

Con respecto a las demás alusiones que usted hace en su aporte, quiero decirle lo siguiente:

Las frases de Pablo escribiendo a Timoteo que usted ha aludido constituyen un tema que da para mucha extensión, pero en lo relativo a esta cuestión de la predicación podemos concordar en que cuando Pablo está argumentando aquí lo está haciendo también en clave matrimonial, no a la mujer en general, porque imagino que usted no pretenderá que cualquier mujer se salve (sea lo que sea lo que se entienda aquí salvar. Porque no creo que usted piense que un parto sustituye a la cruz de Cristo y otorga un mérito salvífico) teniendo hijos, si está soltera ó es viuda, y que Pablo quiera animar a las mujeres a que se salven de esa manera. Porque entonces Pablo debiera empezar porque decir que se casasen antes de lo cual no era muy partidario en 1Cor. 7:38.

Finalmente la palabra hesuchia que se traduce por silencio en 1Tim. 2:11 y 12, no significa silencio. Tanto ella como las palabras hesucazo y hesucios significan sosiego, tranquilidad, calma y reposo ó reposadamente (aparecen en Lc. 14:4 que debiera traducirse como: se tranquilizaron; Lc. 23:56 descansaron; Hch. 11:18, traducido por callaron, mal, porque dice que hablaron, debía traducirse se tranquilizaron; 1Ts. 4:11 tranquilidad; Hch. 22:2 traducido por silencio, debiera ser calma; 2Ts. 3:12 tranquilidad, 1Ti. 2:2, reposadamente, 1Pd. 3:4, apacible, sinónimo de sosegado.) Así pues de estar calladas, nada de nada. Cuando dice en Hch. 21:40 que se hizo silencio, se usa la palabra que significa silencio, sige, no hesuchia, y lo mismo en Apocalipsis 8:1. Y el verbo callarse es sigao, que aparece por ejemplo en Lc. 9:36; 18:39; 20:26; Hch. 15:12, 13; 1Cor. 14:28 y 30 y también en el 14:34, donde dice que las esposas ?callen?, del que antes hemos hablado.

La cuestión del papel de la mujer en el matrimonio y de lo que Pablo quiere decir mencionando a Eva y a Adam es más largo y da para otro tema. Quizás otro día.

Saludos
Pabloblanco
 
Hermano OSO, bendiciones y saludos a tu bella esposa.
He leido con atención tu aporte y suscribo alguno de ellos.
Siempre me ha gustado la historia y de ella lo que mas el tipo de organización social de las diversas culturas que nos ha precedido. Y las que más aquellas que predominaban en la época de Cristo y extensiósn del evangelio.
Una de las que mas ha influenciado en el cristianismo ha sido la griega (en muchos -demasiados- casos de una manera negativa puesto que conceptos que aún hoy muchos cristianos dan por válidos han sido originados por dicha cultura mas que por la bíblica.
Aquí es donde enmarco las enseñanzas de Pablo a la iglesia de Corinto. A fin de entender dicha enseñanza hay que conocer la situación de la mujer entre los griegos.
No tenía estátus o personalidad jurídica (En Roma si lo tenía a pesar de la ley de "manus" que determinaba que el marido era el representante legal de la mujer. No obstante era sacerdotisa junto al marido en los cultos lares, con lo cual adquiria un estatus social elevadísimo, tambien era la educadora de los hijos hasta los siete años que era cuando el padre tomaba el relevo en dicha educación con la imposición de su primera túnica que recibía el nombre de "Túnica Pretexta")
Repito: En Grecia la mujer era un objeto.
No podia comer junto al marido.
No tenía ningún derecho que la amparase.
Cuando el marido deseaba organizar una fiesta junto a amigos y familiares, la mujer y las hijas no podían estar presentes. Pero a cambio requerian los servicios de las llamada "hetarias".
Cuando nacía una niña el padre determinaba si podía o no pertenecer a la familia. Si determinaba que no, la recien nacida era abandonada en cualquier estercolero. (Había quien lo vigilaba y las recogian para educarlas, precisamente, como hetarias)
No recibía ningún tipo de educación.
Ni siquiera podía salir del hogar sin el permiso de su marido.
Debía ir siempre con la cabeza cubierta y si una mujer hablaba en publico con la cabeza descubierta significaba que era una sacerdotisa dedicada a la prostitución sagrada.
Con el cristianismo aquellas mujeres fueron emancipadas de aquellas costumbres que las degradaban y posiblemente o abusaron de ello, o se entendió por parte de muchos, que lo hacian. No se cambia facilmente una mentalidad arraigada en el inconsciente colectivo de una determinada sociedad.
En Roma las ciscunstancias de la mujer eran distintas y por ello no hay en la Carta de Pablo ninguna referencia a la mujer.
Por ello es que no veo que estemos aun inmersos en la situación del mundo griego y dar por válidas unas prácticas cuyo contexto es distinto al de la antigua Corinto. Llama la atención que tampoco en sus cartas a los creyentes de Tesalónica (la actual Salónica) hay la más mínima referencia a la mujer. Ello se explica por el hecho que aquella ciudad era un Ciudad Senatorial y se regía por las leyes y costumbres romanas.
Un abrazo en Cristo, Oso.
 
