DKT
Saludos nuevamente y gracias por tomarse el tiempo para aclararme mis dudas, me ha ayudado a aclarar las dudas sobre estas definiciones.
Si en mis manos está poder responderle alguna duda, con mucho gusto intentaré darle la misma calidad de respuesta como la que usted me ha presentado a mi.
FORISTA DKT:
Gracias por su disponibilidad para responder otra consulta mia. Aunque yo tengo una respuesta a esta pregunta, tengo mucho interes en saber cual es la respuesta de una persona israelita en la carne, como Ud.
Entre los grupos cristianos que ensenan que la comunidad cristiana debe guardar los 10 mandamientos tal cual como fueron dados por Jehova a la nacion de Israel, en el Pacto del Sinai, siempre ellos se refieren UNICAMENTE a los 10 mandamientos que estan escritos en el libro del Exodo 20: 3 al 17. Jamas se refieren a los 10 mandamientos que aparecen mencionados en el libro de Deuteronomio 5: 7 al 21.
Por supuesto, estos cristianos que judaizan con el mandamiento del dia de reposo, nunca ensenan ese mandamiento desde el libro de Deuteronomio 5: 12 al 15, porque el versiculo 15 dice lo que ellos NO DESEAN QUE SEA LEIDO POR PERSONAS A LAS CUALES ELLOS ESTAN ADOCTRINANDO ACERCA DE GUARDAR EL DIA SEPTIMO DE LA SEMANA, COMO DIA DE REPOSO.
Esto es lo que dice Deuteronomio 5: 15, como sigue:
"Acuerdate que fuiste siervo en tierra de Egipto, y que Jehova tu Dios te saco de alla con mano fuerte y brazo extendido; POR LO CUAL JEHOVA TU DIOS TE HA MANDADO QUE GUARDES EL DIA DE REPOSO".
Y cuando a estos cristianos judaizantes con el mandamiento de guardar el dia septimo de la semana, se les pregunta por que ellos JAMAS ENSENAN los 10 mandamientos usando el libro de Deuteronomio 5: 12 al 15, la respuesta de ellos es que esos NO SON LOS 10 MANDAMIENTOS QUE SE ESCRIBIERON EN LAS 2 TABLAS DE PIEDRA. Afirman que los 10 mandamientos que se escribieron en las 2 tablas de piedra son los que se encuentran en Exodo 20: 8 al 17. Entonces, con esa respuesta, estos cristianos judaizantes JAMAS LE LEEN EL VERSICULO 15 DEL CAPITULO 5 DEL LIBRO DE DEUTERONOMIO, a quienes ellos les estan ensenando que deben guardar el dia septimo de la semana, como mandamiento divino.
Sin embargo, escudrinando ambas versiones de los 10 mandamientos CON SUS CONTEXTOS RESPECTIVOS, yo puedo decir que los 10 mandamientos que fueron ESCRITOS POR EL DEDO DE DIOS EN 2 TABLAS DE PIEDRA, fueron los que estan registrados en Deuteronomio 5: 6 al 21, por el siguiente motivo:
Despues que Moises reunio frente a el a todo el pueblo (Deuteronomio 5: 1) y le recito al pueblo los 10 mandamientos, Moises dijo lo siguiente, acerca de esos 10 mandamientos que Moises les habia recitado (lease Deuteronomio 5: 2 al 22):
"Estas palabras" (los 10 mandamientos) "hablo Jehova a toda vuestra congregacion en el monte, de en medio del fuego, de la nube y de la oscuridad, a gran voz; Y NO ANADIO MAS. Y LAS ESCRIBIO EN DOS TABLAS DE PIEDRA, LAS CUALES ME DIO A MI" (Deuteronomio 5: 22). Como puede verse, las palabras que Moises le habia recitado a todo el pueblo, las cuales se encuentran en Deuteronomio 5: 6 al 21, fueron exactamente las palabras que fueron escritas en dos tablas de piedra, pues Moises mismo lo dijo. En otras palabras, Moises mismo dio testimonio de cuales fueron exactamente todas las palabras que Dios escribio en las 2 tablas de piedra.
