Evidencia abrumadora de que la sombra terrenal de las langostas son las legiones romanas y la contraparte humana de Apolión es Titus Flavius Vespasianus
PARTE II
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Las langostas de Apocalipsis 9 son el ejército romano descrito en una semejanza mezclada de esas constelaciones visibles en el cielo nocturno en la Pascua, la noche en que Roma comenzó el sitio de Jerusalén en el año 70 d.C.
Al igual que en Ezequiel 28, en el que la caída terrenal del rey de Tiro se describe como la caída de un ángel del cielo, Apocalipsis 9 también describe eventos terrenales en imágenes de otro mundo.
En Ezequiel 28, Ezequiel predice la ruina del rey de Tiro, una profecía que probablemente se cumplió en el siglo VI a. C. Sin embargo, al predecir la caída de este rey terrenal, Ezequiel describe este evento como si describiera la caída de un ángel del cielo:
Apocalipsis 9 también describe eventos terrenales en imágenes de otro mundo. En este capítulo, la resurrección de la bestia bajo la Dinastía Flavia y el subsiguiente regreso del ejército romano para sitiar Jerusalén se representa en la imagen de espíritus saliendo del Abismo. (Aunque creo que es probable que seres espirituales realmente se levantaron del Abismo para actuar entre bastidores para ayudar en la caída de Jerusalén como se implica en este capítulo).
Apocalipsis es poesía profética y pocos capítulos ilustran la profundidad de este texto mejor que Apocalipsis 9. Por lo tanto, hay capas de profundidad y significado en este capítulo. Por ejemplo, en Apocalipsis 9:1-3 un ejército sale del Abismo. Como se afirmará a menudo a lo largo de estos comentarios, mar y Abismo tiene un doble significado. A lo largo de la Biblia, estos dos términos apuntan tanto al inframundo oscuro de los muertos como a las naciones gentiles, específicamente a Roma en Apocalipsis, simultáneamente. Así, el ejército de langostas es tanto un ejército espiritual del Abismo, el reino de los muertos, como un ejército terrenal del mar, la Roma gentil. En otras palabras, las predicciones sobre la quinta trompeta y la copa de Apocalipsis parecen tener un cumplimiento tanto en el ámbito espiritual como en el terrenal.
Y en el cumplimiento terrenal de este capítulo también parece haber dos capas de profundidad o significado. La ascensión de Apolión y su ejército de langostas del abismo también se predice en Apocalipsis 17:8 como la bestia que sube del abismo: “La bestia que viste que era una vez, ahora no es, y sin embargo saldrá del Abismo e ir a su destrucción.” Cuando se dice que Apolión y su ejército y la bestia que representan emergen del Abismo, este es un lenguaje de resurrección, ya que el Abismo es el reino de la muerte. Esta ascensión del Abismo apunta metafóricamente a la resurrección del Imperio Romano, la bestia, después de que casi se derrumbó con la muerte de Nerón. El surgimiento de la dinastía Flavia a fines del año 69 d. C. puso fin a la guerra civil que casi colapsó el imperio después de la terminación de la dinastía César a la muerte de Nerón. (Más sobre esto más adelante) Recuerde que Abismo (como mar, aguas, etc.) también representa naciones extranjeras. Así, cuando Apolión y su ejército salen del Abismo, esto también simboliza el regreso de Tito y su ejército de las naciones gentiles (el Abismo, el mar, las aguas) para sitiar a Jerusalén (la tierra) en el año 70 d. C. después de que su padre se convirtiera en emperador. Así, la ascensión de este ejército espiritual desde el Abismo se refleja y simboliza en la tierra tanto en el regreso de Tito y su ejército de la Roma gentil (el mar o Abismo) a Israel (la tierra) para sitiar a Jerusalén en el año 70 d. la resurrección aproximadamente simultánea de la bestia que simboliza la restauración del imperio en el surgimiento de la dinastía Flavia. Así, cuando Apolión y su ejército salen del Abismo, esto también simboliza el regreso de Tito y su ejército de las naciones gentiles (el Abismo, el mar, las aguas) para sitiar a Jerusalén (la tierra) en el año 70 d. C. después de que su padre se convirtiera en emperador. Así, la ascensión de este ejército espiritual desde el Abismo se refleja y simboliza en la tierra tanto en el regreso de Tito y su ejército de la Roma gentil (el mar o Abismo) a Israel (la tierra) para sitiar a Jerusalén en el año 70 d. la resurrección aproximadamente simultánea de la bestia que simboliza la restauración del imperio en el surgimiento de la dinastía Flavia. Así, cuando Apolión y su ejército salen del Abismo, esto también simboliza el regreso de Tito y su ejército de las naciones gentiles (el Abismo, el mar, las aguas) para sitiar a Jerusalén (la tierra) en el año 70 d. C. después de que su padre se convirtiera en emperador. Así, la ascensión de este ejército espiritual desde el Abismo se refleja y simboliza en la tierra tanto en el regreso de Tito y su ejército de la Roma gentil (el mar o Abismo) a Israel (la tierra) para sitiar a Jerusalén en el año 70 d.C también con la resurrección aproximadamente simultánea de la bestia que simboliza la restauración del imperio en el surgimiento de la dinastía Flavia.(1)
(1) Estas predicciones también pueden haberse cumplido literalmente en una visión de seres sobrenaturales vistos saliendo de un volcán durante una famosa erupción volcánica. Hay una multitud de ejemplos de doble cumplimiento que se encuentran a lo largo de la Biblia. Uno de esos ejemplos se encuentra en Isaías 7:14. En este versículo Isaías escribe: “La virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel”. Esta profecía se cumple inicialmente en Isaías 8:3 e Isaías 8:18 con el nacimiento del hijo de Isaías y una vez más en el nacimiento de Jesús.
