Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Estimado ernesto gil. Saludos cordiales.

Tú dices:

El tema en discusión es:

Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Favor de no desviarse de dicho tema.

Gracias anticipadas.

Guillermo Miller predicó el mensaje del primer ángel, "mensaje de Dios", y por supuesto que no me estoy desviando del tema, es más, estoy proporcionando los antecedentes que freddy, Henry Langas y otros hermanos más, desconocen y estos antecedentes, nunca se les va a decir en su iglesia ni en sus estudios del abogado de la Biblia.

Bendiciones.

Luego todo Israel será salvo.
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

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.... el gran filósofo y hombre de ciencia, Sir Isaac Newton (1642-1727), cuya comprensión de los símbolos proféticos era notablemente clara para el tiempo en el cual vivió y escribió,....
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..Bueno....Ya sabe que:
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.........Isaac Newton había "estudiado" tan bien las profecías que añadió 1.260 años al año 800 y le dió = año 2060 que según él , era cuando empezaría el TIEMPO DEL FÍN.
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..Por otro lado, también sabe que Newton defendía que el Hijo no es consubstancial con el Padre.
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..Si a semejante "gran filósofo de comprensión notablemente clara" ustedes le hacen caso...NO SE A dónde VAN A LLEGAR.
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...(Al margen de esto, también sabe que, por ejemplo, Newton (contra toda evidencia científica) defendía que los meteoritos que caen en nuestro planeta eran emanaciones de la superficie de la Tierra que se elevaban, solidificaban y volvían cayendo...JA,JA,JA.)
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Si lo desean les puedo ofrecer más errores "científicos" que Newton defendió
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

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..Bueno....Ya sabe que:Isaac Newton había "estudiado" tan bien las profecías que añadió 1.260 años al año 800 y le dió = año 2060 que según él , era cuando empezaría el TIEMPO DEL FÍN...Por otro lado, también sabe que Newton defendía que el Hijo no es consubstancial con el Padre.Si a semejante "gran filósofo de comprensión notablemente clara" ustedes le hacen caso...NO SE A dónde VAN A LLEGAR....(Al margen de esto, también sabe que, por ejemplo, Newton (contra toda evidencia científica) defendía que los meteoritos que caen en nuestro planeta eran emanaciones de la superficie de la Tierra que se elevaban, solidificaban y volvían cayendo...JA,JA,JA.)....Si lo desean les puedo ofrecer más errores "científicos" que Newton defendió

Bueno, estimado Manuel, pero si seguimos el mismo "razonamiento" de los adventistas, todos esos "ERRORES" DE NEWTON, SIMPLEMENTE ERAN "SU VERDAD PRESENTE".....JA, JA, JA, JA, JA......

Bueno, "joelice", lo que tù dices sobre la tal "verdad presente", es una pura falsedad "desde arriba hasta abajo".....NUNCA "UNA MENTIRA PRESENTE", PUEDE CONVERTIRSE EN "VERDAD PRESENTE", COMO SI FUERA "POR ARTE DE MAGIA".....ESE ES OTRO DE LOS "MITOS adventistas"....
ES DECIR, QUE LA SECTA adventista, CON ESA FABULA DE LA SUPUESTA "VERDAD PRESENTE", LO QUE QUIERE ES OCULTAR UNA EQUIVOCACIÒN QUE TUVIERON....PORQUE SU ORGULLO NO LES DA PARA ACEPTAR, QUE PURA Y SIMPLEMENTE ESTUVIERON EQUIVOCADOS, PREDICANDO UNA FALSEDAD.....POR LO TANTO, "joelice", YA DEJEN DE REPETIR ESA "CANTALETA" AQUÌ, PORQUE YA NADIE SE LA CREE.....
SENCILLAMENTE, ESO ERA UNA "MENTIRA PRESENTE".........
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Estimado billi. Saludos cordiales.

Tú dices:

Bueno, estimado Manuel, pero si seguimos el mismo "razonamiento" de los adventistas, todos esos "ERRORES" DE NEWTON, SIMPLEMENTE ERAN "SU VERDAD PRESENTE".....JA, JA, JA, JA, JA......

Se ve que pasan rápidamente de Miller a Newton.

A ambos célebres hombres estudiosos de la Biblia, investigadores que han decubierto muchas certeras evidencias; y estas son halladas por los que aman el estudio e investigación de la Palbra de Dio. Así encontramos además de ellos a muchos otros como "Lacunza" a "Usher" y cientos de hombres que respondieron al llamado de Dios en su época.

Bendiciones.

Luego todo Israel será salvo.
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

billi.....Así encontramos además de ellos a muchos otros como "Lacunza" a "Usher" y cientos de hombres que respondieron al llamado de Dios en su época....

BUENO, "gabriel", ¿Y CUÀLES OTROS DE ESOS HOMBRES, TAMBIÈN TUVIERON SU BÌBLICA.... "MENTIRA PRESENTE"???????.....JA, JA, JA, JA, JA......
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

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.........Isaac Newton había "estudiado" tan bien las profecías que añadió 1.260 años al año 800 y le dió = año 2060 que según él , era cuando empezaría el TIEMPO DEL FÍN.
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Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Guillermo Miller predicó el mensaje del primer ángel..

Sí... del primer ángel padre de las mentiras... el mismo satanás.
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Estimado ernesto gil. Saludos cordiales.

Tú dices:

Sí... del primer ángel padre de las mentiras... el mismo satanás.

Respondo: ¿Insinúas que el mensaje que predicó Guillermo Miller, Apocalipsis 14:7 proviene del padre de las mentiras?

"diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado" Apocalipsis 14:7

¡Vaya que descarado eres! Tu biblia elegeiana te dirá eso, pero la historia y la profecía señalan que este pionero fue bendecido por Dios, y estará en su presencia cuando resucite en la primera resurrección de los justos.

"La profecía que parecía revelar con la mayor claridad el tiempo del segundo advenimiento, era la de Daniel 8:14: 'Hasta dos mil y trescientas tardes y mañanas; entonces será purificado el Santuario.' (V.M.) Siguiendo la regla que se había impuesto, de dejar que las Sagradas Escrituras se interpretasen a sí mismas, Miller llegó a saber que un día en la profecía simbólica representa un año (Números 14:34; Ezequiel 4:6); vio que el período de los 2300 días proféticos, o años literales, se extendía mucho más allá del fin de la era judaica, y que por consiguiente no podía referirse al santuario de aquella economía.