Cuando leemos los 10 mandamientos en el libro de Exodo, no se hace mencion de que esas hayan sido exactamente las palabras que Dios escribio en 2 tablas de piedra. Simplemente se dice:
"Y HABLO Dios todas estas palabras, DICIENDO" (Exodo 20: 1), lo cual nos indica que esa fue simplemente UNA VERSION VERBAL de los 10 mandamientos, pero no fue LA VERSION ESCRITA de los 10 mandamientos.
Entonces, mi pregunta a Ud. es:
Cual de esas 2 versiones de los 10 mandamientos fue LA VERSION ESCRITA en 2 tablas de piedra ?
Gracias por su respuesta y su tiempo.
Bendiciones del Creador.
Patricio Cespedes Castro.
EX-ADVENTISTA DEL SEPTIMO DIA.
Saludos sr Cespedes.
Gracias a usted por tener la amabilidad de darme la oportunidad de dar un punto de vista algo diferente de los visitantes de este espacio. Tengo la duda de lo que usted intenta decir con “una persona israelita en la carne, como Ud” pues no comprendo, si pudiera explicarme le agradecería. Por lo pronto le dejo abajo un breve artículo que explica de forma simple las diferencias entre términos que técnicamente son sinónimos para referirse a los judíos.
Hebreo: Los hebreos (del latín hebræus, éste del hebreo ‘ibrī, y éste quizá del acadio ẖapiru[m], “paria”) fueron un antiguo pueblo semita del Próximo Oriente y ancestros de los israelitas y los judíos. Según la Biblia y las tradiciones hebraicas, los hebreos son originarios de Mesopotamia, de Ur en Caldea. Eran nómadas, vivían en tiendas, llevando manadas de cabras y ovejas, utilizando asnos, mulas y camellos como portadores. Una crisis económica pudo impulsar a Terah, padre de Abraham, a dejar la ciudad para ir a la de Harran, en el Alto Éufrates. De allí, algunos de ellos emigran hacia Canaán, prometido por Dios, según la Biblia, a los descendientes del patriarca Abraham (c. 1750 adC).
Israelita: En la antigüedad, se llamó israelita al pueblo que se formó de la descendencia de Israel o Jacob, de sus 12 hijos surgió el pueblo de Israel, la nación de Israel.
Israelí: Es el término que define la nacionalidad de todos aquellos individuos nacidos en el Estado de Israel o que son ciudadanos del mismo. Por lo tanto, un individuo judío nacido en México no puede ser israelí ya que su nacionalidad es mexicana. Así pues, siendo “israelí” un concepto que define la nacionalidad, se puede hablar de israelíes musulmanes, cristianos o judíos.
Judío: Es todo aquel que profesa la religión judía, haya nacido o no en Israel. El pueblo judío es un grupo étnico descendiente de los antiguos israelitas del Oriente Próximo. La religión constituye, por tanto, un aspecto de la pertenencia étnica al pueblo judío, así también como prácticas culturales, sociales, lingüísticas, etc. La definición precisa de judío es controvertida y puede variar dependiendo de que se haga mayor énfasis en la identidad religiosa o en la secular (étnica y sociológica). De acuerdo con la legislación judía, judío es aquel que: a) es hijo de madre judía (ley que deriva una interpretación del pasaje de Deuteronomio 7:3-4) o b) aquella persona que se convierte formalmente al judaísmo bajo la supervisión halájica de un reconocido Bet Din (corte judía o tribunal rabínico) presidida por tres dayanim (jueces). Este proceso de conversión está desarrollado en textos legales judíos, tales como el Talmud, el Shulján Aruj y las interpretaciones de la ortodoxia rabínica.
Tomado de:
https://www.enlacejudio.com/2013/04/09/diferencias-entre-israelita-israeli-judio-hebreo-semita/
Lo primero que debo aclarar aquí es lo siguiente:
Una persona no-judía no está obligada a cumplir las leyes del pacto hecho por el pueblo en el monte Sinaí con Dios. Sólo los judíos, es decir los descendientes de esas personas tenemos dicha obligación de cumplirlas tal como está establecido a lo largo de la Torá. Esto incluye guardar el Shabbat (Día de reposo o descanso como suelen referir algunos en este espacio).
