Re: Los que nunca guardaron, ni guardarán la ley del sábado.
Se debe observar el sábado como sagrado y santo
El Señor dijo: “Seis días trabajarás y harás toda tu obra más el séptimo día será reposo para Jehová tu Dios: No hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas” (Exodo 20:9-10). Al hombre se le dan seis días para que haga su obra (se dedique a su trabajo secular) y se le ordena reposar en el séptimo día para que lo dedique a su Dios.
El profeta Isaías nos dice cómo se debe observar este día: “Si retrajeres del sábado tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y al sábado llamares delicia, santo, glorioso de Jehová; y lo venerares, no haciendo tus caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus palabras: Entonces te deleitarás en Jehová…” (Isaías 58:13,14).
Este día debe ser observado desde la puesta del sol del viernes, hasta la puesta del sol del sábado.“Sábado de reposo será a vosotros… de tarde a tarde holgaréis vuestro sábado” (levítico 23:32).
El Sábado, memorial de la Creación
Dios, definiendo la causa de la observancia del Sábado, dice: “Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, la mar y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto Jehová bendijo el día del reposo y lo santificó” (Exodo 20:11); quedando así como memorial de la creación.
Este día fue santificado y bendecido para beneficio del mismo hombre: “También les dijo (Jesús): El sábado por causa del hombre es hecho; no el hombre por causa del sábado. Así que el Hijo del Hombre es Señor aun del sábado” (Marcos 2:27,28).
He aquí el ejemplo de Jesús: Jesús acostumbraba ir a la sinagoga en los sábados (Lucas 4:16) Enseñaba en los sábados (Lucas 4:31).
Después de la muerte de Jesús, sus discípulos guardaron el sábado: “Y vueltas, aparejaron drogas aromáticas y ungüentos; y reposaron el sábado conforme al mandamiento” (Lucas 23:56).
En los días de Pablo se registra que casi toda la ciudad de Antioquía de Pisidia dejó sus labores en día de sábado para oír la palabra deDios: “Y el sábado siguiente se juntó casi toda la ciudad para oír palabra de Dios.Y estos no eran judíos, sino gentiles”. (Hechos 13:42,44).
