EL CATOLICISMO ROMANO: UN CAMINO HACIA EL INFIERNO.

Uff te proyectaste de lo lindo "uno debe comer de lo que siembra"

Ya se que eres pastor.

O dicho en lenguaje sacro "de lo que abunda en el corazón habla la boca"

EL FUNDAMENTO DE DIOS NO ES EL DEL CATOLICISMO ROMANO

NO TE EQUIVOQUES VALENCIA:

2Ti 2:19 Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo.
 
Es un mitómano, es decir una persona con un problema psicológico real.

Cuánto tendrás que arrepentirte y eres un buen ejemplo de lo dice Santiago​

Santiago 3:6 Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno.​

 

Gracias a Dios tiene muchos voceros en este mundo y a ninguno han escuchado que son engañados por el diablo con una falsa representación de Dios en la Tierra que es su Papa , falso como el solo porque ni a Dios conoce , cómo puede ser vocero de Dios.​

Si yo sé. Por eso no me trago todo lo que dices .
Me gusta que me platiquen pero no todo les creo .
 

Nadie hablo de profesión , me parece que lee mal y profesión significa que recibo salario o remuneración y eso es también mentira .​

Ah, que no.

Y cómo se mantiene una iglesia?

Bueno, de eso no se habla. Está feo.
 
Uff te proyectaste de lo lindo "uno debe comer de lo que siembra"

Ya se que eres pastor.

O dicho en lenguaje sacro "de lo que abunda en el corazón habla la boca"
@Natanael1 pastor?

No por Dios.

Que vienen los extraterrestres!!!
 
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Ah, que no.

Y cómo se mantiene una iglesia?

Bueno, de eso no se habla. Está feo.

Es que "no" todos los ministros de Cristo son mantenidos por instituciones y vemos en Pablo que gran parte de su ministerio lo hizo trabajando, según creo haciendo carpas y no es que esta mal o bien sino que depende del ministerio y de los gastos, la disposición de cada ministro y la condición económica de los fieles y hemos hablando hasta el cansancio que muchas instituciones en América Latina el pastor tiene trabajo un secular porque la grey no puede mantenerlo.​

 
Si yo sé. Por eso no me trago todo lo que dices .
Me gusta que me platiquen pero no todo les creo .

No dude que esto se pondrá peor, porque por el aumento de la maldad, muchas personas se enfriaran, como lo dice la Escritura y en el Evangelismo ya hay una ola de falsos profetas, con falsas revelaciones y de vez en cuando cae alguno y hace mucho ruido como el nigeriano T.B. Joshua y ni hablar de la Iglesia Católica que nunca termina la ola de denuncias contra curas abusadores .​

 
La ICAR irá en decadencia conforme avanza el tiempo y en los últimos tiempos cuando regrese Jesucristo, la ICAR será parte de ese sistema mundial llamado Gran Ramera y obviamente será destruida como parte de todo lo Anticristiano con el regreso de Jesús.

Hoy sólo nos queda orar para que los que están metidos en esa religión, salgan de ella. Lo bueno es que muchos a diario abandonan las filas de la ICAR para engrosar las filas de confesiones protestantes conservadoras.

Por otro lado, estuve viendo un video interesante sobre las diferencias y las similitudes de la ICAR con la Iglesia Anglicana de Inglaterra y la conclusión es que ambas denominaciones están muy mal. La Iglesia Anglicana permite abiertamente la ordenación de ministros homosexuales mientras que la ICAR también lo permite aunque no tan abiertamente. El punto es que al final hay podredumbre en ambas corrientes.

Cualquier duda estoy a las órdenes.
 
@Robespengler, que cree en la reencarnación y la transmigración de las almas. Es de locos.
Completamente falso. Yo no creo ni en la reencarnación ni en la transmigración de las almas. Tú tergiversaste mis palabras en otro tema para afirmar que yo digo eso. La Biblia deja muy claro en Hebreos 9:27 que los hombres mueren una sola vez y después el Juicio. Nunca dije yo que las almas se reencarnan o transmigran. Si, ante la falta de cuerpos de piel morena, morada u oscura, Dios hubiera puesto nuestras almas en otros cuerpos con menos melanina (sin que nuestras almas hubieran estado nunca antes en ningún otro cuerpo) eso no es reencarnación ni transmigración de almas. Por lo visto sólo puedes recurrir a falacias de la lógica como la falacia del hombre de paja (https://es.wikipedia.org/wiki/Falacia_del_hombre_de_paja).

