Interesante comentario el que está dentro del recuadro rojo
Habla de la condición psíquica de los que proclaman estas ideas
Me quedé pensando en eso de “ser juiciosos y sojuzgar todas las cosas”. Suena como si el cristianismo fuera una especie de tribunal celestial con licencia para someter, ¿no?
Pero tengo una duda: ¿no era Jesús el que se juntaba con publicanos, samaritanos y prostitutas, y que más bien sojuzgaba el ego de los fariseos que creían tener el monopolio de la verdad? Porque si el llamado es a juzgar y dominar, entonces el Sermón del Monte fue un malentendido y el mandamiento de amar al prójimo debe tener letra chica.
Se parece a los argumentos de @7 truenos
Y sobre el ecumenismo… ¿no será que confundir respeto con libertinaje es una forma elegante de evitar convivir con la diferencia? Digo, por si acaso el amor cristiano no se trata solo de salvar almas, sino también de no aplastarlas en el proceso.
En fin, si todo es tan claro y juzgable, quizás el Reino de Dios venga con manual de usuario y formulario de ingreso. Pero mientras tanto, algunos preferimos seguir creyendo que la fe se vive con humildad, no con martillo.

Habla de la condición psíquica de los que proclaman estas ideas
Me quedé pensando en eso de “ser juiciosos y sojuzgar todas las cosas”. Suena como si el cristianismo fuera una especie de tribunal celestial con licencia para someter, ¿no?
Pero tengo una duda: ¿no era Jesús el que se juntaba con publicanos, samaritanos y prostitutas, y que más bien sojuzgaba el ego de los fariseos que creían tener el monopolio de la verdad? Porque si el llamado es a juzgar y dominar, entonces el Sermón del Monte fue un malentendido y el mandamiento de amar al prójimo debe tener letra chica.
Se parece a los argumentos de @7 truenos
Y sobre el ecumenismo… ¿no será que confundir respeto con libertinaje es una forma elegante de evitar convivir con la diferencia? Digo, por si acaso el amor cristiano no se trata solo de salvar almas, sino también de no aplastarlas en el proceso.
En fin, si todo es tan claro y juzgable, quizás el Reino de Dios venga con manual de usuario y formulario de ingreso. Pero mientras tanto, algunos preferimos seguir creyendo que la fe se vive con humildad, no con martillo.