Miller aceptaba la creencia general de que durante la era cristiana la tierra es el santuario, y dedujo por consiguiente que la purificación del santuario predicha en Daniel 8:14 representaba la purificación de la tierra con fuego en el segundo advenimiento de Cristo. Llegó pues a la conclusión de que si se podía encontrar el punto de partida de los 2300 días, sería fácil fijar el tiempo del segundo advenimiento. Así quedaría revelado el tiempo de aquella gran consumación, 'el tiempo en que concluiría el presente estado de cosas, con todo su orgullo y poder, su pompa y vanidad, su maldad y opresión, ... el tiempo en que la tierra dejaría de ser maldita, en que la muerte sería destruida y se daría el galardón a los siervos de Dios, a los profetas y santos, y a todos los que temen su nombre, el tiempo en que serían destruidos los que destruyen la tierra.'-Bliss, pág. 76.

"Miller siguió escudriñando las profecías con más empeño y fervor que nunca, dedicando noches y días enteros al estudio de lo que resultaba entonces de tan inmensa importancia y absorbente interés. En el capítulo octavo de Daniel no pudo encontrar guía para el punto de partida de los 2300 días. Aunque se le mandó que hiciera comprender la visión a Daniel, el ángel Gabriel sólo le dio a éste una explicación parcial. Cuándo el profeta vio las terribles persecuciones que sobrevendrían a la iglesia, desfallecieron sus fuerzas físicas. No pudo soportar más, y el ángel le dejó por algún tiempo. XI Daniel quedó 'sin fuerzas,' y estuvo 'enfermo algunos días.' 'Estaba asombrado de la visión -dice;- mas no hubo quien la explicase.'

"Y sin embargo Dios había mandado a su mensajero: 'Haz que éste entienda la visión.' Esa orden debía ser ejecutada. En obedecimiento a ella, el ángel, poco tiempo después, volvió hacia Daniel, diciendo: 'Ahora he salido para hacerte sabio de entendimiento,' 'entiende pues la palabra, y alcanza inteligencia de la visión.' (Daniel 8: 27, 16; 9:22, 23, V.M.)

Había un punto importante en la visión del capítulo octavo, que no había sido explicado, a saber, el que se refería al tiempo: el período de los 2300 días; por consiguiente, el ángel, reanudando su explicación, se espacia en la cuestión del tiempo:
"'Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad.... Sepas pues, y entiendas, que desde la salida de la palabra para restaurar y edificar a Jerusalem hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas; tornaráse a edificar la plaza y el muro en tiempos angustiosos. Y después de las sesenta y dos semanas se quitará la vida al Mesías, y no por sí.... Y en otra semana confirmará el pacto a muchos, y a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda.' (Daniel 9:24-27.)

"El ángel había sido enviado a Daniel con el objeto expreso de que le explicara el punto que no había logrado comprender en la visión del capítulo octavo, el dato relativo al tiempo: 'Hasta dos mil y trescientas tardes y mañanas; entonces será purificado el Santuario.' Después de mandar a Daniel que 'entienda' 'la palabra' y que alcance inteligencia de 'la visión,' las primeras palabras del ángel son: 'Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad.' La palabra traducida aquí por 'determinadas,' significa literal. mente 'descontadas.' El ángel declara que setenta semanas, que representaban 490 años, debían ser descontadas por pertenecer especialmente a los judíos. ¿Pero de dónde fueron XII descontadas? Como los 2300 días son el único período, de tiempo mencionado en el capítulo octavo, deben constituir el período del que fueron descontadas las setenta semanas; las setenta semanas deben por consiguiente formar parte de los 2300 días, y ambos períodos deben comenzar juntos. El ángel declaró que las setenta semanas datan del momento en que salió el edicto para reedificar a Jerusalén. Sí se puede encontrar la fecha de aquel edicto, queda fijado el punto de partida del gran período de los 2300 días.

"Ese decreto se encuentra en el capítulo séptimo de Esdras. (Vers, 12-26.) Fue expedido en su forma más completa por Artajerjes, rey de Persia, en el año 457 ant. de J.C. Pero en Esdras 6: 14 se dice que la casa del Señor fue edificada en Jerusalén 'por mandamiento de Ciro, y de Darío y de Artajerjes rey de Persia.' Estos tres reyes, al expedir el decreto y al confirmarlo y completarlo, lo pusieron en la condición requerida por la profecía para que marcase el principio de los 2300 años. Tomando el año 457 ant. de J.C. en que el decreto fue completado, como fecha de la orden, se comprobó que cada especificación de la profecía referente a las setenta semanas se había cumplido.

"'Desde la salida de la palabra para restaurar y edificar a Jerusalem hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas' - es decir sesenta y nueve semanas, o sea 483 años. El decreto de Artajerjes fue puesto en vigencia en el otoño del año 457 ant. de J.C. Partiendo de esta fecha, los 483 años alcanzan al otoño del año 27 de J.C. Entonces fue cuando esta profecía se cumplió. La palabra 'Mesías' significa 'el ungido.' En el otoño del año 27 de J.C., Cristo fue bautizado por Juan y recibió la unción del Espíritu Santo. El apóstol Pedro testifica que 'a Jesús de Nazaret:' ... Dios le ungió con el Espíritu Santo y con poder.' (Hechos: 10:38, V.M.) Y el mismo Salvador declara: 'El Espíritu del Señor está sobre mí; por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres.' Después de su bautismo, Jesús volvió XIII a Galilea, 'predicando el evangelio de Dios, y diciendo: Se ha cumplido el tiempo.' (S. Lucas 4: 18; S. Marcos 1: 14,15,V.M.)

" 'Y en otra semana confirmará el pacto a muchos.' La semana de la cual se habla aquí es la última de las setenta. Son los siete últimos años del período concedido especialmente a los judíos. Durante ese plazo, que se extendió del año 27 al año 34 de J.C., Cristo, primero en persona y luego por intermedio de sus discípulos, presentó la invitación del Evangelio especialmente a los judíos. Cuando los apóstoles salieron para proclamar las buenas nuevas del reino, las instrucciones del Salvador fueron: 'Por el camino de los Gentiles no iréis, y en ciudad de Samaritanos no entréis.' (S. Mateo 10:5,6.)

"'A la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda.', En el año 31 de J.C., tres años y medio después de su bautismo, nuestro Señor fue crucificado. Con el gran sacrificio ofrecido en el Calvario, terminó aquel sistema de ofrendas que durante cuatro mil años había prefigurado al Cordero de Dios. El tipo se encontró en el antitipo, y todos los sacrificios y oblaciones del sistema ceremonial debían cesar.