De hecho, una de las razones por las que considero que varias religiones orientales son caminos al Infierno es por esa creencia de la reencarnación o transmigración de las almas. Yo siendo cristiano, no creo en esas cosas.

Bendiciones en Cristo.

Robespengler
 
Holis.

Pastor evangélico y ex-diputado Roberto Suarez es detenido en Maracaibo por tener más de cuarenta cargos de abuso sexual​



Sonríe galán, acaparas la atención de los medios:

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La ICAR irá en decadencia conforme avanza el tiempo y en los últimos tiempos cuando regrese Jesucristo, la ICAR será parte de ese sistema mundial llamado Gran Ramera y obviamente será destruida como parte de todo lo Anticristiano con el regreso de Jesús.

Hoy sólo nos queda orar para que los que están metidos en esa religión, salgan de ella. Lo bueno es que muchos a diario abandonan las filas de la ICAR para engrosar las filas de confesiones protestantes conservadoras.

Por otro lado, estuve viendo un video interesante sobre las diferencias y las similitudes de la ICAR con la Iglesia Anglicana de Inglaterra y la conclusión es que ambas denominaciones están muy mal. La Iglesia Anglicana permite abiertamente la ordenación de ministros homosexuales mientras que la ICAR también lo permite aunque no tan abiertamente. El punto es que al final hay podredumbre en ambas corrientes.

Cualquier duda estoy a las órdenes.
Ustedes van "in crescendo" asi lo demuestran la últimas noticias.
 
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Bueno como dijo un pastor unos aportes atrás:

"Hay que comer de lo que se siembra" o ¿no?

Tribunal confirma sentencia de 27 años a pastor acusado de abuso de indígenas​


 
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Judiciales

Habló la víctima del cura abusador: “Mi objetivo era sacarlo de la Iglesia”​

Fueron las palabras de la víctima de Daniel Omar Acevedo, quien recibió una pena de prisión de 3 años por abuso sexual.
  • 14/09/2022 • 19:11​



Fue condenado y expulsado de la Iglesia.

Fue condenado y expulsado de la Iglesia.

La Justicia chaqueña condenó este lunes 12 de septiembre al ex cura de la Diócesis de Río Gallegos, Daniel Omar Acevedo, a la pena de 3 (tres) años de prisión de ejecución condicional (en suspenso) por considerarlo autor penalmente responsable del delito de abuso sexual.


Para recordar los hechos, el condenado había sido denunciado ante el Obispado años atrás, con una denuncia radicada en Ushuaia en el año 2016. En aquel momento, todavía pertenecía a la orden católica. Ángel, iniciador de la denuncia por abuso fue entrevistado por el programa Cambalache, que se emite en Tiempo FM 97.5, donde detalló como fue el proceso judicial hasta la sentencia. “Mi objetivo cuando empecé con esto fue sacarlo de la iglesia. Decía que no puede haber una persona de estas características sirviendo a Dios y escondiéndose en a envestidura sacerdotal”, indicó en primer lugar. Explicó que se avanzó con la denuncia canónica, recibiendo el primer veredicto por parte de la Iglesia, siendo expulsado por el Papa Francisco.
https://www.tiemposur.com.ar/info-g...stema-de-salud-y-los-desafios-del-federalismo
Ahora tras la sentencia, reconoció que se cerró un circulo y se terminó una etapa de su vida. Prefirió no emitir opinión en cuanto a la sentencia.
“Él era mi tío político. Siempre iba en vacaciones de invierne y verano, decía que era profesor de una escuela religiosa en Río Gallegos”, rememoró. En una de esas visitas fue cuando ocurrieron los hechos.
Posteriormente fue a vivir a Ushuaia, donde el sujeto se volvió a contactar con él. Asistido por un párroco local –quien le pidió que averiguara el nombre y apellido del abusador- concretó un encuentro y pudo recabar ese dato: Daniel Omar Acevedo.
“Él decía que era profesor de un colegio religioso de Río Gallegos”, expresó.
El 31 de mayo de 2020 el Santo Padre decretó la dimisión por pena de Acevedo, dispensándolo de sus obligaciones sacerdotales y el celibato, y quedando excluido del ejercicio del orden sagrado".
El párroco había sido separado en 2018 de sus funciones en la Diócesis, a raíz de la denuncia radicada desde Ushuaia por la víctima de 23 años en noviembre de 2016.
 

