Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

18 Noviembre 1998
12.218
21
blogs.periodistadigital.com
Fuente: http://infocatolica.com/blog/coradcor.php/caamano-nos-pone-a-los-cristianos-ante-l

Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Hoy toca analizar dos sentencias pronunciadas en situaciones ciertamente distintas pero con un mismo tema en común:

“Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres” (Pedro y los apóstoles al Sanhedrín, Jerusalén)
“La libertad de conciencia no puede ser una excusa permanente para desobedecer la ley” (Caamaño a los españoles, El Escorial)
La primera frase fue la respuesta de los apóstoles a aquellos que les querían prohibir la predicación del evangelio. La segunda es la advertencia del ministro de Justicia a aquellos que osen pensar que el gobierno de Zapatero va a permitir que los que cristianos apelen a su conciencia para oponerse a sus leyes de ingeniería social. Y dado el absoluto control que tiene este gobierno sobre los tribunales que acabarán dictaminando si esas amenazas, una vez concretadas en la ley de libertad religiosa, son conformes a la constitución, pues vayámanos haciendo a la idea de que en no mucho tiempo serán bastantes los cristianos que en España tendrán que optar entre seguir el ejemplo de los apóstoles ante las autoridades religiosas de Jerusalén o agachar la cabeza, poner un esparadrapo en la boca de su conciencia y cumplir leyes que chocan radicalmente contra sus valores y contra su fe.

Dejar la libertad religiosa en manos de un gobierno de mentalidad totalitaria, anticlerical y laicista es como poner de jefe de bomberos a un pirómano. El zapaterismo es a la libertad religiosa, en especial si es la libertad de los católicos, lo mismo que el castrismo a la democracia. En esa guerra abierta por amaestrar la conciencia de los españoles, el socialismo que nos gobierna sabe muy bien que es en el ámbito de la religión donde encuentra a su peor enemigo. Quienes tenemos fuertes convicciones religiosas no somos como las mascotas domésticas que saltan alegremente alrededor de sus amos cuando les dan una golosina. Los cristianos de verdad no queremos participar en la comisión de abortos, no queremos dejar que nuestros hijos sean adoctrinados, no deseamos acabar nuestras vidas en manos de doctores Montes. Y claro, como no van a convencernos por las buenas, van a usar la ley para someternos.

Recuerdo, cuando el 31 de diciembre del 2007 se celebró la primera “concentración” de católicos en la Plaza de Colón, que el cardenal García Gasco realizó unas manifestaciones que escandalizaron a muchos. Las reproduzco a continuación:
La cultura del laicismo radical es un fraude y un engaño. No construye nada. Solo conduce a la desesperanza: por el camino del aborto, del “divorcio express” y de las ideologías que pretenden manipular la educación de los jóvenes, no se llega a ningún destino digno del hombre y de sus derechos. Por ese camino no se respeta la Constitución española de 1978 y nos dirigimos a la disolución de la democracia.

¿Qué tal suenan hoy las palabras del cardenal arzobispo emérito de Valencia después de escuchar al ministro de Justicia decir que “también la libertad religiosa tiene que tener límites…. y debe moverse dentro de los límites de una sociedad democrática, y ajustarse a la lógica de esta sociedad“? ¿cuántos obispos, cuántos sacerdotes y cuántos fieles somos conscientes de que el régimen que nació de la constitución de 1978 ha evolucionado hacia una realidad que atenta contra aquello en lo que creemos y por lo que vivimos? Y, sobre todo, ¿qué respuesta daremos a lo que se nos viene encima? ¿sacrificaremos como muestra de adoración al Emperador? ¿Nos negaremos a sacrificar pero compraremos fraudulentamente certificados de haber realizado dichos sacrificios para salvarnos el cuello? ¿o haremos lo que Dios quiere que hagamos?