"Las setenta semanas, o 490 años concedidos a los judíos, terminaron, como lo vimos, en el año 34 de J.C. En dicha fecha, por auto del Sanedrín judaico, la nación selló su rechazamiento del Evangelio con el martirio de Esteban, y la persecución de los discípulos de Cristo. Entonces el mensaje de salvación, no estando más reservado exclusivamente para el pueblo elegido, fue dado al mundo. Los discípulos, obligados por la persecución a huir de Jerusalén, 'andaban por todas partes, predicando la Palabra.' 'Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les proclamó el Cristo.' Pedro, guiado por Dios, dio a conocer el Evangelio al centurión de Cesarea, el piadoso Cornelio, el ardiente Pablo, ganado a la fe de Cristo, fue comisionado para llevar las alegres nuevas 'lejos ... a los gentiles.' (Hechos 8:4,5; 22:21, V.M.)
"Hasta aquí cada uno de los detalles de las profecías se XIV ha cumplido de una manera sorprendente, y el principio de las setenta semanas queda establecido irrefutablemente en el año 457 ant. de J.C. y su fin en el año 34 de J.C. Partiendo de esta fecha no es difícil encontrar el término de los 2300 días. Las setenta semanas -490 días- descontadas de los 2300 días, quedaban 1810 días. Concluidos los 490 idas, quedaban aún por cumplirse los 1810 días. Contando desde 34 de J.C., los 1810 años alcanzan al año 1844. Por consiguiente los 2300 días de Daniel 8: 14 terminaron en 1844. Al fin de este gran período profético, según el testimonio del ángel de Dios, del santuario' debía ser 'purificado.' De este modo la fecha de la purificación del santuario - a la cual se creía casi universalmente que se verificaría en el segundo advenimiento de Cristo quedó definitivamente establecida.

"Miller y sus colaboradores creyeron primero que los 2300 días terminarían en la primavera de 1844, mientras que la profecía señala el otoño de ese mismo año. La mala inteligencia de este punto fue causa de desengaño y perplejidad para los que habían fijado para la primavera de dicho año el tiempo de la venida del Señor. Pero esto no afectó en lo más mínimo la fuerza de la argumentación que demuestra que los 2300 días terminaron en el año 1844 y que el gran acontecimiento representado por la purificación del santuario debía verificarse entonces.

"Al empezar a estudiar las Sagradas Escrituras como lo hizo, para probar que son una revelación de Dios, Miller no tenía la menor idea de que llegaría a la conclusión a que había llegado. Apenas podía él mismo creer en los resultados de su investigación. Pero las pruebas de la Santa Escritura eran demasiado evidentes y concluyentes para rechazarlas.

"Había dedicado dos años al estudio de la Biblia, cuando, en 1818, llegó a tener la solemne convicción de que unos veinticinco años después aparecería Cristo para redimir a su a pueblo." -El Conflicto de los Siglos, págs. 371-377, ed. 1954.

Los creyentes adventistas aguardaban con honda expectación XV el día en su Señor iba a volver. Consideraban el otoño de 1844 como el momento señalado por la profecía de Daniel. Pero aquellos consagrados creyentes iban a sufrir un gran chasco. Así como los discípulos del tiempo de Cristo no comprendieron el carácter exacto de los acontecimientos que se iban a realizar en cumplimiento de la profecía relativa al primer advenimiento de Cristo, los adventistas de 1844 sufrieron un gran chasco en relación con la profecía que anunciaba la segunda venida de Cristo. Acerca de esto leemos:
"Jesús no vino a la tierra, como lo esperaba la compañía que le aguardaba gozosa, para purificar el santuario, limpiando la tierra por fuego. Vi que era correcto su cálculo de los períodos proféticos; el tiempo profético había terminado en 1844, y Jesús entró en el lugar santísimo para purificar el santuario al fin de los días. La equivocación de ellos consistió en no comprender lo que era el santuario ni la naturaleza de su purificación."-Primeros Escritos, pág. 243.

Casi inmediatamente después del chasco de octubre, muchos creyentes y pastores que se habían adherido al mensaje adventista se apartaron de él. Otros fueron arrebatados por el fanatismo. Más o menos la mitad de los adventistas siguió creyendo que Cristo no tardaría en aparecer en las nubes del cielo. Al verse expuestos a las burlas del mundo, las consideraron como pruebas de que había pasado el tiempo de gracia para el mundo.

Creían firmemente que el día del advenimiento se acercaba. Pero cuando los días se alargaron en semanas y el Señor no apareció, se produjo una división de opiniones en el grupo mencionado. Una parte, numéricamente grande, decidió que la profecía no se había cumplido en 1844 y que sin duda se había producido un error al calcular los periodos proféticos.

Comenzaron nuevamente a fijar fechas. Otro grupo menor, que vino a ser el de los antecesores de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, hallaba certeras las evidencias de la obra del Espíritu Santo en el gran despertar, y consideraba imposible negar que el movimiento XVI fuese obra de Dios, pues hacer esto habría sido despreciar al Espíritu de gracia.

Para este grupo, la obra que debían hacer y lo que experimentaban estaba descrito en los últimos versículos de Apocalipsis 10. Debían reavivar la expectación. Dios los había conducido y seguía conduciéndolos. En sus filas militaba una joven llamada Elena Harmon, quien recibió de Dios, en diciembre de 1844, una revelación profética.

En esa visión el Señor le mostró la peregrinación del pueblo adventista hacia la áurea ciudad. La visión no explicaba el motivo del chasco, si bien la explicación podía obtenerse del estudio de la Biblia, como sucedió. Sobre todo hizo comprender a los fieles que Dios los estaba guiando y continuaría conduciéndolos mientras viajasen hacia la ciudad celestial.


Bendiciones.

Luego todo Israel será salvo.
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

NUNCA "UNA MENTIRA PRESENTE", PUEDE CONVERTIRSE EN "VERDAD PRESENTE", COMO SI FUERA "POR ARTE DE MAGIA".......
ESE ES OTRO DE LOS "MITOS adventistas"....
ES DECIR, QUE LA SECTA adventista, CON ESA FABULA DE LA SUPUESTA "VERDAD PRESENTE", LO QUE QUIERE, ES OCULTAR UNA EQUIVOCACIÒN QUE TUVIERON....PORQUE SU ORGULLO NO LES DA PARA ACEPTAR, QUE PURA Y SIMPLEMENTE ESTUVIERON EQUIVOCADOS, PREDICANDO UNA FALSEDAD.....POR LO TANTO, YA DEJEN DE REPETIR ESA "CANTALETA" AQUÌ, PORQUE YA NADIE SE LA CREE.....SENCILLAMENTE, ESO ERA UNA "MENTIRA PRESENTE".........
Bueno, estimado Manuel, pero si seguimos el mismo "razonamiento" de los adventistas, todos esos "ERRORES" DE NEWTON, SIMPLEMENTE ERAN "SU VERDAD PRESENTE".....JA, JA, JA, JA, JA......
BUENO, "gabriel", ¿Y CUÀLES OTROS DE ESOS "GRANDES" HOMBRES, TAMBIÈN TUVIERON SU BÌBLICA "MENTIRA PRESENTE"???????.....JA, JA, JA, JA, JA......
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Estimado ernesto gil. Saludos cordiales.
Tú dices:
Respondo: ¿Insinúas que el mensaje que predicó Guillermo Miller, Apocalipsis 14:7 proviene del padre de las mentiras?

