Re: 1844 LA DOCTRINA ANTICRISTIANA DEL ADVENTISMO
Estimado valdense. Saludfos cordiales.
Tú dices:
Respondo: No puedes negar lo evidente.
[FONT="]Desde su ascensión al cielo,[/FONT][FONT="] [FONT="]Cristo estuvo ofreciendo ante el Padre "su sangre en beneficio de los creyentes arrepentidos". Cristo estuvo aplicando sus méritos a todos los que se arrepentían con el objeto de perdonarles los pecados y librarlos de sus culpas. Era ésta una obra de perdonar y liberar a los pecadores. El perdón se producía y se produce por los méritos del sacrificio de Cristo y la liberación del pecado se producía y se produce por transferencia de los pecados del pecador a Cristo. Todo esto ocurre en el plano del individuo y de la práctica, pero no en el plano de Dios y de la legalidad. En este último plano hay todavía una obra que hacer, pues "aunque la sangre de Cristo habría de librar al pecador arrepentido de la condenación de la ley, no había de anular el pecado; éste queda registrado en el Santuario hasta la expiación final[/FONT]."
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[FONT="]Luego de los 2300 días de tarde y mañana; Cristo entró en el Lugar Santísimo para iniciar la segunda parte de su ministerio en favor de los pecadores, es decir, el acto de borrar los pecados de los registros celestiales; pero esto no implica que Cristo haya abandonado su obra de perdón y liberación de los pecadores. Por el contrario, así como en el día de la expiación el continuo sacrificio no cesaba, tampoco durante el juicio investigador cesa Cristo su obra de perdonar los pecados. Sólo que desde 1844 Cristo agregó al acto de perdonar los pecados el acto de borrarlos de los registros. Esta idea aparece claramente expresada en el siguiente párrafo:[/FONT][FONT="]
"Cuando el sumo sacerdote del servicio típico dejaba el Lugar Santo en el día de la expiación, entraba delante de Dios para presentar la sangre de la ofrenda por el pecado en favor de todo Israel, de quienes se arrepentían verdaderamente de sus pecados. Así Cristo solamente ha completado una parte de su obra como nuestro Intercesor, para comenzar otra porción de, su obra, y él todavía presenta su sangre delante del Padre en favor de los pecadores".
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[FONT="]El acto de borrar incluye necesariamente una obra de juicio (Apoc. 5, 14, 15), pues debe determinarse quién o qué será borrado y quién o qué no será borrado. Con esto ya estamos diciendo qué es lo que se borra: nombres del libro de la vida y pecados del libro de memorias.[/FONT][FONT="]
Los nombres que se borran del libro de la vida son los de aquellos que, habiendo primero aceptado a Cristo, luego pecaron y se apartaron de él negándolo como sacrificio expiatorio. En Éxodo 32:33 Dios le dice a Moisés: "[/FONT][FONT="]Al que pecare contra mí, a éste raeré yo de mi libro[/FONT][FONT="]". Y en Apocalipsis 3:5 se lee: "[/FONT][FONT="]El que venciere será vestido de vestiduras blancas y no borraré su nombre del libro de la vida[/FONT][FONT="]". Esto implica que el que no venciere será borrado del libro de la vida. En todo caso, para determinar quiénes han ganado la victoria por los méritos de la sangre de Cristo y quiénes no la han ganado, se necesita un proceso de juicio: éste es el juicio investigador. En este juicio Cristo borra nombres del libro de la vida y también pecados del libro de memorias.
Los pecados borrados del libro de memorias son aquellos de los cuales sus autores se arrepintieron y recibieron el perdón por los méritos del sacrificio expiatorio de Cristo. La Biblia tiene muchas referencias al hecho de que los pecados serán borrados: En Salmos 51:1 se lee: "[/FONT][FONT="]Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones[/FONT][FONT="]", y en el versículo 9 está la frase: "[/FONT][FONT="]borra todas mis maldades[/FONT][FONT="]". Nehemías ruega que Dios no cubra su iniquidad de los enemigos de su pueblo y agrega: "[/FONT][FONT="]ni su pecado sea borrado delante de t[/FONT][FONT="]i" (Neh. 4: 5). En Isaías 43: 25 Dios se presenta diciendo [/FONT][FONT="][/FONT][FONT="]"yo soy el que borro tus transgresiones[/FONT][FONT="][/FONT][FONT="]", y Pedro ruega a sus oyentes que se arrepientan "[/FONT][FONT="]para que sean borrados vuestros pecados[/FONT][FONT="]" (Hech. 3:19).
Según lo dicho hay una gran diferencia entre el acto de perdonar el pecado y el acto de borrar el pecado. El perdón es algo que puede ser conocido y experimentado por una fe viva en el Señor y elimina el pecado. de la vida del pecador. El acto de borrar el pecado es un proceso legal que elimina el pecado de su registro y que conduce a la eliminación final del pecado en sí.[/FONT][FONT="][/FONT]
Bendiciones.
Luego todo Israel será salvo.