Sin embargo, debo dejar claro que una persona no-judía puede cumplir muchos mandamientos (no todos) si de forma sincera y sobre todo voluntaria, está en todo su derecho. En adición a lo anterior debe ser consciente de que no está obligado y que nadie puede obligarlo a que lo haga, pues no es parte del pueblo judío. Para esto último, una persona que desee pertenecer al pueblo judío, tiene la posibilidad de hacer un proceso de “conversión” el cual no es sencillo, es largo y sólo puede llevarse a cabo por medio de tribunales rabínicos legales en algunos lugares del mundo (no todos los países tienen estos tribunales, de hecho son muy pocos).
Ninguna persona tiene la potestad, autoridad o rango para obligar a una persona no-judía a cumplir algún mandamiento dado en la Torá. Ningún rabino, judío o no judío puede enseñar que una persona no-judía tiene que cumplir algún mandamiento, eso sería una mentira. Sólo si la persona desea voluntariamente cumplir algún mandamiento o mandamientos entonces deberá buscar a una persona judía que le pueda y quiera guiar en tal asunto.
En adición, ya la humanidad había hecho un pacto con Dios antes del pacto hecho en el monte Sinaí. En la historia de Noaj (Noé), al salir este del Arca junto a su familia, Dios realiza un pacto con toda la humanidad y la creación en general. Noé y su familia eran toda la humanidad que quedaba, luego tenía sentido que hiciera un pacto con ellos para que lo transmitieran a las siguientes generaciones. En dicho pacto Dios nunca dio el mandamiento de guardar el Shabbat.
Lo anterior debería ser suficiente para concluir la discusión de este tema en el foro, sin embargo comprendo que muchos se aferraran a diferentes pasajes de la Biblia para defender sus posiciones. Lo cual es a todas luces respetable y no hay más que aceptarlo.
Aquí tenemos que revisar bien el texto, pues el asunto que usted trae a colación es bastante extenso de responder.
El idioma hebreo que es el idioma original del texto (Tanaj para los judíos y AT para los cristianos) es muy diferente a idiomas como el griego, el latín y el español. Son idiomas que tienden a ser precisos en lo que desean expresar, muy pocas veces un texto es ambiguo en sí mismo. Si un texto original fue escrito en estos idiomas no es muy complicado traducir al español lo que allí dice. La información es bastante precisa y clara. Lo anterior se lo expongo y le invito a considerarlo muy a fondo, pues en esto radican muchas disputas que veo en este foro sobre asuntos relacionados al AT, pues tienden a considerar que sólo hay una traducción posible de pasajes del AT. Lo que me parece aún más complejo es que en general la mayoría de foristas no tienen bases sólidas lingüísticas del hebreo o el arameo, ni del griego antiguo para hacer valoraciones de las traducciones que utilizan para defender sus puntos. El resultado de lo anterior es crear debates estériles que no permiten un avance en el estudio, comprensión y sobre todo significación interior y práctica del texto y tienden a verlo como un texto del pasado que en la mayoría ya no opera o que está limitado. Mi invitación es que no ignoren los aspectos lingüísticos originales del texto hebreo/arameo y que no tengan miedo o prejuicios de buscar ayuda de personas que sí conozcan el texto y los puedan guiar para ahondar en lo que allí quizás pueda decir.
En oposición a lo anterior, el hebreo no es un idioma preciso, sino que es un idioma que al ser tan antiguo tiene una estructura gramatical diferente a las de idiomas como el griego, el latín o el español (para este caso concreto). El hebreo no se traduce antiguo no se traduce, realmente se “reconstruye” el significado de una frase, palabra o texto escrito originalmente en él. El hebreo es un idioma que no se escribe con vocales, sino sólo con las consonantes, entonces una palabra puede tener distintas formas de vocalizarse y esto le brinda una gama de posibilidades de significados a muchas palabras. Sólo quien conoce el idioma y la cultura inherente puede “reconstruir” con gran habilidad el contexto general de lo que el autor quiso decir en determinado texto. Sin embargo, lo anterior no significa que haya una sola posibilidad de interpretar el texto, sino muchas y esto tiene una importancia muy profunda para el pueblo judío, pues siempre intentamos imaginar todas las posibles formas de reconstruir el texto. Le quiero ilustrar si me permite:
N JMPL D L Q DS DMSTRRL S PRCSMNT ST TXT SN VCLS L CL SL PD SR NTNDD PR N PRSN Q CNC L DM SPÑL...Si uno traslitera el texto tal como aparece escrito sin vocales, entonces podría darse cuenta que no le estoy mintiendo.
