Re: Lista de obispos y cardenales dimitidos por asuntos sexuales en la iglesia católi
«Mi papá es obispo»
El nacimiento de la hija del obispo suizo Hansjoerg Vogel reabre la polémica del celibato
BERNA.- «Mi papá es obispo». Esta será una de las primeras frases que aprenderá, dentro de pocos años, la pequeña nacida el pasado fin de semana en la localidad suiza de Lucerna. El ex obispo de Bàle, monseñor Hansjoerg Vogel, es el padre de la niña.
Así lo reconoció él mismo a principios del pasado mes de junio, cuando presentó la dimisión de su cargo en el seno de la Iglesia. En medio del estupor de sus feligreses y, en general, de la comunidad católica, el religioso anunció que pronto sería padre biológico. Vogel, de 44 años de edad, era el obispo más joven de su país.
Ayer, la abuela anunciaba el nacimiento del bebé, que se produjo poco después de la reciente vuelta de monseñor Vogel a Suiza.
El obispo había optado por ir a «refugiarse» los tres últimos meses en el extranjero, según parece en un perdido monasterio en Alemania, para poner un punto y aparte al alboroto provocado por la «buena nueva» y huir de la publicidad que se había dado a su relación amorosa con una mujer de 42 años.
Finalmente, el feliz acontecimiento se produjo en la noche del domingo al lunes, en el hospital cantonal de Lucerna y, según la madre de la parturienta, ésta se encontraba en perfectas condiciones.
Ahora queda por dilucidar qué pasará con la situación del monseñor. Según el derecho canónico, Hansjoerg Vogel conservará su condición de obispo «sin cartera», es decir sólo como título, pero según el Papa puede quedarse sin el cargo si llega a unirse en matrimonio con la madre de su hija. El Pontífice aceptó su dimisión después de que el obispo suizo confesara su pecado.
En Bàle se sabe que su sucesor ha sido elegido hace dos semanas por el responsable de la diócesis, pero su nombre permanecerá en el anonimato hasta que su nombramiento sea aprobado por Juan Pablo II.
El ex obispo ha querido mantener la discreción hasta el nacimiento de su hija. El lunes, en una breve entrevista en la radio germano-suiza DRS, explicó que él se ocuparía del bebé y que la cuestión de su boda con la madre es un asunto que, de momento, queda pendiente.
El alto cargo eclesiástico suizo dejó de serlo el pasado 2 de junio, después de 14 meses a la cabeza de la diócesis. Ese día, en una carta a los feligreses, les comunicó que tenía un «problema afectivo» de mucha envergadura que le había llevado a encontrar el apoyo de una mujer que había conocido mucho tiempo atrás.
Su franqueza reabrió en Suiza el debate sobre el celibato de los sacerdotes católicos. Incluso se realizó una encuesta en la que una mayoría de los católicos, en concreto el 84% de los interrogados, se pronunció en contra del celibato impuesto por la Iglesia.
Monseñor Vogel había afirmado en su carta de dimisión que este «fallo personal» no debía afectar a la creencia del celibato que exige la Iglesia a los sacerdotes.
Ayer, la sede episcopal de Bàle no quiso hacer ningún comentario al conocer el nacimiento de la hija de su obispo.
http://www.elmundo.es/papel/hemeroteca/1995/09/12/sociedad/64462.html