Queridos hermanos estoy atento a vuestras opiniones en cuanto al papel de la mujer, y creo sinceramente que la iglesia cristiana hoy le debe mucho a la mujer sobre todo disculpas, puesto que solo han sido los hombres que han relegado a la mujer a un papel secundario, Cristo como maestro en Israel hizo mas bien todo lo contrario se hizo de un grupo de discipulas que bien aventajaron a aquellos grandes apostoles, puesto que ellos en la crucufixion huyeron pero ellas junto a Juan estuvieron al pie de la cruz. También la primera testiga de su resurrección fue una mujer maria magdalena, pero aquellos hombres valientes no la creyeron sino que tuvieron que comprobarlo por sí mismos.
Cuando Pablo en 1 Co 15 da una lista de testigos de ña resurreccion del Señor, no menciona a la primera testiga ¿Porque?
porque las mujeres no servían como testigos fieles.
POr lo tanto sobre todo en la esfera espiritual aunque hoy como seres humanos somos diferentes ante Cristo somos iguales y UNO, por lo tanto no descalifiquemos a aquellas ministras que Dios capacita para su servicio.
No todos los hombres sirven para un ministerio concreto ni tampoco todas las mujeres sirven para cualquier ministerio
Es la obra del Espíritu Santo de Dios, no le resistamos por favor.
 
Originalmente enviado por: Tobi
Hermano OSO, bendiciones y saludos a tu bella esposa.
He leido con atención tu aporte y suscribo alguno de ellos.
Siempre me ha gustado la historia y de ella lo que mas el tipo de organización social de las diversas culturas que nos ha precedido. Y las que más aquellas que predominaban en la época de Cristo y extensiósn del evangelio.
Una de las que mas ha influenciado en el cristianismo ha sido la griega (en muchos -demasiados- casos de una manera negativa puesto que conceptos que aún hoy muchos cristianos dan por válidos han sido originados por dicha cultura mas que por la bíblica.
Aquí es donde enmarco las enseñanzas de Pablo a la iglesia de Corinto. A fin de entender dicha enseñanza hay que conocer la situación de la mujer entre los griegos.
No tenía estátus o personalidad jurídica (En Roma si lo tenía a pesar de la ley de "manus" que determinaba que el marido era el representante legal de la mujer. No obstante era sacerdotisa junto al marido en los cultos lares, con lo cual adquiria un estatus social elevadísimo, tambien era la educadora de los hijos hasta los siete años que era cuando el padre tomaba el relevo en dicha educación con la imposición de su primera túnica que recibía el nombre de "Túnica Pretexta")
Repito: En Grecia la mujer era un objeto.
No podia comer junto al marido.
No tenía ningún derecho que la amparase.
Cuando el marido deseaba organizar una fiesta junto a amigos y familiares, la mujer y las hijas no podían estar presentes. Pero a cambio requerian los servicios de las llamada "hetarias".
Cuando nacía una niña el padre determinaba si podía o no pertenecer a la familia. Si determinaba que no, la recien nacida era abandonada en cualquier estercolero. (Había quien lo vigilaba y las recogian para educarlas, precisamente, como hetarias)
No recibía ningún tipo de educación.
Ni siquiera podía salir del hogar sin el permiso de su marido.
Debía ir siempre con la cabeza cubierta y si una mujer hablaba en publico con la cabeza descubierta significaba que era una sacerdotisa dedicada a la prostitución sagrada.
Con el cristianismo aquellas mujeres fueron emancipadas de aquellas costumbres que las degradaban y posiblemente o abusaron de ello, o se entendió por parte de muchos, que lo hacian. No se cambia facilmente una mentalidad arraigada en el inconsciente colectivo de una determinada sociedad.
En Roma las ciscunstancias de la mujer eran distintas y por ello no hay en la Carta de Pablo ninguna referencia a la mujer.
Por ello es que no veo que estemos aun inmersos en la situación del mundo griego y dar por válidas unas prácticas cuyo contexto es distinto al de la antigua Corinto. Llama la atención que tampoco en sus cartas a los creyentes de Tesalónica (la actual Salónica) hay la más mínima referencia a la mujer. Ello se explica por el hecho que aquella ciudad era un Ciudad Senatorial y se regía por las leyes y costumbres romanas.
Un abrazo en Cristo, Oso.



