las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

En Apoc 13:6 dice: “Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar su Nombre y su Santuario, a saber, los que viven en el cielo”.

La fecha del quitamiento oficial del “continuo” ministerio celestial por el “cuerno” o príncipe opresor, y consiguiente imposición de la “abominación” papal, es de 1290 días-años (Dan 12:12), período que igualmente llega al “tiempo del fin” (Dan 12:9,12).

- Esto se cumplió desde el 508 cuando el rey franco Clodoveo se bautizó al catolicismo romano según un análisis histórico reciente, y fundó París como su capital en un sistema de unión Iglesia-Estado. Su culminación 1290 años después tuvo lugar cuando la misma tribu (los francos), dio su golpe de muerte al papado en 1798, separando la iglesia del estado.

- Ya estaba en los días de Pablo el origen pequeño de ese poder apóstata que, al comenzar el S. VI, iba a obtener un reconocimiento oficial por un gobierno terrenal que se haría universal. Ese reconocimiento implicaba una negación del ministerio sacerdotal de Cristo en el templo celestial, y la implantación en su lugar de la “abominación que causa horror (o consternación)” (Dan 12:12). [La traducción correcta de Dan 12:12 es: “Desde el tiempo que sea quitado el continuo y puesta la abominación asoladora habrá 1290 días”].

- Los historiadores modernos no se cansan de destacar la importancia de la conversión de Clodoveo al catolicismo romano y su consiguiente transformación como adalid en defensa de la fe papal, y hasta colocan el hecho como uno de los más importantes de la historia del mundo.

- Los 1335 días-años sirven de nexo entre la profecía de los 2300 años y los 1290 años; ambas desembocan en el “tiempo del fin” (Dan 8:17,19; 12:9).


Entonces, según lo que expones, el "pisoteo" comenzó en el año 508dC. Lo que indica que el cuernito comenzó a pisotear el santuario celestial en el año 508dC. ¿Correcto?
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

Entonces, según lo que expones, el "pisoteo" comenzó en el año 508dC. Lo que indica que el cuernito comenzó a pisotear el santuario celestial en el año 508dC. ¿Correcto?

"Los protestantes, antes de Miller, habían aplicado este texto de Tesalonicenses a la substitución del paganismo romano por el Cristianismo apóstata; él ahora lo aplicaba de esta manera: El "continuo" (el paganismo romano) fue quitado y el lugar de su santuario (pagano, esto es, Roma) fue echado abajo, o contaminado; y en su lugar fue puesta la abominación (el sistema papal) en la iglesia. Luego el santuario de Dios, que fue pisoteado primero por el paganismo y luego por el Papado, sería limpiado. Él identificó esto al principio como "el templo en Jerusalén y los adoradores en él"; posteriormente como "la Tierra y la Iglesia". (Ver su Evidencia. . .sobre la Segunda Venida ["Conferencias de Miller"], ed. 1838, pp. 36-38; Carta. . . sobre la Purificación del Santuario, 1842, pág. 8).

Miller dio la fecha del 508 d.C. como el tiempo en que el "continuo" sería quitado (lo explicó como el triunfo de la iglesia romana por sobre el paganismo romano) y el comienzo de los 1290 días (Dan 12:11), contados como años. De acuerdo a su cómputo, la fecha del 508 d.C. también marcó el fin de un período de 666 años (al que llegó por su aplicación del número 666 mencionado en Apoc 13:18) durante el cual el paganismo romano dominaría al pueblo de Dios, primero a los judíos y después a los cristianos (Evidencia, pág. 81).

4. Oposición a la interpretación de Miller. La explicación de Miller del "continuo" pronto atrajo el fuego de sus oponentes en dos líneas: (1) su cronología y (2) su identificación. Su cronología fue objetada en base a razones históricas y su identificación del "continuo" por razones exegéticas - lo último especialmente de parte de aquellos que sostenían el punto de vista literal, de que el "continuo" y los períodos de tiempo relacionados (1290 y 2300 días) significaban sacrificios literales y días literales.

5. Cambio en la posición millerista. Los colegas de Miller generalmente aceptaron su identificación del "continuo" pero discrepaban con su aplicación del número 666. La mayoría usó ampliamente el mapa profético millerista (diseñado por Fitch, 1842) y omitía cualquier explicación del 666 o cualquier identificación del "continuo". En 1843 un punto de vista que variaba con el de Miller apareció en el Midnight Cry (Clamor de Media Noche; 5:52-53, 4 de Octubre de 1843). Este enfoque, que fue rechazado en una nota del editor, identificaba el "continuo" como la "continua mediación de Jesucristo" quitado por el cuerno pequeño papal, que "echó abajo el lugar de su santuario evangélico" cuando él "echó abajo los sacramentos y la verdad del evangelio" y "la verdadera doctrina de la cruz de Cristo".

Aun a pesar de las diferencias de opinión sobre la interpretación detallada de Miller, los milleristas se mantuvieron unidos contra los oponentes que contendían por la interpretación literal en lugar de la simbólica. Vez tras vez los escritores milleristas insistían en que la palabra "sacrificio" no estaba en el hebreo original sino que lo proporcionaron los traductores; que por consiguiente el "continuo" no se refería a los sacrificios judíos literales quitados por Antíoco, y que los 2300 días no eran días literales sino años, a ser fechados desde el 457 a.C. No fue sino hasta el período de confusión y división que siguió al chasco de 1844, que un grupo se levantó (el partido de la "Edad por Venir") apoyando el viejo punto de vista literalista, mientras miraban los sacrificios literales a realizarse en el futuro en Jerusalén; este punto de vista fue repudiado por la mayoría de aquellos que permanecieron con Miller y Himes, y también por el pequeño grupo que se convirtió en los Adventistas del séptimo día. "
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

"Precursor de los puntos de vista de los ASD. Cuando los Adventistas Sabatarianos [guardadores del sábado] se encaminaron, después de 1844, a desarrollar su nueva doctrina del santuario celestial, ellos dejaron atrás la identificación de William Miller del santuario de Dan 8:14, de las dos bestias de Apoc 13, y del número 666 como perteneciente al "continuo," pero ellos retuvieron, en lo principal, la idea de Miller de que el "continuo" y la "abominación desoladora" eran dos fases sucesivas del poder romano, el pagano y el papal.

Sin embargo, en el mismo principio una sugerencia marcó una nueva dirección, cuando O. R. L. Crosier, después de un estudio unificado con Hiram Edson y F. B. Hahn, escribió las primeras exposiciones de la doctrina del santuario. El primer artículo de Crosier, que apareció en The Day-Dawn (La Aurora del Día; en la primavera de 1845; reimpreso en la Review and Herald (Revista y Heraldo; 1:78-80, 5 de Mayo de 1851), no menciona el "continuo", pero señaló el santuario celestial, el lugar del ministerio intercesor de Cristo, como el santuario que debía ser limpiado (Dan. 8:14). Su artículo posteriormente expandido en el Day-Star (Estrella del Día, Extra, 7 de Feb. de 1846) expresamente declaró que las varias referencias de Daniel al santuario como siendo echado abajo (Dan 8:11), contaminado (11:31), pisoteado bajo los pies (8:13), y purificado (8:14) se aplican al santuario celestial del nuevo pacto. Esto, decía él, puede ser pisoteado bajo los pies figuradamente, de la misma manera como el Hijo de Dios lo ha sido.

Esta bestia "político-religiosa" contaminó el Santuario (Apoc. 13:6), y lo echó de su lugar en el cielo (Sal. 102:19). (Jer. 17:12; Heb. 8:1-2) cuando ellos llamaron a Roma la ciudad santa (Apoc. 21:2) e instalaron al Papa allí con los títulos, "Señor Dios el Papa", "Santo Padre", "Cabeza de la Iglesia", etc., y allí, en el falsificado "templo de Dios" él profesa hacer lo que Jesús realmente hace en su Santuario; 2 Tes. 2:1-8. El Santuario ha sido pisoteado bajo los pies (Dan. 8:13), el mismo que tiene el Hijo de Dios; Heb. 10:29 (Day-Star Extra, 7 de Feb. de 1846, pág. 38).

