LA BIBLIA ENSEÑA ACERCA DE TRES IMPUTACIONES:
1) EL PECADO DE ADÁN QUE LE FUE IMPUTADO A TODA SU DESCENDENCIA.
(Rom 5:12) Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.
2) EL PECADO DE LA DESCENDENCIA DE ADAN QUE LE FUE IMPUTADO AL SEÑOR JESUCRISTO COMO NUESTRO SUSTITUTO EN LA CRUZ: (2Co 5:21) Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.
3) Y LA JUSTICIA INFINITA QUE CRISTO COMPRÓ EN LA CRUZ, Y QUE LE ES IMPUTADA A TODO AQUEL QUE POR HABER SIDO ELEGIDO Y ATRAÍDO EFICAZMENTE CREE EN CRISTO Y LE RECIBE POR LA FE,
(Rom 5:19) Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos.
AHORA RESPECTO A ESTA TERCERA IMPUTACION, ES DECIR LA IMPUTACION DEL LA JUSTICIA DE CRISTO A LOS ELEGIDOS, ES UN ACTO IRREVOCABLE Y DEFINITIVO, Y ES EL UNICO FUNDAMENTO DE NUESTRA SALVACION. (Rom 8:33) ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.
(Rom 8:34) ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
Todo aquel que afirme que la justificación no es un acto definitivo e irrevocable, lo que en realidad nos esta diciendo, es que no es definitiva porque esta condicionada a algo, y si esta condicionada a algo entonces ya no descansa pura y exclusivamente en la muerte de Cristo, eso precisamente es lo que enseña Roma, y es el falso evangelio de salvación mitad por gracia y mitad por obras.
ES IMPORTANTE QUE DIOS NO SOLO NOS IMPUTA LA JUSTICIA INFINITA DE CRISTO MEDIANTE EL ACTO JUDICIAL DE LA JUSTIFICACIÓN, SINO QUE TAMBIEN NOS REGENERA NOS DA UNA NUEVA NATURALEZA.
(Tit 3:5) nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo,
(Tit 3:6) el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador,
(Tit 3:7) para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna.
ES DECIR LAS BUENAS OBRAS Y LA OBEDIENCIA SON EL EFECTO Y NO LA CAUSA DE NUESTRA SALVACIÓN, PUES NUESTRA SALVACIÓN TIENE COMO ÚNICO FUNDAMENTO LA JUSTICIA QUE CRISTO COMPRÓ EN LA CRUZ, Y AQUEL QUE CREA QUE A ESTA JUSTICIA INFINITA HAY QUE AGREGARLE OBRA ALGUNA PARA SER ACEPTADO POR DIOS, LOS TALES ESTÁN PREDICANDO EL FALSO EVANGELIO DE "SALVOS POR GRACIA PERO PRESERVADOS POR OBRAS.