La década​


16 de Septiembre de 2022 - 09:42
OPINIÓN

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Por Hernán Rausch (*)
El 12 de septiembre se cumplieron diez años de aquella tapa de la revista ANÁLISIS que paralizó la ciudad. El título era El cura abusador. Nadie sabía quién era, ni donde se habían llevado a cabo esos abusos.
Ese rótulo con letras rojas, revolucionó y espantó a toda una comunidad, pero sobre todo a las autoridades de una institución local marcada por la reverencia, su reputación y el respeto.
La noticia desestabilizó e impactó directamente sobre la cabeza de la Arquidiócesis. Un escándalo en el corazón de la Diócesis, en la casa de formación de sacerdotes: Seminario. Se contó que los abusos sucedieron en el sector más vulnerable, sobre las almas que se encontraban internadas como pupilos, en el Seminario menor. En el lugar de nacientes vocaciones que fueron violentadas por quienes tenían el deber de salvaguardar la espiritual y los cuerpos. En lugar de eso, astutamente manipularon mentes inocentes y pactaron el silencio. Investigaron internamente y cerraron el caso lo más pronto que se pudo. Dejaron atrás los hechos perversos, abuso y corrupción de menores, sin dar avisar fuera de la órbita de la Iglesia. La opción fue callar y esconder la verdad.
Después de trasformar al miedo en valor, las víctimas sobrevivientes decidieron no tolerar más la manipulación y la mentira. Revelaron lo acontecido en el Seminario menor, expusieron y afrontaron la dura y dolorosa verdad que, por tantos años, habían silenciado. Habían cargado sobre las espaldas la responsabilidad de posibles escándalos si los abusos se develaban. Quisieron hacerlos sentir culpables de provocar divisiones familiares, críticas a la Iglesia y pérdidas de fieles en las parroquias. Así como los abusos, estos pensamientos fueron llevados adelante por los mismos que habían gestados y ocultado tales acaecimientos inmundos.
Transitaron diez años. La Justicia penal, a pesar de algunos escollos, estuvo a la altura de los hechos. Tomaron la denuncia expuesta mediáticamente y abrieron la investigación. Obtuvieron declaraciones y dieron un verdadero apoyo y posibilidad a aquellos hombres que hicieron carne nuevamente su historia, que se animaron a contar con coraje y valentía, que expusieron sus vivencias con vergüenza y temblor. Esos hombres que lograron quebrar el patrón de culpa y traición y llegar a una condena.

La Iglesia sigue tolerando la mentira, se opone a la revelación y sufre sus propios errores, generando consecuencias propias. Sigue resistiendo a la verdad, una realidad que sigue sucediendo lamentablemente.​

Estamos frente a una década abusada, desaprovechada eclesiásticamente. En parte la Iglesia está enferma porque consume su propio pecado, su propia mentira.
En estos tiempos de revelaciones, donde todo se conoce por redes sociales y medios digitales, la falta de transparencia y esclarecimiento en los juicios que lleva adelante la institución Católica, su posición es indignante, intolerable e irrespetuosa. Solo dilata, deja pasar el tiempo, incita a olvidar la verdad, dejando los juicios pendientes, haciendo agonizar la justicia terrenal de su naturaleza humana. De este modo rejuvenece y fortalece la falsedad y el escándalo, se da lugar y se le permite adueñarse al silencio cómplice y destructivo.
¿Cómo es posible que aún sigan vigentes los actores primarios de estos incidentes? Aquellos individuos partícipes directos de esos astutos manejos procesales, pleitos realizados de forma turbia. Y de esa manera, ocupar importantes cargos y prevalecer sobre las cabezas de las víctimas, sin importarles los resultados desbastadores de los abusos.
Décimo aniversario y sumando… Sumando indiferencia, incomprensión, falta de consideración por aquellos que se jugaron al develar cada detalle de esas horas y momentos lastimosos sufridos en lo corporal, emocional y afectivo, esperando tal vez algún gesto, la mano extendida para la oveja herida de su propio rebaño, sobre todo cuando al año siguiente se escuchaba proclamar el nombre del nuevo sumo pontífice, el argentino Jorge Mario Bergoglio, actual Papa Francisco.
Es lamentable decir que la ilusión sobre el Papa ha acarreado desilusión, al menos por estos años de su pontificado.
No quieren esclarecer los hechos, no hay voluntad, se niegan a ejecutar los juicios, es patético su actuar, causa angustia el uso y abuso de la fe en mucha gente, que no lo manifiesta, pero lo lleva adentro, tristeza.
Aquí y ahora no se quieren tomar medidas. Piden lío, pero al parecer no quieren abrazarlo, enfrentarlo, más temen que ese lio se les torne personal y los involucre directamente.
Acá se trata de servir, no impedir; de colaborar, no estorbar; de enfrentar, no huir.
Están tropezando y dañándose siempre con las mismas piedras, algunas de ellas es la negación y los silencios, hay una falta total de honestidad y empatía hasta entre ellos mismos, lo cual quedó en evidencia y vemos reflejados en los últimos acontecimientos desarrollados en la Basílica de Luján.
Autoridades Eclesiásticas, de una vez por todas es hora de aclarar y allanar caminos, se trata de sumar, no restar, menos dividir.
Deberes y colaboración nos piden siempre. ¡Basta! Es tiempo de sus deberes y sus obligaciones como jefes.
 

