@Jorge Enrique; deja de defender al papa, y a cualquier otro hombre. Ya diste a conocer tus razones, y no hace falta que insistas. No sabes qué hay en el corazón del papa, y cuáles fueron sus verdaderas intenciones. Y será juzgado, como todos, por Dios y cuando llegue el momento. Defiende a Cristo, defiende el Evangelio en la medida que lo conoces, y olvídate de salir en defensa de hombre ninguno, en cuestiones espirituales. Solo es una invitación a la reflexión. El Señor nos dé debida luz y entendimiento.