Muy interesante, Tobi :leyendo:
 
Bendiciones Tobi.

Mil y una garcias por tu respuesta, claro que te saludo a mi OSA, precisamente ¡hoy cumplimos 20 años de casados! Ella para mi es un ejemplo de la mujer cristiana y una inspiración para mi vida, entre miles de bendiciones que me ha dado me ha dado tres preciosas hijas, amén de una linda suegra y muchas cuñadas...Ella es amiga de nuestra pastora, esto es, la esposa de mi pastor y también canta y compone muy lindo, cuando lo hace lo hace con su hermoso cabello rubio y largo pero aun sin velo, no se si un dia lo haga o no, el Señor le dirá que y como hacer lo mejor, y confio en que ella sabiamente sabrá tomar la mejor parte y dejará la otra parte.

Ella es una mujer virtuosa y oro y temo por ella,temo que sin querer hagamos las cosas mal, por esto es que pregunto. Puedo asegurate que no es por ser un misogino o "¿misiogino?"; simplemente no quiero hacer las cosas mal.

Noto un cierto parametro social e histótico en Corino ¿que veria nuesto hermano Pablo ahi?, que comprendo se debe considerar. Creo al igual que tu que "el mundo" ha sido despiadado con la mujer, pero en Cristo Jesús esto no es mas así.

Te mando un fraterno abrazo, claro de oso.


Maripaz.- Bueno, creo que aun me falta mucho ¿verdad?

Un saludo lleno de bendiciones para tu vida.
 
Originalmente enviado por: OSO

Maripaz.- Bueno, creo que aun me falta mucho ¿verdad?

Un saludo lleno de bendiciones para tu vida.



¿ Mucho para qué ? :confused:



:beso:



Bendición fue haberos conocido, y compartir, aun nuestros puntos de vista diferentes :corazon:
 
Tobi dice:
Pero, hombre, Malcom.
¿A que se debe esta animadversión contra la mujer?
¿De que se trata: de sectarismo o simplemente es una cuestión de misoginia.
Citas la Carta a los Corintios. Bien, pero resulta que el mismo que escribió Corintios escribió Galatas donde en 3:27-28 afirma que todos los que han sido revestidos en Cristo han eliminado las diferencias y entre ellas destaca la de que NO HAY HOMBRE NI MUJER por lo que si tu haces una distinción es que te falta el revestimiento. Te falta ser revestido de Cristo.
Donde Pablo inspirado por Dios dice que no hay dintición tu te permites distinguir al 50% (por lo menos) del cuerpo de Cristo. ¿Con que autoridad? ¿La tienes? ¿Donde la has adquirido?
Te olvidas, además, que el Hombre (Adan) fué creado varon y hembra. Luego tanto el varon como la hembra son el hombre.
¿No has leido esta frase? Bienaventurado el que no se condena a sí mismo en lo que aprueba.
Toma nota

