Re: Los adventistas, el sello de Dios y las filacterias
Muy señor mío:
No tengo la necesidad, ni la inclinación de ser nada más que "un aprendiz de torpe" en cuanto al judaísmo, pues no deseo ser judío, ni parecerme a un judío, como tampoco deseo abrazar la religión maya ni las creencias budistas. Para conocer las creencias de esos grupos de personas, se puede leer su literatura (por ejemplo, el Popol Vuh) o se pueden leer síntesis más o menos fundadas en otros libros e incluso en internet, ayudados, claro está, por Google y otras herramientas semejantes.
Dada la reacción de usted, parece que no iba muy descaminado cuando señalé que la práctica de las filacterias era una de tantas supersticiones judías (que documenté debidamente), igual que hay supersticiones en otros grupos religiosos o pseudorreligiosos. Por cierto, sin pretender ser una autoridad de la religión judía, he leído varios tratados del Talmud de Babilonia en español y en inglés, así como las leyendas de los judíos compiladas por Ginzberg. Naturalmente, por mucha bibliografía antigua y moderna que haya de tales cosas, ello no impide que parte de ella refleje supersticiones.
Reciba usted un saludo todo lo cordial que una persona como usted merece.
Bueno, si usted cree que por medio de "google" puede llegar a conocer (otro diría "saber", qué arrogancia la suya) de judaismo o de los judíos, pues está en su derecho de darse por satisfecho, aunque se lo digo por si no se lo han dicho antes: está equivocado.
El caso es que usted escribió:
Es por esto mi aclaración y bueno, una vez más queda evidenciado que usted sabe lo que cree saber de judaismo, es decir, en judaismo usted es un aprendiz de torpe.
La Torá, las Mitzvot, los Jukim, los Mishpatim, las Torot, las halajot... en fin, todo el sistema de legislación al que usted es un perfecto foráneo son cosas entre D'os y los hijos de Israel, su Heredad. Por ende, usted sabe un poco de muy poco de casi nada.
Muy señor mío:
No tengo la necesidad, ni la inclinación de ser nada más que "un aprendiz de torpe" en cuanto al judaísmo, pues no deseo ser judío, ni parecerme a un judío, como tampoco deseo abrazar la religión maya ni las creencias budistas. Para conocer las creencias de esos grupos de personas, se puede leer su literatura (por ejemplo, el Popol Vuh) o se pueden leer síntesis más o menos fundadas en otros libros e incluso en internet, ayudados, claro está, por Google y otras herramientas semejantes.
Dada la reacción de usted, parece que no iba muy descaminado cuando señalé que la práctica de las filacterias era una de tantas supersticiones judías (que documenté debidamente), igual que hay supersticiones en otros grupos religiosos o pseudorreligiosos. Por cierto, sin pretender ser una autoridad de la religión judía, he leído varios tratados del Talmud de Babilonia en español y en inglés, así como las leyendas de los judíos compiladas por Ginzberg. Naturalmente, por mucha bibliografía antigua y moderna que haya de tales cosas, ello no impide que parte de ella refleje supersticiones.
Reciba usted un saludo todo lo cordial que una persona como usted merece.