Aunque lo acaecido ayer en Nueva York nada tiene de gracioso (al menos dos marineros murieron), es insólito que ya se esté diciendo que un desperfecto del buque ocasionó el accidente. Un capitán que ha de maniobrar con el barco en un puerto extranjero ¿pudo olvidar que el palo mayor del mismo era diez metros más alto que la base del puente bajo el que debía pasar? ¿O acaso ignoraba las características de su nave y no se informó sobre las del puerto que había de pasar? Si esto ocurre en la paz, imaginemos a lo que estarían expuestos sus tripulantes en plena guerra.