Re: La última gran aventura
Ahora veo tus mensajes, rato atrás tus mensajes aparecían como una página en blanco...
Ester, pensé que tu entendimiento era más profundo, pero veo que llegas al límite que tu religión te impuso.
Cristo es el pan vivo de Dios, que bajó del cielo para darnos vida, pero no literalmente, porque si así fuera, Cristo nos estaría enseñando a ser caníbales, comer la sangre es un pecado, comer la carne y sangre de un ser humano es un pecado mayor, y comer la carne y sangre del Hijo de Dios, un pecado mucho mucho mayor.
Cristo habló en parábolas para dirigirse a la gente. Comer la carne y beber la sangre de Cristo son símbolos.
Mt 13:34 Todo esto habló Jesús por parábolas á las gentes, y sin parábolas no les hablaba:
El alimento del hombre es la palabra de Dios:
Mt 4:4 Mas él respondiendo, dijo: Escrito está: No con solo el pan vivirá el hombre, mas con toda palabra que sale de la boca de Dios.
Jesús hablaba por parábolas a la gente:
Mt 16:11 ¿Cómo es que no entendéis que no por el pan os dije, que os guardaseis de la levadura de los Fariseos y de los Saduceos?
Mt 16:12 Entonces entendieron que no les había dicho que se guardasen de la levadura de pan, sino de la doctrina de los Fariseos y de los Saduceos.
La Cena del Señor es una conmemoración, tal como Él mismo lo dijo:
Lc 22:19 Y tomando el pan, habiendo dado gracias, partió, y les dió, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado: haced esto en memoria de mí.
Lc 22:20 Asimismo también el vaso, después que hubo cenado, diciendo: Este vaso es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama.
La mujer siro fenicia entendía cabalmente la enseñanza de Cristo, para ella el pan era la fe en el Hijo de Dios:
Mr 7:27 Más Jesús le dijo: Deja primero hartarse los hijos, porque no es bien tomar el pan de los hijos y echarlo á los perrillos.
Mr 7:28 Y respondió ella, y le dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos debajo de la mesa, comen de las migajas de los hijos.
Mr 7:29 Entonces le dice: Por esta palabra, ve; el demonio ha salido de tu hija.
Mr 7:30 Y como fué á su casa, halló que el demonio había salido, y á la hija echada sobre la cama.
Pan y levadura: pan es la palabra fiel de nuestro Padre Eterno, levadura es la falsa enseñanza agregada por los lobos que quieren extraviar a las ovejas, recuerda que Cristo habló en parábolas a la gente:
Mr 8:15 Y les mandó, diciendo: Mirad, guardaos de la levadura de los Fariseos, y de la levadura de Herodes.
Mr 8:16 Y altercaban los unos con los otros diciendo: Pan no tenemos.
Mr 8:17 Y como Jesús lo entendió, les dice: ¿Qué altercáis, porque no tenéis pan? ¿no consideráis ni entendéis? ¿aun tenéis endurecido vuestro corazón?
Pablo también entendió así:
1Co 11:23 Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fué entregado, tomó pan;
1Co 11:24 Y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed: esto es mi cuerpo que por vosotros es partido: haced esto en memoria de mí.
1Co 11:25 Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre: haced esto todas las veces que bebiereis, en memoria de mí.
1Co 11:26 Porque todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que venga.
Jesús es el pan de vida, el pan es creer en Cristo, la vida que nos regala es la vida eterna, ser resucitados en el día portrero:
Jn 6:30 Dijéronle entonces: ¿Qué señal pues haces tú, para que veamos, y te creamos? ¿Qué obras?
Jn 6:31 Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dió á comer.
(El maná era también una profecía acerca de Cristo.)
Jn 6:32 Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: No os dió Moisés pan del cielo; mas mi Padre os da el verdadero pan delcielo.
Jn 6:33 Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.
Jn 6:34 Y dijéronle: Señor, danos siempre este pan.
Jn 6:35 Y Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida: el que á mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
(Para mantener vivo nuestro cuerpo, comemos comida; la verdadera comida y bebida son oír y obedecer la voluntad del Padre mediante su Hijo, y es esta comida la que nos da vida eterna y sacia para siempre nuestra sed.)
Jn 6:40 Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna: y yo le resucitaré en el día postrero.
El sentido espiritual de la comida de Cristo:
Jn 4:34 Díceles Jesús: Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.