Sr. calumniador,

Miller no predicó el mensaje descrito en Apocalipsis 14:7; Miller predicó, influenciado por un espíritu contrario a la Palabra de Dios, que Jesús regresaba:

1º.- El 10 de febrero de 1843

2º.-El 15 de febrero de 1843

3º.-El 14 de abril de 1843

4º.-El 21 de marzo de 1844

5º.-El 18 de abril de 1844

Estas fechas pasaron y Jesús no regresó por lo tanto es OBVIO que esos mensajes fueron inspirados por el mismo demonio... el mismo que inspiró a la descarada White a decir lo siguiente: (Primeros Escritos):

"Vi que Dios estaba en la proclamación del tiempo en 1843."

"...este mensaje del cielo sólo podía encontrar cabida en el corazón de algunos de los que se llamaban ministros de Cristo"

"La predicación de una fecha definida para el advenimiento levantó violenta oposición en todas partes, desde el ministro en el púlpito hasta el más descuidado y empedernido pecador".

"El ministro hipócrita y el descarado burlón decían: "Pero del día y la hora nadie sabe.""

"La verdad predicada con poder convincente despertó a la gente, que como el carcelero empezó a preguntar: "¿Qué debo hacer para ser salvo?""

"Las vestiduras de aquellos profanos pastores estaban teñidas con la sangre de las almas. Los ministros que no querían aceptar este mensaje salvador, estorbaron a quienes lo hubieran recibido. La sangre de las almas está sobre ellos."

Aunque le des vueltas y vueltas no puedes ocultar el sol con un dedo; no puedes decir que el mensaje del primer ángel de Apocalipsis 14:7 equivale a las MENTIRAS que Miller predicó.
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Estimado ernesto gil. Saludos cordiales.

Tú dices:

Sr. calumniador,
Miller no predicó el mensaje descrito en Apocalipsis 14:7; Miller predicó, influenciado por un espíritu contrario a la Palabra de Dios, que Jesús regresaba:
........

Respondo: Bueno, tú mismo has confirmado que Miller no dijo "ni el día ni la hora del regreso de nuestro Señor", y esto es digno de ser mencionado ya que me atribuyes a mi el de ser calumniador, ¿Has leído tus propios mensajes?

En fin, nuevamente salen a relucir tus pobres argumentos de un jesuita en ruinas, "el fin justifica los medios", descalificar a tu oponente que te pone las cosas en su lugar, y no acepta "las locuras" que se te ocurren.

Miller encontró que la venida verdadera y personal de Cristo está claramente enseñada en las Santas Escrituras. San Pablo dice: "El Señor mismo descenderá del cielo con mandato soberano, con la voz del arcángel y con trompeta de Dios." Y el Salvador declara que "verán al Hijo del hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y grande gloria." "Porque como el relámpago sale del oriente, y se ve lucir hasta el occidente, así será la venida del Hijo del hombre." Será acompañado por todas las huestes del cielo, pues "el Hijo del hombre" vendrá "en su gloria, y todos los ángeles con él." "Y enviará sus ángeles con grande estruendo de trompeta, los cuales juntarán a sus escogidos." (1 Tesalonicenses 4: 16; S. Mateo 24: 30, 27, 31; 25: 31, V.M.)

A su venida los justos muertos resucitarán, y los justos que estuvieren aún vivos serán mudados. "No todos dormiremos —dice Pablo,— mas todos seremos mudados, en un momento, en un abrir de ojos, al sonar la última trompeta: porque sonará la trompeta, y los muertos resucitarán incorruptibles, y nosotros seremos mudados. Porque es necesario que este cuerpo corruptible se revista de incorrupción, y que este cuerpo mortal se revista de inmortalidad." (1 Corintios 15: 51-53, V.M.) Y en 1 Tesalonicenses 4: 16, 17, después de describir la venida del Señor, dice: "Los muertos en Cristo se levantarán primero; luego, nosotros los vivientes, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos a las nubes, al encuentro del Señor, en el aire; y así estaremos siempre con el Señor."

El pueblo de Dios no puede recibir el reino antes que se realice el advenimiento personal de Cristo. El Señor había dicho: "Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, y todos los ángeles con él, entonces se sentará sobre el trono de su gloria; y delante de él serán juntadas todas las naciones; y apartará a los hombres unos de otros, como el pastor aparta las ovejas de las cabras: y pondrá las ovejas a su derecha, y las cabras a la izquierda. Entonces dirá el Rey a los que estarán a su derecha: ¡ Venid, benditos de mi Padre, poseed el reino destinado para vosotros desde la fundación del mundo! "(S. Mateo 25: 31 - 34, V.M.)

Hemos visto por los pasajes que acabamos de citar que cuando venga el Hijo del hombre, los muertos serán resucitados incorruptibles, y que los vivos serán mudados. Este gran cambio los preparará para recibir el reino; pues San Pablo dice: "La carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción." (1 Corintios 15: 50, V.M.) En su estado presente el hombre es mortal, corruptible; pero el reino de Dios será incorruptible y sempiterno. Por lo tanto, en su estado presente el hombre no puede entrar en el reino de Dios. Pero cuando venga Jesús, concederá la inmortalidad a su pueblo; y luego los llamará a poseer el reino, del que hasta aquí sólo han sido presuntos herederos.

Estos y otros pasajes bíblicos probaron claramente a Miller que los acontecimientos que generalmente se esperaba que se verificasen antes de la venida de Cristo, tales como el reino universal de la paz y el establecimiento del reino de Dios en la tierra, debían realizarse después del segundo advenimiento. Además, todas las señales de los tiempos y el estado del mundo correspondían a la descripción profética de los últimos días. Por el solo estudio de las Sagradas Escrituras, Miller tuvo que llegar a la conclusión de que el período fijado para la subsistencia de la tierra en su estado actual estaba por terminar.