Éste fue un paso definitivo de separación de los dos santuarios de Miller, aquel de Dan 11:31 como el santuario pagano que pertenecía al continuo, y el otro de Dan 8:13-14 como el templo de Dios.
No está claro si Crosier tomó el paso más amplio de abandonar la ecuación "continuo-paganismo" de Miller. Su identificación de que los que contaminan el santuario son "Roma y los apóstoles de la Cristiandad [¿padres de la iglesia?]... juntamente" (ibid.) suena más parecida a la interpretación de Miller de las dos fases, con el "continuo" como la primera fase, esto es, el paganismo. Sin embargo, en su discusión él no menciona el término "continuo". Él dice (ibid., pág. 39, col. 3), "El servicio diario descrito era una clase de intercesión continua", pero el contexto de esta declaración muestra que él está hablando claramente de los sacrificios levíticos realizados diariamente a lo largo del año en contraste con el servicio anual especial del Día de Expiación. Crosier describe estos servicios como un tipo del sacerdocio celestial de Cristo, que dura desde Su ascensión hasta el fin de los 2300 años; no como el "continuo" de Daniel, quitado cuando el Papado se estableció."
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

Desarrollo del "viejo" punto de vista ASD. Crosier había identificado el santuario en Dan 8:11,13-14 y 11:31 como el santuario celestial.

" Los escritores Adventistas del Séptimo día concordaron tiempo después en que el santuario descrito en Dan 8:14, aquel a ser limpiado después de los 2300 días, significaba el santuario celestial. En los otros tres pasajes, los autores Adventistas siguieron en general también a Crosier (quizás con la sola excepción de David Arnold) en aplicar el santuario descrito en Dan 8:13, aquel que fue pisoteado bajo los pies, al santuario celestial, aunque ellos continuaron sosteniendo, con Miller, que el "continuo" era el paganismo y que el santuario referido en Dan 8:11 y 11:31 (echado abajo, y contaminado) pertenecía al "continuo", y representaba un santuario pagano.

José Bates identificó el "continuo" como el paganismo en 1846 (The Opening Heavens [Los Cielos Que Se Abren], pág. 31), de igual modo hizo J. N. Andrews en 1853 (Review and Herald, 3:145, 3 de Feb. de 1853; cfr. pág. 129, 6 de Ene. de 1853), y posteriormente Uriah Smith (ibid., 24:180, 1° de Nov. de 1864) y James White ("El Tiempo", en sus Sermones sobre la Venida y el Reino de... Cristo, ed. 1870, pp. 116-117; cfr. pp. 108, 118, 122-125). En un artículo temprano (Review and Herald, 1:28, 29 de Enero de 1851) White había seguido a Crosier en argumentar finalmente que el santuario pisoteado era aquel del cielo, pero él no definió el "continuo" en este artículo. Cuando él más tarde lo definió, enfáticamente describió "el continuo, y la abominación desoladora" como "dos poderes desoladores; el primero, paganismo, luego, el Papado" (Sermones, pág. 116).

Otros escritores Adventistas del séptimo día siguieron consecuentemente esta interpretación, y Smith expuso una exposición más detallada en Pensamientos sobre Daniel y Apocalipsis, que llegó a ser un libro de texto normativo."
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

"Un enfoque diferente y sus resultados. Muy extrañamente, sin embargo, una interpretación aislada y atípica había aparecido en Marzo de 1850, en el artículo más temprano sobre Dan 8 en cualquier revista Adventista del Séptimo Día, un artículo escrito por David Arnold (La Verdad Presente, 1:60). Fue significativo con relación a uno de los varios esfuerzos entre el grupo más grande de los Adventistas no-Sabatarianos - aquellos que habían abandonado la fecha de 1844 - para encontrar un nuevo y más tardío cómputo de tiempo para los 2300 años. Unos pocos de ellos, mientras esperaban el fin del período en 1850, defendían que los creyentes fueran a Jerusalén (entre aquellos que se fueron estaba la Sra. Clorinda S. Minor).

Arnold se opuso a la expectativa de 1850 pero pareció responder al común entusiasmo que algunos tenían por la Tierra Santa. Al explicar el "continuo" como los sacrificios judíos literales llevados en Jerusalén y que fueron quitados en el 70 d.C., él igualó el pisoteo al ejército [y las estrellas] con la opresión de los judíos a través de los siglos, y vio la purificación del santuario como que involucraba su liberación inmediata.

Fue la expectativa de 1850, y sus efectos en unos pocos Adventistas Sabatarianos, lo que provocó en aquel año una declaración de Elena G. de White en que menciona el "continuo". Ella dijo que la palabra "sacrificio" no está en el texto original y que los Milleristas habían sostenido "el punto de vista correcto" acerca de ello. (Los Milleristas, como ya se notó, habían enfatizado repetidamente este enfoque de la palabra "sacrificio", a saber, que el término había sido agregado; ellos habían insistido que el "diario, cotidiano", o continuo, no significa ningún sacrificio judío real). La señora E. de White también amonestó contra la puesta de cualesquiera nuevas fechas después de 1844 y contra la búsqueda de una reunión de los santos en la vieja Jerusalén antes del Segundo Advenimiento" (La Verdad Presente, 1:87, Noviembre de 1850, reimpreso en PE:74-75).
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

Elena G. de White y el "continuo".

"Muchos años después - luego que el escenario y los errores específicos a los que la declaración fue dirigida, fueron olvidados - la declaración de la Sra. de White de 1850 fue citada (de PE:74-75) en la controversia como un endoso de la prevaleciente identificación millerista del "continuo", a saber, como siendo el paganismo. Cuando se averiguaba, sin embargo, sobre el significado del "continuo", la Sra. de White "normalmente decía que ella no tenía luz clara sobre el tema, y que nuestros hermanos tendrían que estudiar el asunto por sí mismos" (W. C. White, Carta a J. E. White, 1° de Junio de 1910, en los Archivos White, Patrimonio Ellen G. White, Inc.). De acuerdo al informe de A. G. Daniells de una entrevista tenida con E. de White acerca del "continuo", ella dejó claro que su declaración de 1850 no intentó establecer la identidad del "continuo" y que ella no pretendía conocerla, sino declarar que los Milleristas tenían el punto de vista correcto del "continuo" en cuanto a aquel período de tiempo (los 2300 días); que ella había escrito con referencia a los errores corrientes de aquel tiempo, sobre todo los esfuerzos por revisar la puesta de fechas de los 2300 días (declaración de A. G. Daniells, 25 de Set. de 1931, en los Archivos White). El punto en discusión era el tiempo - como lo había sido entre los Milleristas y sus opositores que concebían el "continuo" como los sacrificios judíos literales - no la identidad del "continuo".

En 1910 la Sra. White reprendió a aquellos que disentían sobre "el verdadero significado de 'el continuo', diciendo que era "un asunto de menor importancia", y que "no tenía ninguna instrucción respecto al punto en discusión". Su consejo era: "Mientras exista la actual condición de diferencia de opinión con respecto a este asunto, no se lo haga prominente". (1 MS:193-198).
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

"El "nuevo" punto de vista. Al tiempo que sentían la necesidad de una base lingüística e histórica más segura para interpretar el "continuo", un número creciente de líderes ASD hizo conocer lo que dio en llamarse - un tanto inexactamente - el "nuevo punto de vista". Se señalaron dos fallas en el argumento que sostenía que "el continuo" era el paganismo (ver por ejemplo, W. W. Prescott, "El Continuo," pp. 9-11): primero, que los eventos históricos citados para la toma del "continuo" - la victoria de Clodoveo, el rey católico de los francos, sobre los visigodos arrianos - constituyó realmente una victoria sobre el arrianismo, no el paganismo; y segundo, que el éxito de Clodoveo no ocurrió en el 508.