Para Dios en Cristo los hombre y mujeres somos iguales, la mujer no es menos que el hombre, la gracia de Dios se imparte por igual, todos gozamos de los mismos beneficios por Cristo, ambos somos coherederos de la gracia. Aunque en la historia bíblica tanto los hombres como las mujeres han tenido ciertos privilegios en determinadas ocasiones, pero estos no significa que el hombre o la mujer este por encima del otro delante de los ojos de Dios. Yo ni ningún cristiano creemos que la mujer en algún sentido tenga un segundo plano en las cosas de Dios, así que no hay ningún machismo ni en mi ni en ninguno que sea cristiano esos calificativos de ustedes son simples calumnias o ignorancia. Toda la Biblia habla de un orden establecido por Dios. Así como Cristo no es cabeza de Dios sino que Dios cabeza de Cristo, lo mismo se nos enseña que la mujer no es cabeza del hombre sino lo contrario. El orden divino es Dios cabeza de Cristo, Cristo cabeza del hombre y el hombre cabeza de la mujer, y así como Cristo no en menor grado que Dios sino en funciones lo mismo es que el hombre no es mayor que la mujer sino en funciones de orden y autoridad BIBLICA. Así que yo no hago una distinción de superioridad sobre la mujer sino de autoridad no de dominio y no machista ni porque la mujer sea mas ignorante que el hombre o menos fuerte sino por dos razones 1) porque Adán fue formado primero y después Eva, y 2) Adán no fue engañado sino Eva, Y por cierto que seria muy interesante que me pudieras explicar como es que en este pasaje de 1 Timoteo 2 hay una distinción Adán y Eva, dos personas diferentes, si, una sola carne pero el uno fue creado primero y después el otro, el uno fue engañado primero y después el otro. Si, los dos son el hombre como dices pero el uno fue creado varón y el otro fue credo hembra. Y este argumento de Pablo de mas peso lo diferencia muy bien, ¿no te parece? Entonces Pablo no permite a la mujer enseñar ni ejercer dominio sobre el varón por este orden divino de la creación, así es la economía divina. Si nos vamos a Corinto a esta iglesia con muchos problemas Pablo es evidente que la mujer hablaba mucho en la iglesia (como hoy) y no era sumisa por eso Pablo les dice vuestras mujeres callen, no le es permitido hablar pero el punto aquí es que Pablo dice que esto es algo que no solo en Corinto debería obedecerse sino que era un común mandato “en todas las iglesias de los santos” y todas las iglesias de los santos no eran corinto.
Claro que la sujeción, sumisión, autoridad y demás deben de ser BIBLICAS he ahí el punto, los que se rasgan el vestido nos tildan de toda clase de animales maltratadotes de mujeres. Deberían de aprender o conocer a una mujer sumisa que entiende el orden divino como es tratada y amada por su marido, respetándolo en todo como Sara respetaba a Abraham y así las demás mujeres virtuosas y como estos maridos amaban a sus mujeres en todo. Repito que todo esto de autoridad debe ser bajo el concepto bíblico y este concepto Bíblico le da al hombre una ordenanza de honrar y amar a su mujer en todo.

Saludos
Malcon
 
Originalmente enviado por: Maripaz
¿ Mucho para qué ? :confused:



:beso:



Bendición fue haberos conocido, y compartir, aun nuestros puntos de vista diferentes :corazon:

Dios te bendiga hermana.


Creo que aun me falta mucho para comprender mas y mejor la posición de nuestro hermano Pablo, para conocer aspectos tan importantes como los que qui se han señalado(gracias nuevamente hermano Tobi), para comprender mejor algunos aspectos rcordados que parecieran puntos encontrados (gracias hermano Malcom)para comprender mas y mejor en que podemos ser al mismo tiempo tan iguales y tan diferentes y como hacerle para que todos juntos conforme a la ley de Cristo crezcamos siendo edificados santamente. He aqui que soy todo oidos.

Un saludo de parte de OSA y mío :corazon: :corazon:
 
oso y malcom

oso y malcom

lo han dicho mejor que yo. me gusto y me identifique con ellos sobre como la mujer en el orden biblico se encuentra frente al hombre ¡estamos de acuerdo!
 
Re: Respuesta para Malcom

Re: Respuesta para Malcom

Originalmente enviado por: Pabloblanco
Esta es una respuesta a la intervención de Malcom:

Estimado amigo:

Respondiendo a su artículo, me permito replicarle lo siguiente:

Primero, la epístola a los corintios la escribe Pablo desde Efeso, a causa de una problemática concreta. Las cosas que le contaron y una carta que recibe de la iglesia (1Cor. 1:11; 11:18 y 7:1), y responde a una problemática local concreta: que hay grupos y rivalidad por el liderazgo, que se tolera la inmoralidad, que algunos comen lo sacrificado a los ídolos, que otros tienen relaciones con prostitutas, que algunos se emborrachan en los ágapes, que las reuniones son un escándalo de desorden, que otros no creen en la resurrección e incluso que Pablo está cuestionado como apóstol.