El sentido espiritual de la bebida de Cristo:
Lc 22:42 Diciendo: Padre, si quieres, pasa este vaso de mí; empero no se haga mi voluntad, sino la tuya.
Mt 26:42 Otra vez fué, segunda vez, y oró diciendo. Padre mío, si no puede este vaso pasar de mí sin que yo lo beba, hágase tu voluntad.
Bendiciones.
Gracias le doy a nuestro Padre Eterno que nos da a entender la verdad. Amén.
Los que reducen a Dios no somos nosotros que sabemos que Dios es capaz de incluso darse al humano en un sacrificio diario – darnos el pan de Cada día – sino los que reducen a Dios son los que dicen que Dios no es capaz de estar presente también en el Pan y el Vino como dijo el mismo en Juan 6.
Cristo nació en Belén lo que en hebreo significa = Casa de Pan.
6:26 Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os saciasteis.
6:27 Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece, la cual el Hijo del Hombre os dará; porque a éste señaló Dios el Padre.
6:28 Entonces le dijeron: ¿Qué debemos hacer para poner en práctica las obras de Dios?
6:29 Respondió Jesús y les dijo: Esta es la obra de Dios, que creáis en el que él ha enviado.
6:30 Le dijeron entonces: ¿Qué señal, pues, haces tú, para que veamos, y te creamos? ¿Qué obra haces?
6:31 Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dio a comer.
6:32 Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: No os dio Moisés el pan del cielo, mas mi Padre os da el verdadero pan del cielo.
6:33 Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.
6:34 Le dijeron: Señor, danos siempre este pan.
6:35 Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
6:36 Mas os he dicho, que aunque me habéis visto, no creéis.
6:37 Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.
6:38 Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.
6:39 Y esta es la voluntad del Padre, el que me envió: Que de todo lo que me diere, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero.
6:40 Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
6:41 Murmuraban entonces de él los judíos, porque había dicho: Yo soy el pan que descendió del cielo.
6:42 Y decían: ¿No es éste Jesús, el hijo de José, cuyo padre y madre nosotros conocemos? ¿Cómo, pues, dice éste: Del cielo he descendido?
6:43 Jesús respondió y les dijo:No murmuréis entre vosotros.
6:44 Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero.
6:45 Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados por Dios. Así que, todo aquel que oyó al Padre, y aprendió de él, viene a mí.
6:46 No que alguno haya visto al Padre, sino aquel que vino de Dios; éste ha visto al Padre.
6:47 De cierto, de cierto os digo: El que cree en mí, tiene vida eterna.
6:48 Yo soy el pan de vida.
6:49 Vuestros padres comieron el maná en el desierto, y murieron.
6:50 Este es el pan que desciende del cielo, para que el que de él come, no muera.
6:51 Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.
6:52 Entonces los judíos contendían entre sí, diciendo: ¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?
6:53 Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros.
6:54 El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
6:55 Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida.
6:56 El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él.
6:57 Como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí.
6:58 Este es el pan que descendió del cielo; no como vuestros padres comieron el maná, y murieron; el que come de este pan, vivirá eternamente.
Y no solo Le reducen se quedan ellos FUERA de Cristo…. Y no se condenan solo que jamás llegaran a entrar en la Nueva Jerusalén…
pero es la elección de cada uno.
Creer en los que dicen que Le es imposible a Dios estar completamente presente como El mismo ha dicho también en el Pan y el Vino y no solo en Su Santa Escritura y en El Espíritu – o los que dicen que TODO es posible para Dios y que no hay límites de Su Poder y Su Amor para con nosotros… el que Le recibe sin fe jamás percibirá a Dios… ni en Pan ni en Vino ni en Espíritu…
Escrito Esta – lee Heb. Y la gente prefiere reducir a Dios lo que saben y son ellos - en vez de recibir TODO Dios... en Cristo - y prefieren lo que les mienten otros hombres que jamas han vivido la Fe real... a ellos.... pero en infierno recibiran su merecido por cerrar el Camino a los Hijos de Dios a recibir el Hijo del Hombre...
En Cristo
Ahora veo tus mensajes, rato atrás tus mensajes aparecían como una página en blanco...
Ester, pensé que tu entendimiento era más profundo, pero veo que llegas al límite que tu religión te impuso.
Cristo es el pan vivo de Dios, que bajó del cielo para darnos vida, pero no literalmente, porque si así fuera, Cristo nos estaría enseñando a ser caníbales, comer la sangre es un pecado, comer la carne y sangre de un ser humano es un pecado mayor, y comer la carne y sangre del Hijo de Dios, un pecado mucho mucho mayor.
