Re: La Homosexualidad
Hola, Presto... Tú comentaste esto...
Hola
El instinto del hombre no es procrear, son cosas distintas.
Usted piensa como piensa porque ha nacido en un tiempo, un espacio, en una familia, una sociedad y una cultura. Es decir, piense que usted hoy naciera sin familia que le inculque nada, cultura ni sociedad a la que estar atado, como animal que somos, usted sería bisexual, claro está con el tiempo eligirá que camino prefiere, pero de nacimiento no.
Si es cierto que la homosexualidad radical (todos homosexuales) es algo antinatura, se acabaría nuestra raza. Pero no hay nada de malo en una pareja que se ama, da igual si son dos hombres, dos mujeres u hombre y mujer. ¿O acaso no os a parecido adorable nunca la relación de alguna persona con su mascota?
He pensado algo que bien se ha pasado por alto...
Mira, la Biblia habla de una especie de medidor o termostato que nos indica si algo que hacemos es correcto o no. Se le conoce como "Conciencia".
Todos, todititos los seres humanos nacemos con conciencia, la cual nos indica en silencio si nuestras acciones son justas o injustas...
Partiendo de esto, podríamos definir si X o Y conducta son apropiadas o no. Eso abarca, como es obvio, la intención de una persona por acercarse a otra persona de su mismo sexo porque siente "algo" por esa persona.
Si lo analizas cuidadosamente, el querer no es cosa de hormonas, sino de cerebro. Perdona que recalque en el punto, pero aquí aplica la libertad de elección. Si bien es cierto que la sociedad, la cultura y la moral inculcada en la infancia determinan buena parte del criterio del adulto, no se puede aplicar esto de manera general. Las vivencias del individuo son un factor decisivo cuando le llega la hora de tomar una decisión que puede afectar para siempre su vida.
En realidad, se sabe que existe una etapa crítica en la adolescencia que define si un individuo sigue el camino heterosexual u homosexual. En función de buenas o malas experiencias, un individuo toma la decisión de abrazar a una pareja del otro sexo, o a una pareja del suyo propio... o una quimera.
Te pondré un caso a la mano: conozco a una persona que, tras amargas experiencias familiares y sociales, decidió no enredarse ni con hombres ni con mujeres. Su fijación sexual se orientó hacia sus propias fantasías personales (no me preguntes cual es el objeto de esta fijación, no podrías entenderlo).
En este caso, la persona de quien te cuento se halla entre la espada y la pared. Rechazó la vida heterosexual porque tuvo malas, malísimas experiencias con mujeres, pero también tuvo amargas decepciones intentando tener amigos, lo que se ha cerrado a sí mismo la posibilidad de convertirse en
gay.
El objeto de su fijación es algo que quiere tanto cual si fuese lo más querido de este mundo... pero también se considera "rechazado" ante la sociedad por causa de este cariño que hay en él.
Cabe mencionar que, cuando una persona tiene en sus manos el objeto deseado de su cariño -una persona, una mascota, un aparato de audio, un coche, etc.-, y es un cariño demasiado grande, puede llegar a tener un orgasmo. Nuevamente aquí entra en juego la libertad de elección personal. Tú puedes elegir si algo/alguien te da lo mismo, "te cae bien" o se convierte en "el amor de tu vida"...
Ahora bien, él sabe que no es correcto su comportamiento, su conciencia se lo recrimina... pero él mismo eligió ignorar esta voz de alerta, y se ha resignado a vivir como si fuese único en su especie: ni heterosexual, ni homosexual...
¿Qué se puede concluir de esto? ¿En qué categoría encajará esta persona?
Saludos.