"Otra clase de evidencia que afectó vitalmente mi espíritu —dice él— fue la cronología de las Santas Escrituras.... Encontré que los acontecimientos predichos, que se habían cumplido en lo pasado, se habían desarrollado muchas veces dentro de los límites de un tiempo determinado. Los ciento y veinte años hasta el diluvio(Génesis 6:3); los siete días que debían precederlo, con el anuncio de cuarenta días de lluvia (Génesis 7:4); los cuatrocientos años de la permanencia de la posteridad de Abrahán en Egipto (Génesis 15:13); los tres días de los sueños del copero y del panadero (Génesis 40:12 - 20) ; los siete años de Faraón (Génesis 41:28 - 54) ; los cuarenta años en el desierto (Números 14:34) ; los tres años y medio de hambre (1 Reyes 17:1) [véase S. Lucas 4:25];...los setenta años del cautiverio en Babilonia (Jeremías 25:11);los siete tiempos de Nabucodonosor (Daniel 4:13 - 16) ; y las siete semanas, sesenta y dos semanas, y la una semana, que sumaban setenta semanas determinadas sobre los judíos (Daniel 9:24 - 27); todos los acontecimientos limitados por estos períodos de tiempo no fueron una vez más que asunto profético, pero se cumplieron de acuerdo con las predicciones." —Bliss, págs. 74, 75.

Por consiguiente, al encontrar en su estudio de la Biblia varios períodos cronológicos, que, según su modo de entenderlos, se extendían hasta la segunda venida de Cristo, no pudo menos que considerarlos como los "tiempos señalados," que Dios había revelado a sus siervos. "Las cosas secretas —dice Moisés— pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas nos pertenecen a nosotros y a nuestros hijos para siempre," y el Señor declara por el profeta Amós que "no hará nada sin que revele su secreto a sus siervos los profetas." (Deuteronomio 29: 29; Amós 3: 7, V.M.) Así que los que estudian la Palabra de Dios pueden confiar que encontrarán indicado con claridad en las Escrituras el acontecimiento más estupendo que debe realizarse en la historia de la humanidad.

"Estando completamente convencido —dice Miller— de que toda Escritura divinamente inspirada es útil [2 Timoteo 3:16]; que en ningún tiempo fue dada por voluntad de hombre, sino que fue escrita por hombres santos inspirados del Espíritu Santo [2 Pedro 1:21], y esto 'para nuestra enseñanza' 'para que por la paciencia, y por la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza' [Romanos 15:4], no pude menos que considerar las partes cronológicas de la Biblia tan pertinentes a la Palabra de Dios y tan acreedoras a que las tomáramos en cuenta como cualquiera otra parte de las Sagradas Escrituras. Pensé por consiguiente que al tratar de comprender lo que Dios, en su misericordia, había juzgado conveniente revelarnos, yo no tenía derecho para pasar por alto los períodos proféticos." —Bliss, pág. 75.

La profecía que parecía revelar con la mayor claridad el tiempo del segundo advenimiento, era la de Daniel 8: 14: "Hasta dos mil y trescientas tardes y mañanas; entonces será purificado el Santuario." (V.M.) Siguiendo la regla que se había impuesto, de dejar que las Sagradas Escrituras se interpretasen a sí mismas, Miller llegó a saber que un día en la profecía simbólica representa un año (Números 14: 34; Ezequiel 4: 6); vio que el período de los 2.300 días proféticos, o años literales, se extendía mucho más allá del fin de la era judaica, y que por consiguiente no podía referirse al santuario de aquella economía.

Miller aceptaba la creencia general de que durante la era cristiana la tierra es el santuario, y dedujo por consiguiente que la purificación del santuario predicha en Daniel 8:14 representaba la purificación de la tierra con fuego en el segundo advenimiento de Cristo. Llegó pues a la conclusión de que si se podía encontrar el punto de partida de los 2.300 días, sería fácil fijar el tiempo del segundo advenimiento. Así quedaría revelado el tiempo de aquella gran consumación, "el tiempo en que concluiría el presente estado de cosas, con todo su orgullo y poder, su pompa y vanidad, su maldad y opresión, . . . el tiempo en que la tierra dejaría de ser maldita, en que la muerte sería destruída y se daría el galardón a los siervos de Dios, a los profetas y santos, y a todos los que temen su nombre, el tiempo en que serían destruídos los que destruyen la tierra." —Bliss, pág. 76.

Miller siguió escudriñando las profecías con más empeño y fervor que nunca, dedicando noches y días enteros al estudio de lo que resultaba entonces de tan inmensa importancia y absorbente interés. En el capítulo octavo de Daniel no pudo encontrar guía para el punto de partida de los 2.300 días. Aunque se le mandó que hiciera comprender la visión a Daniel, el ángel Gabriel sólo le dio a éste una explicación parcial. Cuando el profeta vio las terribles persecuciones que sobrevendrían a la iglesia, desfallecieron sus fuerzas físicas. No pudo soportar más, y el ángel le dejó por algún tiempo. Daniel quedó "sin fuerzas," y estuvo "enfermo algunos días." "Estaba asombrado de la visión —dice;— mas no hubo quien la explicase."

Y sin embargo Dios había mandado a su mensajero: "Haz que éste entienda la visión." Esa orden debía ser ejecutada. En obedecimiento a ella, el ángel, poco tiempo después, volvió hacia Daniel, diciendo: "Ahora he salido para hacerte sabio de entendimiento;" "entiende pues la palabra, y alcanza inteligencia de la visión." (Daniel 8: 27, 16; 9: 22, 23, V.M.) Había un punto importante en la visión del capítulo octavo, que no había sido explicado, a saber, el que se refería al tiempo: el período de los 2.300 días; por consiguiente, el ángel, reanudando su explicación, se espacia en la cuestión del tiempo:
"Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad.... Sepas pues y entiendas, que desde la salida de la palabra para restaurar y edificar a Jerusalem hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas; tornaráse a edificar la plaza y el muro en tiempos angustiosos. Y después de las sesenta y dos semanas se quitará la vida al Mesías, y no por sí.... Y en otra semana confirmará el pacto a muchos, y a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda." (Daniel 9: 24 - 27.)

El ángel había sido enviado a Daniel con el objeto expreso de que le explicara el punto que no había logrado comprender en la visión del capítulo octavo, el dato relativo al tiempo: "Hasta dos mil y trescientas tardes y mañanas; entonces será purificado el Santuario." Después de mandar a Daniel que "entienda" "la palabra" y que alcance inteligencia de "la visión," las primeras palabras del ángel son: "Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad."

La palabra traducida aquí por "determinadas," significa literalmente "descontadas." El ángel declara que setenta semanas, que representaban 490 años, debían ser descontadas por pertenecer especialmente a los judíos. ¿Pero de dónde fueron descontadas? Como los 2.300 días son el único período de tiempo mencionado en el capítulo octavo, deben constituir el período del que fueron descontadas las setenta semanas; las setenta semanas deben por consiguiente formar parte de los 2.300 días, y ambos períodos deben comenzar juntos. El ángel declaró que las setenta semanas datan del momento en que salió el edicto para reedificar a Jerusalén. Si se puede encontrar la fecha de aquel edicto, queda fijado el punto de partida del gran período de los 2.300 días.