Cristo habló en parábolas para dirigirse a la gente. Comer la carne y beber la sangre de Cristo son símbolos.
Mt 13:34 Todo esto habló Jesús por parábolas á las gentes, y sin parábolas no les hablaba:
El alimento del hombre es la palabra de Dios:
Mt 4:4 Mas él respondiendo, dijo: Escrito está: No con solo el pan vivirá el hombre, mas con toda palabra que sale de la boca de Dios.
Jesús hablaba por parábolas a la gente:
Mt 16:11 ¿Cómo es que no entendéis que no por el pan os dije, que os guardaseis de la levadura de los Fariseos y de los Saduceos?
Mt 16:12 Entonces entendieron que no les había dicho que se guardasen de la levadura de pan, sino de la doctrina de los Fariseos y de los Saduceos.
La Cena del Señor es una conmemoración, tal como Él mismo lo dijo:
Lc 22:19 Y tomando el pan, habiendo dado gracias, partió, y les dió, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado: haced esto en memoria de mí.
Lc 22:20 Asimismo también el vaso, después que hubo cenado, diciendo: Este vaso es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama.
La mujer siro fenicia entendía cabalmente la enseñanza de Cristo, para ella el pan era la fe en el Hijo de Dios:
Mr 7:27 Más Jesús le dijo: Deja primero hartarse los hijos, porque no es bien tomar el pan de los hijos y echarlo á los perrillos.
Mr 7:28 Y respondió ella, y le dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos debajo de la mesa, comen de las migajas de los hijos.
Mr 7:29 Entonces le dice: Por esta palabra, ve; el demonio ha salido de tu hija.
Mr 7:30 Y como fué á su casa, halló que el demonio había salido, y á la hija echada sobre la cama.
Pan y levadura: pan es la palabra fiel de nuestro Padre Eterno, levadura es la falsa enseñanza agregada por los lobos que quieren extraviar a las ovejas, recuerda que Cristo habló en parábolas a la gente:
Mr 8:15 Y les mandó, diciendo: Mirad, guardaos de la levadura de los Fariseos, y de la levadura de Herodes.
Mr 8:16 Y altercaban los unos con los otros diciendo: Pan no tenemos.
Mr 8:17 Y como Jesús lo entendió, les dice: ¿Qué altercáis, porque no tenéis pan? ¿no consideráis ni entendéis? ¿aun tenéis endurecido vuestro corazón?
Pablo también entendió así:
1Co 11:23 Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fué entregado, tomó pan;
1Co 11:24 Y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed: esto es mi cuerpo que por vosotros es partido: haced esto en memoria de mí.
1Co 11:25 Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre: haced esto todas las veces que bebiereis, en memoria de mí.
1Co 11:26 Porque todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que venga.
Jesús es el pan de vida, el pan es creer en Cristo, la vida que nos regala es la vida eterna, ser resucitados en el día portrero:
Jn 6:30 Dijéronle entonces: ¿Qué señal pues haces tú, para que veamos, y te creamos? ¿Qué obras?
Jn 6:31 Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dió á comer.
(El maná era también una profecía acerca de Cristo.)
Jn 6:32 Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: No os dió Moisés pan del cielo; mas mi Padre os da el verdadero pan delcielo.
Jn 6:33 Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.
Jn 6:34 Y dijéronle: Señor, danos siempre este pan.
Jn 6:35 Y Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida: el que á mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
(Para mantener vivo nuestro cuerpo, comemos comida; la verdadera comida y bebida son oír y obedecer la voluntad del Padre mediante su Hijo, y es esta comida la que nos da vida eterna y sacia para siempre nuestra sed.)
Jn 6:40 Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna: y yo le resucitaré en el día postrero.
El sentido espiritual de la comida de Cristo:
Jn 4:34 Díceles Jesús: Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.
El sentido espiritual de la bebida de Cristo:
Lc 22:42 Diciendo: Padre, si quieres, pasa este vaso de mí; empero no se haga mi voluntad, sino la tuya.
Mt 26:42 Otra vez fué, segunda vez, y oró diciendo. Padre mío, si no puede este vaso pasar de mí sin que yo lo beba, hágase tu voluntad.
Bendiciones.
Gracias le doy a nuestro Padre Eterno que nos da a entender la verdad. Amén.