¿AGUA BENDITA?
Sobre el agua bendita leí en la revista católica holandesa titulada "Katholieke Stemmen" de noviembre/diciembre un artículo titulado: "El agua bendita una poderosa ayuda para las almas del purgatorio".
Allí se podía leer:
"El agua bendita ahuyenta los espíritus malos. De ahí el refrán: Huye de esto o de lo otro ... como el diablo del agua bendita. Con miles de ejemplos podríamos probar como el diablo teme el agua bendita".
Nuestra pregunta: 1. No necesitamos miles de pruebas. Nos gustaría que se nos mostrase una prueba claramente, pero esa no se nos da. 2. Si los sacerdotes afirman que su agua bendita tiene un tal efecto que los demonios salen corriendo como liebres tan pronto como huelen el agua bendita, ¿por qué no bendicen entonces los ríos, mares y océanos? Así el demonio saldría pitando de rebote de esta tierra llena con tanta agua bendita de tal manera que aquí de nuevo sería un paraíso.
El artículo continúa:
"Sí, una gota de agua bendita a veces tiene más efecto que una larga oración, ya que por desgracia nuestra oración es a menudo insípida y distraída".
Nuestra pregunta: Entonces si procuramos tener en casa algunos cubos de agua, ¿es eso mejor que orar mucho? ¿Tiene la oración tan poco valor?
Seguimos citando:
"Cada día nuestra alma está en peligro... necesitamos pues gracia y ayuda. Uno de los medios más fáciles y poderosos para rechazar los ataques del enemigo es el uso devoto del agua bendita".
Nuestra pregunta: ¿sobresalen los católicos romanos sobre los otros holandeses en una correcta conducta, en honradez, en socorro y amor, porque disponen del agua bendita?
¿Suspiros de las almas?
"Por eso las almas benditas del purgatorio suspiran tanto por el agua bendita, y si pudiésemos ver como sufren, si pudiésemos escuchar su constante suspiro: ¡Dadnos una gota de agua bendita!, sin duda que al menos por la mañana y por la noche y a veces durante el día usaríamos el agua bendita para esas almas del purgatorio".
Nuestro asombro: ¡Qué despiadados son sin embargo los sacerdotes romano-católicos! Ellos pueden en un santiamén fabricar un cubo lleno de agua, y con una gota de ella mitigar a alguien la pena del purgatorio o incluso quitársela totalmente. ¡Maravilloso, qué mago! Pueden más que Abraham y Lázaro. El hombre rico "dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua; porque estoy atormentado en esta llama. Pero Abraham le dijo: (...) "una gran sima está puesta entre vosotros y nosotros, de manera que los que quisieran pasar de aquí a vosotros, no pueden" (Lucas 16:19-31).
El artículo no menciona a ningún autor, pero sí el Imprimatur = la aprobación eclesiástica de E. Touze, vicario general.
Comentario
¡Qué lejos está esta tontería de lo que dice la Biblia y enseña la Reforma! Debemos constatar eso para nuestra decepción. Aunque, si es bueno que nos alegremos por las muchas innovadoras voces dentro de la Iglesia Católica, no podemos cerrar los ojos ante esa manera de pensar.
Si el agua bendita es tan importante, ¿por qué Jesús no nos ha enseñado nunca nada sobre eso? ¿Por qué Él Mismo nunca ha hecho uso de ella? Nunca se le vio andar por ahí con un hisopo. Y Él ha tenido que vérselas con el diablo. Recuerda las tentaciones en el desierto. Él no ahuyenta al diablo tirándole un chorro de agua bendita, sino citando la Escritura. Sigamos Su ejemplo y basémonos en la Escritura y no en ninguna otra cosa.
¿Qué diferencia hay entre este confiar en el agua bendita y el llevar amuletos por los creyentes de las religiones paganas?
El Señor Jesús nos dice: Confiad en Mí, y Yo os guardaré de todo mal, también de los ataques del mal.
En otro tiempo también yo, como católico, creía en ese poder del agua bendita. Oh, uno crece con un punto de vista determinado que la tradición te hace creer. Eso también tenía que ser una advertencia para los cristianos evangélicos: sin darse cuenta se pueden adoptar tradiciones que no tienen nada que ver con la Biblia e incluso pueden estar en contradicción con ella. Todo lo tenemos que someter siempre a la única norma que Dios nos ha dado: la Biblia. ¡Sola Scriptura!
A pesar de toda esta crítica, quiero terminar este comentario de una manera positiva indicando algunos textos en los que la Palabra de Dios habla del agua de la vida.
Jesús le dijo a la mujer samaritana: "El que bebiere del agua que Yo daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que Yo le daré será en él una fuente que salte para vida eterna" (Jn. 4:14).
Un creyente, pues, no tiene necesidad de ir a cada paso a un sacerdote para pedirle el agua bendita porque el agua de la vida, que ha recibido por la fe, no se agota jamás. Uno tiene en sí mismo la fuente de ese agua tan pronto como uno ha llegado a la fe en Jesús.
"El que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente" (Ap. 22:17). "Gratuitamente" y "el que quiera".
Según el Señor Jesús no dependemos en manera alguna de los sacerdotes, sino de Él, el Hijo de Dios. Él dijo: "El que cree en Mí, tiene vida eterna" (Jn. 6:47).
