Re: ¿JESUS DIJO QUE ERA DIOS?
Cuando surgen discusiones bíblicas en torno al tema de si Cristo es “Dios”, o si la Trinidad es doctrina “verdadera” o no, es probable que una escritura que sea lanzada en la discusión, sea la de 1 Timoteo 3:16. Dice esta escritura, según la Versión Reina-Valera Revisada (RVR). También: Versión Rey Jaime; Versión Scío de San Miguel; Biblia Lutero, 1545; Versión Tyndale; Versión Coverdale, y Versión Webster): “E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, Justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles Creído en el mundo, Recibido arriba en gloria”.
Es sorprendente que un buen número de personas utilizan esta escritura en defensa de la doctrina de “la Encarnación” como “comprobación” o “prueba de texto”. Así lo hace el Comentario Bíblico de William Mac Donald al declarar: “Dios fue manifestado en carne se refiere al Señor Jesús, y en particular a Su Encarnación”.
Cuando se hace referencia a “la encarnación”, se observa que la forma en que la gente usa el término para defender la doctrina de la “encarnación” va más allá del significado básico de la palabra que se remonta al latín, (Incarnatio = incarno = en: caro, carne).
Por, ejemplo, el Online Etymology Dictionary define “encarnación” como: “Encarnación de Dios en la persona de Cristo”. El Diccionario Oxford de la Iglesia Cristiana define la enseñanza de este modo: “La doctrina cristiana de la Encarnación afirma que el Hijo eterno de Dios tomó carne humana de Su madre humana, y que el Cristo histórico es a la vez plenamente Dios y plenamente hombre”. (The Oxford Dictionary of the Christian Church, 2ª edición, por F.L. Cross y E.A. Livingstone. Editado por F.L. Cross, p. 696)
Tradicionalmente, ciertas Escrituras, tales como Juan 1:14, Filipenses 2:7, y 2 Juan 7 han sido utilizadas con frecuencia como referencias en relación a la doctrina. Pero primero, hay que señalar que la mayoría de las traducciones de la Biblia no son compatibles con la lectura de la RVR (y de su homóloga versión inglesa, King Jame Version [KJV]) de que “Dios fue manifestado en carne”.
La Versión Nueva Vida es una versión que estropea el texto, pues vierte 1Timoteo 3:16 así: “Dios en Cristo vino a la Tierra como hombre”. Sin embargo, esta última versión (VNV) es una traducción de la versión original en inglés (New Life Version), y ésta decía más apropiadamente: “Christ came to earth as a Man [Traducción: Cristo vino a la Tierra como hombre]”.
La traducción Reina-Valera Revisada tiene sus versiones variantes, y éstas presentan la misma lectura, a saber, “Dios”. No obstante, una variante, la Versión Reina-Valera Actualizada, tuvo el valor de desprenderse de la tradición del Textus Receptus o Texto Recibido, y presentó una lectura en el texto principal (El fue) que concuerda con la mayoría de las Biblias (aunque tiene una nota que informa que “Algunos mss antiguos dicen Dios fue”). Y la RVR 1977 tiene a Dios
entre corchetes (“[Dios] fue...”) indicando su origen dudoso.
Pero en lugar de “Dios”, otras Biblias presentan un cuadro diferente en 1Timoteo 3:16 al revelar quién realmente fue manifestado en carne, al presentar las siguientes lecturas: “Él”, “Aquel”, “que”, “el cual”, “el que”, “Cristo”, o “el Hijo de Dios” en referencia a Cristo. Estas traducciones manifiestan que no fue “Dios” quien fue hecho carne, sino su Hijo, Cristo.
¿Por qué será que la mayoría de las versiones bíblicas difieren de la popular RVR castellana, y de la KJV en inglés? Principalmente, por que estas dos versiones bíblicas se basan en el Texto Recibido. El Texto Recibido se basa en parte en algunos manuscritos de fecha más reciente (considerados de menos autoridad), que otros Textos Griegos no contienen. (El principio textual axiomático es que entre más antiguos sean los manuscritos, mayor probabilidad existe de su autenticidad.)