Alrededor de 1900 L. R. Conradi, quien poco después llegó a ser el líder de la obra ASD en Europa, escribió a la Sra. White en Australia pidiéndole que le diera cualquier luz que ella pudiera tener sobre el asunto, y si no él procedería a publicar algo a lo que él y sus asociados habían arribado. Dado que ella no tenía nada, él publicó su trabajo sobre el libro de Daniel, en alemán (ver W. C. White, Carta a J. E. White, 1° de Junio de 1910, en los Archivos White). El trabajo de Conradi, que es el primer libro ASD en ofrecer un sustituto para la interpretación "continuo = paganismo", se tituló Die Weissagung Daniels [La Predicción de Daniel] que se tradujo posteriormente a varios idiomas europeos y se recomendó en 1905 para la circulación en América entre lectores de habla extranjera.

En una carta a la Sra. de White del 17 de Abril de 1906 (en los Archivos White), Conradi recordó cómo él llegó a sus conclusiones:

(1) La palabra "santuario" significaba "el santuario de Dios concebido como tipo en la tierra y como antitipo ahora en el cielo".

(2) El "diario", o continuo, era el verdadero servicio del santuario.

(3) La toma del "continuo" fue el desplazamiento por parte de la iglesia papal del "verdadero servicio del santuario en favor de un servicio humano particular", la misa, cuando echa "a un lado al verdadero Sumo Sacerdote al colocar al Papa en Su lugar".

(4) La profecía de Daniel de la purificación del santuario aseguraba, en un tiempo cuando el templo de Jerusalén yacía en ruinas, "que no sólo el servicio típico en el santuario terrenal sería restaurado, sino que habría un verdadero servicio en el cielo que debía continuarse hasta el fin". Declaró además que se sorprendió al hallar que algunos escritores de la Reforma pensaron que "la misa idolátrica" "era la abominación predicha en Daniel 8"; y de esta manera él unía su "nuevo" punto de vista con una interpretación mucho más vieja que el "viejo" enfoque de Miller.

Conradi discutió su interpretación con A. G. Daniells (quien en 1900 estaba atravesando Europa en camino a la sesión de la Conferencia General de 1901), también con H. P. Holser, W. W. Prescott, y W. A. Spicer. Daniells posteriormente informó que lo había escuchado en aquel tiempo de Conradi y, además, de Prescott. En América tiempo después Prescott, y sobre todo Daniells, y otros defendieron esta interpretación.

Aunque durante un tiempo hubo considerable controversia en los círculos ministeriales, el consejo de la Sra. E. de White - que se evite el argumento divisivo en un punto menor - eventualmente prevaleció. Desde entonces el debate sobre el tema ha cesado."
(Aporte de Don Neufeld)
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

Entonces, según lo que expones, el "pisoteo" comenzó en el año 508dC. Lo que indica que el cuernito comenzó a pisotear el santuario celestial en el año 508dC. ¿Correcto?
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

Entonces, según lo que expones, el "pisoteo" comenzó en el año 508dC. Lo que indica que el cuernito comenzó a pisotear el santuario celestial en el año 508dC. ¿Correcto?


Muy buen punto de vista.


En el año 508 terminó la resistencia unida que se oponía al desarrollo del papado. La cuestión de la supremacía entre los francos y los godos, entre la religión católica y la arriana, quedó decidida a favor de los católicos.

--"En él [CLODOVEO] se unían dos religiones, y dos épocas del mundo. Cuando el nació, el reino romano todavía era una potencia; su muerte señala el amanecer de la Edad Media. El ocupó del puesto vacante del emperador oriental, y preparó el camino para lo que Carlo-Magno perfeccionó: la fusión de la civilización romana con la germana, la alianza con la Iglesia y el Estado". (Julio von Pflugk-Harttung, "A History of all Nations", tomo 7, pág. 72).

-"Él [CLODOVEO] había demostrado en todas las ocasiones que era implacable forajido, conquistador codicioso, tirano sanguinario; pero por su conversión había preparado el triunfo del catolicismo; salvo a la iglesia romana de los escollos de Escala y Cabréis, que eran herejía y el paganismo, la asentó sobre una roca en el mismo centro de Europa, y fijo su doctrina y tradiciones en los corazones de los conquistadores del occidente". (Guantero C. Perry, "The Franks, from their first apperance in history to the death of king Pepin" ; pág. 97)
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

No sé de dónde sacas que ese es mi punto de vista.

Según lo que expones, el "pisoteo" comenzó en el año 508dC. Lo que indica que el cuernito comenzó a pisotear el santuario celestial en el año 508dC. ¿Eso crees? ¿Sí o No?
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

No sé de dónde sacas que ese es mi punto de vista.

Según lo que expones, el "pisoteo" comenzó en el año 508dC. Lo que indica que el cuernito comenzó a pisotear el santuario celestial en el año 508dC. ¿Eso crees? ¿Sí o No?

Tu pregunta es muy interesante, ya que me permite señalar que la imposición del "día del sol", fue introducido en forma paulatina en la iglesia por el cuerno pequeño:

Bajo el liderazgo de Constantino, las primeras propiedades eclesiásticas confiscadas fueron restauradas a la Iglesia, y el “Día del Sol” (domingo) fue impuesto “como un día de descanso y culto”. Además de eso, Constantino asumió “una posición de liderazgo teológico en el Concilio de Nicea, en el año 325, cuando arbitró la controversia ariana.

Después que Constantino trasladó la capital del Imperio de Roma a Constantinopla en el año 330 d.C., el liderazgo del Obispo de Roma terminó quedando como único “durante mucho tiempo”, y los romanos pasaron a aceptarlo como su legítimo “líder temporal y espiritual” en situaciones de crisis.

A pesar de Constantino no haber resignado jamás su posición como Pontífex Máximus, principal sacerdote de la religión pagana estatal, sus decisiones eran “un gran punto crucial” en la historia del cristianismo. De acuerdo con Daniel Walther, “aunque antes del año 313 era difícil ser un cristiano, era difícil no ser un cristiano después de esa fecha”.

El proceso de conceder privilegios a la Iglesia fue seguido por los emperadores subsiguientes. El título de Pontífex Máximus no fue más usado por el Emperador Graciano. En el año 380, Teodocio I promulgó “un edicto transformando al cristianismo la religión exclusiva del Estado”, y “cualquier persona que siguiese otra forma de culto sería penada por el Estado”. Por medio del Edicto de Constantinopla, en el año 392, los cultos paganos llegaron a ser ilegales. Por lo tanto, el cristianismo terminó transformándose finalmente en la religión del Estado, y comenzó a perseguir al paganismo de la misma forma como el paganismo los había perseguido antes.

Al mismo tiempo que la Iglesia Romana se volvía cada vez más poderosa, el Imperio Romano enfrentaba una creciente flaqueza interna. Conciente de esa realidad, Alarico invadió Italia con los visigodos en el año 401. Como las autoridades romanas no tenían más condiciones de reclutar fuerzas militares suficientes para detener las invasiones de esos pueblos bárbaros, los visigodos saquearon Roma en el año 410. Que la “Roma Eterna”, amada por los dioses, pudiese ser tratada de esa forma podía ser interpretado por los paganos como consecuencia por el abandono de sus antiguos dioses, cuya adoración había sido considerada ilegal desde el año 392.

En respuesta a esa acusación, Agustín escribió, entre los años 413 y 426, su famosa obra titulada De Civitate Dei (La Ciudad de Dios). A pesar de que el libro fuese escrito originalmente para solucionar un problema específico de la época, su influencia en la historia de la iglesia cristiana va mucho más allá de su tiempo. Thomas Merton enfatiza el hecho de que “la visión de San Agustín de la historia es la visión mantenida por la iglesia católica y por toda la tradición católica”.