Luis Fernando Pérez Bustamante
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

la ley de los hombres puede ser modificada, pero la ley de Dios no, ahora como hombres podemos mejorar, pero nadie sabe lo que piense Dios , solo tenemos lo que dice la biblia al respecto , pero si lo piensan con logica es una referencia y el mundo a evolucionado. por lo que exites en el derecho lo que se llama culpa inexcusable que significa que al momento de omterse un crimen ay que tener en cuenta la cultura y las costumbres de una persona , ya que en determinadas culturas robar o cortar un dedo esta permitido , eso se aplica a los indios normalmente . Pero dudo que se aplique a un ciudadano occcidental y menos por religion . Por eso la conclusion final es que si nos gobierna una democracia debemos respetar y seguir las leyes de ella , le duela a quien le duela .:FIREdevil
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

la ley de los hombres puede ser modificada, pero la ley de Dios no, ahora como hombres podemos mejorar, pero nadie sabe lo que piense Dios , solo tenemos lo que dice la biblia al respecto , pero si lo piensan con logica es una referencia y el mundo a evolucionado. por lo que exites en el derecho lo que se llama culpa inexcusable que significa que al momento de omterse un crimen ay que tener en cuenta la cultura y las costumbres de una persona , ya que en determinadas culturas robar o cortar un dedo esta permitido , eso se aplica a los indios normalmente . Pero dudo que se aplique a un ciudadano occcidental y menos por religion . Por eso la conclusion final es que si nos gobierna una democracia debemos respetar y seguir las leyes de ella , le duela a quien le duela .:FIREdevil

O sea, que si una democracia le exige a un médico cristiano que practique un aborto, entonces debe de practicar el aborto, ¿verdad?

Pues mire, no.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

determinadas culturas robar o cortar un dedo esta permitido , eso se aplica a los indios normalmente .

¿podrías especificar a que te refieres?

gracias
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Dejar la libertad religiosa en manos de un gobierno de mentalidad totalitaria, anticlerical y laicista es como poner de jefe de bomberos a un pirómano. El zapaterismo es a la libertad religiosa, en especial si es la libertad de los católicos, lo mismo que el castrismo a la democracia. En esa guerra abierta por amaestrar la conciencia de los españoles, el socialismo que nos gobierna sabe muy bien que es en el ámbito de la religión donde encuentra a su peor enemigo.

Estimado Luis.

Debemos como cristianos, pensar muy bien los términos, porpuestas y demandas en materia de religión y no proque no tengamos derecho a ello, sino lo que ahora demandamos otros grupos religiosos como el Islam demandarán tambien como de suyo.

Saludos
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Al salvajismo

-------------


salvajismo.



1. m. Modo de ser o de obrar propio de los salvajes.

2. m. Cualidad de salvaje.

Indio u originario de, nativo de América no es sinonimo de "salvaje", ¿o te parece que lo es?

Saludos.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Indio u originario de, nativo de América no es sinonimo de "salvaje", ¿o te parece que lo es?

Saludos.

Antes de la llegada de Cristo, antes de llegada la Civilizacion eran unos simples salvajes
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Antes de la llegada de Cristo, antes de llegada la Civilizacion eran unos simples salvajes

vaya

Lo que hay que leer.

En fin.

No quiero distraer el tema de Luis Fernando.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

O sea, que si una democracia le exige a un médico cristiano que practique un aborto, entonces debe de practicar el aborto, ¿verdad?

Pues mire, no.

Pues aunque no lo creas Luis, la culpa es de nosotros. Cristo ha sido despojado de su túnica que se juegan a suerte. Desde el siglo XIX Cristo ha sido desterrado del gobierno, de la ciudad, de la escuela y ahora finalmente esta siendo desaterrado de las familias.

No son los enemigos los culpables. Somos nosotros, cristianos somnolientos, aburguesados, cómodos, indiferentes, y cobardes, nosotros somos los únicos culpables.

La democracia debe saber que los valores cristianos son innegociables, sin embargo no se cuando pasamos de cristianizar la democracia a democratizar al cristianismo.

Saludos.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Estimado Luis.

Debemos como cristianos, pensar muy bien los términos, porpuestas y demandas en materia de religión y no proque no tengamos derecho a ello, sino lo que ahora demandamos otros grupos religiosos como el Islam demandarán tambien como de suyo.