“Pocos problemas textuales han ocasionado tanto revuelo y controversia como éste...”, dice el New Commentary on the Whole Bible [Nuevo Comentario sobre la Biblia entera], editado por J.D. Douglas y Philip W. Comfort. Esta obra añade: “Muchos eruditos entraron en el debate – y no sin buena razón, ya que este versículo está relacionado con la doctrina de la encarnación”.
Ellos explican: “La mano de los escribanos originales del Códice Sinaiticus, Códice Alexandrinus, y Codex Ephraem Rescriptus escribieron‘[Aquel] que’, que fue cambiado entonces por escribanos posteriores, en tres manuscritos, para que leyera ‘Dios’ … En el texto original, el tema del versículo consiste simplemente en ‘aquel (o: el cual)’ – que la mayoría de los traductores vierten como ‘él’, y que la mayoría de los comentaristas identifican como Cristo”.
La American Standard Version traduce esta parte del versículo: “Aquel que fue manifestado en carne [He who was manifested in the flesh]”. Una nota al pie explica: “La palabra “Dios”, en lugar de Aquel que, no descansa sobre ninguna evidencia antigua suficiente. Algunas autoridades antiguas leen el cual [which]”. Y el Comentario Bíblico de Matthew Henry dice: “Aunque ‘Dios’ aparece a la cabeza de esta frase en gran número de MSS menos importantes, más bien parece desafortunado relleno de copistas, pues en la mente de Pablo y, en especial, en este contexto, resulta inaudita la idea de Dios Padre (gr. Ho Theós,sin más) manifestado en carne”. (Pág.1749, Traducido y adaptado por Francisco Lacueva. CLIE)También comenta la Biblia de Estudio MacArthur sobre esto: “En los mejores manuscritos se lee ‘Aquel que’ en lugar de ‘Dios’.
En cualquier caso, es una referencia clara a Cristo, quien manifestó al Dios invisible a la humanidad entera. (Jn. 1:1-4; 14:9;Col. 1:15; He. 1:3; 2 P. 1:16-18)”He aquí cómo vierten 1 Timoteo 3:16 algunas traducciones en inglés: “He who was manifested in the body” (New English Bible) “the Son of God became a man” (The Clear Word, Jack Blanco, Th.D; Adventista) “Which was manifested in the flesh” (Douay-Rheims) “He appeared in a body” (New International Version) “Christ came as a human” (Contemporary English Version) “He who was manifested in the flesh” (American Standard Version) “He who was revealed in the flesh”(New American Standard Bible) “He was manifested in the flesh” (Revised Standard Version) “Who was manifested in the flesh” (New American Bible) “Who was revealed in the flesh” (The Lexham English Bible)
Y cómo vierten 1 Timoteo 3:16 algunas traducciones castellanas: “Él fue manifestado en carne” (Biblia Peshitta en Español) “Aquel que fué manifestado en la carne” (Versión Moderna) “Cristo vino a la Tierra como hombre” (Nueva Biblia al Día) “el cual fue manifestado en la carne” (Bover-Cantera) “que se manifestó en [la] carne” (Sagrada Biblia, Cantera-Iglesias, Corchetes suyos)“ Él fue manifestado en la carne” (La Biblia de las Américas) “Cristo vino al mundo como ser humano”(Traducción en lenguaje actual) “Él se manifestó como hombre” (Nueva Versión Internacional) “Él [Nota: “Cristo”] ha sido manifestado en la carne” (Biblia de Jerusalén) “Cristo se manifestó en forma humana” (Castilian) “el cual fue manifestado en carne” (Sagrada Biblia, R.P. Serafín de Ausejo) “el Hijo de Dios se ha manifestado en carne mortal” (S. Biblia del Pueblo Católico) “Que se ha manifestado en la carne” (Nácar-Colunga) “el cual fué manifestado en carne”
(N.T. de Pablo Besson) “Cristo se manifestó corporalmente” (Biblia del Peregrino) “El se manifestó en la carne” (Levoratti-Trusso, Argentina) “Él fue manifestado en carne” (Versión Ecuménica, Barcelona) “Cristo vino al mundo como ser mortal” (Biblia Traducción Interconfesional) “el cual fue manifestado en la carne” (Sagrada Biblia, Versión Oficial Conferencia Episcopal Española)
La traducción católica NABRE (New American Bible Revised Edition) publicada en 2011 , traduce las palabras en disputa: “Quien [el cual] fue manifestado en la carne”. Yuna nota al pie dice lo siguiente: “Quien: la referencia es a Cristo, que es él mismo ‘el misterio de nuestra devoción’.