Los historiadores concuerdan que Carlos Magno “encontró en la ciudad de Dios, de San Agosthino, una inspiración para el imperio cristiano que él esperaba revivir en el mundo transformado de los siglos VII y IX”. R. W. Collins va más allá en declarar que “fue, sin duda, la Ciudad de Dios que proveyó la teoría del poder temporal del papado con sus pretensiones de dominio mundial”. L. P. Qualben explica que:

La “Ciudad de Dios” ejerció una profunda influencia sobre el cristianismo occidental. Ella formó el trasfondo religioso para la teoría del papado medieval. La curia romana de la edad media transformó realmente la Civitas Dei (Ciudad de Dios) en la Civitas Terrena (ciudad terrestre), representada por el imperio visible de la iglesia gobernado por el Obispo de Roma. La “Ciudad de Dios” acentuó también la fuerte distinción entre lo sagrado y lo secular, que todavía continúa ejerciendo tan grande influencia sobre la civilización occidental.
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

La conversión de Clóvis.

Las invasiones de las tribus bárbaras no trajeron solamente un problema político para el imperio romano, sino también muchas dificultades para las pretensiones del Obispo de Roma. Más allá de la tarea de convertir muchas tribus del paganismo, había también un problema de convertir los visigodos y los lombardos del área mismo para la ortodoxia cristiana.

Pero un evento muy significativo ocurrió casi al final del siglo V. En 493 Clóvis I, rey de los francos, se casó con Clotilde, princesa católica de Borgoña. Permitiendo que sus hijos fuesen bautizados; él mismo incitaba a abjurar “la fe de sus ancestros”. Él vio también que la Iglesia Católica Romana se transformaría en “el gran poder eclesiástico del futuro” y se enfrentó con la cuestión básica: ¿Un gran poder político debía crecer en “alianza con ese otro poder o en oposición a él?”

A semejanza de Constantino, Clóvis comenzó a percibir “la fuerza que él ganaría si aceptase el cristianismo” y, durante una batalla con los alamanes, él juró aceptar al Dios de Clotilde y convertirse en un cristiano si salía victorioso. Debido a su victoria él fue bautizado en el día de Navidad del 496 “con 3000 de sus soldados por el Obispo Remigio de Reims” que pronunció en la ocasión las conocidas palabras: “Inclina tu cabeza en humildad, oh sicambriano; adora lo que habías quemado y quema lo que habías adorado”.31

De acuerdo con E. E. Cairns, “la aceptación del cristianismo por Clóvis tendría efectos duraderos en la historia futura de la Iglesia”. H. Rosenberg afirma que “la conversión de Clóvis lanzó los fundamentos para una importante alianza entre el papado y los francos”. Es evidente que “esto no significa que el Papa tuvo inmediatamente gran influencia sobre la política real”, pero el fundamento fue lanzado en aquella ocasión, pues “fueron apenas los francos que se convirtieron, de todas las tribus germánicas, un amplio poder en la historia general de la Edad Media.

E. Emerton declara que:
El Papa quedó, por consiguiente, lleno de satisfacción al oír que el recién converso franco había asumido su forma de fe cristiana. Él estaba listo a bendecir cualquier emprendimiento de ellos como una obra de Dios, si apenas fuese en oposición a los paganos arianos. Así comenzó, en el año 500, un acuerdo entre el papado romano y el imperio franco que habría de madurar en una íntima alianza, de hacer mucho para forjar toda la historia futura de Europa.

Para W. J. Courtenay, la conversión de Clóvis “transformó automáticamente las guerras de
Clóvis en guerras santas contra los herejes y los no creyentes”. Gwatkin y Whitney explican que los obispos de la Iglesia de Roma ejercieron la más poderosa influencia para apoyar a Clóvis en sus luchas con las tribus bárbaras paganas, y también contra aquellas que adherían la herejía ariana. Con tal apoyo sus guerras asumieron “el carácter de guerras religiosas – cruzadas, valiéndonos del término usado posteriormente”.
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

El año 508 d.C.

En 507 Clóvis declaró guerra contra los visigodos. Él era el agresor, y para él “era una guerra religiosa, para libertar a Galia de los herejes arianos”. Él reunió sus tropas y les hizo un vigoroso discurso en el cual declaró: “Me entristece el hecho de que estos arianos dominen una parte de Galia. Marchemos, con la ayuda de Dios, y subyuguemos su país”.

Sin duda, “el elemento religioso fue muy poderoso en esa guerra”, “de la cual dependía, humanamente hablando, la supremacía del credo católico o del ariano en Europa occidental”. 40 Después de su victoria, en el 508, Clóvis recibió honras especiales de Roma. De acuerdo con Auguste Dumas:

En el 508, en cuanto retornaba de aquella conquista, Clóvis vino a Tours, ofreciendo sus dádivas a San Martinho. Él vio una embajada viniendo de Constantinopla. “Él recibió, de acuerdo con Gregorio de Tours, del emperador Anastasio, el diploma de Cónsul. En la basílica de San Martinho él se vistió con una túnica púrpura, una corona, y colocó una diadema sobre su cabeza. Entonces montado en un caballo él regaló algunas piezas de oro y de plata a las personas reunidas en la calle. De aquella época en adelante, él era llamado cónsul y Augusto.” (Hist. Franc., ii, 38).

En realidad, Clóvis “aparece como uno de los grandes genios creativos que dan un nuevo rumbo al curso de la historia”. Él “fue el fundador de la primera monarquía bárbara que fue plenamente capaz de resistir victoriosamente a los últimos ataques de invasión y de permanecer por muchos siglos”, y que “se transformó en un soporte vigoroso del papado en la baja Edad Media”.

Victor Duruy enfatiza apropiadamente el importante papel desempeñado por Clóvis como un gran unificador. Él dice:

Clóvis fue el primero en unir todos los elementos de los cuales el nuevo orden social sería formado, a saber, los bárbaros, a los cuales él colocó en el poder; la civilización romana, a la cual él rindió homenaje al recibir la insignia de patriarca y cónsul de parte del Emperador Anastasio; y la Iglesia Católica, con la cual él estableció la fructífera alianza que fue continuada por sus sucesores. El Concilio de Órleans había sancionado esa alianza, reconociendo a Clóvis como el protector de la Iglesia, cuyas intenciones él confirmó en ese mismo concilio. El papa ya le había escrito: “El Señor previó las necesidades de la Iglesia por concederlo como defensor un príncipe armado con el casco de la salvación: seas siempre para ella una corona de hierro y ella te concederá la victoria sobre tus enemigos”.

George B. Adams también enfatizó el hecho de que Clóvis:

Unió los romanos y los germanos en términos iguales, preservando cada uno de ellos la fuente de sus fuerzas, para formar una nueva civilización. Él fundó un poder político que habría de unir casi todo el continente, y dar fin al período de las invasiones. Él estableció una íntima alianza entre las dos grandes fuerzas controladoras del futuro – los imperios que continuarían la unidad establecida por Roma – el imperio político y eclesiástico.

El mismo autor explica el significado eclesiástico de esa alianza, en la siguiente declaración:

Es probable que el Imperio Franco podría haber sido formado sin esa alianza. Es posible también que una organización eclesiástica común podría haber sido creada para todas sus partes; pero habría sido imposible para tal iglesia realizar la obra – tan importante fuera de las fronteras francas como dentro de ellas – que la Iglesia Católica llevó a cabo.

