EL AYUDADOR OLVIDADO
Quizás la lectura de este mensaje, nos ayude en algo, a discernir y considerar, no solo la misión del Espíritu Santo, no solo en nuestras asambleas, sino también a explicar el por qué, se ha reemplazado el trabajo del Espíritu Santo, por el gobierno humano.
La naturaleza del Espíritu Santo ha sido muy discutida en la historia de la Iglesia de Cristo, incluso hoy en día. En la biblia aparece en forma de paloma, o se compara con el agua o el fuego, quizás por esto, algunos lo toman como una energía que procede del Padre.
La palabra griega para Espíritu, “pneuma” no es masculina ni femenina, sino neutra, por tal motivo, algunos insisten en que no es una Persona.
En Hebreo el “Espíritu” es “Ruaj” femenino, por eso hay quienes dicen que es mujer y otros dicen que es Jesús en forma espiritual, entonces en qué quedamos.
Lo cierto es que su naturaleza es un misterio y no podemos comprenderla del todo, porque no nos ha sido revelada con más claridad.
¿Pero qué es lo que sí ha sido revelado?
¿Qué dice la Biblia de este ser fascinante?
¿Es una Persona, una Fuerza, un Concepto, es Divino?
El Espíritu Santo es el tercer miembro de la Deidad, aparece en la Creación y en todo el Nuevo Testamento, inspirando y dirigiendo hombres de Dios, pero cuando vino Jesús, su Personalidad se reveló más claramente, en Juan 14 Jesús dijo:
Jua 14:15 Si me amáis, guardad mis mandamientos.
Jua 14:16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
Jua 14:17 el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.
La expresión “Otro” en referencia al Espíritu de Verdad, indica otro de la misma clase, por lo que tenía que ser Divino, como Jesús.
En Pentecostés, todos fueron llenos del Espíritu Santo, desde entonces es el Representante Legítimo de Jesús en la tierra, en su Iglesia, en su Asamblea, sin ninguna restricción espacio temporal.
El Espíritu Santo asume el relevo en el plan de Salvación, repartiendo dones como Él quiere en la Iglesia, y haciendo efectivo en los creyentes, el Sacrificio de Jesús.
En la Biblia el Espíritu Santo es una Persona que escudriña, conoce, revela, testifica, convence, ordena, lucha, mueve, ayuda, guía, crea, recrea, santifica, realiza milagros, y dirige asuntos de la asamblea.
Le vemos eligiendo hombres para una misión evangelizadora.
Hch 13:2 Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado.
Y en Hechos 15 le contemplamos dando su parecer en una reunión de apóstoles y ancianos para esclarecer un asunto, leemos:
Hch 15:28 Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no imponeros ninguna carga más que estas cosas necesarias:
Además, la Persona del Espíritu Santo, puede ser resistido, entristecido, blasfemado, ofendido, no es una energía, ni la Personificación de un concepto abstracto, porque tal figura no tiene alma inteligente y sensible.
Aparece en igualdad junto al Padre y al Hijo, en Hechos 10:
Hch 10:37 Vosotros sabéis lo que se divulgó por toda Judea, comenzando desde Galilea, después del bautismo que predicó Juan:
Hch 10:38 cómo Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo éste anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.
En 1 de Pedro:
1Pe 1:1 Pedro, apóstol de Jesucristo, a los expatriados de la dispersión en el Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia,
1Pe 1:2 elegidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas.
En 2 de Corintios:
o 13:14 La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén.
En el bautismo de Jesús:
Mat 3:16 Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él.
Mat 3:17 Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.
En la Gran Comisión:
Mat 28:19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;
Su Divinidad no se cuestiona:
Hch 5:3 Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad?
Hch 5:4 Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios.
SU OMNISCIENCIA, PODER Y ETERNIDAD
1Co 2:10 Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios.
Luc 1:35 Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios.
Heb 9:7 pero en la segunda parte, sólo el sumo sacerdote una vez al año, no sin sangre, la cual ofrece por sí mismo y por los pecados de ignorancia del pueblo;
Heb 9:8 dando el Espíritu Santo a entender con esto que aún no se había manifestado el camino al Lugar Santísimo, entre tanto que la primera parte del tabernáculo estuviese en pie.
Somos Templo de Dios, porque el Espíritu Santo mora en nosotros:
Co 6:18 Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca.
1Co 6:19 ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?
¿CÓMO ACTÚA EL ESPÍRITU SANTO EN NOSOTROS?
Produciendo en nuestra mente, el arrepentimiento, la conversión, y su especialidad, los frutos del Espíritu. Por tal motivo, el pecado contra el Espíritu Santo no se perdonará, no por ser demasiado grave, sino porque rechazar al Espíritu significa rechazar la posibilidad de arrepentirse.
En Efesios se nos invita a ser llenos del Espíritu Santo, leemos:
Efe 5:18 No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu,
Efe 5:19 hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones;
Efe 5:20 dando siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.
Esta relación plena y diaria, significa bautismo en el Espíritu Santo.
Y en 1Cor.12 da una participación activa dentro del Cuerpo de Cristo, su Iglesia, leemos:
1Co 12:4 Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo.
1Co 12:5 Y hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo.
1Co 12:6 Y hay diversidad de operaciones, pero Dios, que hace todas las cosas en todos, es el mismo.
1Co 12:7 Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho.
1Co 12:8 Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia según el mismo Espíritu;
1Co 12:9 a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu.
1Co 12:10 A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas.
1Co 12:11 Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como él quiere.
En Juan 16 su misión es convencernos de pecado, de Justicia y de Juicio, leemos:
Jua 16:7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; más si me fuere, os lo enviaré.
Jua 16:8 Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.
Jua 16:9 De pecado, por cuanto no creen en mí;
Jua 16:10 de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;
Jua 16:11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.
El Espíritu Santo inspira a los profetas, ilumina a los creyentes para descubrir verdades, nos da poder para llevar una vida victoriosa y graba el carácter de Cristo en nosotros.
Desde la ascensión de Jesús ha subido su protagonismo en la historia, haciendo efectivo el Sacrificio de Jesús, trabajando en nuestras mentes, y asistiendo a la Iglesia de Dios con sus dones.
Con el Espíritu Santo fuimos sellados como un anticipo del cielo y en Romanos 8 Él intercede por nuestras oraciones, leemos:
Rom 8:26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
Rom 8:27 Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.
Pronto se cumplirá plenamente la profecía de Joel 2, luego que la Iglesia haya sido arrebatada de la faz de la tierra y con este evento, culminará la predicación del evangelio de la gracia de Dios, revelado a Pablo en Hechos 2:24, para dar lugar a Israel y su relación con el evangelio del reino predicado por Cristo y rechazado por su pueblo, en su primera venida, mensaje que será predicado en el tiempo de la Gran Tribulación que habló el profeta Daniel (Mt.24:14).
Todavía hay mucho por descubrir del Espíritu Santo, pero sabemos que es un ser diferente al Padre y al Hijo, Divino y Eterno.
Caminar con Dios, es vivir y andar en el Espíritu, rechazar al Espíritu Santo, es perder el cielo.
Sí un día aceptaste a Jesús, fue gracias al Espíritu Santo que te convenció de pecado, de justicia y de juicio.
Si tu vida ha sido cambiada, ha sido por el Espíritu Santo.
Agradece al Padre y al Hijo, la presencia del Espíritu Santo en tu vida.