Muere sin justicia ni disculpas Emiliano Álvarez, una de las primeras víctimas en denunciar los abusos sexuales de un sacerdote​


Emiliano Álvarez Delgado, víctima de abusos en La Bañeza
Emiliano Álvarez Delgado, víctima de abusos en La Bañeza
C. J. Domínguez / ileon.com
27 de agosto de 2022 19:33h
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A los 55 años ha fallecido Emiliano Álvarez, víctima de abusos sexuales de un sacerdote en el Seminario de La Bañeza en 1978. Fue uno de los primeros pioneros en España en romper años de silencio y miedo para denunciar a viva voz la forma en la que la vida le fue destrozada.
“Muchísimas veces estuve con mi hermano en el baño temblando de frío y de miedo, y limpiándonos. Limpiándome yo el día que me tocaba a mí eso. Y el día que le tocaba a mi hermano limpiando a mi hermano”. Así resumía para la cadena CNN en español el infierno de los abusos sexuales a los que ambos fueron sometidos por un sacerdote católico en el Seminario de La Bañeza.
A los 55 años de edad, con una vida de castigo y dificultades atribuida en gran medida a aquella traumática infancia de abuso sexual indiscriminado, Emiliano Álvarez acaba de fallecer. Y con él se va uno de los más activos luchadores contra la impunidad de los religiosos que han protagonizado durante décadas este tipo de delitos contra menores de edad, hasta hace bien poco con todo el amparo de la iglesia católica y sin que ni siquiera se reconociera el inmenso daño causado.
Emiliano siempre señaló desde la pasada década en concreto a su abusador: el cura Ángel Sánchez Cao, durante la estancia de ambos en el Seminario de La Bañeza, en 1978, cuando Emiliano tenía apenas 10 años y sufrió incontables violaciones y otros actos sexuales.
El Obispado de Astorga acabó reconociendo los hechos y el daño, algo que ratificó tras cinco años de lucha el propio Vaticano en el año 2021, pero no llegó a recibir de manera oficial y formal disculpa alguna. En concreto, el Tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica condenó al sacerdote Sánchez Cao a no poder ejercer cargos que impliquen el contacto esporádico o habitual con menores de 18 años hasta que cumpla los 80, por abusos sexuales, de poder y conciencia, así como le revocó por el mismo periodo la facultad de oír “habitualmente” confesiones.

Las víctimas, entre ellas Emiliano, apenas recibieron un mensaje de Whatsapp como toda información de la decisión. Pero antes se había dado hasta la cruel circunstancia de que el sacerdote Ángel Sánchez Cao, llegó a denunciar al propio Álvarez a través de una querella criminal por calumnias e injurias cuando ya había sido apartado por considerar la diócesis de Astorga 'fundadas' las acusaciones en su contra.
Emiliano Álvarez sufrió en su vida numerosas secuelas, pero se atrevió a romper el silencio y señalar a los culpables de todo lo que él, y muchos alumnos más, sufrieron en un tiempo de total impunidad.
 
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TNInternacional

“Cuatro niños con el alma rota”: la cacería de película de un cura abusador y un relato conmovedor​

En marzo último, uno de los sacerdotes más conocidos de Costa Rica, Mauricio Víquez, fue condenado a 20 años de cárcel por violar a un niño. La foto del abrazo de cuatro hombres víctimas se hizo viral junto al mensaje de lucha por justicia y verdad.​

Stephane Bailly
Por Stephane Bailly
05 de junio 2022, 05:50hs

Anthony Venegas, Michael Rodríguez, Carlos Muñoz y Josué Alvarado se abrazan tras la condena a 20 años de cárcel contra el cura Mauricio Víquez. (Foto: Twitter/Anthony Venegas).