Pablo responde a la problemática local para poner orden en un grupo que estaba creciendo en cantidad (Hch. 10:18), y debemos considerar que esta iglesia es sumamente joven. Los más veteranos tienen 5 años de creyentes cuando Pablo escribe, pero la mayoría no alcanza los tres años y medio (la segunda etapa del ministerio, tras la visión) y están en un proceso de enseñanza tanto los hombres como las mujeres, y ahora solos, pues tanto Pablo como Aquila y su mujer, Timoteo y Silas se han ido a Efeso, y queda como más instruido Estéfanas, a quien no le hacen mucho caso. Sucede tambien que por las costumbres sociales las mujeres tienen mucha menos instrucción que los varones. Si la mayoría de ambos sexos sería analfabeta, entre las mujeres lo serían casi todas. Los padres de entonces no invertían mucho en educar a las hijas porque siendo muy jóvenes se casaban, se iban de casa, se llevaban una dote económica y no servían para el progreso familiar propio. Pero los hijos varones quedaban bajo la autoridad del paterfamilias y de su instrucción podía sacarse un provecho.

Una parte importante de las reuniones se dedicaba a la instrucción de los nuevos creyentes y simpatizantes en la doctrina cristiana pero, salvo los escasos judíos de la congregación que estaban familiarizados al menos con el Antiguo Testamento y la LXX, los gentiles partían de menos de cero por su trayectoria pagana, politeísta e idólatra. En esa etapa de la iglesia, en la que carecían de las escrituras del nuevo testamento, la exhortación y enseñanza se hacía por la providencia del espíritu de profecía.

Así en estas reuniones, muchas mujeres casadas que asistían con sus maridos, interrumpían el orden de las reuniones haciendo comentarios ó preguntas, lo cual iba contra las costumbres locales de que en presencia de sus maridos las mujeres se dirigiesen a otras personas en público. Lo honesto y lo legal era que las mujeres casadas preguntasen a sus maridos y estos formulasen las preguntas por ellas y las enseñasen. Y esto es lo que Pablo escribe. Pero esto no tiene nada que ver con el ministerio de las profetisas en el desempeño de su don, porque estas no estaban aprendiendo nada, ni siendo instruidas, sino desarrollando ya un ministerio reconocido en la iglesia. Así las mujeres creyentes casadas, que tenían conocimiento y profecía, podían profetizar, simplemente teniendo la cabeza cubierta que era otro requisito social que mencionaba un poco antes Pablo en la misma epístola (1cor. 11:5). Y para las solteras, Pablo escribe tambien en esta epístola que no tiene ningún mandamiento de parte de Dios (1Cor. 7:25), y para las viudas, les pone como ejemplo su propio ejemplo (1Cor. 7:40). En este preciso capítulo 7, la cuestión que marca la diferencia en el servicio a la causa de Cristo radica en el estado civil, no en el sexo de la persona, a causa de que tanto los hombres como las mujeres casados contraen mutuas obligaciones en razón de su matrimonio que les restringe en un ministerio más consagrado (1Cor. 7:32-34)

Situados ya en el contexto de la epístola, encontramos otra cuestión de debate en el texto, al que apela Malcon: ¿Qué es los que se hace en todas las iglesias de los santos según 1Cor. 14:33?:

a) Profetizar todos uno por uno, y sujetar a los profetas el espíritu de profecía porque Dios es Dios de orden, ó
b) Que las esposas no hablen en las congregaciones, y que pregunten en casa a sus maridos.

Encontramos traducciones en ambos sentidos (las que ponen el punto en confusión, y las que ponen el punto en santos), lo cual solo añade confusión al asunto.

Cuando persiste una duda sobre un texto, debe tratarse con cierto cuidado y no pontificar, ni basar sobre el una conclusión radical. Debemos saber además en algunos manuscritos el texto de los versículos 34 y 35 están colocados después del versículo 40, y yo me inclino por pensar en mi modesta opinión que así fueron escritos por Pablo, pero puedo estar equivocado.

Si fuese así, y el versículo 36 fuese a continuación del 34, este tendría más coherencia a que en el lugar que ocupa ahora, porque parece sería una continuación que refuerza la instrucción de Pablo sobre el ejercicio profético en la congregación, viniendo a decir que los corintios no son los únicos que reciben revelación de parte de Dios, ni que la transmiten (el ejercicio de los dones se produce también en todas las iglesias de los santos), y en las otras no sucede lo que está sucediendo en Corinto. Pero situado en el lugar que aparece en nuestras Biblias, el versículo 36 tiene un muy difícil encaje.

