Tal connotación es muy usada en el mundillo denominacional.
Nosotros no tenemos tal costumbre ni las Iglesias de Dios.
A propósito, sobre la confesión de pecados por medio de los muebles de madera, llamados "confesionarios", no sé si vuestra tradición ha sido frenada con el surgimiento de una aplicación, donde cómodamente, desde el sillón o desde cualquier lugar donde el pecador católico se encuentre, puede obtener perdón de pecados online.
De modo que el mueble de madera tiende a desaparecer.
APLICACIÓN "CONFESOR GO"
La app católica para confesar pecados desde cualquier sitio del mundo.
"La aplicación 'Confesor GO' está basada en la geolocalización y permite a los católicos que la descarguen, localizar a aquellos sacerdotes más cercanos que estén disponibles para perdonar los pecados."
El sacerdote podrá estar en un confesionario, en el interior de un templo o en parajes públicos, es más, puede ejercer esta función absolutoria, al mismo tiempo que esté ejecutando "otra función", de las que ya sabemos practican, pues el pecador no se dará cuenta de esto, a no ser que sea una videollamada.
"Cuando un sacerdote estime que existe causa justa para ponerse a confesar en espacios públicos abiertos, Confesor GO también estará informando de su ubicación exacta",
Nosotros, la genuina Iglesia de Cristo, en relación con los pecados, tenemos las siguientes herramientas escriturales:
1Ti_5:24 Los pecados de algunos hombres se hacen patentes antes que ellos vengan a juicio, más a otros se les descubren después.
El Juicio lo hace es Dios, en casos de disciplina, como la que vemos en Corinto, cuando un creyente, llevado por la concupiscencia, había accedido carnalmente a la amante de su papá, leemos:
1Co_5:1 De cierto se oye que hay entre vosotros fornicación, y tal fornicación cuál ni aun se nombra entre los gentiles; tanto que alguno tiene la mujer de su padre.
La asamblea se había demorado mucho en aplicar la disciplina de rigor, el caso fue llevado al conocimiento del apóstol, quien, en unión con Cristo, se expresó así:
1Co 5:3 Ciertamente yo, como ausente en cuerpo, pero presente en espíritu, ya como presente he juzgado al que tal cosa ha hecho.
1Co 5:4 En el nombre de nuestro Señor Jesucristo, reunidos vosotros y mi espíritu, con el poder de nuestro Señor Jesucristo,
1Co 5:5 él tal sea entregado a Satanás para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús.
A Maciel ustedes no lo pusieron en disciplina, más bien lo protegieron, y así ocurre en la mayoría de los casos denunciados públicamente.
Aunque ambos son pecados horribles, hay un menor grado de castigo en el caso de Corinto, por cuanto la mujer era una persona adulta, no un niño vulnerable, como ocurre en vuestros casos de pedofilia.
Si Maciel usó el confesionario de ustedes, al igual que los millones de pedófilos, a través de los siglos de la historia oculta de vuestro catolicismo, no lo sabemos, pero sí la fecha que registra su aparición:
"Su primera aparición fue en el Concilio de Trento, convocado por el papa Pablo III y que transcurrió entre los años 1542 y 1562. Se le colocó una rejilla para evitar que el confesor y los penitentes intimaran demasiado. En el Concilio Vaticano II se renovó el mueble."
Ahora, con la aparición de app "Confesor Go", la pedofilia de vuestra institución, goza de una protección más efectiva, por cuanto el sacerdote que ya lleve un número elevado de casos cometidos en su contra, pero que aún, no han salido a la luz pública, esto quiere decir, que lleva la cuenta, pero que todavía no ha sido acusado. Con el uso de la app, puede confesarse con algún jerarca de importancia, quien puede ponerlo a salvo en un lugar distante, antes que estalle la denuncia pública.
¿Tú, forista VALENCIA, usas esa aplicación??