La Gracia no es un objeto de ostentación
1Co_1:31 para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.
2Co_10:17 Mas el que se gloría, gloríese en el Señor;
Cristo es la Gracia Personificada. (2Tim.1:9)
Rom_6:1 ¿Qué, pues, diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para que la gracia abunde?
Esto, precisamente es lo que Jorge Enrique no entiende ni practica.
Si se considera de Cristo, ¿Qué tiene que hacer dentro de un sistema religioso cuyo dios es el diablo?
Es como si un diablo que cree en Cristo dejase de ser diablo desde el infierno, o fuera de él.
Seguirá siendo diablo, leemos:
Stg_2:19 Tú crees que Dios es uno; bien haces.
También los demonios creen, y tiemblan.
En contraste, quien oye el evangelio de la Gracia de Dios, y cree, abandona inmediatamente el lugar de idolatría donde se halla encadenado, Cristo rompe esas cadenas, y sale libre, fuera del campamento contaminado, llevando el vituperio de Cristo, dando testimonio con su conducta, que hay poder transformador en el evangelio, como está escrito:
Rom_1:16 Porque no me avergüenzo del evangelio,
porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.
Permanecer encadenado y decir que se cree en Cristo, es la misma situación de los demonios, ellos también creen y tiemblan.