En segundo lugar, la clave aclaratoria de este texto (vers. 34 y 35) está en la frase: Como la ley lo dice. ¿Qué ley? ¿La de Moisés, la ley natural, la de Cristo? ¿Dónde lo dice? Si Pablo menciona que esto es de acuerdo con lo que dice la ley, es vital saber de que ley se trata.

Descartamos: La de Moisés porque ni lo dice, ni los gentiles (los sin ley) estuvieron nunca bajo ella, ni los cristianos están bajo ella. ¿La ley de Cristo? Tampoco. De hecho la mujer samaritana habló a los hombres de Cristo y Jesús no corrigió esa conducta, al contrario, la destacó delante de los discípulos varones. La ley natural tampoco enseña tal cosa a los seres humanos a través de la conciencia. De hecho esto solo se le ocurre pensarlo al que tiene un prejuicio con el texto, pero no tiene ningún efecto sobre personas que ignoran las Escrituras. Y si todos, hombres y mujeres, naciésemos con esa ley en nuestra conciencia tendría efectos bien diferentes, y el Espíritu Santo no debía dar profecía a las mujeres, porque por ejemplo en Pentecostés profetizaron delante de todo el pueblo en Jerusalén. Luego, solo puede referirse a la ley civil imperante en aquel lugar, casi con toda probabilidad por motivos.

Con respecto a las demás alusiones que usted hace en su aporte, quiero decirle lo siguiente:

Las frases de Pablo escribiendo a Timoteo que usted ha aludido constituyen un tema que da para mucha extensión, pero en lo relativo a esta cuestión de la predicación podemos concordar en que cuando Pablo está argumentando aquí lo está haciendo también en clave matrimonial, no a la mujer en general, porque imagino que usted no pretenderá que cualquier mujer se salve (sea lo que sea lo que se entienda aquí salvar. Porque no creo que usted piense que un parto sustituye a la cruz de Cristo y otorga un mérito salvífico) teniendo hijos, si está soltera ó es viuda, y que Pablo quiera animar a las mujeres a que se salven de esa manera. Porque entonces Pablo debiera empezar porque decir que se casasen antes de lo cual no era muy partidario en 1Cor. 7:38.

Finalmente la palabra hesuchia que se traduce por silencio en 1Tim. 2:11 y 12, no significa silencio. Tanto ella como las palabras hesucazo y hesucios significan sosiego, tranquilidad, calma y reposo ó reposadamente (aparecen en Lc. 14:4 que debiera traducirse como: se tranquilizaron; Lc. 23:56 descansaron; Hch. 11:18, traducido por callaron, mal, porque dice que hablaron, debía traducirse se tranquilizaron; 1Ts. 4:11 tranquilidad; Hch. 22:2 traducido por silencio, debiera ser calma; 2Ts. 3:12 tranquilidad, 1Ti. 2:2, reposadamente, 1Pd. 3:4, apacible, sinónimo de sosegado.) Así pues de estar calladas, nada de nada. Cuando dice en Hch. 21:40 que se hizo silencio, se usa la palabra que significa silencio, sige, no hesuchia, y lo mismo en Apocalipsis 8:1. Y el verbo callarse es sigao, que aparece por ejemplo en Lc. 9:36; 18:39; 20:26; Hch. 15:12, 13; 1Cor. 14:28 y 30 y también en el 14:34, donde dice que las esposas ?callen?, del que antes hemos hablado.

La cuestión del papel de la mujer en el matrimonio y de lo que Pablo quiere decir mencionando a Eva y a Adam es más largo y da para otro tema. Quizás otro día.

Saludos
Pabloblanco




Gracias Pablo. Rescato tu valioso aporte. ;)
 
http://www.elpais.es/articulo.html?...nchor=elpepiopi

Miércoles, 10 de julio de 2002



Cuando las mujeres eran sacerdotes



JUAN JOSÉ TAMAYO-ACOSTA


Juan José Tamayo-Acosta es director de la Cátedra de Teología y Ciencias de la Religión en la Universidad Carlos III de Madrid.




Durante los últimos meses han aparecido numerosos documentos y declaraciones de teólogos y teólogas, grupos de sacerdotes y religiosos, movimientos cristianos y organizaciones cívico-sociales, e incluso de obispos y cardenales de la Iglesia católica, pidiendo el acceso de las mujeres al sacerdocio. Todos ellos consideran la exclusión femenina del ministerio sacerdotal como una discriminación de género que es contraria a la actitud inclusiva de Jesús de Nazaret y del cristianismo primitivo, va en dirección opuesta a los movimientos de emancipación de la mujer y a las tendencias igualitarias en la sociedad, la política, la vida doméstica y la actividad laboral.

