Queridos amigos, Roberto nos trae numerosas citas de las cartas atribuidas a Pablo, y entre las citas que nos trae, se encuentran las siguientes palabras:
Y nuestra amiga Manhatan, le responde diciendo así:
¿"trayendo la Palabra de Dios"?... ¿quiénes son quienes siguen desechando la Palabra de Dios (la Palabra del Evangelio)?...
Tú agradeces a Roberto sus aportes, y Roberto cita:
EFESIOS 2.....
Tito 3.....
Hebreos 7.....
Romanos 7.....
.....Y "Pablo y Pablo y Pablo"...
¿Qué es para vosotros Jesucristo y los mandamientos del Evangelio?... Mientras no nos habléis del Evangelio (la única y verdadera Palabra de Dios), es que despreciáis la piedra que despreciaron los principales sacerdotes y los fariseos:
"Jesús les dijo: ¿Nunca leísteis en las Escrituras:
La piedra que desecharon los edificadores,
Ha venido a ser cabeza del ángulo.
......Por tanto os digo, que el reino de Dios será quitado de vosotros, y será dado a gente que produzca los frutos de él.
Y el que cayere sobre esta piedra será quebrantado; y sobre quien ella cayere, le desmenuzará.
Y oyendo sus parábolas los principales sacerdotes y los fariseos, entendieron que hablaba de ellos". (Mateo21:42-45)
Los principales sacerdotes y los fariseos querían seguir imponiendo las leyes del viejo testamento que Jesucristo, con sus misericordiosos mandamientos del Evangelio, dejó abolidas..., y desecharon los mandamientos que Jesucristo nos enseñó cuando predicó el Evangelio.
Es comprensible que digáis que ya no estamos bajo las leyes del viejo testamento que fueron abolidas por Jesucristo. Eso es correcto. ¿Pero cuándo vais a recordar los mandamientos que Jesucristo nos entregó en el Evangelio?..., ¿y cuándo vais a decir que, para entrar en la vida, DEBEMOS CUMPLIR los mandamientos que Jesucristo nos dio en el Evangelio, COMO JESUCRISTO LO ENSEÑÓ?:
"Entonces vino uno y le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener la vida eterna? El le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno sino uno: Dios. Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones" (Mateo 19:16-22)
No estamos bajo las leyes del viejo testamento que Jesucristo abolió. Pero de nada os valdrá decir que no estamos bajo las leyes del viejo testamento que Jesucristo abolió si no proclamáis que, para entrar en la vida, debemos guardar los mandamientos de Jesucristo como Jesucristo lo enseñó.
Son muchos los que no comprenden que muchas leyes del viejo testamento fueron abolidas por Jesucristo porque no eran la verdadera Ley que Dios había dado a Moisés. Son muchos los que no comprenden que la verdadera Ley que Dios había dado a Moisés son los mandamientos que Jesucristo nos reveló en el Evangelio.
Los mandamientos que Jesucristo nos reveló en el Evangelio son los mandamientos que realmente había dado Dios a Moisés y al pueblo de Israel. Y eso lo dice Pablo, al que tanto creéis defender:
"Porque no quiero, hermanos, que ignoréis que nuestros padres todos estuvieron bajo la nube, y todos pasaron el mar; y todos en Moisés fueron bautizados en la nube y en el mar, y todos comieron el mismo alimento espiritual, y todos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebían de la roca espiritual que los seguía, y la roca era Cristo. Pero de los más de ellos no se agradó Dios; por lo cual quedaron postrados en el desierto". (1ª Corintios 10:1-5)
"¿Quiénes fueron los que, habiendo oído, le provocaron? ¿No fueron todos los que salieron de Egipto por mano de Moisés? ¿Y con quiénes estuvo él disgustado cuarenta años?...... . Porque también estamos evangelizados lo mismo que aquellos;...... Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en él, y aquellos que primero fueron evangelizados no entraron por causa de desobediencia, otra vez fija un día hoy, en David, diciendo después de tanto tiempo, como había sido predicho: Hoy, si oyereis su voz, no endurezcáis vuestros corazones" (Hebreos 3:16-4:7).
"Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas! Mas no todos obedecieron al evangelio; pues Isaías dice: Señor, ¿quién ha creído a nuestro mensaje?". (Romanos 10:15-16)
Por tanto, los mandamientos que Jesucristo nos enseñó en el Evangelio son los únicos mandamientos vigentes, desde siempre y para siempre:
"Las obras de sus manos son verdad y juicio; Fieles son todos sus mandamientos, Afirmados eternamente y para siempre, Hechos en verdad y en rectitud. Redención ha enviado a su pueblo; Para siempre ha ordenado su pacto" (Salmos 111,7-9)
"De tus decretos he sabido hace tiempo que para siempre los has establecido" (Salmos 119 (118), 152).
Vuelvo a repetir: los mandamientos que Jesucristo nos enseñó en el Evangelio son los verdaderos mandamientos de Dios y no las leyes del viejo testamento que fueron abolidas por Jesucristo.