Saludos

Yo no sé en otros países, pero en España los musulmanes son perfectamente libres para practicar su fe. Y no me cabe la menor duda de que si el gobierno socialista acaba "limitando" la libertad religiosa en este país, el Islam no será afectado lo más mínimo. Está claro a por quiénes van.

Kal_El, sobre algo parecido a eso que cuentas escribí el mes pasado. Copio el post:

La democracia deja de ser un sistema legítimo si permite el asesinato de inocentes


La Humanidad ha conocido una gran variedad de sistemas políticos a lo largo de su historia. No es necesario enumerarlos todos. España se gobierna actualmente por un sistema democrático que, consideraciones aparte sobre su carácter partitocrático y sobre la deficiente separación real de poderes, no se diferencia gran cosa del resto de democracias occidentales. Por tanto, lo que se diga respecto a la democracia de nuestro país vale para el resto de las naciones que forman parte de ese concepto sociopolítico, y otrora religioso, llamado Occidente.

La doctrina social de la Iglesia Católica admite la legitimidad del régimen democrático e incluso tiene palabras elogiosas hacia el mismo. Así, podemos leer lo siguiente en encíclica la Centesimus annus de Juan Pablo II:

La Iglesia aprecia el sistema de la democracia, en la medida en que asegura la participación de los ciudadanos en las opciones políticas y garantiza a los gobernados la posibilidad de elegir y controlar a sus propios gobernantes, o bien la de sustituirlos oportunamente de manera pacífica” (Centesimus annus, 46).

Ahora bien, en esa misma encíclica, el recordado antecesor del actual Papa, advertía de lo siguiente:

Una auténtica democracia es posible solamente en un Estado de derecho y sobre la base de una recta concepción de la persona humana” (idem).

Aun más, el Papa polaco no dudó en afirmar que “si no existe una verdad última, la cual guía y orienta la acción política, entonces las ideas y las convicciones humanas pueden ser instrumentalizadas fácilmente para fines de poder. Una democracia sin valores se convierte con facilidad en un totalitarismo visible o encubierto, como demuestra la historia” (idem).

El problema de la democracia española no es la ausencia de valores. El drama es que los valores que se están integrando en el ADN del sistema son los de la cultura de la muerte. Habrá quien me llame fundamentalista por ello y sin duda no soy nada políticamente correcto, pero no puedo dejar de decir que un sistema que llama derecho al asesinato de un ser humano en el seno de su madre tiene, según mi comprensión de la doctrina católica, la misma legitimidad que pueda tener un sistema que permite el asesinato de un ser humano por el hecho de pertenecer a determinada raza o por profesar tal o cual credo.

En realidad, si el derecho a la vida es una cuestión a decidir en unas urnas, de tal forma que el voto de una mayoría, por muy cualificada que sea, justifica la limitación de ese derecho, ¿qué otros derechos no pueden ser conculcados y anulados a través del voto? O se admite un límite moral anterior y superior a cualquier régimen político, sea este el que sea, que no permita cruzar determinadas líneas, o no habrá forma de parar los abusos que siempre, siempre, acaban cebándose con los más desprotegidos de cualquier sociedad.

En definitiva, en España, y en gran parte de Occidente, estamos viviendo una gran farsa que, a su vez, refleja una gran verdad. A saber, que una sociedad enferma sólo puede producir una democracia corrupta como la actual, en la que uno de cada seis embarazos acaban en el cubo de la basura con el permiso de nuestros representantes en las Cortes.

Sin embargo, hemos de saber que no hay nada que haga el hombre que no acabe teniendo consecuencias. Si muerte sembramos, muerte recogeremos, si es que no la estamos recogiendo ya. No hace falta ser profeta para discernir que esta nación, si no se arrrepiente del camino de iniquidad en el que está caminando desde hace décadas, recibirá el pago que merece por su comportamiento. No sabemos bien en qué se traducirá tal cosa. Cuando lo sepamos, quizás será demasiado tarde para dar marcha atrás. Por eso es esencial que la Iglesia tome el protagonismo que le pertenece y, aun a riesgo de ser calumniada, vejada y despreciada por quienes viven ajenos a la misma o incluso por algunos de sus miembros, se comprometa a denunciar el avance de la cultura de la muerte y a promover la cultura de la vida de forma incansable y a través de todos los instrumentos de que dispone. Porque si los que somos cristianos no nos oponemos a lo que ven nuestros ojos, ¿quién lo hará?

