Defectos. A veces nos da por ver solamente defectos. Vemos la hoja seca al borde del vergel más florecido y, aunque esté cuajado de flores, lo despreciamos por tan horrendo deterioro.
Defectos. A veces nos da por ver solamente defectos. Vemos la hoja seca al borde del vergel más florecido y, aunque esté cuajado de flores, lo despreciamos por tan horrendo deterioro.
Salmo 91:1-2 El que habita al abrigo del Altísimo morará a la sombra del Omnipotente. Diré yo al Señor: Refugio mío, y fortaleza mía, mi Dios, en quien confío.
Salmo 4:8 En paz me acostaré, y así mismo también dormiré; porque solo tú, Señor, me haces habitar seguro.