El alto magisterio eclesiástico responde negativamente a esa reivindicación, apoyándose en dos argumentos: uno teológico-bíblico y otro histórico, que pueden resumirse así: Cristo no llamó a ninguna mujer a formar parte del grupo de los apóstoles, y la tradición de la Iglesia ha sido fiel a esta exclusión, no ordenando sacerdotes a las mujeres a lo largo de los veinte siglos de historia del catolicismo. Esta práctica se interpreta como voluntad explícita de Cristo de conferir sólo a los varones, dentro de la comunidad cristiana, el triple poder sacerdotal de enseñar, santificar y gobernar. Sólo ellos, por su semejanza de sexo con Cristo, pueden representarlo y hacerlo presente en la eucaristía.

Estos argumentos vienen repitiéndose sin apenas cambios desde hace siglos y son expuestos en tres documentos de idéntico contenido, a los que apelan los obispos cada vez que los movimientos cristianos críticos se empeñan en reclamar el sacerdocio para las mujeres: la declaración de la Congregación para la Doctrina de la Fe Inter insigniores (15 de octubre de 1976) y dos cartas apostólicas de Juan Pablo II: Mulieris dignitatem (15 de agosto de 1988) y Ordinatio sacerdotalis. Sobre la ordenación sacerdotal reservada sólo a los hombres (22 de mayo de 1984). La más contundente de todas las declaraciones al respecto es esta última, que zanja la cuestión y cierra todas las puertas a cualquier cambio en el futuro: 'Declaro que la Iglesia no tiene en modo alguno facultad de conferir la ordenación sacerdotal a las mujeres, y que este dictamen debe ser considerado como definitivo por todos los fieles de la Iglesia'.

Es verdad que la historia no es pródiga en narrar casos de mujeres sacerdotes. Esto no debe extrañar, ya que ha sido escrita por varones, en su mayoría clérigos, y su tendencia ha sido a ocultar el protagonismo de las mujeres en la historia del cristianismo. 'Si las mujeres hubieran escrito los libros, estoy segura de que lo habrían hecho de otra manera, porque ellas saben que se les acusa en falso'. Esto escribía Cristina de Pisan, autora de La ciudad de las damas (1404). Sin embargo, importantes investigaciones históricas desmienten tan contundentes afirmaciones del magisterio, hasta invalidarlas y convertirlas en pura retórica al servicio de una institución patriarcal. Entre los estudios más relevantes al respecto cabe citar Mujeres en el altar, de Lavinia Byrne, religiosa expulsada de su congregación por publicar este libro; Cuando las mujeres eran sacerdotes, de Karen Jo Torjesen, catedrática de Estudios sobre la Mujer y la Religión en Claremont Graduate School, y los trabajos del historiador Giorgio Otranto, director del Instituto de Estudios Clásicos y Cristianos de la Universidad de Bari. En ellos se demuestra, mediante inscripciones en tumbas y mosaicos, cartas pontificias y otros textos, que las mujeres ejercieron el sacerdocio católico durante los 13 primeros siglos de la historia de la Iglesia. Veamos algunas de estas pruebas que quitan todo valor a los argumentos del magisterio eclesiástico.

Debajo del arco de una basílica romana aparece un fresco con cuatro mujeres. Dos de ellas son las santas Práxedes y Prudencia, a quienes está dedicada la iglesia. Otra es María, madre de Jesús de Nazaret. Sobre la cabeza de la cuarta hay una inscripción que dice: Theodora Episcopa (= Obispa). La 'a' de Theodora está raspada en el mosaico, no así la 'a' de Episcopa.

En el siglo pasado se descubrieron inscripciones que hablan a favor del ejercicio del sacerdocio de las mujeres en el cristianismo primitivo. En una tumba de Tropea (Calabria meridional, Italia) aparece la siguiente dedicatoria a 'Leta Presbytera', que data de mediados del siglo V: 'Consagrada a su buena fama, Leta Presbytera vivió cuarenta años, ocho meses y nueve días, y su esposo le erigió este sepulcro. La precedió en paz la víspera de los Idus de Marzo'. Otras inscripciones de los siglos VI y VII atestiguan igualmente la existencia de mujeres sacerdotes en Salone (Dalmacia) (presbytera, sacerdota), Hipona, diócesis africana de la que fue obispo san Agustín cerca de cuarenta años (presbiterissa), en las cercanías de Poitires (Francia) (presbyteria), en Tracia (presbytera, en griego), etcétera.