BRHSHYT BRH HLHM HT HSHMYM VHRTZ: Así se vería transliterado (es decir tomar cada letra hebrea y darle un valor fonético aproximado a las letras latinas) el primer versículo del Génesis en hebreo. Tenga en cuenta que muchas veces las palabras no están claramente separadas en el manuscrito.
Entonces, si uno tomara la primera palabra del texto hebreo: BRHSHYT uno podría dividir este conjunto de letras de varias formas: BR-HSH-YT [Emanar-Fuego-Tiempo]/[Parir-Fuego-Tiempo]/[Emanar-Fuego-Algo femenino]/[Parir-Fuego-Algo femenino]/[Emanar-Luz-Tiempo]/[Emanar-Luz-Algo femenino]...etc
Otra forma de dividir el mismo conjunto de palabras: BRH-SHYT [Crear-Velo/Compartir/Capas/Cascarones/Pantallas]
Otra forma de dividir el mismo conjunto de palabras: B-RH-SHYT [En/Dentro de-Ver/Visionar-Velo/Cascarones/Capas/Compartir].
Otra forma: B-RHSH-YT: [En/dentro de-Cabeza/Punta/Inicio/Mente/Pensamiento-Tiempo/Algo femenino]
Otra forma: B-RHSHYT: [En/Dentro de-Principio temporal/Comienzo temporal/Inicio temporal después de un tiempo de no contado] ahora... use esto: En [un] principio/En [el] principio/En [un/el] inicio temporal/En [un/el] inicio del tiempo/En [un/el] comienzo del tiempo después de un tiempo no contado/En [un/el] principio del tiempo (contado)/En [un/el] inicio del conteo del tiempo/En [un/el] inicio/comiezo de lo que es el tiempo antes de que no existiera el tiempo/....etc.
El ejercicio anterior es lo que deseo significar del mensaje anterior. Le aseguro que no le he dado ni la mitad de las posibles combinaciones e interpretaciones o traducciones de esa primera palabra o conjunto de palabras y no hemos hablado del resto de palabras del primer versículo.
En este punto le pregunto a usted algo:
¿Usted ahora puede seguir creyendo que los judíos somos tan arrogantes para creer que tenemos la verdad absoluta de algo o que el cristianismo o el islám o el budismo tienen la verdad absoluta de Dios que es incomprensible para el ser humano? De antemano le respondo que honestamente no. Por eso es que siempre he sido reiterativo en mis pocas intervenciones en este foro de que la verdad la construimos entre todos, pero debemos estar dispuestos a tener la paciencia, humildad y la valentía de construir una verdad y no de que “tenemos” la verdad.
El versículo que usted menciona como prueba de su punto es interesante, pues la traducción no es tan sencilla como creen muchas personas que desconocen el idioma hebreo. Dicho versículo se puede traducir de dos (2) formas distintas, esto debido a que en él hay una palabra que es clave para darle un sentido u otro al texto. La palabra en cuestión es “iasaf” la cual es una palabra polisémica (tiene varios significados) y en general estos significados son opuestos. Los significados posibles de dicha palabra son “continuar/adicionar/continuar” y el otro significado posible es “pausar/detener/reevaluar”. De hecho hay profundas discusiones rabínicas desde hace más de 2000 años documentadas sobre este versículo y en general de este texto completo. Le recogeré algunas de estas “opiniones” (no verdades absolutas) sobre el versículo y verá que incluso llegan a ser opuestas, ambas sin embargo son perfectamente válidas y cada una cambia profundamente las implicaciones de comprender grandes pasajes del texto.
Devarim (Deuteronomio) 5:19 – Por favor note que le he subrayado y resaltado la palabra que es objeto de debate y que cambia la reconstrucción del versículo y su interpretación -
Texto original en hebreo:
את־הדברים האלה דבר יהוה אל־כל־קהלכם בהר מתוך האש הענן והערפל קול גדול ולא יסף ויכתבם על־שני לחת אבנים ויתנם אלי
La transliteración/Fonética del texto hebreo:
Et-hadevarim ha'eleh diber Adonay el-kol-kehaljem bahar mitoj ha'esh he'anan veha'arafel kol gadol velo iasaf vayijtevem al-shney lujot avanim vayitnem elay.