De lo que fue dicho hasta aquí, podemos concluir que:

(1) la conversión de Constantino fue el punto crucial que permitió que el cristianismo se convirtiera en la religión oficial del Imperio Romano;

(2) la Ciudad de Dios, de Agustín, proveyó el ideal filosófico que inspiró al papado a construir un poder temporal para conquistar el mundo;

(3) la conversión de Clóvis I abrió las puertas para la unificación político-eclesiástico que era necesario para apoyar las pretensiones católico-romanas durante la Edad Media;

y (4) la guerra de Clóvis y la victoria final sobre los visigodos arianos, en el año 508, representan un paso extremadamente importante en proveer un ejército efectivo para la Iglesia Católica Romana para castigar los así llamados “herejes”.

Por lo tanto, lo que ocurrió en el año 508 puede ser considerado uno de los pasos más significativos en el proceso de consolidación de las pretensiones temporales de la Iglesia Católica Romana, que tuvo su culminación en las fuertes persecuciones de la Edad Media.
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

El contexto histórico de 538 d.C.

Muchos eventos importantes ocurrieron en el largo proceso del fortalecimiento del papado. Teniendo en mente lo que fue dicho hasta aquí, pasaremos ahora a considerar más específicamente algunos de esos eventos ocurridos desde el inicio del siglo VI hasta el año 538. De especial relevancia fue la elección del Papa Simaco y el apodo del Emperador Justiniano I.

El Papa Simaco

En el período inicial de la iglesia cristiana, todos los obispos poseían casi la misma autoridad. Pero “entre los años 313 y 590, el obispo romano pasó a ser reconocido como el primero entre los iguales”. Con la ascensión de León I al trono episcopal, en el 440, el Obispo de Roma comenzó a reivindicar más explícitamente su supremacía sobre los demás obispos. Algunos de los obispos romanos de la segunda mitad del siglo V eran hombres poderosos, y “no dejaban pasar ninguna oportunidad que pudiese aumentar su poder”.

Con el pasar del siglo V para el siglo VI, el Papa Simaco fue “acusado de muchos crímenes”, dentro de los cuales se destacaban el de “adulterio” y el de “disipar las propiedades de la iglesia”. Las acusaciones fueron llevadas al herético rey ariano Teodorico, que convocó, con el consentimiento del Papa, un sínodo en el 501 para tratar el asunto. A pesar de que algunas personas argumentaban “que el obispo romano no podía ser juzgado por cualquier otra persona, a menos que fuese acusado de crímenes como aquellos de los cuales Simaco era acusado”, el problema no fue solucionado inmediatamente. Pero finalmente los miembros de un sínodo realizado en el 503 “exigieron que los oponentes y los acusadores del Papa debían ser penados, y que le saludaran con altos gritos de alegría”. Teodorico, rey de los ostrogodos, que estuviera directamente involucrado en la solución del problema, “ordenó ahora que todas las iglesias en Roma fuesen entregadas a Simaco, y que solamente él fuese reconocido como obispo de esa ciudad”.

A pesar de que esas discusiones trataban más específicamente de la integridad moral personal de Simaco en ocupar el trono papal, la cuestión básica de la autoridad papal también estaba involucrada: ¿Podría un Papa ser juzgado por un rey o por otros obispos?

En respuesta a esta cuestión, había por lo menos un “infame y extravagante adulador de Simaco”, llamado Enodio, que llegaba al punto de acelerar “que un pontífice romano era constituido juez en lugar de Dios, posición ocupada por él como el subgerente del Altísimo”.

A pesar de que el propio Simaco admitiese obedecer “los poderes temporales cuando estos se limitan a la esfera de ellos”, él también era capaz de condenar al emperador por “apoyar la herejía”, enfatizando su propia superioridad sobre el gobernante:

¿Te imaginas que por ser un emperador, te está permitido despreciar las órdenes de Dios, y exaltarte contra el poder de San Pedro?… Compara la dignidad de los emperadores con la de un pontífice. Entre ellos existe tanta diferencia como entre un administrador de las cosas terrenales y el otro de las celestiales. Aunque seas un príncipe, tú recibes del pontífice el bautismo y los sacramentos y su pedido de penitencia. En resumen, en cuanto se te ha encargado solamente de cuestiones humanas, él te dispensa los bienes celestiales. La dignidad de él, por consiguiente, es por lo menos igual a la suya, para no decir superior a ella.
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

No sé de dónde sacas que ese es mi punto de vista.

Según lo que expones, el "pisoteo" comenzó en el año 508dC. Lo que indica que el cuernito comenzó a pisotear el santuario celestial en el año 508dC. ¿Eso crees? ¿Sí o No?
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

El Emperador Justiniano.

Justiniano I se convirtió en el 527 en el único emperador del segmento oriental del Imperio Romano, conocido como el Imperio Bizantino. Sus ideales políticos y eclesiásticos son bien definidos por Daniel D. McGarry en la siguiente declaración:

Él era inspirado por dos grandes proyectos:

(1) restaurar el Imperio Romano alrededor del Mediterráneo Occidental,

y (2) reestablecer la unidad de la iglesia cristiana. El primer blanco postulaba la reconquista del occidente del Mediterráneo; el segundo la erradicación de la herejía en Egipto y Siria.

Justiniano no veía esos dos blancos como disociados uno de otros. En realidad, el reconocía que uniformidad en cuestiones seculares sólo podría ser bien sucedida con “la misma uniformidad en cuestiones de fe.” Por lo tanto, “Justiniano deseaba reunificar todas las ramificaciones de la iglesia cristiana y abolir todas las herejías”. De acuerdo con James Bryce:

No sólo se enorgullecía de su ortodoxia, como varios soberanos anteriores habían hecho, pero tenía también gran confianza en su propia capacidad como teólogo, y tomó parte activa en todas las controversias de la época. Siendo un estudiante inteligente y una persona de algunas pretensiones literarias, él leyó y escribió considerablemente sobre asuntos teológicos.

Algunas decisiones eclesiásticas muy significativas fueron cambiadas por Justiniano.

Como un “campeón de la ortodoxia”, él “prohibió impiadosamente tanto el paganismo como la herejía”. R.W. Collins explica que:

Los devotos de las divinidades paganas fueran privados de todos los derechos civiles; así ellos no podían ejercer oficios públicos, dejar como herencia sus propiedades o servir como testigo en un juramento. La pena de muerte fue decretada a todos los que secretamente practicasen un culto pagano o, una vez convertidos, retornasen a su antigua fe. Los hijos de padres paganos debían ser quitados de éstos, bautizados e instruidos en la religión cristiana. Todos los templos restantes eran convertidos en iglesias cristianas o destruidos. Como un soplo final contra el paganismo, la Academia de Atenas, el último refugio de la filosofía pagana fue cerrada (529), sus profesores fueron dispersados y sus donaciones confiscadas.

Considerando “la unidad de la fe en un estado bien organizado, tan esencial como la unidad política”, Justiniano realizó un trabajo incomparable como “codificador y consolidador de las leyes preexistentes”, y como legislador, preparando “nuevas leyes” que fueron incorporadas en su famosa Corpus Juris Civilis. Esa obra no incluye sólo leyes civiles, sino también leyes eclesiásticas por medio de las cuales la supremacía eclesiástica del papa fue oficialmente legalizada.

