Papa dice estar dolido por "odio y hostilidad" contra él
jueves 12 de marzo de 2009 09:39 GYT Imprimir | Una Pagina [-] Texto [+]
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Por Philip Pullella
CIUDAD DEL VATICANO (Reuters) - El Papa Benedicto XVI dijo el jueves que se sentía profundamente dolido por la "hostilidad y odio" que algunos católicos mostraron hacia él después que permitiera que cuatro obispos tradicionalistas, incluyendo a uno que niega el Holocausto, regresaran a la Iglesia.
En una carta dirigida a los obispos del mundo y divulgada el jueves, el Papa admitió que el Vaticano manejó y comunicó mal el asunto y que algunos problemas podrían haberse evitado utilizando internet para revisar los antecedentes de las personas.
En una muestra extremadamente rara de emoción personal, Benedicto XVI también advirtió que la Iglesia corre el riesgo de "morderse y devorarse a si misma" con peleas internas.
Es muy inusual que un Papa tenga que explicar sus acciones a sus obispos y reconocer que las cosas salieron mal.
En la carta, Benedicto XVI defiende su decisión de iniciar el proceso para permitir que la tradicionalista Sociedad de San Pío X se reincorpore a la Iglesia, pero rechaza las acusaciones de que él quería "retroceder el reloj".
Dijo que lamentaba que un "gesto de misericordia" llevara a "una discusión más acalorada que cualquiera que hemos visto en mucho tiempo".
El Papa levantó el 24 de enero la excomunión de Richard Williamson y otros tres obispos, intentando sanar 20 años de ruptura que comenzaron cuando fueron expulsados de la Iglesia por haber sido ordenados sin el permiso de su antecesor, Juan Pablo II.
Williamson dijo en una entrevista transmitida varios días antes que creía que no existieron cámaras de gas y que no más de 300.000 judíos murieron en campos de concentración nazis, a diferencia de los seis millones de víctimas aceptadas por la mayoría de los historiadores.
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Por Philip Pullella
CIUDAD DEL VATICANO (Reuters) - El Papa Benedicto XVI dijo el jueves que se sentía profundamente dolido por la "hostilidad y odio" que algunos católicos mostraron hacia él después que permitiera que cuatro obispos tradicionalistas, incluyendo a uno que niega el Holocausto, regresaran a la Iglesia.
En una carta dirigida a los obispos del mundo y divulgada el jueves, el Papa admitió que el Vaticano manejó y comunicó mal el asunto y que algunos problemas podrían haberse evitado utilizando internet para revisar los antecedentes de las personas.
En una muestra extremadamente rara de emoción personal, Benedicto XVI también advirtió que la Iglesia corre el riesgo de "morderse y devorarse a si misma" con peleas internas.
Es muy inusual que un Papa tenga que explicar sus acciones a sus obispos y reconocer que las cosas salieron mal.
En la carta, Benedicto XVI defiende su decisión de iniciar el proceso para permitir que la tradicionalista Sociedad de San Pío X se reincorpore a la Iglesia, pero rechaza las acusaciones de que él quería "retroceder el reloj".
Dijo que lamentaba que un "gesto de misericordia" llevara a "una discusión más acalorada que cualquiera que hemos visto en mucho tiempo".
El Papa levantó el 24 de enero la excomunión de Richard Williamson y otros tres obispos, intentando sanar 20 años de ruptura que comenzaron cuando fueron expulsados de la Iglesia por haber sido ordenados sin el permiso de su antecesor, Juan Pablo II.
Williamson dijo en una entrevista transmitida varios días antes que creía que no existieron cámaras de gas y que no más de 300.000 judíos murieron en campos de concentración nazis, a diferencia de los seis millones de víctimas aceptadas por la mayoría de los historiadores.