"Estimado Ernesto, no puedo dejar ahora de comentar sobre tu avatar, te describe a la perfección y disipa mis dudas, ¿te acuerdas sobre las preguntas que te hice sobre el Papa y sobre la hostia?, allí tenía sospechas, con esto tu confirmas mi percepción, la que me hace tenerle más lástima aún al pobre Billi, quién al visitar las páginas amarillas anti adventistas, declaró que él esperaba encontrar allí jesuitas, ¿Cómo los iba a encontrar, si todos estaban camuflados? , Allí tienes un trabajo Ernesto, en esas páginas estabas tú.
Ahora te comento que el obelisco que usas como avatar, no lo elegiste al azar, es parte de tu religión y de tu sistema falso de adoración. Y por algo salió a la luz ayer sábado.
Es por eso que en cada tema que uno escribe, encontrarás la forma de desvirtuarlo y si te equivocas lanzarás cortinas de humo. ¿Te acuerdas cuando escribiste: “Mi Biblia dice que…” y en tu disculpa dijiste: “Me equivoqué de arcángel?
He aquí algunas referencias sobre tu avatar.(El obelisco) “Los papas "cristianizaron" los obeliscos, la Iglesia Católica Romana se volvió loca con los obeliscos. Virtualmente comenzaron a despojar a Egipto de su abundante reserva, embarcándolos a Roma, y levantándolos en todas partes. El Papa compró el obelisco egipcio más famoso de todos los tiempos, La Aguja de Cleopatra. Cuando lo hizo traer a Roma, diseñó la plaza de San Pedro de modo que ubicara el obelisco en el medio del Camino de 8 Pasos Hacia la Iluminación, a la derecha de la Basílica de San Pedro. De ese modo, el Papa está en posición perfecta para "dar la cara al obelisco'' diariamente, tantas veces al día como quiera. “