Quizás en esta era de la Gracia de Dios, el poder de la Justicia ante la Santidad de Dios, se haya neutralizado por el amor de Dios a su Hijo, al contemplarle con las huellas de un Cordero como inmolado en el mismo cielo:
"YO PAGUÉ POR ELLOS"
"ELLOS SON EL FRUTO DE LA AFLICCIÓN DE MI ALMA"
Pero bajo la ley no era así:
Lev 10:3 Entonces dijo Moisés a Aarón: Esto es lo que habló Jehová, diciendo: En los que a mí se acercan me santificaré, y en presencia de todo el pueblo seré glorificado. Y Aarón calló.
La ira de Dios se había encendido de manera instantánea contra los hijos de Aarón por haber osado ofrecer fuego extraño que Dios jamás había ordenado, y los mató a los dos con fuego de Dios.
La ceremonia donde Dios consagra a Aarón y sus hijos al sacerdocio esta viva en la memoria del pueblo, ¿Cómo entonces le mata sus dos hijos?
Uno puede visualizar a Aarón viendo a sus dos hijos muertos y a Moisés recordándole en cuanto a la responsabilidad sacerdotal de hacer las cosas como Dios manda y no como nosotros quisiéramos hacerlo.
"¿Cómo es posible que Dios me mate mis hijos por una pequeña transgresión?"
"¿Toda mi vida le he servido al Señor y este es el pago que me da?"
Si este mismo celo de Dios en el oficio sacerdotal se aplicara hoy en día, pienso que muchas asambleas serían diezmadas.
Ahora el asunto de la salvación está condensado por las mismas palabra del Señor así:
Mat_12:31 Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada.
Un genuino creyente está exento del pecado imperdonable por cuanto ha sido sellado con el Espíritu Santo.
Otro ejemplo del celo del Señor lo contemplamos cuando uno que no era de la tribu de Leví tocó el arca de Dios para que no cayera, leemos:
2Sa_6:6 Cuando llegaron a la era de Nacón, Uza extendió su mano al arca de Dios, y la sostuvo; porque los bueyes tropezaban.
2Sa_6:7 Y el furor de Jehová se encendió contra Uza, y lo hirió allí Dios por aquella temeridad, y cayó allí muerto junto al arca de Dios.
El Arca de Dios no podía ser tocada por manos humanas, pues tenía un par de huecos donde se le introducían varas con el fin de ser transportadas sin contacto humano.
Y solo podía ser transportada por la tribu de Leví.
En la era apostólica aquel que participase de los símbolos indignamente, era muerto, leemos:
1Co 11:30 Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos duermen.
La palabra "Santo" significa apartado para Dios, y esta es la razón por la cual, asociamos este término con rectitud y pureza moral en la persona que ha creído en Cristo.
A la pregunta de si la salvación puede perderse o no, esto depende de la vida que uno lleve, porque el celo de Dios sigue intacto; si decimos que somos de Cristo, apartados para Dios, pero nuestra vida no responde a este llamado, sino que vivimos una doble vida, nos reservamos espacios personales y privados, para nuestra auto-satisfacción personal, esto es fuego extraño.
Dios quiera que no nos llevemos una triste y eterna sorpresa cuando abandonemos este cuerpo que nos ha sido prestado para glorificar al Señor en sacrificio vivo, santo, agradable a él, y no para nuestro propio deleite y deseo carnal.