Traducción 1:
El SEÑOR habló esas palabras, esas y nada más, a toda su congregación en la montaña, con una voz poderosa que sale del fuego y las densas nubes. Los inscribió en dos tablas de piedra que me dio.
Traducción 2 (la que usted brindó):
"Estas palabras" (los 10 mandamientos) "hablo Jehova (Con todo respeto le aseguro que: ésta fonética es errónea) a toda vuestra congregación en el monte, de en medio del fuego, de la nube y de la oscuridad, a gran voz; y no añadió más. Y las escribió en dos tablas de piedra, las cuales me dio a mi"
Traducción 3:
Las Palabras estas había hablado Adonai a toda vuestra congregación en la montaña, de en medio del fuego, la nube y la densa nube; una Voz poderosa, y no se interrumpió Las escribió sobre dos tablas de piedras y me las entregó a mí.
Traducción 4:
Estas palabras habló el Adonai/Eterno a toda vuestra asamblea en el monte, desde en medio del fuego, de la nube y de las tinieblas, con gran voz, sin cesar. Y las escribió sobre dos tablas de piedra y me las dio.
Traducción al arameo por Onkelos:
(Ciudadano romano que se convirtió al judaísmo y vivió entre el año 35 e.c y el año 120 e.c y es considerado por el judaísmo una de las mejores fuentes de contraste de los significados de los textos, incluso los masoretas lo usaron como una de sus fuentes más fiables).
יָת פִּתְגָמַיָא הָאִלֵין מַלִיל יְיָ עִם כָּל קְהָלְכוֹן בְּטוּרָא מִגוֹ אֶשָׁתָא עֲנָנָא וַאֲמִיטְתָא קָל רַב וְלָא פְסַק וּכְתָבִנוּן עַל תְּרֵין לוּחֵי אַבְנַיָא וִיהָבִנָן לִי
Transliteración/fonética del arameo:
Iat pitgamaía hailén malíl Adonai ‘im kol kehaljon beturá migó eshata ánaná vaamit.tá kal rav vela fesák ujtavinún ‘al terén lujé avnaiá vihavinán lí.
Traducción más cercana del texto:
Estas palabras habló el Adonai/Eterno a toda vuestra asamblea en el monte, desde en medio del fuego, de la nube y de las tinieblas, con gran voz, sin cesar. Y las escribió sobre dos tablas de piedra y me las dio.
Irremediablemente la palabra “fesak” en arameo significa “cesar/parar/limitar” luego “vela fesak” significa “y no cesó/sin cesar/sin limitarse”. No quiere decir que ya esté todo dicho, pues Onkelos es una referencia muy buena, pero no se puede descartar de tajo el otro significado.
A continuación le comparto tres comentarios (Hay 27 opiniones al respecto) sobre la interpretación del texto entre los rabinos. La primera es de un rabino y comentarista muy estimado incluso por los teólogos cristianos imparciales, llamado RaShi:
ולא יסף. מְתַרְגְּמִינָן "וְלָא פָּסִיק" (וּלְפִי שֶׁמִּדַּת בָּשָׂר וָדָם אֵינָן יָכוֹלִין לְדַבֵּר כָּל דְּבְרֵיהֶם בִּנְשִׁימָה אַחַת וּמִדַּת הַקָּבָּ"ה אֵינוֹ כֵן — לֹא הָיָה פוֹסֵק, וּמִשֶּׁלֹּא הָיָה פוֹסֵק לֹא הָיָה מוֹסִיף) כִּי קוֹלוֹ חָזָק וְקַיָּם לְעוֹלָם (סנהדרין י"ז); דָּ"אַ — ולא יסף לֹא הוֹסִיף לְהֵרָאוֹת בְּאוֹתוֹ פֻּמְבִּי:
ולא יסף — We render this in the Targum by ולא פסק “and He did not cease”, — [Because it is characteristic of human beings that they are unable to utter all their words in one breath (but must make pauses) and it is characteristic of the Holy One, blessed be He, that this is not so, therefore He did not pause, and since He did not pause, He did not have to resume], — for His voice is strong and goes on continuously (Sanhedrin 17a). Another explanation of ולא יסף: He did not again ever reveal himself with such publicity.