Anthony Venegas, Michael Rodríguez, Carlos Muñoz y Josué Alvarado se abrazan tras la condena a 20 años de cárcel contra el cura Mauricio Víquez. (Foto: Twitter/Anthony Venegas).​

Cuatro hombres se abrazan en una ronda fraterna, un círculo humano que rompe con las filas de sillas de plástico del tribunal de la localidad de Desamparados, en Costa Rica. Es el abrazo de cuatro sobrevivientes que sufrieron lo peor de parte de un mismo abusador, el excura Mauricio Víquez, y entre todos encontraron la fuerza para obtener justicia. Es la historia de valentía y resiliencia de Anthony, Carlos, Michael y Josué. De lucha, también, contra los prejuicios, la sociedad y hasta contra el tiempo y las fronteras.

El 30 de marzo último, día en que se tomó la foto, Víquez fue condenado a 20 años de cárcel por delitos sexuales cometidos contra Josué Alvarado. Tenía 11 años en 2003 cuando el entonces párroco de la iglesia San Juan Bautista, en la localidad de Patarrá de Desamparados, lo abusó después de ganarse su confianza cuando el chico fue a pedir ayuda para su humilde familia.​


Fueron muchos años de estar luchando por esta justicia. Eramos cuatro víctimas tratando de encontrarla desde hace años”, contó a TN Anthony Venegas, una de las cuatro personas que denunciaron a Víquez por abusos.

Cuatro denuncias en la Justicia y una sola que llegó a juicio​

Su denuncia, como las de otros dos denunciantes -Michael Rodríguez y Carlos Muñoz- estaba prescripta gracias al trabajo de encubrimiento que durante años hizo la iglesia de Costa Rica, según dijo Venegas a TN. Pero la lucha pública de estos tres hombres le dio ánimos a Josué para denunciar lo que sufrió. Su causa aún no había vencido y finalmente llevó a la detención de Víquez, que en el medio se había escondido en México.
Josué decidió salir del anonimato para el momento de la sentencia. Ante las cámaras dijo que con el fallo “sintió una liberación total”. “El fantasma que me acarreaba desde los 12 años desapareció y puedo darle vuelta a la página de mi libro”, afirmó.




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Anthony Venegas, Michael Rodríguez, Josué Alvarado y Carlos Muñoz durante el juicio contra Mauricio Víquez. (Foto y video: CRHoy).

La sentencia: “Víquez se aprovechó de su posición de poder”​

“La Fiscalía demostró que Víquez se aprovechó de su posición de poder, autoridad, relación de confianza con la víctima y de su condición de sacerdote para cometer las agresiones sexuales en perjuicio de la persona ofendida’', informó el Poder Judicial sobre la sentencia.
Todo pendía de este juicio específico, pero para nosotros era como una resolución de lo nuestro”, consideró Venegas, que sin embargo hizo apelación de su caso.
“Cuatro niños con el alma rota”: la cacería de película de un cura abusador y un relato conmovedor

“Cuando escuché la sentencia sentí alivio porque era algo que necesitaba oír después de tanto daño, tanta lucha, después de pasar por el escrutinio público, el juzgamiento de muchas personas. Tener esa resolución de parte de la Justicia significa que no estabamos mintiendo, sacaba un abusador de las calles y enviaba un mensaje a la sociedad”, sostuvo.

Mauricio Víquez, una figura “destacada” de la Iglesia costarricense​

El cura condenado no era cualquiera y el caso causó revuelo en Costa Rica, una pequeña nación de 5 millones de habitantes que, al igual que la Argentina, aún tiene al catolicismo como religión de Estado.
Víquez fue durante años vocero de la Iglesia costarricense por los asuntos de familia y para muchas personas era una figura muy respetada.
Era un sacerdote muy público, estábamos acostumbrados a verlo en los noticieros, en programas para dar la opinión de la curia sobre temas como el aborto, la fertilización in vitro, el matrimonio gay”, resumió Venegas.
“Cuatro niños con el alma rota”: la cacería de película de un cura abusador y un relato conmovedor

Una imagen aparentemente intachable, pero que era solo la punta reluciente del iceberg. “Lo que no se sabía era que era una persona que abusó de decenas de adolescentes”, zanjó Venegas.​

Si bien los casos judicializados fueron cuatro, y medios locales hablan de 9 denuncias eclesiásticas, Venegas sostuvo que son muchas más las víctimas. “Estoy casi seguro de que todos mis amigos lo fueron”, dijo a TN.​

Desde que hizo público su caso, lo contactaron “montones de víctimas de abuso, muchas de ellas de Víquez”, que le agradecieron “por hacer justicia por ellos también porque no se atrevían a denunciarlo”.