En la segunda edición de su Codex, publicado el día 16 de noviembre de 534, aparece una carta escrita por Justiniano al Papa Juan II, en el 533, en la cual él reconoce al Papa como “la cabeza de todas las sagradas iglesias”. Justiniano inicia su carta con las siguientes palabras:

Justiniano, Victorioso, Pío, Feliz, Renovado, Triunfante, Siempre Augusto, a Juan, Patriarca, y el más santo arzobispo de la Justa Ciudad de Roma:

Con honra a la Sede Apostólica, y a Vuestra Santidad, que siempre ha sido recordada en nuestras oraciones, tanto ahora como anteriormente, y honrando vuestra alegría, como es apropiado en el caso de alguien que es considerado como un padre. Nosotros nos apresuramos en traer al conocimiento de Vuestra Santidad todo lo que esté relacionado con la condición de la Iglesia, a la vez que siempre tuvimos el mayor deseo de preservar la unidad de la Sede Apostólica, y la condición de la Santas Iglesias de Dios, como ellas existen en el tiempo presente, para que permanezcan sin disturbios u oposiciones. Por lo tanto nosotros nos empeñamos en unir todos los sacerdotes de oriente y sujetarlos a la sede de Vuestra Santidad, y en consecuencia de las cuestiones levantadas presentemente, en cuanto ellas sean evidentes y libres de cualquier duda, y de acuerdo con la doctrina de vuestra Sede Apostólica, son observadas constantemente con firmeza y predicadas por todos los sacerdotes. Todavía no consideramos necesario que ellas atraían la atención de Vuestra Santidad. Pues no permitimos que nada que diga respecto a la condición de la iglesia o que cause dificultades sea claro o libre de duda, sea discutido sin que sea traído al conocimiento de Vuestra Santidad, porque vos sois la cabeza de todas las Santas Iglesias, pues nosotros nos empeñaremos de todas las formas (como ya mencionáramos) para aumentar la honra y la autoridad de Vuestra Sede.

Es importante notar también la forma como el Papa enfatizó su propia autoridad en una carta escrita a Justiniano:

Juan, obispo de la ciudad de Roma, a su más ilustre y Misericordioso Hijo Justiniano:

Entre las conspicuas razones para alabar a vuestra sabiduría y nobleza, el Más cristiano de los emperadores, es uno que irradia luz como una estrella, se encuentra el hecho de que por el amor del Padre, y movido por el celo, por la caridad, tú, instruido en disciplina eclesiástica, has mantenido la reverencia por la Sede de Roma, y tienes subyugados todas las cosas a tu autoridad, y le has dado unidad. El siguiente precepto fue comunicado a su fundador, esto es al primero de los Apóstoles, por boca del Señor, a saber: “Apacienta mis corderos”.

Esta Sede es, en realidad, la cabeza de todas las iglesias, como resguardada por los preceptos de los Padres y decretos de los emperadores, y testificado por las palabras de vuestra más venerable piedad.

En el mismo año (533), Justiniano promulgó un edicto “contra todos los herejes”. También en 533, firmó un acuerdo de paz entre los persas y los romanos, y los laureados filósofos paganos, que se refugiaran entre los persas después que Justiniano hubo decretado el cierre de su escuela en Atenas (529), “desaparecieran gradualmente en las escuelas públicas y seminarios de erudición, que dejaran, con el pasar del tiempo, bajo su dirección”.

Una de las mayores evidencias del interés de Justiniano en los asuntos de la Iglesia puede ser observado, “en los edificios que él construyó por todo el imperio” El mayor de ellos fue la Iglesia de la Hagia Sophia, o la Iglesia de la Sagrada Sabiduría, que fue designada para ser el símbolo visible del poder imperial”, y de la cual el emperador se consideraba así mismo el representante terrestre”. Construida en Constantinopla y dedicada en la Navidad del 537, ese edificio a sido considerado “el más magnífico monumento de arte bizantino de la época” y “el más importante edificio en la historia del arte cristiano”.
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

El año 538 d.C.

Como hemos visto anteriormente, muchos eventos importantes ocurrieron durante el período anterior al 538, preparando el camino para la supremacía papal de la Edad Media.

A pesar de que Justiniano hubiese reconocido oficialmente en el 533 la primacía eclesiástica del papa, la Iglesia de Roma aún no tenían libertad política para ejercer su supremacía. Desde la permanencia del Imperio Romano (476), Roma estaba siempre bajo el dominio de un rey ariano. Los hérulos dominaron Roma hasta el tiempo que su rey Odoacro fue asesinado por Teodorico, en el 493. En el 534, los vándalos fueron completamente derrotados por Belisario y su ejército. Pero Roma todavía no había sido liberada del dominio de los ostrogodos. En realidad, Roma, de acuerdo con Hodgkin, fue sitiada por 374 días, durante el 537 y 538, por un gran cerco de los ostrogodos. El 12 de marzo de 538, “ los godos resolvieron abandonar su sitio a Roma.” Herwing Wolfram aclara que “el 21 de junio de 538, Belisario dejó Roma. Poco después, Narses, con 7000 hombres, desembarcó en Picenum, probablemente en el puerto de Firmum-Fermo. La superioridad numérica de los godos era ahora una cosa del pasado.”

Por consiguiente, “en el 538 por primera vez desde el fin del linaje imperial occidental la ciudad de Roma estaba libre del dominio de un reino ariano”. Eso no significa que en aquella época el Imperio Ostrogodo sucumbió, “pero la sepultura de la monarquía ostrogoda en Italia fue cavada por la derrota de ese sitio”.

También en el 538 fue realizado el tercer Sínodo de Orleáns, en el cual “los obispos reunidos declararon su intención de restablecer las antiguas Leyes de la Iglesia y aprobar nuevas leyes”. Entre los 33 canones, había uno (Canon 13) en el cual está dicho que “los cristianos no deben casarse con judíos, ni tampoco comer con ellos”; y otro (Canon 28) dice:

Es una superstición judaica la noción de que es ilegal cabalgar o dirigir en el domingo o hacer cualquier cosa para decorar la casa o la persona. Pero los trabajadores del campo son prohibidos de manera que el pueblo tenga condiciones de venir a la iglesia y adorar. Cualquiera que hiciera de otra manera será penado, no por los laicos sino por los obispos.

El día 29 de junio de 538, el Papa Virgilio respondió una carta de Profuturo, obispo de Braga, en Lusitania, en la cual “condena a aquellos que se abstienen de ciertos tipos de carnes, alegando que son prohibidas, al menos en sí mismas, como si procediesen de un principio malo; que fue la doctrina de los maniqueos”.

El acto de Virgilio hizo que fuera llevado a Constantinopla y mantenido por allá por siete años (547-554), por no haber obedecido la voluntad imperial, no significa que en aquella época no hubiese un poder eclesiástico para apoyar las ambiciones católico-romanas. El verdadero problema fue que Justiniano “que se enorgullecía de su conocimiento teológico y que tenía un amor apasionado por sutiles debates teológicos”, no estaba satisfecho solo en convocar concilios, sancionar o revocar sus decretos, formular confesiones de fe, y proferir vehementes anatemas; él estaba determinado aún a “dominar al Papa, como también a la Iglesia oriental”.

De acuerdo con Bermont y Monod.

A medida que el obispo de Roma se estaba volviendo, el primado indisputable de Italia, y ejerciendo una función del liderazgo en la Iglesia universal, él comenzó a involucrarse en cuestiones temporales, no solamente en Roma sino también en el Imperio, como también entre los reinos bárbaros. Hasta el siglo VI todos los papas son declarados santos en las martirologías. Virgilio (537-555) fue el primero de una serie de papas que no adoptaron más ese título, que fue conferido parsimoniosamente desde aquel tiempo. De esa época en adelante, los papas, cada vez más involucrados en asuntos temporales, no pertenecían solamente a la Iglesia; ellos son hombres de Estado, y entonces gobernantes de Estado.

Platt y Drummont declaran que “pocos emperadores de la Roma antigua tuvieron tanto poder como el Papa durante la Edad Media”.83

De lo que fue dicho sobre el contexto histórico del 538 d.C., podemos concluir que:

(1) a pesar del hecho de que Simaco tuvo que legalmente someterse algunas veces al herético rey ariano Teodorico, el no solamente se consideraba superior al gobernante secular, sino llegó a autodenominarse “juez en lugar de Dios” y “subgerente del Altísimo”;

(2) Justiniano I no solamente llamó al Papa “la cabeza de todas las sagradas iglesias”, sino también legalizó oficialmente la supremacía oficial del Papa;

y (3) fue solamente en el 538 que la ciudad de Roma se vio libre del dominio de cualquier reino ariano “herético”, y la Iglesia de Roma fue capaz de desarrollar más efectivamente su supremacía eclesiástica.

