Lamento comunicarte que no estás en posición de enseñar cuál es la verdad revelada.
"Jesús entonces dijo a Pedro: Mete tu espada en la vaina; la copa que el Padre me ha dado, ¿no la he de beber?"
No puedes comprender que la voluntad de Cristo ES la voluntad del Padre. No estás listo para tener esta conversación.
Aquí te equivocas rotundamente.
"...y todo lo mío es tuyo, y lo tuyo mío; y he sido glorificado en ellos..."
Cuando Cristo afirmó ser uno con el Padre, es uno en todo, no nada más en lo que te gusta.
Por tercera vez eres derrotado por la Escritura.
"He aquí mi siervo, yo le sostendré; mi escogido, en quien mi alma tiene contentamiento; he puesto sobre él mi Espíritu; él traerá justicia a las naciones..."
"Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres..."
La confesión de pedro certifica la deidad de Cristo como hijo de Dios, cosa que a los judíos les molestó, asumiendo que se hacía igual a Dios (Juan 5:18). Y, al parecer, te molesta que no puedas quebrar el testimonio de Cristo.
Chocas de nuevo con la deidad de Cristo.
"...Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre"
"...El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo..."
"...Y mirando a Jesús que andaba por allí, dijo: He aquí el Cordero de Dios..."
"...Y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos. Los cuatro seres vivientes decían: Amén; y los veinticuatro ancianos se postraron sobre sus rostros y adoraron al que vive por los siglos de los siglos"
"...No temas; yo soy el primero y el último; y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén..."
No pienses que solo puedes tomar lo que a ti te gusta -como lo hizo el pendejo diablo-, creyendo que un lector atento no se dará cuenta del error que cometes.
Cristo nunca dijo que era un ser creado. Y tampoco dijo estar separado del Padre (Juan 10:30) como pretendes hacer que te crea.
De hecho, Cristo fue engendrado del Padre, no creado (Salmo 2:7; Hebreos 1:5).
Cristo no deja de ser Dios por tener un Dios y Padre al que adora. Cristo es igualmente adorado (Apocalipsis 5:13), te guste o no te guste.