H.J.Hegger
http://www.epos.nl/ecr/
Sobre el agua bendita leí en la revista católica holandesa titulada "Katholieke Stemmen" de noviembre/diciembre un artículo titulado: "El agua bendita una poderosa ayuda para las almas del purgatorio".
Allí se podía leer:
"El agua bendita ahuyenta los espíritus malos. De ahí el refrán: Huye de esto o de lo otro ... como el diablo del agua bendita. Con miles de ejemplos podríamos probar como el diablo teme el agua bendita".
Nuestra pregunta: 1. No necesitamos miles de pruebas. Nos gustaría que se nos mostrase una prueba claramente, pero esa no se nos da. 2. Si los sacerdotes afirman que su agua bendita tiene un tal efecto que los demonios salen corriendo como liebres tan pronto como huelen el agua bendita, ¿por qué no bendicen entonces los ríos, mares y océanos? Así el demonio saldría pitando de rebote de esta tierra llena con tanta agua bendita de tal manera que aquí de nuevo sería un paraíso.
El artículo continúa:
"Sí, una gota de agua bendita a veces tiene más efecto que una larga oración, ya que por desgracia nuestra oración es a menudo insípida y distraída".
Nuestra pregunta: Entonces si procuramos tener en casa algunos cubos de agua, ¿es eso mejor que orar mucho? ¿Tiene la oración tan poco valor?
Seguimos citando:
"Cada día nuestra alma está en peligro... necesitamos pues gracia y ayuda. Uno de los medios más fáciles y poderosos para rechazar los ataques del enemigo es el uso devoto del agua bendita".
Nuestra pregunta: ¿sobresalen los católicos romanos sobre los otros holandeses en una correcta conducta, en honradez, en socorro y amor, porque disponen del agua bendita?
¿Suspiros de las almas?
"Por eso las almas benditas del purgatorio suspiran tanto por el agua bendita, y si pudiésemos ver como sufren, si pudiésemos escuchar su constante suspiro: ¡Dadnos una gota de agua bendita!, sin duda que al menos por la mañana y por la noche y a veces durante el día usaríamos el agua bendita para esas almas del purgatorio".
Nuestro asombro: ¡Qué despiadados son sin embargo los sacerdotes romano-católicos! Ellos pueden en un santiamén fabricar un cubo lleno de agua, y con una gota de ella mitigar a alguien la pena del purgatorio o incluso quitársela totalmente. ¡Maravilloso, qué mago! Pueden más que Abraham y Lázaro. El hombre rico "dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua; porque estoy atormentado en esta llama. Pero Abraham le dijo: (...) "una gran sima está puesta entre vosotros y nosotros, de manera que los que quisieran pasar de aquí a vosotros, no pueden" (Lucas 16:19-31).
El artículo no menciona a ningún autor, pero sí el Imprimatur = la aprobación eclesiástica de E. Touze, vicario general.
Comentario
¡Qué lejos está esta tontería de lo que dice la Biblia y enseña la Reforma! Debemos constatar eso para nuestra decepción. Aunque, si es bueno que nos alegremos por las muchas innovadoras voces dentro de la Iglesia Católica, no podemos cerrar los ojos ante esa manera de pensar.
Si el agua bendita es tan importante, ¿por qué Jesús no nos ha enseñado nunca nada sobre eso? ¿Por qué Él Mismo nunca ha hecho uso de ella? Nunca se le vio andar por ahí con un hisopo. Y Él ha tenido que vérselas con el diablo. Recuerda las tentaciones en el desierto. Él no ahuyenta al diablo tirándole un chorro de agua bendita, sino citando la Escritura. Sigamos Su ejemplo y basémonos en la Escritura y no en ninguna otra cosa.
¿Qué diferencia hay entre este confiar en el agua bendita y el llevar amuletos por los creyentes de las religiones paganas?
El Señor Jesús nos dice: Confiad en Mí, y Yo os guardaré de todo mal, también de los ataques del mal.
En otro tiempo también yo, como católico, creía en ese poder del agua bendita. Oh, uno crece con un punto de vista determinado que la tradición te hace creer. Eso también tenía que ser una advertencia para los cristianos evangélicos: sin darse cuenta se pueden adoptar tradiciones que no tienen nada que ver con la Biblia e incluso pueden estar en contradicción con ella. Todo lo tenemos que someter siempre a la única norma que Dios nos ha dado: la Biblia. ¡Sola Scriptura!
A pesar de toda esta crítica, quiero terminar este comentario de una manera positiva indicando algunos textos en los que la Palabra de Dios habla del agua de la vida.
Jesús le dijo a la mujer samaritana: "El que bebiere del agua que Yo daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que Yo le daré será en él una fuente que salte para vida eterna" (Jn. 4:14).
Un creyente, pues, no tiene necesidad de ir a cada paso a un sacerdote para pedirle el agua bendita porque el agua de la vida, que ha recibido por la fe, no se agota jamás. Uno tiene en sí mismo la fuente de ese agua tan pronto como uno ha llegado a la fe en Jesús.
"El que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente" (Ap. 22:17). "Gratuitamente" y "el que quiera".
Según el Señor Jesús no dependemos en manera alguna de los sacerdotes, sino de Él, el Hijo de Dios. Él dijo: "El que cree en Mí, tiene vida eterna" (Jn. 6:47).
H.J.Hegger
http://www.epos.nl/ecr/