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Estimado valdense. Saludfos cordiales.
Tú dices:
5.-Argumentar que esta purificacion y el juicio son la misma cosa
Respondo: No puedes negar lo evidente.
[FONT="]Desde su ascensión al cielo,[/FONT][FONT="] [FONT="]Cristo estuvo ofreciendo ante el Padre "su sangre en beneficio de los creyentes arrepentidos". Cristo estuvo aplicando sus méritos a todos los que se arrepentían con el objeto de perdonarles los pecados y librarlos de sus culpas. Era ésta una obra de perdonar y liberar a los pecadores. El perdón se producía y se produce por los méritos del sacrificio de Cristo y la liberación del pecado se producía y se produce por transferencia de los pecados del pecador a Cristo. Todo esto ocurre en el plano del individuo y de la práctica, pero no en el plano de Dios y de la legalidad. En este último plano hay todavía una obra que hacer, pues "aunque la sangre de Cristo habría de librar al pecador arrepentido de la condenación de la ley, no había de anular el pecado; éste queda registrado en el Santuario hasta la expiación final[/FONT]."
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[FONT="]Luego de los 2300 días de tarde y mañana; Cristo entró en el Lugar Santísimo para iniciar la segunda parte de su ministerio en favor de los pecadores, es decir, el acto de borrar los pecados de los registros celestiales; pero esto no implica que Cristo haya abandonado su obra de perdón y liberación de los pecadores. Por el contrario, así como en el día de la expiación el continuo sacrificio no cesaba, tampoco durante el juicio investigador cesa Cristo su obra de perdonar los pecados. Sólo que desde 1844 Cristo agregó al acto de perdonar los pecados el acto de borrarlos de los registros. Esta idea aparece claramente expresada en el siguiente párrafo:[/FONT][FONT="]
"Cuando el sumo sacerdote del servicio típico dejaba el Lugar Santo en el día de la expiación, entraba delante de Dios para presentar la sangre de la ofrenda por el pecado en favor de todo Israel, de quienes se arrepentían verdaderamente de sus pecados. Así Cristo solamente ha completado una parte de su obra como nuestro Intercesor, para comenzar otra porción de, su obra, y él todavía presenta su sangre delante del Padre en favor de los pecadores".
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[FONT="]El acto de borrar incluye necesariamente una obra de juicio (Apoc. 5, 14, 15), pues debe determinarse quién o qué será borrado y quién o qué no será borrado. Con esto ya estamos diciendo qué es lo que se borra: nombres del libro de la vida y pecados del libro de memorias.[/FONT][FONT="]
Los nombres que se borran del libro de la vida son los de aquellos que, habiendo primero aceptado a Cristo, luego pecaron y se apartaron de él negándolo como sacrificio expiatorio. En Éxodo 32:33 Dios le dice a Moisés: "[/FONT][FONT="]Al que pecare contra mí, a éste raeré yo de mi libro[/FONT][FONT="]". Y en Apocalipsis 3:5 se lee: "[/FONT][FONT="]El que venciere será vestido de vestiduras blancas y no borraré su nombre del libro de la vida[/FONT][FONT="]". Esto implica que el que no venciere será borrado del libro de la vida. En todo caso, para determinar quiénes han ganado la victoria por los méritos de la sangre de Cristo y quiénes no la han ganado, se necesita un proceso de juicio: éste es el juicio investigador. En este juicio Cristo borra nombres del libro de la vida y también pecados del libro de memorias.
Los pecados borrados del libro de memorias son aquellos de los cuales sus autores se arrepintieron y recibieron el perdón por los méritos del sacrificio expiatorio de Cristo. La Biblia tiene muchas referencias al hecho de que los pecados serán borrados: En Salmos 51:1 se lee: "[/FONT][FONT="]Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones[/FONT][FONT="]", y en el versículo 9 está la frase: "[/FONT][FONT="]borra todas mis maldades[/FONT][FONT="]". Nehemías ruega que Dios no cubra su iniquidad de los enemigos de su pueblo y agrega: "[/FONT][FONT="]ni su pecado sea borrado delante de t[/FONT][FONT="]i" (Neh. 4: 5). En Isaías 43: 25 Dios se presenta diciendo [/FONT][FONT="][/FONT][FONT="]"yo soy el que borro tus transgresiones[/FONT][FONT="][/FONT][FONT="]", y Pedro ruega a sus oyentes que se arrepientan "[/FONT][FONT="]para que sean borrados vuestros pecados[/FONT][FONT="]" (Hech. 3:19).
Según lo dicho hay una gran diferencia entre el acto de perdonar el pecado y el acto de borrar el pecado. El perdón es algo que puede ser conocido y experimentado por una fe viva en el Señor y elimina el pecado. de la vida del pecador. El acto de borrar el pecado es un proceso legal que elimina el pecado de su registro y que conduce a la eliminación final del pecado en sí.[/FONT][FONT="][/FONT]
Bendiciones.
Luego todo Israel será salvo.
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