Algunos manuscritos predominantemente occidentales leen ‘el cual’, que armoniza el género del pronombre con el de la palabra griega para misterio; muchos manuscritos posteriores (del siglo octavo/noveno en adelante), principalmente bizantinos leen ‘Dios’, posiblemente por razones teológicas”.
¿Se dio cuenta que esta prestigiosa Biblia Católica reconoce que posiblemente “muchos manuscritos posteriores” dicen “Dios” en 1 Timoteo 3:16 “por razones teológicas” ?Cuando uno considera los hechos históricos sobre los acalorados debates “cristológicos” que transcurrieron por siglos después de la época de Cristo, no es ilógico concluir como lo hicieron los traductores de la Biblia NABRE, es decir, que posiblemente hubo corrupción textual en el manuscrito “por razones teológicas”.
Al parecer alguien quiso apoyar la doctrina de la Trinidad, yendo más allá de la lectura original. Tal vez por eso la lectura que aparece en 1 Timoteo 3:16 en la mayoría de las traducciones bíblicas no concuerda con la versión RVR y con la de King James que basan sus traducciones en el Texto Recibido. Por consiguiente, los que defienden apasionadamente la doctrina de “la Encarnación” apoyándose en 1 Timoteo 3:16 lo hacen sobre un fundamento equivocado. ¿Pero no enseña la Biblia la doctrina de “la encarnación”? ¡Realmente no!
Consideremos tres escrituras utilizadas con frecuencia en apoyo de la doctrina, a saber: Juan 1:14, Filipenses 2:7, y 2 Juan 7.
Juan 1:14 nos dice: “Y aquel Verbo fue hecho carne”. Observe que fue “el Verbo” o, “la Palabra”, que fue hecho carne, no “Dios”. Esta escritura está totalmente de acuerdo con las lecturas de los manuscritos más antiguos de 1 Timoteo 3:16, pero no con los manuscritos posteriores que la contradicen. Hay una gran diferencia entre decir que “el Verbo fue hecho carne” y otra decir que “Dios fue hecho carne”.
Ahí está el error de muchos, cuando confunden los dos. Juan 1:2 dice que fue ‘el Verbo quien estaba en el principio con Dios’. Juan 1:18 nos comunica que únicamente es “el Dios Unigénito” [o, el Hijo Unigénito], quien es ‘capaz de explicar al Padre invisible’. Otras descripciones que se hacen de este ‘Verbo hecho carne’ en el capítulo primero de Juan son: “el Cordero de Dios”; el “Hijo de Dios”; y “el Hijo del hombre”. (Vv. 29, 34, 36, 49,51)
En ninguna parte se dice que este Verbo sea idéntico a Dios, o que él sea “Dios” Todopoderoso, ni siquiera en la escritura “más discutida” de Juan 1:1, donde la comprensión correcta de esta escritura no contradice las descripciones acerca del Cristo en el capítulo primero. Juan 1:1 dice que ‘el Verbo existía con Dios en el principio’, por lo que lógicamente, no podía ser el Dios con quien estaba. Por tanto, algunos traductores vierten apropiadamente a Juan 1:1c de manera diferente: “el Verbo era divino” (o: “un dios”; “un ser divino”). Incluso si “Dios” sea su lectura preferida en Juan 1:1c, no debe ser entendida dentro del molde conceptual trinitario, pero en un sentido adjetival, descriptivo de la naturaleza divina del Logos.
