Muchos con relativismo no llegan a Invocar el Nombre de Jesús aduciendo que significa sólo autoridad
Sinceramente, apreciado Julio Parada, siempre me infunde desconfianza los términos como:
"Yo declaro, Yo decreto"
Considero, en el uso de tales pronombres personales, la existencia de una dosis exagerada de soberbia de la criatura, respecto al trato de respeto y sumisión que debe darse al Creador.
No hay humildad en el uso de tales pronombres, sino la presuntuosa intención de acomodar al Dios omnipotente dentro de los parámetros de nuestra mente, y tal intención es altivez de espíritu, la criatura no tiene autoridad para declarar nada, como si fuese mayor que Dios.
Todo tiene que hacerse de acuerdo a la voluntad del Padre en el Hijo.
Jua 14:13 Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.
Jua 14:14 Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.
Por otro lado, el Nombre Jesús, va asociado al título "Cristo", como por ejemplo, Gabriel Boric, cuyo título es Presidente, de su nación.
Y es debido a su frecuencia, sea "Cristo Jesús" o "Jesucristo" que hemos llegado a pensar en Cristo como un segundo nombre de Jesús.
Como bien sabemos, "Cristo" significa "ungido", recordando la primera intervención registrada en la Sinagoga de Nazaret, luego de su batalla con el diablo, en el desierto. Leemos:
Luc 4:18 El Espíritu del Señor está sobre mí,
Por cuanto me ha "
ungido" para dar buenas nuevas a los pobres;
Y Jesús, después de la lectura de ese texto, sencillamente dijo a la congregación:
Luc 4:21 "Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros".
El título de Mesías, conlleva otras responsabilidades, como el buen Pastor, como el Rey, como el Siervo Sufriente, como el Cordero, que se predice en el libro de Isaías.
Todas estas glorias de expectativas Mesiánicas, establecidas en el AT convergen y se cumplen en una sola Persona de una manera dramática.
En Jesús se cumple la figura de el "León de la tribu de Judá", pero también el es "El Cordero de Dios", que fue inmolado desde antes de la fundación del mundo.
Pero hay un título sumamente importante, que vemos en el NT, y es el título de "Kurios".
Esta fue la primera confesión de Fe de la Iglesia primitiva, "Jesús es el Señor".
Una confesión que ponía a prueba la fe en Cristo Jesús.
Pues tal confesión representaba la muerte en los tiempos cuando quien reclamaba tal título era el Emperador Romano, debido al culto que se le daba no solo en Roma sino en todas las naciones subyugadas por el poder imperial, incluida la nación de Israel.
Todo ciudadano romano tenía que recitar la expresión "César es el Señor", como confesión de lealtad al emperador.
Esto representaba un problema para la Iglesia primitiva, pues el evangelio manda someterse a las autoridades civiles por cuanto por Dios han sido establecidas.
Además, hay que orar por los que estén en eminencia, sea rey o líder de un país o nación, pagar los impuesto, y obedecer las leyes.
Pero lo único que no podían hacer era atribuir al César, el honor y la majestad implícita en el título Kurios.
Ahora, el título "Señor" no siempre se utiliza de una manera majestuosa, pues se halla el uso normal y educado, para dirigirse a cualquier persona como "señor", cuando no conocemos su nombre.
En el NT ese título se le da a una persona rica que tenía sirvientes que trabajaban para él, y sirviente o esclavo fue llamado un "Doulos".
Este "Doulos" es bastante usado por los apóstoles en el NT, entendiendo que Cristo nos ha comprado a precio de sangre y le pertenecemos como "doulos".
Pero Kurios posee un uso mayor, para Cristo, este uso está relacionado con su Soberanía por sobre todas las cosas.
Este uso solo es conocido por Cristo en los que son suyos, porque muchos usan el nombre "Señor" sin ser de Cristo, leemos:
Mat 7:22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?
De manera que una persona bien puede abrir su boca y llamarlo "Señor" y aún así, no estar redimido, así se hayan hecho milagros y sacados demonios en su nombre.
Cuando los apóstoles afirman:
Hch 4:12 Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.
Están uniendo el nombre de Jesús a su título como Soberano Señor, leemos:
Hch 4:24 Y ellos, habiéndolo oído, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay
De manera que cuando leemos que nadie puede llamar a Jesús Señor, si no es por el Espíritu Santo, se está considerando al Señor como el Creador, como el Todopoderoso, para la Gloria del Padre.
¿En dónde quedan entonces los foristas que presentan un "cristo" devaluado buscando entronizar al Padre, sin entender que quien no honra al Hijo, tampoco honra al Padre?