Un “niño con el alma rota”​

Venegas tenía 14 años y al igual que Carlos y Michael era monaguillo cuando comenzaron los abusos a los que Víquez llamaba “cariñitos”. En su caso duraron 3 años, hasta que la madre de un amigo le “inició el clic de víctima” y lo llevó a la curia metropolitana para dar la alerta.
En un posteo de Instagram sobre el fallo, Venegas habló de “cuatro niños con el alma rota que se hicieron hombres y decidieron alzar la voz, no aceptar más daño, luchar por justicia y crecer”.
El posteo de Anthony Venegas en Instagram tras la condena de Mauricio Víquez. (Foto: captura de Instagram).

El posteo de Anthony Venegas en Instagram tras la condena de Mauricio Víquez. (Foto: captura de Instagram).
En diálogo con TN, Venegas habló de la “culpa muy compleja” que sintió por los abusos. Víquez para él era “un amigo muy cercano, un guía espiritual y una figura a la que no ponía exponer porque le tenía miedo”. Además, su mamá trabajaba como cocinera en la curia, por lo que peligraba la de por sí complicada situación económica de su familia.
Me convertí en un adolescente depresivo, con intentos de suicidio, me afectó el avance en mi vida desde lo más profundo de mi alma, me destruyó mi espiritualidad”, explicó sobre las consecuencias personales del abuso.
“Cuatro niños con el alma rota”: la cacería de película de un cura abusador y un relato conmovedor

El hombre de 36 años hizo terapia y gracias a la ayuda de su familia logró avanzar. “Necesité muchos años para llamar lo que había vivido como un abuso sexual. Tuve que luchar mucho para estar sano. Es una pelea constante, es un proceso de toda la vida. Hay momentos buenos y otros no tanto, pero he logrado convertir algo tan oscuro en luz para mí”, dijo Venegas.

La Ley de “Derecho al tiempo”​

Después de ver cómo se caían sus denuncias por haber vencido el plazo legal de 10 años tras la mayoría de edad, Venegas y Michael Rodríguez no se quedaron de brazos cruzados. Impulsaron con la ayuda de de un diputado una Ley de Derecho al Tiempo, la cual fue aprobada en mayo de 2021. La medida amplió el plazo de prescripción de los delitos sexuales hasta 25 años después de que la víctima cumple la mayoría de edad.
“Eso fue parte de mi proceso de sanación”, dijo Venegas. “Exponer a Víquez fue un proceso muy difícil que revictimiza, te pasa factura. Pero me di cuenta de que lo hacía por mucha gente, me escribió gente que me agradeció y me dijo que los inspiraba a denunciar a sus abusadores. Eso es algo que me llena y me motiva a seguir adelante”.
Michael Rodríguez y Anthony Venegas se inspiraron de una ley chilena para lograr extender a 25 años tras la mayoría de edad el plazo para denunciar un abuso sexual. (Foto: captura de Twitter)

Michael Rodríguez y Anthony Venegas se inspiraron de una ley chilena para lograr extender a 25 años tras la mayoría de edad el plazo para denunciar un abuso sexual. (Foto: captura de Twitter)
Para Venegas, el plazo de 10 años era “un irrespeto”. “No hay un tiempo establecido para que una persona sane, es mucho lo que tiene que superar para poder denunciar. Yo digo que somos sobrevivientes más que víctimas, porque sobrevivimos a muchas cosas que una persona normal no vive”.
Venegas explicó que primero buscaron que se aprobara la imprescriptibilidad, pero que no se pudo por “unos tratados de DD.HH. a los que Costa Rica adhiere”. No obstante, consideró que la ampliación del plazo legal “es una herramienta que le brinda a muchas personas la oportunidad de denunciar”.
“Cuatro niños con el alma rota”: la cacería de película de un cura abusador y un relato conmovedor

Además, con el cambio legal, recibió el apoyo de la Fiscalía para apelar la prescripción de su denuncia. “Queremos buscar justicia por una denuncia propia”, sostuvo.

