El arzobispo de Milwaukee, Rembert Weakland....
El arzobispo de Milwaukee, Rembert Weakland....
El Papa acepta una nueva dimisión
J. A. PARRADO. Corresponsal
NUEVA YORK. Los escándalos sexuales que salpican a la Iglesia católica en EEUU han provocado ya una segunda dimisión en su alta jerarquía. El arzobispo de Milwaukee, Rembert Weakland, ha pedido al Vaticano que acepte su jubilación anticipada tras saltar a la luz que compensó con medio millón de euros a un ex amante que le acusaba de violación La Santa Sede comunicó ayer con una escueta frase que aceptaba la renuncia del arzobispo.
El caso de Weakland no es de pederastia. Su antiguo compañero, Paul Marcoux, tenía 33 años cuando se produjó el supuesto asalto sexual, que nunca fue denunciado a policía. Weakland ha negado los hechos, pero su comportamiento, además de sospechoso, lo deja en entredicho. El arzobispo sufragó el silencio de Marcoux con su dinero de la diócesis. Cuando comenzó a estallar toda la avalancha de denuncias de abusos sexuales, fue el primero en aplicar una política de tolerancia cero con los supuestos pederastas.
Pese a las afirmaciones de Marcoux, una carta del arzobispo de hace 20 años, da a entender que realmente ambos mantenían una relación romántica. Fue, al parecer, Marcoux el que «vendió» su discreción.
La decisión de renuncia de Weakland contrasta con la negativa de otros cardenales y obispos, implicados en la ocultación de casos verdaderos de pederastia.
A primeros de año, resignó el obispo de Palm Beach (Florida) y el jueves el responsable de la diócesis de Kentucky se acogió a una baja temporal. Sin embargo, el cardenal Law de Boston, centro de los dos mayores escándalos, se resiste a aceptar las presiones de sus feligreses.
La salida del arzobispo de Milwaukee de la conferencia episcopal debilita las posiciones de los progresistas y hace temer que en la próxima cumbre de obispos, se tomen posturas más conservadoras y defensivas, como el ataque a los gays. Muchos jerarcas, entre ellos Joaquín Navarro Valls (portavoz en el Vaticano) están descargando las responsabilidades sobre los homosexuales. El jueves pasado, decenas de organizaciones de gays y lesbianas publicaron un comunicado denunciando esta estrategia de la Iglesia.
http://www.elmundo.es/2002/05/25/sociedad/1147965.html