Lo leí. Muy bien, pero te quedas en la superficie.
El asunto de la Ley y el pecado lo explica Pablo en Romanos.
- Muertos para el pecado, vivos para Dios (Rom.6.1)
- Esclavos de la justicia (Rom.6.15)
- Liberados de la Ley (Rom.7.1)
- La ley del pecado (Rom.7.7)
- La vida en el Espíritu (Rom.8.1)
- Coherederos con Cristo (Rom.8.12)
Rom 6:3 ¿O no saben ustedes que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en Su muerte?
Rom 6:4 Por tanto, hemos sido sepultados con El por medio del bautismo para muerte, a fin de que como Cristo resucitó de entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en novedad de vida.
Rom 6:5 Porque si hemos sido unidos a Cristo en la semejanza de Su muerte, ciertamente lo seremos también enla semejanza de Su resurrección.
Rom 6:11 Así también ustedes, considérense muertos para el pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús.
Rom 6:23 Porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.
Rom 8:1 Por tanto, ahora no hay condenación para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu.
Rom 8:2 Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús te ha libertado de la ley del pecado y de la muerte.
Rom 8:9 Sin embargo, ustedes no están en la carne sino en el Espíritu, si en verdad el Espíritu de Dios habita en ustedes. Pero si alguien no tiene el Espíritu de Cristo, el tal no es de El.
Rom 8:10 Y si Cristo está en ustedes, aunque el cuerpo esté muerto a causa del pecado, sin embargo, el espíritu está vivo (es vida) a causa de la justicia.
Rom 8:11 Pero si el Espíritu de Aquél que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en ustedes, el mismo que resucitó a Cristo Jesús de entre los muertos, también dará vida a sus cuerpos mortales por medio de Su Espíritu que habita enustedes.
Rom 8:17 Y si somos hijos, somos también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si en verdad padecemos con El a fin de que también seamos glorificados con El .
Rom 8:39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios que es en CristoJesús Señor nuestro.