Re: LO QUE REALMENTE CAMBIEN A LA SANA DOCTRINA DE DIOS
Haber amigos.
Si acepto los versículos que me da Greivin sin completarlos con los míos, resulta ser que el haber nacido de nuevo no tiene ningún efecto, entonces los textos que puse no me sirven a mi tampoco, pero si creo en la nueva criatura entiendo que esta no puede convivir con el pecado si este reina sobre mi carne, si mi carne vive y reina sobre mi, la nueva criatura no puede existir, y el que no es nueva criatura no conoce a Dios, porque los hijos de Dios viven conforme el Espíritu, y no conforme la carne.
Pero como no deseo dar solo razones propias que entiendo en su palabra(la de Dios), les ofrezco un ejercicio que podemos hacer juntamente, y es el de ver el punto de relación y respaldo entre el texto que nos ofrece Greivin y los que le he expuesto yo, pues ciertamente no deben contrariarse, sino mas bien complementarse.
Para eso les invito a que traten de ver el punto que les ofrezco como algo mas elevado, pues mas elevado es el asiento del nacido de nuevo.
Amigo Carlos, dices esto:
distinto es que algunos logren dominar su cuerpo y más difícil de lograr es cambiar nuestra mente
El problema en tu enfoque es que tu no puedes cambiar nada, sino que es el Espíritu Santo quien produce el querer como el hacer en nosotros, y si a eso le añades que soy nacido de nuevo, entenderás que nos ha sido dada nueva mente, nueva vida, y al ser nueva ya se efectuó ese cambio, y nada pudiste tu hacer, sino que todo es mérito de Jesús.
Quizá sería necesaria una explicación mas profunda sobre el lugar de la mente en la lucha que nos describe Pablo, pero mejor es cerrar este punto para avanzar a otros.
Bendiciones.
Haber amigos.
Si acepto los versículos que me da Greivin sin completarlos con los míos, resulta ser que el haber nacido de nuevo no tiene ningún efecto, entonces los textos que puse no me sirven a mi tampoco, pero si creo en la nueva criatura entiendo que esta no puede convivir con el pecado si este reina sobre mi carne, si mi carne vive y reina sobre mi, la nueva criatura no puede existir, y el que no es nueva criatura no conoce a Dios, porque los hijos de Dios viven conforme el Espíritu, y no conforme la carne.
Pero como no deseo dar solo razones propias que entiendo en su palabra(la de Dios), les ofrezco un ejercicio que podemos hacer juntamente, y es el de ver el punto de relación y respaldo entre el texto que nos ofrece Greivin y los que le he expuesto yo, pues ciertamente no deben contrariarse, sino mas bien complementarse.
Para eso les invito a que traten de ver el punto que les ofrezco como algo mas elevado, pues mas elevado es el asiento del nacido de nuevo.
Amigo Carlos, dices esto:
distinto es que algunos logren dominar su cuerpo y más difícil de lograr es cambiar nuestra mente
El problema en tu enfoque es que tu no puedes cambiar nada, sino que es el Espíritu Santo quien produce el querer como el hacer en nosotros, y si a eso le añades que soy nacido de nuevo, entenderás que nos ha sido dada nueva mente, nueva vida, y al ser nueva ya se efectuó ese cambio, y nada pudiste tu hacer, sino que todo es mérito de Jesús.
Quizá sería necesaria una explicación mas profunda sobre el lugar de la mente en la lucha que nos describe Pablo, pero mejor es cerrar este punto para avanzar a otros.
Bendiciones.