Pues, no es que me haya ido a practicar todas las que existen, pero sí he leído sobre ellas y he hablado con algunos que las practican, las occidentales.
Y nadie puede probar nada sobre lo que dicen de su respectivo Dios. Todo es cuestión de fe, de creerlo.
Pero cuando el Dios que predican dice y hace cosas como las que hace un dictador o un rey que pide gloria y alabanzas a todas horas y está siempre con la espada en alto amenazando con castigos eternos, y proyecta un plan A y le fracasa y quiere arreglarlo con un plan B que tampoco es definitivo porque la gente se sigue condenando, pues qué quieres que te diga, no es como para creer que un Dios así es real. Yo al menos no puedo creerlo.