Re: La pena de muerte
-----------------------------------------
Deuteronomio 13:6
Si te incitare tu hermano, hijo de tu madre, o tu hijo, tu hija, tu mujer o tu amigo íntimo, diciendo en secreto: Vamos y sirvamos a dioses ajenos, que ni tú ni tus padres conocisteis,
Deuteronomio 13:7
de los dioses de los pueblos que están en vuestros alrededores, cerca de ti o lejos de ti, desde un extremo de la tierra hasta el otro extremo de ella;
Deuteronomio 13:8
no consentirás con él, ni le prestarás oído; ni tu ojo le compadecerá, ni le tendrás misericordia, ni lo encubrirás,
Deuteronomio 13:9
sino que lo matarás; tu mano se alzará primero sobre él para matarle, y después la mano de todo el pueblo.
Deuteronomio 13:10
Le apedrearás hasta que muera, por cuanto procuró apartarte de Jehová tu Dios, que te sacó de tierra de Egipto, de casa de servidumbre;
Deuteronomio 13:11
para que todo Israel oiga, y tema, y no vuelva a hacer en medio de ti cosa semejante a esta.
Me parece que es obvio que Dios dio mandamiento de matar a las personas que ante Él eran culpables de muerte ... y que éste mandamiento se lo dio a a personas como tú y como yo ... así que el querer negar lo evidente no me parece de recibo en un debate serio ... así que mejor lo dejamos porque veo que no se quiere reconocer la verdad.
Que Dios les bendiga a todos
Paz a la gente de buena voluntad
¿HAS NOTADO QUE DIOS CONCEDIÓ A JESUS EL TITULO DE SUMO SACERDOTE ?
En el Antiguo Testamento, Dios constituyó sacerdotes para
que sirvieran en el santuario, escogiendo para esta función, a los
descendientes de Leví; dentro de estos sacerdotes, Dios también constituyó a
un sumo sacerdote para que presentara ofrendas y sacrificios por los pecados
del pueblo (He. 5:1);
este privilegio era exclusivo de los descendientes de
Aarón, sin embargo, en el Nuevo Pacto Jesucristo fue constituido por Dios
como Sumo Sacerdote, según el orden de Melquisedec (Gn, 14:1820;
Sal. 110:4: He. 5:56; 5:810),
es decir, un sacerdocio eterno (He. 7:410).
Jesús es quien limpia nuestros pecados e intercede por nosotros ante el Padre (1 Jn. 2:1). Esta faceta del
mensaje de Dios, nos enseña también varios aspectos:
· No necesita ofrecer sacrificios por sus propios pecados, como los
sacerdotes del orden de Leví (He. 7:2628).
· Se compadece de nuestras flaquezas, por cuanto El mismo fue tentado en
todo, pero sin pecado (He. 4:1416).
· Es poderoso para socorrer a los que son tentados (He. 2:1718).
¿Has notado que la biblia compara a Jesús con
Moisés, el personaje más grande del Antiguo Pacto; manifestando la
superioridad de Jesús sobre Moisés? porque Moisés fue fiel a
Dios únicamente como siervo, pero Jesús fue fiel a Dios, como Hijo y es
evidente que un hijo siempre es mayor que un siervo, porque el siervo gobierna
sobre lo que no es propio, pero
un hijo gobierna sobre lo que le pertenece.
Antes que matar a los pecadores dió su vida por ellos, y te aseguro que así como dijo: Soy Señor del sábado, también al dar su vida por los pecadores se hizo dueño de esas vidas, acerca de lo cual nos indicó no proferir pero ni siquiera un insulto para no ser reos de juicio por homicidio.
Vemos que Moisés luego que bajaba del monte su rostro resplandecía (Ex.
34:29), pero Jesús estando en el monte fue transfigurado totalmente (Mt. 17:2;
Mrc. 9:23);
también leemos que cuando Moisés guiaba a Israel por el desierto
ellos comieron pan del cielo, pero Jesús le revela al pueblo que Él es el
verdadero pan que descendió del cielo (Jn. 7:3233,35);
también esta escrito
que Dios le dijo a Moisés que no entraría a Canaán por haber desobedecido al
golpear la roca (Nm. 20:1112),
pero de Jesús dice
“Este es mi Hijo amado, en
quien se agrada mi alma” (Mt. 3:17,12:18,17:5). Por otra parte, una de las
funciones de Jesús, como Hijo de Dios consistía en edificar una casa para Dios,
conforme a la promesa que Dios le hizo a David (2 S. 7:117)
y, también es
evidente que tiene más honra quien edifica una casa, que la casa misma (He.
3:3). Esa casa que el Hijo habría de edificar para el Padre, no es hecha por
manos de hombre, ni es una casa de cedro como la que David quería edificar a
Dios, sino que es una casa hecha de piedras vivas, las cuales somos nosotros
(He. 3:6; 1 P. 2:5).
Nádie puede ser salvo sí antes no ha conocido a Jesús como aquel a quien Dios envió
para que muriera por nuestros pecados. El hijo de Dios manifestó "Si supierais lo que significa 'misericordia quiero y no sacrificios' y lejos de quitarle la vida a los pecadores dió su propia vida por ellos.
· Fue enviado para que el mundo fuera salvo por medio de El (Jn. 3:17).
· La obra de Dios consiste en creer en aquel a quien El ha enviado (Jn. 6:2829).
· La vida eterna consiste en conocer a Dios y a su Hijo Jesucristo, a quien El
ha enviado (Jn. 17:3).
· Jesús oraba al Padre, para que aquellos que estaban al rededor de El,
creyeran que Dios le había enviado (Jn. 11:4142).
Dios envíoa Jesús para que el mundo sea
salvo por El, así como el sumo sacerdote que se compadece de nuestras
debilidades.
Por lo tanto, como dice el Espíritu Santo: Sí oyeres hoy su voz, no
endurezcáis vuestros corazones... (He. 3:8).