Una red de encubrimiento que iría hacia lo más alto de la Iglesia de Costa Rica​

Cuando Venegas denunció a Víquez en la curia, en 2003, lo atendió el vicario general José Rafael Quirós, actual arzobispo de San José y por ende la figura más prominente de la Iglesia católica costarricense.
Las movidas que siguieron la denuncia parecen salir del mismo manual que se vio en otros países como Estados Unidos, Alemania o Francia.
“Ahí empezó un proceso de encubrimiento. Lo sacaron de la parroquia, pero no hubo ningún proceso. Lo que recibimos fue pura manipulación”, afirmó Venegas.
José Rafael Quirós fue nombrado arzobispo por el papa Francisco en 2013. (Foto: Twitter/AFP).

José Rafael Quirós fue nombrado arzobispo por el papa Francisco en 2013. (Foto: Twitter/AFP).
Ahora hay tres denuncias civiles contra Quirós y la conferencia episcopal, entre ellas una de Venegas.
El miércoles pasado, se inició el juicio. Fue una instancia preliminar, a la que solo asisiteron los abogados de ambas partes. “La Iglesia católica no permitió que asista la prensa. Como decimos en Costa Rica, ‘el que nada debe, nada teme’. Por algo ellos no querían que se manejara públicamente”, afirmó.
Leé también: Condenaron a un cura y a un portero a 15 años de prisión por abusos en un jardín de San Pedro
Venegas también presentó una denuncia contra Quirós ante el Vaticano, y hace 3 años que espera una resolución. El sobreviviente afirmó: “Los altos mandos de la Iglesia que se encargaron de encubrir a Víquez y minimizar nuestras denuncias enfocaron sus fuerzas en defender al arzobispo a toda costa de una manera lamentable”.
“Cuatro niños con el alma rota”: la cacería de película de un cura abusador y un relato conmovedor

“Ese asunto se me pasó” y “no tenía experiencia” fueron algunas de las justificaciones del arzobispo cuando fue señalado por los exmonaguillos y la Policía desembarcó en la sede de la Iglesia católica de Costa Rica para buscar evidencias de casos de pederastia y abuso sexual.
Por el escándalo, el arzobispo de San José no pudo asistir al encuentro convocado por el papa Francisco en 2019 para tratar precisamente el tema de los abusos sexuales en la Iglesia católica.

La huida de Víquez a México​

Paradojicamente, Quirós fue quien firmó en 2019 la expulsión de Víquez del sacerdocio, cuando ya “estaba hundido”. Pero no sin antes darle el tiempo al cura de irse de Costa Rica.
“Cuando salió la denuncia de Josué, la Iglesia le avisó a Víquez, que huyó primero a Panamá y luego a México”, afirmó Venegas. La Justicia emitió una orden de detención internacional, pero durante meses no hubo noticias del cura.
La circular roja de Interpol por la búsqueda de Mauricio Víquez. (Foto: Interpol).

La circular roja de Interpol por la búsqueda de Mauricio Víquez. (Foto: Interpol).

“Se busca”: el viaje descabellado de Venegas y Rodríguez para encontrar a su abusador en México​

Lo que siguió parece de película y revela las agallas que tenían los sobrevivientes. Josué estaba por cumplir 28 años y en octubre la causa iba a caducar. Entonces, cuando faltaba apenas dos meses para ello, Venegas y Michael Rodríguez se fueron a México para buscar a Víquez con el apoyo de la organización mexicana FIND, especializada en la defensa de menores abusados.
Era una idea descabellada, México es un país gigantesco”, reconoció Venegas a TN. Pero también parecía ser su última chance. “La Iglesia lo expulsó y se lavó las manos, era la única oportunidad para sacarlo de las calles”, dijo.
“Cuatro niños con el alma rota”: la cacería de película de un cura abusador y un relato conmovedor

Con Rodríguez contaron su historia en una conferencia de víctimas de abuso, donde consiguieron llamar la atención de medios. Tocaron timbre en albergues de la iglesia católica y hasta pegaron afiches con la cara de Víquez por las calles.
Anthony Venegas participó de manera casi accidental de un foro sobre “Violencia sexual infantil y adolescente en el Senado de la Ciudad de México y consiguió llamar la atención de los medios locales.  (Foto: Instagram/@tovenegas).

