Hola Espada, te voy a contestar porque te dirigiste a mi personalmente.
Yo no escondo mi cabeza en un hoyo y tampoco se me ocurre el porque haría algo así.
En mi particular visión de la esta historia, lo que comenzó con aquella intervención de Dios en el mundo durante la vida de Noé con el diluvio universal, terminó con la muerte de Jesucristo y la aparición de la iglesia.
Aclaremos que con iglesia no me estoy refiriendo a lo que hoy se conoce como la iglesia católica.
A través de esta historia Dios nos va dejando un mensaje ininterrumpido y vemos, con absoluta claridad, que este mensaje es de carácter progresivo.
Así ya podemos ver a Jesucristo en Génesis 3:15, en Noé, en Abraham, en Isaac y en toda la historia de Israel, primero como individuo y después como pueblo nación, hasta llegar a Belén, donde nace el heredero de toda este derrotero fantástico.
Jesús nace para oficiar de Noé y para llevar a cabo el último gran diluvio universal pero esta vez con un destino y eficacia completamente exitosos.
En aquel primer diluvio Dios manifiesta muy a pesar suyo de que el hombre se había vuelto un ser malo que debía, si o si, ser destruido para que aquel mal que se había metido dentro de él pudiera ser completamente destruido.
Pero a pesar de decir esto con total claridad por otro lado, el mismo boicotea su propio plan maestro al permitirle a Noé y los suyos escapar de este juicio divino tan justo y verdadero.
Así, el mismo mal que Dios quería erradicar, se coló en el arca y sobrevivió al diluvio, agazapado en aquellas pocas personas que se mantuvieron con vida, salvaguardados en el arca.
No hubo un error por parte de Dios ni mucho menos un cambio de idea.
Lo que Dios nos deja con aquel tremendo diluvio es una enseñanza fundamental y esa enseñanza es que el pecado solo se puede erradicar de manera definitiva mediante la muerte del portador.
Y sin su muerte el pecado permanece.
De esta forma el pecado fue exterminado en todos aquellos que se ahogaron pero en los que no murieron aquel pecado y maldad se coló de nuevo al mundo pos diluvio.
Para terminar Dios nos deja escrito como enseñanza que el exterminio del pecado mediante un ahogamiento universal no sirve porque para alcanzar el éxito, este método debe terminar con la vida del propio pecador, porque si queda al menos uno solo vivo, el pecado seguirá vivo con él.
¿Entonces como matarlos a todos pero sin matarlos y destruir así la esperanza del hombre?
Y la respuesta de Dios es JESUCRISTO.
Jesucristo va ser para Dios un Noé muy especial.
En el diluvio universal Dios mata a todos los hombres pero por causa de la esperanza de la raza humana tiene que preservar vivo a Noé.
En cambio en este segundo exterminio del pecado Dios mata al nuevo Noé para no tener que matar a todos los demás.
Y en este segundo y definitivo plan de eliminación del pecado por ahogamiento, este ahogamiento es ahora personal y auto infligido y se lo conoce como BAUTISMO.
Para terminar el punto es, que así como el mundo ante diluviano debió perecer en el diluvio pero no pasó a causa de Noé y de la esperanza, en la exitosa cruz de JESUCRISTO el fin del mundo se materializó.
Y en aquella cruz todo muere.
TODO.
MUERE ISRAEL y RESUCITA LA IGLESIA.
Dios te bendiga.
¿Qué hubiera pasado si en el diluvio universal Dios no hubiera dejado a nadie con vida?
¿Si no hubiera habido un arca y Noé y los suyos también se hubieran ahogado?
Bueno...
Precisamente eso pasó en la cruz.
Sin muerte el pecado no se puede eliminar y es por eso que Dios interpone MUERTE.
Pero esta MUERTE no es universal e infringida por Dios, sino personal y auto infringida.
Es necesario MORIR para poder nacer de nuevo SIN PECADO.
De este mundo salís cuando la ley se termine cumpliendo en ti o anticipadamente usando la CRUZ como vía de escape.
Podés esperar la muerte que a todos tarde o temprano llega, o morir anticipadamente subiéndote a la CRUZ y dejándote sepultar juntamente con Cristo.
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