En un tratado sobre la virtud de la virginidad, del siglo IV, atribuido a san Atanasio, se afirma que las mujeres consagradas pueden celebrar juntas la fracción del pan sin la presencia de un sacerdote varón: 'La santas vírgenes pueden bendecir el pan tres veces con la señal de la cruz, pronunciar la acción de gracias y orar, pues el reino de los cielos no es ni masculino ni femenino. Todas las mujeres que fueron recibidas por el Señor alcanzaron la categoría de varones' (De virginitate, PG 28, col. 263).

En una carta del papa Gelasio I (492-496) dirigida a los obispos del sur de Italia el año 494 les dice que se ha enterado, para gran pesar suyo, de que los asuntos de la Iglesia han llegado a un estado tan bajo que se anima a las mujeres a oficiar en los sagrados altares y a participar en todas las actividades del sexo masculino al que ellas no pertenecen. Los propios obispos de esa región italiana habían concedido el sacramento del orden a mujeres, y éstas ejercían las funciones sacerdotales con normalidad.

Un sacerdote llamado Ambrosio pregunta a Atón, obispo de Vercelli, que vivió entre los siglos IX y X y era buen conocedor de las disposiciones conciliares antiguas, qué sentido había que dar a los términos presbytera y diaconisa, que aparecían en los cánones antiguos. Atón le responde que las mujeres también recibían los ministerios ad adjumentum virorum, y cita la carta de san Pablo a los Romanos, donde puede leerse: 'Os recomiendo a Febe, nuestra hermana y diaconisa en la Iglesia de Cencreas'. Fue el concilio de Laodicea, celebrado durante la segunda mitad del siglo IV, sigue diciendo en su contestación el obispo Aton, el que prohibió la ordenación sacerdotal de las mujeres. Por lo que se refiere al término presbytera, reconoce que en la Iglesia antigua también podía designar a la esposa del presbítero, pero él prefiere el significado de sacerdotisa ordenada que ejercía funciones de dirección, de enseñanza y de culto en la comunidad cristiana.

En contra de conceder la palabra a las mujeres se manifestaba el papa Honorio III (1216-1227) en una carta a los obispos de Burgos y Valencia, en la que les pedía que prohibieran hablar a las abadesas desde el púlpito, práctica habitual entonces. Éstas son sus palabras: 'Las mujeres no deben hablar porque sus labios llevan el estigma de Eva, cuyas palabras han sellado el destino del hombre'.

Estos y otros muchos testimonios que podría aportar son rechazados por el magisterio papal y episcopal y por la teología de él dependiente, alegando que carecen de rigor científico. Pero ¿quién es la teología y quiénes son el papa, los cardenales y los obispos para juzgar sobre el valor de las investigaciones históricas? La verdadera razón de su rechazo son los planteamientos patriarcales en que están instalados. El reconocimiento de la autenticidad de esos testimonios les llevaría a revisar sus concepciones androcéntricas y a abandonar sus prácticas misóginas. Y a eso no parecen estar dispuestos. Prefieren ejercer el poder autoritariamente y en solitario encerrados en la torre de su 'patriarquía', a ejercerlo democráticamente y compartirlo con las mujeres creyentes, que hoy son mayoría en la Iglesia católica y, sin embargo, carecen de presencia en sus órganos directivos y se ven condenadas a la invisibilidad y al silencio.
 
La realidad es que historicamente los hombres han abusado de las mujeres hasta lìmites a veces inauditos , para ser miembros de la misma especie .

Podemos asegurar que lo bondadoso y justo de una sociedad , pudiera medirse por el trato que esta da a las mujeres , niños , y tambièn a los animales .

Esto de la discriminaciòn , aùn dentro del cristianismo , no tiene nada que ver con Cristo , sinò que es producto de ese odio macabro y ascentral , o tal vez solo sea miedo

Mientras los cristianos no borren de sus corazones esos recelos , miedos , envidias , complejos de superioridad , o cualquier otro sentimiento discriminatorio hacia las mujeres , no estaremos realmente listos para predicar el evangelio a gran escala , ni de recibir al Señor .