Re: Los Verdaderos creyentes NO CUESTIONAN las Leyes ni los MANDAMIENTOS DEL ETERNO
Salud marcelinoc:
El hombre ya era pecador desde antes que existiera la ley pero no era conciente de ello. La ley fue dada por Dios para que el hombre lo supiera, por eso Pablo dice que conocimos el pecado por la ley; es decir, la infracción a la ley solo nos muestra que existe pecado. Entonces, cuando nosotros pecamos, no pecamos porque exista la ley sino porque esa es nuestra naturaleza; pero como la ley fue puesta para nuestra conciencia, cada vez que la quebrantamos, somos concientes de que pecamos.
Cuando Dios creo a Adán, la narración dice que Dios sopló en su nariz aliento de vida; este aliento se refiere al Espíritu Santo quien es el dador de VIDA, y por esta razón, cuando Adán desobedeció al mandamiento de Dios: "del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás", el Espíritu Santo salió de Adán y Adán murió.
Mira que Adán no murió a la vida terrenal sino a la comunión con el Espíritu Santo, al conocimiento de Dios que es la fuente de todo bien, y por ello tenemos una naturaleza inclinada hacia el mal, una naturaleza pecaminosa. El pecado es la manifestación, o la consecuencia, de nuestra naturaleza que se refleja infracciones a la ley.
Cuando Jesucristo vino, su misión fue reconciliarnos con Dios, y por lo tanto, a cada uno de los que cree en su resurrección y se somete a su Señorío, Dios le da una nueva naturaleza que es guiada por el Espíritu Santo según el plan original antes de la caída de Adán. Esta nueva naturaleza, u hombre interior como lo llama Pablo, actúa de acuerdo con la voluntad de Dios y por lo tanto ya no necesita de la ley para conocer el pecado, puesto que ya no hay pecado en él.
Pero todo esto no quiere decir que nuestra vieja naturaleza deje de manifestarse, y ahí es donde entra nuestra propia voluntad, pues nuestra responsabilidad es hacer morir a la vieja naturaleza mediante la renovación de nuestro entendimiento, de tal manera que el hombre espiritual interior crezca y se fortalezca para que la domine. Es una lucha ardua y difícil, pero afortunadamente no estamos solos sino que contamos con la ayuda del Espíritu Santo que nos da la fuerza necesaria para vencer.
Acuérdate que la fe es la convicción de lo que no se ve, y el Espíritu Santo no se ve, pero es real. La única cosa que nos puede dar la convicción de la acción del Espíritu Santo en nosotros, es la comunión íntima con Él. Él es el que nos da esa convicción, Él es el que nos da la fe. Pero todo se debe traducir en obras pues la manifestación del Espíritu Santo es en amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y dominio propio. Si no hay esto, pues no hay Espíritu Santo en nuestra vida; y si aseguramos que somos de Él cuando no lo somos, lo estamos haciendo mentiroso y nuestra condenación es segura. Por eso dice que lo que no es de fe es pecado, y también que todo aquel que sepa hacer lo bueno y no lo haga, le es pecado.
Ahora, mira que la esencia de Dios es el amor, DIOS ES AMOR, por eso la única ley espiritual que mueve al universo es el amor. Jesucristo nos dijo que aquellos que oyen su voz son de Él, y Jesucristo solo vino a hablar del amor del Padre; su sacrificio fue por amor y la motivación nuestra debe ser el amor.
Gracia y paz.
CIRCONBRILLANTE:
Repito el post, para corregir la solola redaccion,pero el contenido es el mismo.
En el punto uno dices que el hombre no peca poque quebrante la ley, pero luego afirmas lo contrario al decir que la ley es quebrantada cuando el hombre peca.
Dime como defines lo que es pecado. Para entenderte. Pues para mi:
"Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley; pues el PECADO ES infracción de la ley". I Juan 3:4
"todo lo que no proviene de fe, ES PECADO". Romanos 14:23
"y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le ES PECADO". Santiago 4:17
En el punto dos, como concluyes que la UNICA ley es la del amor ??
Respecto al punto tres, crees que los nacidos de nuevo, ya no necesitan mandamientos de Dios?
Aparte de lo anterior no crees que la fe forma parte de la ley de Dios?
BENDICIONES.
Salud marcelinoc:
El hombre ya era pecador desde antes que existiera la ley pero no era conciente de ello. La ley fue dada por Dios para que el hombre lo supiera, por eso Pablo dice que conocimos el pecado por la ley; es decir, la infracción a la ley solo nos muestra que existe pecado. Entonces, cuando nosotros pecamos, no pecamos porque exista la ley sino porque esa es nuestra naturaleza; pero como la ley fue puesta para nuestra conciencia, cada vez que la quebrantamos, somos concientes de que pecamos.
Cuando Dios creo a Adán, la narración dice que Dios sopló en su nariz aliento de vida; este aliento se refiere al Espíritu Santo quien es el dador de VIDA, y por esta razón, cuando Adán desobedeció al mandamiento de Dios: "del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás", el Espíritu Santo salió de Adán y Adán murió.
Mira que Adán no murió a la vida terrenal sino a la comunión con el Espíritu Santo, al conocimiento de Dios que es la fuente de todo bien, y por ello tenemos una naturaleza inclinada hacia el mal, una naturaleza pecaminosa. El pecado es la manifestación, o la consecuencia, de nuestra naturaleza que se refleja infracciones a la ley.
Cuando Jesucristo vino, su misión fue reconciliarnos con Dios, y por lo tanto, a cada uno de los que cree en su resurrección y se somete a su Señorío, Dios le da una nueva naturaleza que es guiada por el Espíritu Santo según el plan original antes de la caída de Adán. Esta nueva naturaleza, u hombre interior como lo llama Pablo, actúa de acuerdo con la voluntad de Dios y por lo tanto ya no necesita de la ley para conocer el pecado, puesto que ya no hay pecado en él.
Pero todo esto no quiere decir que nuestra vieja naturaleza deje de manifestarse, y ahí es donde entra nuestra propia voluntad, pues nuestra responsabilidad es hacer morir a la vieja naturaleza mediante la renovación de nuestro entendimiento, de tal manera que el hombre espiritual interior crezca y se fortalezca para que la domine. Es una lucha ardua y difícil, pero afortunadamente no estamos solos sino que contamos con la ayuda del Espíritu Santo que nos da la fuerza necesaria para vencer.
Acuérdate que la fe es la convicción de lo que no se ve, y el Espíritu Santo no se ve, pero es real. La única cosa que nos puede dar la convicción de la acción del Espíritu Santo en nosotros, es la comunión íntima con Él. Él es el que nos da esa convicción, Él es el que nos da la fe. Pero todo se debe traducir en obras pues la manifestación del Espíritu Santo es en amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y dominio propio. Si no hay esto, pues no hay Espíritu Santo en nuestra vida; y si aseguramos que somos de Él cuando no lo somos, lo estamos haciendo mentiroso y nuestra condenación es segura. Por eso dice que lo que no es de fe es pecado, y también que todo aquel que sepa hacer lo bueno y no lo haga, le es pecado.
Ahora, mira que la esencia de Dios es el amor, DIOS ES AMOR, por eso la única ley espiritual que mueve al universo es el amor. Jesucristo nos dijo que aquellos que oyen su voz son de Él, y Jesucristo solo vino a hablar del amor del Padre; su sacrificio fue por amor y la motivación nuestra debe ser el amor.
Gracia y paz.