2 Pedro 2:4-22
4 Dios no perdonó a los ángeles cuando pecaron, sino que los arrojó al abismo, poniéndolos en cadenas de oscuridad y reservándolos para el juicio. 5 Tampoco perdonó al mundo antiguo cuando mandó un diluvio sobre los impíos, aunque protegió a ocho personas, incluyendo a Noé, predicador de la justicia. 6 Además, condenó a las ciudades de Sodoma y Gomorra, y las redujo a cenizas, poniéndolas como escarmiento para los impíos.
Esos angeles encarcelados son quienes cayeron en la antigüedad y fueron hacia las hijas de los hombres.
No son los demonios descritos en el NT, a los demonios se les describe como espiritus impuros, satiros, y otros seres que viven en lugares apartados de la gente, etc. Son dos clases de seres distintos.