La hora más oscura de Roma...
PARTE III
Martín, Juan. Una de las siete plagas de Egipto.
Como está profetizado en Apocalipsis 9:2 y Apocalipsis 16:10 , el reino de la bestia está sumido en la oscuridad. Recuerde que las siete trompetas y las copas de Apocalipsis describen los mismos eventos desde una perspectiva ligeramente diferente. En otras palabras, la primera trompeta y la primera copa describen el mismo evento que la segunda trompeta y la segunda copa, etc. Así, la quinta trompeta de Apocalipsis 9 en la que se sueltan langostas del abismo y el cielo se oscurece (Apocalipsis 9: 2) corresponde a la quinta copa cuando el reino de la bestia es sumido en tinieblas (Apocalipsis 16:10).
En el año 69 dC, Roma enfrentó lo que pudo haber sido su hora más oscura. Ese año, los generales en guerra enfrentaron a las legiones del imperio entre sí y amenazaron con derrumbar el imperio y, en última instancia, provocaron la muerte de tres autoproclamados césares. Destrozada por la guerra civil, Roma cesó temporalmente su asalto a Israel. Entonces surgió el orden del caos cuando el control del imperio cayó firmemente en manos del ex general de la guerra judía: Vespasiano.
La sexta trompeta y la copa describen lo que sucedió a continuación: Tras la ascensión de Vespasiano, en el año 70 dC, el control de las legiones romanas en Israel pasó a su hijo Tito. Deseando una victoria rápida, Vespasiano atrajo a miles de soldados y auxiliares romanos del Éufrates y las provincias vecinas para ayudar en el esfuerzo de guerra. Esta plaga describe la movilización de estas tropas y su posterior asalto a Jerusalén.
Manteniendo el tema del último capítulo, Juan continúa conectando eventos futuros con las plagas del Éxodo. Este capítulo representa la plaga de langostas y la plaga de tinieblas. Esta plaga de tinieblas vincula la quinta trompeta con la quinta copa de Apocalipsis 16:10 en la que el reino de la bestia se sumerge en la oscuridad. Así, tanto en Apocalipsis 9:2 como en Apocalipsis 16:10, el reino de la bestia es arrojado a las tinieblas.
TITAN.Martín, Juan. Una de las siete plagas de Egipto.
Como está profetizado en Apocalipsis 9:2 y Apocalipsis 16:10 , el reino de la bestia está sumido en la oscuridad. Recuerde que las siete trompetas y las copas de Apocalipsis describen los mismos eventos desde una perspectiva ligeramente diferente. En otras palabras, la primera trompeta y la primera copa describen el mismo evento que la segunda trompeta y la segunda copa, etc. Así, la quinta trompeta de Apocalipsis 9 en la que se sueltan langostas del abismo y el cielo se oscurece (Apocalipsis 9: 2) corresponde a la quinta copa cuando el reino de la bestia es sumido en tinieblas (Apocalipsis 16:10).
En el año 69 dC, Roma enfrentó lo que pudo haber sido su hora más oscura. Ese año, los generales en guerra enfrentaron a las legiones del imperio entre sí y amenazaron con derrumbar el imperio y, en última instancia, provocaron la muerte de tres autoproclamados césares. Destrozada por la guerra civil, Roma cesó temporalmente su asalto a Israel. Entonces surgió el orden del caos cuando el control del imperio cayó firmemente en manos del ex general de la guerra judía: Vespasiano.
La sexta trompeta y la copa describen lo que sucedió a continuación: Tras la ascensión de Vespasiano, en el año 70 dC, el control de las legiones romanas en Israel pasó a su hijo Tito. Deseando una victoria rápida, Vespasiano atrajo a miles de soldados y auxiliares romanos del Éufrates y las provincias vecinas para ayudar en el esfuerzo de guerra. Esta plaga describe la movilización de estas tropas y su posterior asalto a Jerusalén.
Manteniendo el tema del último capítulo, Juan continúa conectando eventos futuros con las plagas del Éxodo. Este capítulo representa la plaga de langostas y la plaga de tinieblas. Esta plaga de tinieblas vincula la quinta trompeta con la quinta copa de Apocalipsis 16:10 en la que el reino de la bestia se sumerge en la oscuridad. Así, tanto en Apocalipsis 9:2 como en Apocalipsis 16:10, el reino de la bestia es arrojado a las tinieblas.
EX-FUTURISTA POR MÁS QUE FUTURISTAS LADREN.
'Ladran, Sancho, señal que cabalgamos' (VAMOS POR BUEN CAMINO).