Aunque pienso que Dios hace como quiere, y estos monjes tradujeron la Biblia casi que a escondidas y la Reina Valera es la copia mas fiel en español de las originales...
EL CANON LE PERTENECE A DIOS Y NO A NINGÚN SISTEMA RELIGIOSO
2Ti 4:13 Trae, cuando vengas, el capote que dejé en Troas en casa de Carpo, y los libros (G975), mayormente los pergaminos (G3200).
Biblion (G975) = Libros.
Membrana (G3200)= Piel de oveja, usada para la Escritura
Dios ha preservado su propio canón, tanto en el AT como en el NT.
Éxo 17:14 Y Jehová dijo a Moisés:
Escribe esto para memoria en un libro, y dí a Josué que raeré del todo la memoria de Amalec de debajo del cielo
Es el propio Jehová quien ordena a Moisés que escriba un registro de todo lo que está aconteciendo.
Éxo 24:4
Y Moisés escribió todas las palabras de Jehová, y levantándose de mañana edificó un altar al pie del monte, y doce columnas, según las doce tribus de Israel.
De manera que no tenemos dudas acerca de Moisés como el escritor de la Torá.
Deu 31:9
Y escribió Moisés esta ley, y la dio a los sacerdotes hijos de Leví, que llevaban el arca del pacto de Jehová, y a todos los ancianos de Israel.
Jos 1:7 Solamente esfuérzate y sé muy valiente,
para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas.
De la misma manera los libros de los profetas, fueron reconocidos por Cristo, luego de su resurrección, como se les hizo saber a los que iban camino a Emaús, leemos:
Luc 24:24 Y fueron algunos de los nuestros al sepulcro, y hallaron así como las mujeres habían dicho, pero a él no le vieron.
Luc 24:25 Entonces él les dijo: ¡Oh insensatos, y tardos de corazón
para creer todo lo que los profetas han dicho!
Luc 24:26 ¿No era necesario que el Cristo padeciera estas cosas, y que entrara en su gloria?
Luc 24:27
Y comenzando desde Moisés, y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían.
Y dentro de la Iglesia Primitiva, los evangelios entraban al canón, por cuanto procedían de un apóstol, como Pedro, o Juan, o Mateo, o de un historiador como el Dr. Lucas, autor también del libro de los Hechos.
La confección de estos textos, o evangelios, o cartas epistolares, gozaban de la confianza de ser escritos en los tiempos muy cercanos a la vida de Jesús, luego de su resurrección, por lo tanto, cualquier error o datación histórica, sería fácilmente advertida y corregida.
Y durante los primeros doscientos años la Iglesia del Señor poseyó un canón sin añadiduras de apócrifos, como ocurre cuando en el siglo III surge el catolicismo romano, con sus falsedades y doctrinas heréticas, con las cuales vienen engañando al mundo entero.
Y no solo eso, sino que se jactan mentirosamente de ser los "autores del canon", pero el de ellos.
No al que se refiere Cristo cuando el mismo sanciona los escritos de Moisés y de los profetas, como también los evangelios y las cartas epistolares, y hasta el mismo Apocalipsis.
La Gran Ramera que surge en el siglo III, con su magisterio católico, fue ideada por el mismo diablo para someter al creyente, a falsas doctrinas, como el ascenso en cuerpo y alma de la reina del cielo, la existencia del purgatorio, la salvación por obras, la veneración de estatuas y las invocaciones a los espíritus de los muertos, etcétera, etcétera.
Nos llaman "protestantes", pero solo es un tonto recurso de la impotencia, por cuanto no comulgamos con sus credos.
La cuota de sangre derrramada por la genuina Iglesia de Cristo en manos de las persecuciones que la Gran Ramera ha ejecutado a través de la historia, habla por si misma de su procedencia infernal.
