“Yo les ruego que piensen en ustedes mismos, y que velen por el rebaño sobre el cual el Espíritu Santo los ha puesto como obispos, para que cuiden de la iglesia del Señor, que el ganó por su propia sangre.” (Hechos 20:28 RVC)
Tú crees que esa sangre es literal, pero la Biblia usa muchas veces el término “sangre” ( como cualquier otra obra literaria, e incluso como lo usamos tú y yo hasta nuestros días) para indicar muerte violenta, sacrificio, martirio. Podemos revisarlo versículo a versículo a través de una concordancia si gustas.
De hecho, la muerte de Jesús en la cruz fue con muy poco derramamiento de sangre literal.
Los crucificados no morían desangrados de manos y pies, sino por deshidratación, inanición e incluso asfixia (por el problema para respirar que representaba tal posición). A su vez, la coronación con espinas y la flagelación no ponían a nadie en riesgo de morir desangrado
Hay mucho más derramamiento de sangre en un degollamiento. Esa es la forma de sangrar a un animal o a una persona, por antonomasia. Los corderos eran degollados.
Si el derramamiento de sangre literal hubiera sido importante para la salvación, Dios hubiera elegido para su Hijo una muerte degollado, como los corderos que lo prefiguraban.
Esto es una evidencia más de que cuando la Biblia se refiere a la sangre preciosa de Jesús, se refiere a su muerte, a su sacrificio, no a su sangre literal.