La siguiente declaración es muy significativa para obtener una clara idea de la relación entre el 533 y 538, como se mencionó anteriormente:

A pesar de que ese reconocimiento legal de la supremacía eclesiástica del Papa sea fechado el año 533, es obvio que el edicto imperial no puede hacerse efectivo para el Papa en cuanto el reino arriano de los ostrogodos controlaba Roma y gran parte de Italia. Fue solamente después que el dominio de los godos había sido quebrado que el papado tuvo libertad para desarrollar plenamente su poder. En el 538, por primera vez desde el linaje imperial occidental, la ciudad de Roma estaba libre de un reino arriano. En aquel año el reino de los ostrogodos recibió su golpe mortal (a pesar de que los ostrogodos sobrevivieron algunos años más como un pueblo). Esta es la razón porque el 538 es una fecha más significativa de que el 533.
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

Resumen y conclusiones:

"Un análisis de la historia del cristianismo revela que varios pasos importantes ocurrieran entre los siglos IV y VI en el proceso por el cual la Iglesia Romana se volvió cada vez más influyente en cuestiones seculares. Ese proceso culminó en la unión entre la Iglesia y el Estado.

En el tiempo de Constantino el cristianismo obtuvo libertad de culto, tomándose una de las religiones oficiales del Estado. Los emperadores subsiguientes avanzaron más y más en la dirección de transformar el cristianismo en la religión exclusiva del Estado. Después del saqueo de Roma por los visigodos en el 410, Agustín escribió su famosa obra la Ciudad de Dios, en la cual el expuso “el ideal católico de una iglesia universal en el control de un estado universal”, proveyendo “la base teocrática para el papado medieval”. La conversión de Clóvis, rey de los francos, fue un evento muy significativo en proveer la unificación de la Europa Occidental para apoyar al papado durante la primera mitad de la Edad Media. Y la guerra de Clóvis contra los visigodos arianos y su victoria sobre ellos en el 508 representa un paso importante en proveer un ejército efectivo para la Iglesia Católica Romana penar a los “herejes”.

A pesar del hecho de que el Papa Simaco había sido fuertemente acusado y de tener que someterse al juicio del herético rey arriano Teodorico, él se consideraba superior al gobernante secular y fue llamado hasta ser “juez en lugar de Dios” y “subgerente del Altísimo”. Ya en el año 533, Justiniano, emperador del Imperio Bizantino, reconoció la supremacía eclesiástica del Papa cuando lo llamó “cabeza de todas las sagradas Iglesias”, y, en el año siguiente (534), ese status fue legalizado oficialmente en la segunda edición del Codex. Pero fue solamente en el año 538 que la ciudad de Roma terminó siendo libertada del dominio de un “herético” reino arriano, y la Iglesia Romana fue capaz de desarrollar más efectivamente su supremacía eclesiástica.

Podemos concluir, con base en las discusiones anteriores, que si tomamos los eventos ocurridos en el 508 y 538 aisladamente, sin llevar a consideración su respectivos contextos históricos, podemos ser tentados a negar la validez de elegir esas fechas como puntos de partidas para los períodos proféticos de los 1290 y 1335 años, y para los 1260 años. Pero si consideramos los años del 508 y 538 la luz de sus respectivos antecedentes históricos, percibiremos que no existe razón para negar la importancia histórica de tales fechas en el largo proceso del establecimiento de la autoridad temporal del obispo de Roma."

Alberto R. Timm, Ph. D.
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

Resumen y conclusiones: Eres un cobarde que no quiere contestar.
 
Re: las ordenes de artajerjes para pisotear el templo del cielo

Resumen y conclusiones: Eres un cobarde que no quiere contestar.

No te desesperes, ni descontroles como es tu costumbre.

Veamos ahora las actividades del cuerno pequeño (Dan. 8:9-12; 23-25)


Después de establecer el origen e identidad del cuerno pequeño, podemos dedicar nuestra atención a sus actividades:

(1) Puede echar por tierra parte del ejército y de las estrellas.

(2) Se exaltó a sí mismo tan alto como el Príncipe de los ejércitos.

(3) Quitó el continuo y el lugar del santuario de Dios.

(4) Echó por tierra la verdad.


1. Echó por tierra parte del ejército y algunas de las estrellas

Dan. 8:10, 24

10 Y se engrandeció hasta el ejército del cielo; y parte del ejército y de las estrellas echó por tierra, y las pisoteó. 24Y su poder se fortalecerá, mas no con fuerza propia; y causará grandes ruinas, y prosperará, y hará arbitrariamente, y destruirá a los fuertes y al pueblo de los santos.


Éxodo 12:41 describe el ejército del Señor en términos de Israel. En la visión de Daniel, el “ejercito del cielo” se refiere al pueblo de Dios que permanece aquí en la tierra pero tiene su ciudadanía en el cielo.

Fil. 3:20

Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo;

De esta forma se puede interpretar que el ejército del cielo en Daniel 8:24 indica a la gente santa, y las estrellas probablemente representan a los líderes de los ejércitos.

Apoc. 1:20.

El misterio de las siete estrellas que has visto en mi diestra, y de los siete candeleros de oro: las siete estrellas son los ángeles de las siete iglesias, y los siete candeleros que has visto, son las siete iglesias.

Los emperadores romanos persiguieron a los judíos al igual que a los cristianos. Cuando Roma destruyó Jerusalén y su templo en 70 d.C. murieron más de un millón de judíos.

Y durante los primeros dos siglos de la era cristiana los emperadores Nerón, Decio y Dioclesiano asesinaron a miles de cristianos que rehusaron ofrecer incienso al emperador.

El historiador de la iglesia, Eusebio (siglo IV), nos cuenta: "No se puede dejar de admirar a aquellos que sufrieron también en su tierra natal donde miles de hombres, mujeres y niños, despreciaron la vida presente por causa de la doctrina de nuestro Salvador, y se sometieron a la muerte en varias formas. Algunos, luego de haber sido torturados con raspados de la piel, el potro, los azotes más crueles y otras agonías innumerables que hacen temblar sólo de escucharlas, fueron sometidos a las llamas. Algunos se hundieron y ahogaron en el mar, otros voluntariamente ofrecieron sus cuellos a los verdugos, otros murieron en medio de sus tormentos, algunos fueron consumidos por el hambre, y otros fueron colocados en la cruz. Algunos ciertamente fueron ejecutados como lo eran los malhechores; otros, más cruelmente, fueron clavados cabeza abajo y mantenidos vivos hasta que finalmente perecían por el hambre sobre la cruz".

2. Se exaltó a sí mismo al nivel del Príncipe de los ejércitos

Daniel 8:11, 25

Aun se engrandeció contra el príncipe de los ejércitos, y por él fue quitado el continuo sacrificio, y el lugar de su santuario fue echado por tierra. 25Con su sagacidad hará prosperar el engaño en su mano; y en su corazón se engrandecerá, y sin aviso destruirá a muchos; y se levantará contra el Príncipe de los príncipes, pero será quebrantado, aunque no por mano humana.

Los versículos 9 y 10 presentaron los movimientos del cuerno pequeño sobre un plano horizontal, mientras que los versículos 11 y 12 muestran una dimensión vertical, lo que indica el cambio de actividades de la Roma pagana a la Roma papal.

En Josué, el comandante del ejército del Señor es un ser divino (Josué 5:14, 15).

El Príncipe del ejército del pueblo de Dios debe ser Aquel que es llamado "Mesías Príncipe" en Daniel 9:25, "Miguel vuestro príncipe" en Daniel 10:21, y "Miguel, el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo" en Daniel 12:1. En otras palabras, Cristo.

