El problema es que apartan de la fé en Cristo a muchísimos que aún no tienen discernimiento de espíritu para huir de los falsos evangelios que les predican los lobos disfrazados de cordero, que ni pasan ni dejan pasar a los incautos que les siguen.-Las doctrinas por sí mismas son inocuas aun siendo falsas, de no hacerles caso.
Bendiciones