Bendiciones.

Luego todo Israel será salvo.
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Respondo: Bueno, tú mismo has confirmado que Miller no dijo "ni el día ni la hora del regreso de nuestro Señor", y esto es digno de ser mencionado...

Sr. Calumniador,

La pregunta que hiciste es una calumnia pues en ningún lugar yo he insinuado que Apoc. 14:7 proviene del padre de las mentiras. Veamos tu pregunta nuevamente:

Respondo: ¿Insinúas que el mensaje que predicó Guillermo Miller, Apocalipsis 14:7 proviene del padre de las mentiras?

Volviendo al tema:

Miller dijo que Jesús regresaba en varias fechas:

1º.- El 10 de febrero de 1843

2º.-El 15 de febrero de 1843

3º.-El 14 de abril de 1843

4º.-El 21 de marzo de 1844

5º.-El 18 de abril de 1844

Ahora tú intentas suavizar las mentiras de Miller aludiendo al hecho que Miller no fijó día ú hora entonces, ¿Qué piensas del mensaje de Samuel Snow y co? ¿Acaso ellos no dijeron que Jesús regresaba el 22 de Octubre del 1844?

¡La verdad es que cada vez que intentas vindicar a los pioneros de tu Iglesia lo que haces es hundirlos más! :lach:

El tema en discusión es si Miller se equivocó o si predicó un mensaje de Dios. Tú has dicho que Miller predicó el mensaje del primer ángel y por eso te dije que el único primer ángel que pudo haber influenciado a Miller es el primer ángel que pecó.

Miller predicó que Jesús iba a regresar en ciertas fechas...

Entonces gabriel47, vuelvo a preguntar:

Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Estimado ernesto gil. Tú dices:

Sr. Calumniador,

La pregunta que hiciste es una calumnia pues en ningún lugar yo he insinuado que Apoc. 14:7 proviene del padre de las mentiras. Veamos tu pregunta nuevamente:

Respondo: ¿Insinúas que el mensaje que predicó Guillermo Miller, Apocalipsis 14:7 proviene del padre de las mentiras?

Volviendo al tema:

Miller dijo que Jesús regresaba en varias fechas:

1º.- El 10 de febrero de 1843

2º.-El 15 de febrero de 1843

3º.-El 14 de abril de 1843

4º.-El 21 de marzo de 1844

5º.-El 18 de abril de 1844

Ahora tú intentas suavizar las mentiras de Miller aludiendo al hecho que Miller no fijó día ú hora entonces, ¿Qué piensas del mensaje de Samuel Snow y co? ¿Acaso ellos no dijeron que Jesús regresaba el 22 de Octubre del 1844?

¡La verdad es que cada vez que intentas vindicar a los pioneros de tu Iglesia lo que haces es hundirlos más! :lach:

El tema en discusión es si Miller se equivocó o si predicó un mensaje de Dios. Tú has dicho que Miller predicó el mensaje del primer ángel y por eso te dije que el único primer ángel que pudo haber influenciado a Miller es el primer ángel que pecó.

Miller predicó que Jesús iba a regresar en ciertas fechas...

Entonces gabriel47, vuelvo a preguntar:

Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Respondo: Miller predicó el mensaje del primer ángel, Así que no vengas con tus desvarios propios de los profetas de Baal.

El movimiento adventísta:
"Pero tienes unas pocas personas en Sardis que no han manchado sus vestiduras; y andarán conmigo en vestiduras blancas, porque son dignas." Apoc. 3:4

"para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad." 1Tim. 3:15.

"La voz que oí del cielo habló otra vez conmigo, y dijo: Ve y toma el librito que está abierto en la mano del ángel que está en pie sobre el mar y sobre la tierra.
Y fui al ángel, diciéndole que me diese el librito. Y él me dijo: Toma, y cómelo; y te amargará el vientre, pero en tu boca será dulce como la miel.
Entonces tomé el librito de la mano del ángel, y lo comí; y era dulce en mi boca como la miel, pero cuando lo hube comido, amargó mi vientre." Apoc.10:8-10.

"Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas." apoc.14: 6,7.

"Mientras que un sinnúmero de personas inteligentes e interesadas se apiñaban para oír a Miller, su nombre era rara vez mencionado por la prensa religiosa y sólo para ridiculizarlo y acusarlo. Los indiferentes y los impíos, alentados por la actitud de los maestros de religión, recurrieron a epítetos difamantes, a chistes vulgares y blasfemos, en sus esfuerzos para atraer el desprecio sobre él y su obra. El siervo de Dios, encanecido en el servicio y que había dejado su cómodo hogar para viajar a costa propia de ciudad en ciudad, y de pueblo en pueblo, para proclamar al mundo la solemne amonestación del juicio inminente, fue llamado fanático, mentiroso y malvado.
Las mofas, las mentiras y los ultrajes acumulados sobre él despertaron la censura y la indignación hasta de la prensa profana. La gente del mundo declaró que "tratar un tema de tan imponente majestad e importantes consecuencias" con ligereza y lenguaje vulgar, "no equivalía sólo a divertirse a costa de los sentimientos de sus propagadores y defensores," sino "a reírse del día del juicio, a mofarse del mismo Dios y a hacer burla de su tribunal." —Bliss, pág. 183.

Como los primeros discípulos, Guillermo Miller y sus colaboradores no comprendieron ellos mismos enteramente el alcance del mensaje que proclamaban. Los errores que existían desde hacía largo tiempo en la iglesia les impidieron interpretar correctamente un punto importante de la profecía. Por eso si bien proclamaron el mensaje que Dios les había confiado para que lo diesen al mundo, sufrieron un desengaño debido a un falso concepto de su significado.

Al explicar Daniel 8:14 "Hasta dos mil y trescientas tardes y mañanas; entonces será purificado el santuario," Miller, como ya lo hemos dicho, aceptó la creencia general de que la tierra era el santuario, y creyó que la purificación del santuario representaba la purificación de la tierra por el fuego a la venida del Señor. Por consiguiente, cuando echó de ver que el fin de los 2.300 días estaba predicho con precisión, sacó la conclusión de que esto revelaba el tiempo del segundo advenimiento. Su error provenía de que había aceptado la creencia popular relativa a lo que constituye el santuario.