Filipenses 2:6,7 también se cita a menudo en apoyo a la doctrina de “la encarnación”. Esto es lo que dice esta escritura en su contexto: “5 Considerad entre vosotros lo que hubo también en Jesús el Mesías, 6 el cual, existiendo en forma de Dios [o: “siendo de condición divina”, Biblia de Navarra], no quiso por usurpación ser igual con Dios, 7 sino que se despojó a sí mismo tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; 8 y hallándose en la condición de hombre, se humilló a sí mismo al hacerse obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. 9 Por lo cual Dios también lo exaltó hasta lo sumo, y le dio el nombre que es sobre todo nombre; 10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra, 11 y toda lengua confiese que Jesús el Mesías es el Señor para gloria de Dios Padre”. (Biblia Textual)
Tampoco hay nada en estas Escrituras que realmente apoye la doctrina de “la encarnación”, como usualmente se define. Algunos ven en el versículo seis de Filipenses del capítulo 2, “evidencia” de que Cristo es Dios. Pero el texto no dice eso. Lo único que dice el texto es que Cristo ‘existía en la forma de Dios’. Pero decir que ‘existía en la forma de Dios’, no equivale a decir cómo quieren entender algunos, a saber, “que era Dios”.
Otra manera de describir lo que significa ‘existir en la forma de Dios’ es traducirlo como lo hace la Biblia de Navarra, y también la Biblia de América, cuya lectura (“siendo de condición divina”) no requiere que Cristo sea idéntico a Dios, ya que es ‘su Hijo’, como se manifiesta claramente en las Escrituras. Traducirlo así concuerda perfectamente con otros detalles suministrados por Pablo aquí: Se dice que Cristo Jesús ‘se humilló; se hizo obediente hasta la muerte; Dios lo exaltó hasta lo sumo y le dio el nombre que es sobre todo nombre...para la gloria de Dios Padre’.
Sí, Dios Todopoderoso jamás tiene que humillarse a otro; no necesita ser obediente a nadie; tampoco necesita que otro lo ensalce hasta lo sumo (ya que Dios siempre es y será el Ser Supremo, y no puede ser ensalzado más allá de su posición suprema); y Dios el Padre, siempre es y será el que recibe toda máxima gloria. (Mateo 4:10) Jesús mismo había dicho: ‘Honro a mi Padre’, y “Yo no busco mi gloria”. (Juan8:49-50)En ningún momento o lugar estas Escrituras dicen que “Dios fue hecho carne”.
La Biblia Católica NABRE citada anteriormente tiene la siguiente nota al pie explicando el versículo 6: “Ya sea una referencia a la preexistencia de Cristo y aquellos aspectos de la divinidad que estaba dispuesto a renunciar a fin de servir en forma humana, o a lo que el hombre Jesús rechaza agarrar para alcanzar divinidad. Muchos ven una alusión a la historia del Génesis: a diferencia de Adán, Jesús, sin embargo... en la forma de Dios (Gén 1:26-27), no procuró alcanzar igualdad con Dios, en contraste con el primer Adán en el Gén 3:5-6”.
2 Juan 7 es otra escritura frecuentemente citada a favor de la doctrina de “la encarnación”. Juan advirtió: “Porque muchos engañadores han salido por el mundo, que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne [o: ‘que Jesucristo vino como hombre verdadero’, Dios habla hoy]. Quien esto hace es el engañador y el anticristo”. Como cristiano, jamás negaría la concreta verdad de que Cristo Jesús (la Palabra de Juan 1:14) fue hecho carne, porque eso es lo que dice la Biblia.
En contraste a ésa enseñanza bíblica, no puedo aceptar la doctrina de “la Encarnación”, como se enseña, a saber, que fue ‘Dios mismo quien fue hecho carne’, y que “fue totalmente Dios y hombre” al mismo tiempo en la tierra. Ninguna de las Escrituras que se han considerado hasta ahora o alguna otra afirman tal cosa.
Además, ese lenguaje es ajeno a la Biblia. 2 Juan 3 hace una distinción entre el Dios el Padre y de Cristo Jesús, el Hijo al decir: “La gracia, la misericordia y la paz de Dios el Padre y de Jesucristo, el Hijo del Padre, estarán con nosotros en verdad y en amor”. (NVI) En conformidad con 2 Juan 3 y 7, 1 Juan 4:2 nos dice: “Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne [en cuerpo humano, NVI], es de Dios”.