ולא יסף - Hacemos esto en el Targum por ולא פסק "y Él no cesó", - [Porque es característico de los seres humanos que son incapaces de pronunciar todas sus palabras de una vez (pero deben hacer una pausa) y es característico del Santo, bendito sea Él, que esto no es así, por lo tanto, no se detuvo, y como no se detuvo, no tuvo que reanudar], porque su voz es fuerte y continúa continuamente (Sanedrín 17a ). Otra explicación de ולא יסף: nunca más se reveló con tanta publicidad.
Ahora le cito la opinión del rabino Ibn-Ezra (Edad Media en España), en referencia a la palabra “iasaf” traducida como “añadir/continuar”seguir”:
“
Estas palabras, es decir, los Diez Mandamientos, pero no las palabras exactas dadas anteriormente [comenta en: 5]
una voz poderosa que nunca antes habían escuchado “
y que no ha continuado”, esta fue la única revelación. Este verso explica por qué la gente se dispersó.”
Ahora le cito otra opinión de un rabino llamado el Chizkuni:
קול גדול ולא יסף, “con una voz fuerte que no se debilitó”. Según nuestros sabios, esta voz continuó siendo escuchada durante los cuarenta días que Moisés pasó en el Monte Sinaí, inmediatamente después de la revelación. Otra interpretación de esa línea: las palabras ולא יסף significan que los israelitas no escucharon nada más que los Diez Mandamientos, para no distraerlos. Esto estaría en línea con
Jeremías 45,3: כי יסף מכאוב על מכאובי, "porque Él había agregado a mi dolor".
Lo que deseo demostrarle, es que la reconstrucción del texto usando ambos significados de la palabra iasaf es válida. Ahora, usted se preguntará porqué es importante esa palabra (“iasaf”) y la respuesta es que va ligada a otra palabra aún más importante que se repite 7 veces en un lapso de 8 versículos en el texto. La palabra central aquí es “kol” (קול) (Voz/Ruido/Sonido/Estruendo/Eco/Trueno/Rumor) en referencia a lo que escucharon los israelitas en el monte Sinaí/Jorév. Los rabinos infieren que ninguna palabra está demás en el texto y si hay una palabra que se repite de forma continua (algo que sucede en muchísimas partes del AT) entonces puede significar que eso es importante. La palabra iasaf, hace referencia a la “Voz” de Dios. A continuación le doy pruebas de que esta palabra aparece repetida:
Devarím 5:19-25
יט. את־הדברים האלה דבר יהוה אל־כל־קהלכם בהר מתוך האש הענן והערפל קול גדול ולא יסף ויכתבם על־שני לחת אבנים ויתנם אלי
כ. ויהי כשמעכם את־הקול מתוך החשך וההר בער באש ותקרבון אלי כל־ראשי שבטיכם וזקניכם
כא. ותאמרו הן הראנו יהוה אלהינו את־כבדו ואת־גדלו ואת־קלו שמענו מתוך האש היום הזה ראינו כי־ידבר אלהים את־האדם וחי
כב. ועתה למה נמות כי תאכלנו האש הגדלה הזאת אם־יספים אנחנו לשמע את־קול יהוה אלהינו עוד ומתנו
כג. כי מי כל־בשר אשר שמע קול אלהים חיים מדבר מתוך־האש כמנו ויחי
כד. קרב אתה ושמע את כל־אשר יאמר יהוה אלהינו ואת תדבר אלינו את כל־אשר ידבר יהוה אלהינו אליך ושמענו ועשינו
כה. וישמע יהוה את־קול דבריכם בדברכם אלי ויאמר יהוה אלי שמעתי את־קול דברי העם הזה אשר דברו אליך היטיבו כל־אשר דברו
Lo importante entonces es lo siguiente:
Si “iasaf” se traduce como “continuar/añadir” entonces técnicamente podríamos entender que aquello que sucedió en el monte Sinaí es una experiencia irrepetible (lo cual es parcialmente cierto) y la Voz de Dios jamás se volverá a escuchar de esa forma.