Anthony Venegas participó de manera "casi accidental" de un foro sobre “Violencia sexual infantil y adolescente" en el Senado de la Ciudad de México y consiguió llamar la atención de los medios locales. (Foto: Instagram/@tovenegas).
“Estuvimos tratando de poner su cara para que la gente lo viera, se cuidara, lo identificara”, dijo Venegas.
Aunque parecía una locura, el fruto de la desesperación, sus esfuerzos surtieron efecto. Mientras Anthony y Michael buscaban a Víquez por el sur del país, la policía lo detuvo en el norte, cerca de Monterrey, gracias a tareas de inteligencia, aunque se habló también de una llamada anónima.
Venegas, al que seguía una cámara del canal Univisión, estaba en un avión a punto de despegar cuando se enteró de la detención del sacerdote, una noticia que estuvo esperando por casi 20 años.




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Anthony Venegas pegó carteles con la cara de Víquez por las calles mexicanas. (Foto: captura de video Univisión).
Ya no le va a hacer daño a nadie”, celebró entre sollozos y con el pecho oprimido. Llamó a su familia para buscar consuelo, apenas podía hablar.
Para burlar a las autoridades, Víquez había bajado mucho de peso y se había dejado crecer la barba. Se lo veía muy distinto al afiche de búsqueda.
Según informó la Policía Judicial, determinaron su ubicación a partir de una red social en la que el cura se identificó con su segundo nombre, Antonio, para ofrecer servicios de asesoría en la elaboración de tesis.
Víquez fue detenido el 18 de agosto en el norte de México. (Foto: Twitter/FGR).

Víquez fue detenido el 18 de agosto en el norte de México. (Foto: Twitter/FGR).
“No digo que fue por nosotros, pero me gusta pensar que nuestra presencia ayudó a que se lo atrape de una vez “, declaró Venegas acerca de la captura.
Sin embargo, la pandemia de coronavirus que estalló demoró casi un año y medio la extradición del cura y el posterior juicio en el que fue condenado.

La condena de Víquez, un antes y un después​

¿Cambió algo en Costa Rica tras la denuncia? Para Venegas, la respuesta es sí. Y el resultado lo ve en sus cuentas de Twitter e Instagram.
“Nuestras denuncias y el resultado del juicio marcan un antes y un después de cómo se ve y cómo se trasmite a nivel social. Por ejemplo, en las redes sociales la gente nos señalaba, decía que queríamos dinero... me escribían amenazándome, diciéndome que era el demonio. Ahora la mayoría nos apoyan”, contó.
“Cuatro niños con el alma rota”: la cacería de película de un cura abusador y un relato conmovedor

El movimiento Me too ya había iniciado una revolución mundial que los exmonaguillos potenciaron en Costa Rica. “Al denunciar una figura preeminente y pública, se dio un movimiento en el que se denunció también a expresidentes como Óscar Arias, a profesores universitarios…”, dijo.
Venegas está convencido de que entre su primera denuncia como adolescente y la segunda como adulto, la gran diferencia es que la hizo de manera pública y a cara descubierta. “Poner la cara fue lo que cambió todo”, afirmó.
Si bien “es muy pronto para pensar que se logró un cambio total”, Venegas cree que con sus amigos, a los que “tristemente conoció dentro de ese ambiente de abuso”, lograron “abrir un camino”.
“Cuatro niños con el alma rota”: la cacería de película de un cura abusador y un relato conmovedor

Mientras se prepara para dar su testimonio en el juicio contra el arzobispo de San José, Venegas afirma que “su lucha no es contra la Iglesia ni los católicos, sino contra los jerarcas que siguen permitiendo que la Iglesia priorice la imagen sobre la ayuda a miles de niños abusados y destruidos por sus sacerdotes”.
“El cambio se generará cuando la Iglesia se haga responsable y deje de pensar en su fama para ocuparse de limpiarse desde dentro de toda la podredumbre”, continuó.

Los consejos de Venegas para víctimas de abuso sexual​

“Como sobreviviente de abuso, recomiendo a las víctimas que denuncien, que no carguen con la responsabilidad de los actos de otros, que busquen sanación y sigan adelante”, declaró Venegas a TN.
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También llamó a acercarse a organismos de ayuda. En base a su propia experiencia, el joven costarricense afirmó que “luchar acompañado es diferente a luchar solo”. En su caso, “encontrar a personas que vivieron lo mismo, las mismas consecuencias y lograr la justicia juntos fue algo muy importante”.
Sin parar, el exmonaguillo sigue adelante con su búsqueda de justicia. Por el adulto que es ahora, por el adolescente que alguna vez fue, y por todos los que no pudieron, no se animaron a hablar o quizás no sobrevivieron.