Mientras estuvo en la tierra, Jesús habló abiertamente de su condición subordinada: “...el Hijo de Dios no puede hacer nada por su propia cuenta”. (Juan 5:19, Dios habla hoy) ‘El Padre es más grande que yo’. (Juan 14:28, NVI) ‘Hay cosas de las cuales Jesús no sabía’. (Marcos 13:32, Apocalipsis 1:1) Y en su futuro Reino, Jesús no sería todopoderoso, pues tendría limitaciones. (1 Corintios 15:28)
Jesús declaró que no tenía derecho de asignar los asientos en su Reino para que otros se sentaran junto a él. Mateo 20:20-23dice: “20-21 La madre de Santiago y Juan, que eran dos de los discípulos, fue con ellos a hablar con Jesús. Cuando llegaron, ella se arrodilló delante de Jesús para pedirle un favor. Jesús le preguntó: — ¿Qué es lo que quieres? Ella le dijo: —Por favor, ordena que, cuando estés sentado en el trono de tu reino, mis hijos se sienten siempre junto a ti, uno a tu derecha y otro a tu izquierda. 22 Jesús respondió: —Ustedes no saben lo que piden. ¿Están dispuestos a sufrir todo lo malo que va a pasarme? Ellos le dijeron. —Sí, lo estamos. 23 Jesús les dijo: —Les aseguro que ustedes sufrirán mucho, igual que yo. Pero sólo mi Padre decide quiénes serán los más importantes en mi reino. Eso no lo decido yo”. (Traducción en lenguaje actual)
Además, el resucitado y glorificado Cristo aparece en el registro bíblico llamando a su Padre, “mi Dios”. (Juan 20:17; Apocalipsis 3:12) No, Jesucristo no era ‘Dios hecho carne’. De hecho, la Escritura más traducida y reconocida mundialmente (Juan 3:16) dice esto: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”. (RVR) Fue “el Hijo de Dios” quien vino a ser carne.
Cuando se entienden estas declaraciones tal como están escritas, se desvanece el “misterio” de la doctrina de la Trinidad. La Traducción en lenguaje actual lo pone claro y sencillo para nosotros (2 Juan 7): “En el mundo hay muchos que engañan a la gente diciendo que Jesucristo no vino al mundo como un hombre de verdad, de carne y hueso. Eso lo dice el Enemigo de Cristo, que es un mentiroso”.
Acepto plenamente esta declaración. Por lo tanto, sería irónico que “los engañadores”, al atribuir falsa identidad al personaje mencionado en 2 Juan 7 que viene a la Tierra, podrían terminar siendo los que avanzan una doctrina que Juan nunca enseñó, a saber, que “Dios vino al mundo como un hombre”.
En contraste, Juan claramente dice que fue “Jesucristo”, el Hijo de Dios quien vino en carne. Y en armonía con lo que está escrito en Juan 3:16, Juan también nos dice: “Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él”; “... el Padre ha enviado al Hijo, el Salvador del mundo”; “Nadie ha visto jamás a Dios”. (1 Juan 4:9, 12, 14) No obstante, sí ‘vieron’ a Jesucristo venido en carne como hombre.
¿Dónde, pues, surgió el concepto de “la Encarnación”? Una fuente confiable contesta: “La doctrina, que tomó forma clásica bajo la influencia de las controversias de los siglos 4to y 5to..., fue formalmente definida en el Concilio de Calcedonia de 451 (q. v.)
Fue moldeada en gran parte por la diversidad de tradición en las escuelas de Antioquía y Alejandría, una haciendo hincapié especialmente en los aspectos humanos del Cristo Encarnado y la otra, bajo la influencia de una filosofía platonizante, de Su Divinidad [...] Sin embargo, la Definición fue apenas una solución; sólo determinaba los límites de la ortodoxia. Dentro de estos límites, más refinamientos fueron añadidos en los períodos patrísticos y medievales posteriores”.
(El Diccionario Oxford de la Iglesia Cristiana, editado por F. L. Cross. Op.cit., p. 696)