Si “iasaf” se traduce como “pausar/cesar/limitar” entonces técnicamente podríamos entender que aquello aún tiene ecos en nuestro presente, que aquello no ha perdido significado y que podemos tener un acercamiento de esa experiencia. A mi particularmente me gusta más esta opinión y este significado, en especial porque el mismo texto en el mismo capítulo nos da pistas de que es posiblemente es así:
El contexto en el que Moisés da estas palabras es 40 años después de lo que él está narrando. El público al que va dirigido es prácticamente diferente, pues estos nacieron después del suceso (no fueron esclavos en Egipto) y pocos de los que vivieron tal experiencia en el monte Sinaí/Jorév seguían con vida. La narración es prácticamente la misma salvo algunas variaciones lingüísticas. En adición a lo anterior, es claro que Moisés omite lo que pasó con el becerro de oro, el cual sucede entre la experiencia de Monte Sinaí y la entrega definitiva de las Tablas escritas por Dios y rotas por él y la posterior entrega de otras tablas escritas por Moisés.
Luego si vemos Deuteronomio 5:2-5 y leemos cuidadosamente el texto nos damos cuentas que los versículos parecen contradecirse mutuamente:
5:2 El Eterno, nuestro Dios, hizo un pacto con nosotros en Jorev.
Adonay Eloheynu karat imanu brit beJorev.
Aquí es claro ver que Moisés dice que “el pacto” fue hecho con “todos los presentes” (Pero la mayoría de los presentes ni siquiera habían nacido).
5:3 No con nuestros padres hizo este pacto, sino con todos nosotros que estamos aquí vivos este día.
Lo et-avoteynu karat Adonay et-habrit hazot ki itanu anajnu eleh poh hayom kulanu jayim.
Este versículo, reafirma lo dicho en el anterior, de una forma innegable, clara y sin lugar a dudas. Todo va bien…pero:
5:4 Cara a cara habló el Eterno con vosotros en el monte, desde en medio del fuego,
Panim befanim diber Adonay imajem bahar mitoj ha'esh.
Aquí hay un problema: La mayoría no estuvo en el monte Sinaí/Jorév en ese día, no habían nacido siquiera. ¿Cómo podrían haber escuchado la Voz de Dios “cara a cara” con él? Ellos no estaban vivos, ni siquiera habían nacido.
5:5 estando yo en aquel tiempo entre el Eterno y vosotros para comunicaros la palabra del Eterno, porque tuvisteis miedo del fuego y no subisteis al monte; entonces El me dijo así:
Anoji omed beyn-Adonay uveyneyjem ba'et hahi lehagid lajem et-devar Adonay ki yeretem mipney ha'esh velo-alitem bahar lemor.
¿En qué momento exacto sucedió esto? Hay opiniones de rabinos que dicen que el pueblo escuchó las primeras 10 sentencias y le pidieron a Moisés que fueran su intermediario. Otra opinión menciona que sólo fueron las 2 primeras sentencias. Otra opinión menciona que sólo fue la primera. Otra opinión afirma que justo después de la primera palabra y una última afirma que fue justo después de escuchar la primera letra. El texto en hebreo da lugar a todas estas interpretaciones que le he dado, pero no me voy a explayar en esto.
¿Cómo así? Ellos (la mayoría) no estuvieron presentes, no pudieron tener miedo, ¿qué sucedió? Aquí es donde yo personalmente prefiero usar la traducción de la palabra “iasaf” como “pausar/limitar” pues es posible que la interpretación (y me baso en opiniones rabínicas) de estos pasajes signifiquen que la Voz de Dios es atemporal (Dios no está limitado por el tiempo y es espacio) sino que los ecos de Su Ley siguen vigentes y permanentes para los que estamos hoy presentes. Aclaro, yo lo veo desde el lente judío, la ley para el pueblo judío.
La premisa que los judíos tenemos es que todos los judíos estuvimos de pie en el monte Sinaí y que si nos preparamos de forma consciente, intelectual, física y transcendentalmente podremos escuchar los ecos de la Voz de Dios. Entonces su pregunta es bastante difícil de responder en realidad y por último le deseo dar una reflexión importante del asunto. A continuación le he de compartir una pequeña reflexión de un maestro judío (Rodrigo Varscher) sobre la naturaleza de las tablas (lujot) de la Ley.
LAS TABLAS DE DIOS Y LAS TABLAS DE MOISÉS
Al reparar en la naturaleza de los dos juegos de las Tablas de la Ley mosaica y las circunstancias que rodean la elaboración de las mismas, se observan diferencias significativas en la relación de las concepciones teológica y legal con la humana.