¿Cómo es que el cuerno pequeño se engrandeció contra Cristo? Al asumir abiertamente el oficio de Cristo como mediador entre Dios y la humanidad, el papado se exaltó a sí mismo contra el príncipe del ejército y cumplió.

2 Tesalonicenses 2:4.

El cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.

3. Quitó el continuo y echó por tierra el lugar del santuario de Dios (Dan. 8:11)-

¿Cómo fue que el papado quitó el sacrificio diario y echó por tierra el lugar del santuario de Dios? Al colocar la intercesión humana en las manos de sacerdotes, [al establecer] el uso del confesionario y al sacrificar nuevamente a Cristo en cada misa, el papado ha eclipsado el ministerio celestial de Cristo en las mentes de los adoradores, a los santos o a María. Al sustituir el papel de Cristo en el santuario celestial por el servicio del sacerdote aquí en la tierra, el cuerno pequeño ha “echado por tierra” simbólicamente “el lugar de su santuario”, y por lo tanto, lo ha profanado.

En el sacrificio de la misa, el sacerdote romano se transforma en un alter Christus, en otras palabras, en "otro Cristo" en el sentido de que él sacrifica al Cristo verdadero sobre el altar y lo presenta para la salvación de los fieles

Las últimas ediciones del catecismo de la iglesia Católica muestra esto claramente: “El sacrificio de Cristo y el sacrificio de la Eucaristía son, pues, un único sacrificio: ‘Es una y la misma víctima, que se ofrece ahora por el ministerio de los sacerdotes, que se ofreció a sí misma entonces sobre la cruz. Sólo difiere la manera de ofrecer'; Cristo, que se ofreció a sí mismo una vez de manera cruenta sobre el altar de la cruz, es ofrecido e inmolado de manera no cruenta".


Además, el sacerdote transforma la sustancia del pan y el vino en la sustancia misma del cuerpo y la sangre de Cristo. "Entonces se lleva al altar, a veces en procesión, el pan y el vino que serán ofrecidos por el sacerdote en nombre de Cristo en el sacrificio eucarístico en el que se convertirán en su Cuerpo y su Sangre".'

En otras palabras, en obediencia a las palabras del sacerdote, Cristo desciende sobre el altar en cada misa. El sacerdote jesuita Franz Xaver Esser escribió: “Oh, sacerdote, cuán sobrehumano y grande eres, eres como Cristo que ordenó a los vientos y al mar, y quien caminó sobre las hinchadas olas… El sacerdote entra al cielo y toma al hijo de Dios del círculo cerrado del coro angelical y todos quedan impotentes, no pueden evitarlo”.

En el confesionario el sacerdote absuelve los pecados con la fórmula: "Te absuelvo de tus pecados en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo".

Es una llave maravillosa en las manos del sacerdote.

Dice el Catecismo: "Los obispos y los presbíteros, en virtud del sacramento de las Santas Órdenes, tienen el poder de perdonar todos los pecados 'en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo"'.

A través de tales enseñanzas es que el ministerio de Cristo en el santuario celestial ha sido echado a un lado en la mente de muchos cristianos y su lugar ha sido tomado por sustitutos engañosos. La misa y el confesionario alejan la mente de los creyentes cristianos de una continua dependencia del ministerio mediador del Salvador en su santuario.

Complejas ceremonias, todas en el nombre de Cristo, oscurecen el ministerio de Cristo. "En vez de confiar en la Palabra inspirada y en el ministerio personal del Espíritu Santo, se les enseña a los hombres a depender de una iglesia infalible y un cuerpo pedagógico autoritativo, y a recibir doctrinas falsas tales como la transustanciación, el purgatorio, la adoración de imágenes, la inmortalidad del alma, el sacrificio de la misa, la inmaculada concepción.

Nuestro gran Sumo Sacerdote quien nos invita a venir a su trono de gracia y encontrar gracia para un oportuno socorro, encuentra que su intercesión perpetua es echada a un lado y que otros medios de alcanzar la gracia, otros mediadores e intercesores se interponen entre él y su pueblo... En el sistema [católico] romano su lugar es ocupado por sacerdotes humanos que ofrecen sacrificios, perdonan pecados y confieren el Espíritu Santo. La iglesia es llevada sobre los hombros del papa y el corazón de María, en vez de sobre los hombros y el corazón de Cristo. La mayoría de estos principios falsos se han fortalecido a lo largo de los siglos, pero ninguno de ellos puede remontarse ni siquiera en una forma primitiva a una fecha anterior al quinto siglo d.C.".

4. Echó por tierra la verdad

Dan. 8:12

Y a causa de la prevaricación le fue entregado el ejército junto con el continuo sacrificio; y echó por tierra la verdad, e hizo cuanto quiso, y prosperó.

- Jesús dijo de sí mismo: "Yo soy la verdad" (Juan 14:6), y respecto a la Palabra de Dios, dijo: "Tu Palabra es verdad" (Juan 17: 17).El salmo 119:142 dice que “tu ley es la verdad.”

Desde el siglo XII en adelante, varios papas prohibieron el uso de la Biblia en el idioma vernáculo porque los valdenses y luego los protestantes la utilizaron para oponerse a las enseñanzas de la iglesia.

El concilio de Trento en 1546 decretó que nadie podía interpretar las Escrituras en forma contraria a la opinión de la iglesia, porque la iglesia era juez del sentido correcto de las escrituras. “contrario al consentimiento Nadie, confiando en su propia habilidad, debe – en materia de fe y de moral relacionada con la edificación de la doctrina cristiana y forzando la Sagrada Escritura según sus propios sentidos - presumir de interpretar dicha sagrada Escritura en un sentido contrario al sentido de la santa madre Iglesia -la cual ha de juzgar el sentido verdadero y la interpretación de las santas Escrituras-el que ésta ha mantenido y mantiene; ni tampoco unánime de los Padres [de la iglesia] ",

Hoy, por supuesto, el cuadro ha cambiado. En 1943 el papa Pío XII publicó una encíclica que animaba a los sacerdotes a estudiar y predicar de la Escritura, a asistir a las asociaciones católicas dedicadas a propagar las Escrituras en lenguas modernas, y animar a los laicos a leer diariamente la Biblia. Sin embargo, no significa que la Biblia es la norma absoluta de fe para la Iglesia Católica en la actualidad.

El Concilio Vaticano Segundo (1962-1965) declaró que "ella [la Iglesia] siempre ha considerado y continúa considerando a las Escrituras, acompañadas por la santa Tradición, como la regla suprema de su fe" y que "la teología sagrada depende de la Palabra escrita de Dios, tomada juntamente con la Tradición sagrada, como un fundamento permanente".

Así que mientras que el liderazgo propone la lectura de la Biblia, los católicos aceptan la tradición como si estuviese al mismo nivel que las Escrituras.

Cuando hablamos del cuerno pequeño, debemos distinguir entre la institución del papado y las personas que apoyan o siguen sus enseñanzas. Los miembros de la Iglesia Católica, incluso el papa, son personas por las cuales Cristo murió. A lo largo de la historia una cantidad innumerable de cristianos sinceros y devotos han sido miembros de la Iglesia Católica.

La pluma inspirada escribió: “Hay cristianos verdaderos en cada iglesia que no conocen el origen del día de reposo dominical, y creen que están observando el día que Dios santificó y bendijo. Esto se aplica incluso a adoradores dentro de la Iglesia Católica; mientras existe esta condición de ignorancia e integridad, Dios acepta su sinceridad; pero cuando la luz cae sobre su camino, Dios requiere que se pongan en armonía con su ley, y que observen el día de reposo que él estableció.”19

Como Lutero, Zuinglio y Calvino en los días de la Reforma, el pueblo de Dios en todas las iglesias cristianas en el tiempo del fin escuchará la voz del cuarto ángel de Apocalipsis 18 que le dirá: "Salid de ella, pueblo mío", y responderán uniéndose al pueblo remanente de Dios.