En el sistema típico —que era sombra del sacrificio y del sacerdocio de Cristo— la purificación del santuario era el último servicio efectuado por el sumo sacerdote en el ciclo anual de su ministerio. Era el acto final de la obra de expiación— una remoción o apartamiento del pecado de Israel. Prefiguraba la obra final en el ministerio de nuestro Sumo Sacerdote en el cielo, en el acto de borrar los pecados de su pueblo, que están consignados en los libros celestiales. Este servicio envuelve una obra de investigación, una obra de juicio, y precede inmediatamente la venida de Cristo en las nubes del cielo con gran poder y gloria, pues cuando él venga, la causa de cada uno habrá sido fallada. Jesús dice: "Mi galardón está conmigo, para dar la recompensa a cada uno según sea su obra." (Apocalipsis 22: 12, V.M.) Esta obra de juicio, que precede inmediatamente al segundo advenimiento, es la que se anuncia en el primer mensaje angelical de Apocalipsis 14:7: "¡Temed a Dios y dadle honra; porque ha llegado la hora de su juicio!" (V.M.)

Los que proclamaron esta amonestación dieron el debido mensaje a su debido tiempo. Pero así como los primitivos discípulos declararan: "Se ha cumplido el tiempo, y se ha acercado el reino de Dios," fundándose en la profecía de Daniel 9, sin darse cuenta de que la muerte del Mesías estaba anunciada en el mismo pasaje bíblico, así también Miller y sus colaboradores predicaron el mensaje fundado en Daniel 8:14 y Apocalipsis 14:7 sin echar de ver que el capítulo 14 del Apocalipsis encerraba aún otros mensajes que debían ser también proclamados antes del advenimiento del Señor. Como los discípulos se equivocaron en cuanto al reino que debía establecerse al fin de las setenta semanas, así también los adventistas se equivocaron en cuanto al acontecimiento que debía producirse al fin de los 2.300 días. En ambos casos la circunstancia de haber aceptado errores populares, o mejor dicho la adhesión a ellos, fue lo que cerró el espíritu a la verdad. Ambas escuelas cumplieron la voluntad de Dios, proclamando el mensaje que él deseaba fuese proclamado, y ambas, debido a su mala comprensión del mensaje, sufrieron desengaños.

Sin embargo, Dios cumplió su propósito misericordioso permitiendo que el juicio fuese proclamado precisamente como lo fue. El gran día estaba inminente, y en la providencia de Dios el pueblo fue probado tocante a un tiempo fijo a fin de que se les revelase lo que había en sus corazones. El mensaje tenía por objeto probar y purificar la iglesia. Los hombres debían ser inducidos a ver si sus afectos pendían de las cosas de este mundo o de Cristo y del cielo. Ellos profesaban amar al Salvador; debían pues probar su amor. ¿Estarían dispuestos a renunciar a sus esperanzas y ambiciones mundanas, para saludar con gozo el advenimiento de su Señor? El mensaje tenía por objeto hacerles ver su verdadero estado espiritual; fue enviado misericordiosamente para despertarlos a fin de que buscasen al Señor con arrepentimiento y humillación.

Además, si bien el desengaño era resultado de una comprensión errónea del mensaje que anunciaban, Dios iba a predominar para bien sobre las circunstancias. Los corazones de los que habían profesado recibir la amonestación iban a ser probados. En presencia de su desengaño, ¿se apresurarían ellos a renunciar a su experiencia y a abandonar su confianza en la Palabra de Dios o con oración y humildad procurarían discernir en qué puntos no habían comprendido el significado de la profecía ? ¿Cuántos habían obrado por temor o por impulso y arrebato? ¿Cuántos eran de corazón indeciso e incrédulo? Muchos profesaban anhelar el advenimiento del Señor. Al ser llamados a sufrir las burlas y el oprobio del mundo, y la prueba de la dilación y del desengaño, ¿renunciarían a su fe? Porque no pudieran comprender luego los caminos de Dios para con ellos, ¿rechazarían verdades confirmadas por el testimonio más claro de su Palabra?

Esta prueba revelaría la fuerza de aquellos que con verdadera fe habían obedecido a lo que creían ser la enseñanza de la Palabra y del Espíritu de Dios. Ella les enseñaría, como sólo tal experiencia podía hacerlo, el peligro que hay en aceptar las teorías e interpretaciones de los hombres, en lugar de dejar la Biblia interpretarse a sí misma. La perplejidad y el dolor que iban a resultar de su error, producirían en los hijos de la fe el escarmiento necesario. Los inducirían a profundizar aún más el estudio de la palabra profética. Aprenderían a examinar más detenidamente el fundamento de su fe, y a rechazar todo lo que no estuviera fundado en la verdad de las Sagradas Escrituras, por muy amplia que fuese su aceptación en el mundo cristiano.

Miller predicó el mensaje del primer ángel de Apocalipsis 14.

"El movimiento adventista de 1840 a 1844 fue una manifestación gloriosa del poder divino; el mensaje del primer ángel fue llevado a todas las estaciones misioneras de la tierra, y en algunos países se distinguió por el mayor interés religioso que se haya visto en país cualquiera desde el tiempo de la Reforma del siglo XVI" CS 669.


Bendiciones.

Luego todo Israel será salvo.
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

ernesto gil....Miller predicó el mensaje del primer ángel, Así que no vengas con tus desvarios propios de los profetas de Baal.
El movimiento adventísta:
Esta prueba revelaría la fuerza de aquellos que con verdadera fe habían obedecido a lo que creían ser la enseñanza de la Palabra y del Espíritu de Dios. Ella les enseñaría, como sólo tal experiencia podía hacerlo, el peligro que hay en aceptar las teorías e interpretaciones de los hombres, en lugar de dejar la Biblia interpretarse a sí misma.....Miller predicó el mensaje del primer ángel de Apocalipsis 14....

BUENO, "gabriel", SI DEJAMOS A UN LADO LO QUE TU SECTA adventista HA PRETENDIDO ENSEÑAR SOBRE EL "MENSAJE DEL PRIMER ANGEL", Y SENCILLAMENTE LEEMOS EL APOCALIPSIS, VEMOS QUE EL "PRIMER ANGEL" TENÌA "EL EVANGELIO ETERNO" PARA PREDICARLO A TODO EL MUNDO, Y SU MENSAJE ESPECÌFICO ERA ESTE:

"TEMED A DIOS Y DADLE GLORIA, PORQUE LA HORA DE SU JUICIO HA LLEGADO; Y ADORAD A AQUEL QUE HIZO EL CIELO....".

