Re: ¿ES PECADO COMER CARNE?
Estimados hermanos. Saludos cordiales.
Leyendo este tema veo como algunos pretenden relacionar que la Iglesia Adventista “prohíbe el consumo de carnes” y osadamente también señalan “el matrimonio”; para argüir que 1 Tim 4: 3 se aplica a esta denominación, leamos: “prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad”, por supuesto que ninguno de los foristas que fueron alguna vez adventistas, y ahora están como adversarios de este movimiento se atreverán a decir aquí que la iglesia les prohibió “comer algún alimento”, y “no casarse”, si bien es cierto que la Palabra de Dios nos enseña que al salir de Egipto y ser liberado de la esclavitud, su pueblo, tuvo que atravesar el desierto para ir a la tierra prometida, el Señor nos brinda una enseñanza al otorgarle alimentación a esa gran multitud.: “¿Qué es esto?” Porque no sabían qué era. Entonces Moisés les dijo: “Es el pan que el Eterno os da para comer” Exodo 16: 15
Este “pan” que Dios había provisto para su pueblo se describe del siguiente modo:
“Y la casa de Israel lo llamó “maná”. Era como semilla de cilantro, blanco. Y su sabor como hojuelas con miel” Ex. 16: 31
“Trigo del cielo les dio” Sal. 78: 24
“Y el hombre comió pan de ángeles” Sal. 78: 25
El modo de preparación también se encuentra descrito en las Sagradas Escrituras:
“Lo molían en molinos, o lo majaban en morteros; lo cocían en caldera, o hacían de él panes. Y su sabor era como aceite nuevo” Núm. 11: 8
La Palabra de Dios nos informa acerca de este período de tiempo en que se les suministró este alimento de origen celestial: “ Así, los israelitas comieron maná durante 40 años, hasta que entraron en la tierra habitada. Maná comieron hasta que llegaron al límite de Canaán” Ex. 16: 35
Durante la peregrinación de Israel por el desierto recibieron como alimento enviado por Dios, únicamente maná, pues este modo de alimentación era prevista por el Cielo. Aunque deben tomarse en consideración dos ocasiones en que comieron carne:
“y les decían los hijos de Israel: Ojalá hubiéramos muerto por mano de Jehová en la tierra de Egipto, cuando nos sentábamos a las ollas de carne, cuando comíamos pan hasta saciarnos; pues nos habéis sacado a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud.” Ex. 16: 3
Aproximadamente, dos meses después de la salida de Egipto y poco antes de llegar al Sinaí, Israel solicitó carne y pan. Ambos alimentos se le concedieron, de acuerdo al informe bíblico, aunque el primero no de acuerdo con la voluntad de Dios, sino a su propio deseo y únicamente por un día (CSRA, 452).
“Y al atardecer llegaron codornices que cubrieron el campamento, y a la mañana descendió roció alrededor del campamento” Ex. 16: 3
“Y la gente extranjera que se mezcló con ellos tuvo un vivo deseo, y los hijos de Israel también volvieron a llorar y dijeron: ¡Quién nos diera a comer carne!” Núm. 11: 4
Aproximadamente, dos años después de la salida de Egipto y muy cerca de los límites de Canaán, Israel volvió a pedir carne y también en esta ocasión se les concedió su deseo, pero en contra del propósito divino y con su evidente desagrado, durante un mes.
Pero al pueblo dirás: Santificaos para mañana, y comeréis carne; porque habéis llorado en oídos de Jehová, diciendo: ¡Quién nos diera a comer carne! ¡Ciertamente mejor nos iba en Egipto! Jehová, pues, os dará carne, y comeréis. 19No comeréis un día, ni dos días, ni cinco días, ni diez días, ni veinte días, 20sino hasta un mes entero, hasta que os salga por las narices, y la aborrezcáis, por cuanto menospreciasteis a Jehová que está en medio de vosotros, y llorasteis delante de él, diciendo: ¿Para qué salimos acá de Egipto?” Nún. 11: 33,34
Así pues, durante aproximadamente cuarenta años Israel tuvo como alimento previsto por Dios “maná”, que era similar a una semilla que descendía del cielo como el rocío cada mañana.
Hoy en día, el pueblo de Dios, está enfrentado a la misma situación, estamos por ser trasladados a la Canaán Celestial, listos para abandonar este mundo de pecado (Egipto espiritual) y se requiere una reforma completa, y entre ellos, la de los hábitos alimenticios y el consumo de sustancias dañinas que perjudicarán la correcta relación entre nosotros con nuestro Señor. La alimentación provista por Dios para la última iglesia se conforma de los siguientes productos:
“planta que da semilla”
“árbol que lleva fruto”
“plantas del campo”
Ahora frente a la pregunta hecha: “Hablas del cielo, y sé que entiendes por cielo, algo completamente diferente a lo que yo entiendo, por lo cuál te pregunto:¿Qué es el cielo para vos?
Conforme a tus palabras:¿Comerás porotos y frutas y verduras en el cielo?
Saludos.” (Maedicus)
Respondo: La Bíblia hace mención de tres cielos, pero es el Paraiso; lugar donde el Señor está y nos está preparando morada y habita con su Padre: “En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.” S Jn. 14:2.
Es decir en el Paraíso, y precisamente allí, la alimentación que Dios proveerá para su pueblo redimido, y esto se encuentra descrita en la Sagradas Escrituras:
Semilla “…Al que venza, le daré del maná escondido…” Apoc. 2: 17
[B]“maná[/B]”. Era como semilla de cilantro, blanco. Y su sabor como hojuelas con miel” Ex. 16: 31
“Frutas”. “Y junto al río, en la ribera, a uno y otro lado, crecerá toda clase de árboles frutales; sus hojas nunca caerán, ni faltará su fruto. A su tiempo madurará, porque sus aguas salen del santuario; y su fruto será para comer, y su hoja para medicina.” Ez. 47: 12
“En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones.” Apoc. 22: 2
Bendiciones.
Luego todo Israel será salvo.