Las primeras tablas, así relata la Torá, fueron escritas por el mismísimo "dedo de Dios" y entregadas por este a Moisés (Éxodo 31:18). Al concluir el listado de leyes que Dios le dictara a Moisés en la cima del monte Sinaí, el Eterno le entrega a aquel "dos tablas de testimonio". Pero la gloria y la grandiosidad del acontecimiento no duró demasiado tiempo; mientras Moisés escuchaba atentamente las leyes divinas, el pueblo estaba sumido en un profundo desosiego ante la ausencia de su líder que hasta entonces había dirigido la gesta libertadora y la travesía por el desierto desde Egipto, lo cual llevó al pueblo a construir para sí mismo un becerro de oro fundido al que pudiera adorar y por el cual sustituir a la persona de Moisés. El pueblo no había entendido aún que la libertad no pasaba por cambiar de ídolo venerable sino por la institución de una ley que precisamente echara por tierra a todo objeto de idolatría y que rigiera a todos por igual.
El hecho es que, mientras Moisés comulgaba con Dios en el monte Sinaí, el pueblo construyó este ídolo, y "se sentó a comer y a beber y se paró a reír" (Éxodo 21:6). Este verbo "reír" (לצחק, "letsajek") aparece vocalizado en el texto masorético (tradicional) de una manera muy particular, pues si bien su raíz significa "reír" (צ.ח.ק), está estructurado de tal forma que resuena más a la idea de "jugar" (לשחק, "lesajek"), ya que "reír" se dice לצחוק ("litsjok"). Este mismo verbo es el que usa la Torá para referirse a la manera en que Sara vio que se estaba comportando Ismael (primer hijo de Abraham) y lo que la motivó a exigirle a su marido Abraham que lo expulsara junto con su madre Hagar, sirvienta de la pareja (Génesis 21:9). Evidentemente, este verbo, que combina el reír y el jugar, connota algún tipo de comportamiento indebido, probablemente relacionado con el acto sexual impropio, inadecuado y, en el caso de los hermanos, hasta abusivo. Por eso Sara se escandaliza y le exige a su marido que expulse a ese hijo y a su madre de la casa, y por eso Moisés, al comunicarle Dios lo que estaba haciendo el pueblo mientras tanto, rompe las tablas al descender del monte y ver lo que estaba haciendo el pueblo.
Al quebrar las tablas, se quiebra también ese primer pacto entre Dios y el pueblo, pero Dios le insiste a Moisés con volver a establecer uno nuevo. Así es que, esta vez, es el propio Moisés el que tallará las tablas en las que Dios inscribirá sus leyes (Éxodo 34:1). La base donde figurarán las leyes ya no será de naturaleza divina sino humana: Moisés, un ser humano, las construye. Su contenido sigue siendo divino, pero la plataforma que sostiene las leyes es de material terrenal. Parecería ser que no era compatible con el hombre bajar del cielo una verdad intacta y no imbuirle algo de lo humano. Por eso, finalmente Dios le ordena a Moisés que él mismo escriba para sí las condiciones del pacto, es decir, los Diez Mandamientos (Éxodo 34:28).
Lo curioso es la diferencia en el nombre de Dios entre la primera vez que este construye las tablas e inscribe en ellas sus leyes y la segunda en que Moisés las talla. En el primer caso es el "dedo de Elohim", nombre que alude a la fuerza de la naturaleza que creó el mundo ("En el principio creó Elohim los cielos y la tierra"), independientemente de su relación con la existencia del ser humano, mientras que en el segundo caso, es el nombre inefable de Dios (יהוה) el que le ordena a Moisés que sea él mismo el que talle las tablas e inscriba en ellas los Diez Mandamientos. "Elohim" es de hecho un sustantivo plural, aunque se lo conjugue con verbos en singular a propósito para no dar lugar a la idea de la existencia de una divinidad múltiple, que iría en contra de la determinación monoteísta del texto bíblico, pero aparece en cada uno de los siete días de la Creación y hasta la época de los patriarcas.
Finalmente, el Dios con el que se sella el pacto definitivamente es el que se pone en relación con el ser humano, reconoce su naturaleza falible y le otorga la libertad y la responsabilidad de instituir y hacer cumplir la ley.
Muchas gracias por su tiempo para leerme, además es un placer para mi compartir.
Bendiciones para usted siempre.