SIN EMBARGO, EL MENSAJE DE Miller, ERA QUE JESUS REGRESABA EN:
1º.- El 10 de febrero de 1843

2º.-El 15 de febrero de 1843

3º.-El 14 de abril de 1843

4º.-El 21 de marzo de 1844

5º.-El 18 de abril de 1844

ENTONCES, ESTÀ CLARO QUE SIN IMPORTAR QUE FUERA POR "EQUIVOCACIÒN O NO", EL MENSAJE DEL "PRIMER ANGEL" ERA UNO, MIENTRAS QUE EL DE Miller ERA OTRO MENSAJE, MUY DISTINTO....
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Un pequeño paréntesis para nuevamente demostrar como gabriel47 se hace el loco...

Ayer este señor, en su intento de vindicar a William Miller, dijo lo siguiente:

"Respondo: Bueno, tú mismo has confirmado que Miller no dijo "ni el día ni la hora del regreso de nuestro Señor", y esto es digno de ser mencionado..."

A lo que yo le respondí:
"Ahora tú intentas suavizar las mentiras de Miller aludiendo al hecho que Miller no fijó día ú hora entonces, ¿Qué piensas del mensaje de Samuel Snow y co? ¿Acaso ellos no dijeron que Jesús regresaba el 22 de Octubre del 1844?"

Gabriel47 no contestó pues sabe que volvió a meter las extremidades pues no se dio cuenta que al intentar vindicar a William Miller estaba hundiendo a los que inventaron la fecha del 22 de Octubre del 1844.

¡La verdad es que cada vez que este señor intenta vindicar a los pioneros de su Iglesia lo que hace es hundirlos más! :lach:
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

Estimado ernesto gil. Saludos cordiales.

Tú dices:

Un pequeño paréntesis para nuevamente demostrar como gabriel47 se hace el loco...

Ayer este señor, en su intento de vindicar a William Miller, dijo lo siguiente:

"Respondo: Bueno, tú mismo has confirmado que Miller no dijo "ni el día ni la hora del regreso de nuestro Señor", y esto es digno de ser mencionado..."

A lo que yo le respondí:
"Ahora tú intentas suavizar las mentiras de Miller aludiendo al hecho que Miller no fijó día ú hora entonces, ¿Qué piensas del mensaje de Samuel Snow y co? ¿Acaso ellos no dijeron que Jesús regresaba el 22 de Octubre del 1844?"

Gabriel47 no contestó pues sabe que volvió a meter las extremidades pues no se dio cuenta que al intentar vindicar a William Miller estaba hundiendo a los que inventaron la fecha del 22 de Octubre del 1844.

¡La verdad es que cada vez que este señor intenta vindicar a los pioneros de su Iglesia lo que hace es hundirlos más! :lach:

Respondo: ¡Queda claro entonces que ni Guillermo Miller ni Ellen White, fijaron el día y la hora del regreso de nuestro Señor, como algunos lo han intentado exponer para desacreditarlos!

Con lo que presentan ernesto gil y co, tendrían que decir que ellos fijaron las horas y los días del regreso de nuestro Señor, y se verían en un absurdo más grande del que reiteradamente proclaman en su locura.

Hace poco ya acusaron a Isaac Newton, y ahora señala a Samuel Snow, ¡Claro que se les olvida lo de la parábola de las 10 vírgenes y su relación con las bodas del Cordero! ¿Se hará el loco o será...?

"Aunque combatido por los que se llamaban cristianos y por el mundo, y abofeteado por Satanás y sus ángeles, no cesaba Miller de predicar el Evangelio Eterno a las multitudes siempre que se le deparara ocsión, pregonando cerca y lejos: "Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado" PE 232

Bendiciones.

Luego todo Israel será salvo.
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

BUENO, "gabriel", SI DEJAMOS A UN LADO LO QUE TU SECTA adventista HA PRETENDIDO ENSEÑAR SOBRE EL "MENSAJE DEL PRIMER ANGEL", Y SENCILLAMENTE LEEMOS EL APOCALIPSIS, VEMOS QUE EL "PRIMER ANGEL" TENÌA "EL EVANGELIO ETERNO" PARA PREDICARLO A TODO EL MUNDO, Y SU MENSAJE ESPECÌFICO ERA ESTE:

"TEMED A DIOS Y DADLE GLORIA, PORQUE LA HORA DE SU JUICIO HA LLEGADO; Y ADORAD A AQUEL QUE HIZO EL CIELO....".

SIN EMBARGO, EL MENSAJE DE Miller, ERA QUE JESUS REGRESABA EN:
1º.- El 10 de febrero de 1843

2º.-El 15 de febrero de 1843

3º.-El 14 de abril de 1843

4º.-El 21 de marzo de 1844

5º.-El 18 de abril de 1844

ENTONCES, ESTÀ CLARO QUE SIN IMPORTAR QUE FUERA POR "EQUIVOCACIÒN O NO", EL MENSAJE DEL "PRIMER ANGEL" ERA UNO, MIENTRAS QUE EL DE Miller ERA OTRO MENSAJE, MUY DISTINTO....
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?


Saludos

El mensaje de Miller no era distinto. El hecho de que "QUE JESUS REGRESABA E" tambien incluia una obra de juicio y preparación. Lee el libro que amas tanto el CS las paginas del mensaje de Miller y veras que cumplio con el mensaje del primer y segundo angel. Y dicho sea de paso que acertaste con 2 fechas:

4º.-El 21 de marzo de 1844

5º.-El 18 de abril de 1844

Las otras no tuvieron impacto y no se las considera como un "chasco".

Bendiciones
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

¡Queda claro entonces que ni Guillermo Miller ni Ellen White, fijaron el día y la hora del regreso de nuestro Señor, como algunos lo han intentado exponer para desacreditarlos!

Sigue hundiendo a tus diositos...

“Es a medianoche cuando Dios decide librar a su pueblo. Mientras los impíos se burlan a su alrededor, repentinamente sale el sol, brillando en todo su esplendor, y la luna permanece” (Spiritual Gifts [Dones espirituales], vol. 1, p. 205).

Antes de dar la excusa patética de "medianoche" no quire decir "medianoche" tienes que entender que ella dice que el sol sale "repentinamente" así que es obvio que "medianoche" es "medianoche" (EST) :lach:
 
Re: Guillermo Miller: ¿Se equivocó o predicó un mensaje de Dios?

El mensaje de Miller no era distinto. El hecho de que "QUE JESUS REGRESABA E" tambien incluia una obra de juicio y preparación.

Pues si incluía una obra de Juicio y preparación obviamente eran antes de:

1º.- El 10 de febrero de 1843

2º.-El 15 de febrero de 1843

3º.-El 14 de abril de 1843

4º.-El 21 de marzo de 1844

5º.-El 18 de abril de 1844

No le des más vueltas al asunto... Los 5 mensajes eran MENTIRA pues Jesús no iba a regresar en esas fechas.