Que tal Eraclio, debes de tomar en cuenta que también se hace historia de Estado, por poner un ejemplo el del Emperador Maximiliano (Maximiliano de Habsburgo ), que de alguna manera lo plasmaban en los libros de texto de educación básica en México como una especie de villano y en contraparte al presidente Benito Juárez como una especie de héroe nacional por haber fusilado al emperador extranjero durante su gobierno, irónicamente Maximiliano fue al igual que Benito Juárez un liberal y durante el Segundo Imperio Mexicano decretó leyes en favor de los indígenas, te cito unos fragmentos de El indigenismo de Maximiliano en México de Katalin Jancsó:
"... Ya en julio se podía leer en el periódico oficial del imperio que el secretario de la Comisión Científica, Literaria y Artística de México se había dirigido al ministro del Despacho de Negocios Extranjeros, y le pidió que le ayudara a obtener gramáticas y diccionarios en las diversas lenguas del imperio. Durante sus encuentros con los indígenas, a Maximiliano le ayudó un profesor universitario, Faustino Galicia Chimalpopoca, que probablemente pronunció el discurso de bienvenida en lengua nahuatl cuando el emperador llegó a México. Maximiliano anunció ya al llegar a Veracruz que para él no existía diferencia entre indio y no indio y que quería recibir a cada mexicano con la misma atención. Pronto apareció el Programa del Imperio, en el que se acentuó la importancia de los pueblos indígenas. Según el programa, la república no había podido alcanzar el desarrollo del país, porque le faltaba su base principal, el pueblo. La conquista española elevó a la raza indígena al rango de la raza humana. La tarea del imperio se consistía en elevarla a la vida social y, más tarde, a la vida política... "
"... Ya hemos aludido varias veces al interés de Maximiliano por las lenguas indígenas. Durante su gobierno, nacieron varias obras de esta índole, como por ejemplo la Geografía de las lenguas y carta etnográfica de México de Manuel Orozco y Berra o muchos diccionarios, así como el diccionario mexicano – español, español – mexicano de dos tomos, de Alonso Molins, que se publicó en 1866. En un periódico así presentaron la obra:
“El estudio de idiomas forma en el día uno de los ramos principales de la educación. El que antiguamente hablaron los mexicanos, y aun se habla en la mayoría de nuestra población, ha sido descuidado, acaso porque nuestros indígenas aunque torpemente, se dan a entender estropeando el español...
El estudio del idioma mexicano, considerado en un punto más elevado, debe formar una parte de la educación de una de las clases que por su carácter mismo fue en un tiempo y aun hasta ahora, llamada a ejercer una influencia benéfica en las clases indígenas de México. Hablamos de los señores sacerdotes...”
Muchos de los decretos y órdenes de Maximiliano fueron interpretados falsamente. Así ocurrió con sus medidas tomadas a favor de la emigración. Pronto después de su llegada a México, en su programa acentuó que había que apoyar la emigración extranjera hasta que los indígenas se integraran a la sociedad y vida política. Instó la emigración alemana; según un informe de enero de 1865, tenían como objetivo atraer a familias alemanas anualmente, desde aquel mismo año. Contaban con familias de cinco miembros, cada una iba a recibir una casa con dos cuartos, harina, semillas de algodón, tabaco, trigo y maíz y animales: caballos, bueyes, cabras, ovejas, vacas, según sus necesidades. En los territorios con resurrecciones contra el imperio, amenazaron a la población con que quitarían sus tierras para dárselas a los nuevos colonos. En realidad, los extranjeros iban a recibir terrenos que no estaban cultivados... "
Cosas como esta no las mencionaba la historia de Estado, porque digamos que lo que les interesaba era transmitir su versión histórica, en lo personal creo que debemos mantener la mente abierta a otras opiniones, puntos de vista, maneras de pensar, conocimientos, en el ánimo de enriquecer nuestro criterio. Un saludo y bendiciones.