Luis Fernando Pérez Bustamante
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Yo no sé en otros países, pero en España los musulmanes son perfectamente libres para practicar su fe. Y no me cabe la menor duda de que si el gobierno socialista acaba "limitando" la libertad religiosa en este país, el Islam no será afectado lo más mínimo. Está claro a por quiénes van.

Kal_El, sobre algo parecido a eso que cuentas escribí el mes pasado. Copio el post:

La democracia deja de ser un sistema legítimo si permite el asesinato de inocentes


La Humanidad ha conocido una gran variedad de sistemas políticos a lo largo de su historia. No es necesario enumerarlos todos. España se gobierna actualmente por un sistema democrático que, consideraciones aparte sobre su carácter partitocrático y sobre la deficiente separación real de poderes, no se diferencia gran cosa del resto de democracias occidentales. Por tanto, lo que se diga respecto a la democracia de nuestro país vale para el resto de las naciones que forman parte de ese concepto sociopolítico, y otrora religioso, llamado Occidente.

La doctrina social de la Iglesia Católica admite la legitimidad del régimen democrático e incluso tiene palabras elogiosas hacia el mismo. Así, podemos leer lo siguiente en encíclica la Centesimus annus de Juan Pablo II:

La Iglesia aprecia el sistema de la democracia, en la medida en que asegura la participación de los ciudadanos en las opciones políticas y garantiza a los gobernados la posibilidad de elegir y controlar a sus propios gobernantes, o bien la de sustituirlos oportunamente de manera pacífica” (Centesimus annus, 46).

Ahora bien, en esa misma encíclica, el recordado antecesor del actual Papa, advertía de lo siguiente:

Una auténtica democracia es posible solamente en un Estado de derecho y sobre la base de una recta concepción de la persona humana” (idem).

Aun más, el Papa polaco no dudó en afirmar que “si no existe una verdad última, la cual guía y orienta la acción política, entonces las ideas y las convicciones humanas pueden ser instrumentalizadas fácilmente para fines de poder. Una democracia sin valores se convierte con facilidad en un totalitarismo visible o encubierto, como demuestra la historia” (idem).

El problema de la democracia española no es la ausencia de valores. El drama es que los valores que se están integrando en el ADN del sistema son los de la cultura de la muerte. Habrá quien me llame fundamentalista por ello y sin duda no soy nada políticamente correcto, pero no puedo dejar de decir que un sistema que llama derecho al asesinato de un ser humano en el seno de su madre tiene, según mi comprensión de la doctrina católica, la misma legitimidad que pueda tener un sistema que permite el asesinato de un ser humano por el hecho de pertenecer a determinada raza o por profesar tal o cual credo.

En realidad, si el derecho a la vida es una cuestión a decidir en unas urnas, de tal forma que el voto de una mayoría, por muy cualificada que sea, justifica la limitación de ese derecho, ¿qué otros derechos no pueden ser conculcados y anulados a través del voto? O se admite un límite moral anterior y superior a cualquier régimen político, sea este el que sea, que no permita cruzar determinadas líneas, o no habrá forma de parar los abusos que siempre, siempre, acaban cebándose con los más desprotegidos de cualquier sociedad.

En definitiva, en España, y en gran parte de Occidente, estamos viviendo una gran farsa que, a su vez, refleja una gran verdad. A saber, que una sociedad enferma sólo puede producir una democracia corrupta como la actual, en la que uno de cada seis embarazos acaban en el cubo de la basura con el permiso de nuestros representantes en las Cortes.

Sin embargo, hemos de saber que no hay nada que haga el hombre que no acabe teniendo consecuencias. Si muerte sembramos, muerte recogeremos, si es que no la estamos recogiendo ya. No hace falta ser profeta para discernir que esta nación, si no se arrrepiente del camino de iniquidad en el que está caminando desde hace décadas, recibirá el pago que merece por su comportamiento. No sabemos bien en qué se traducirá tal cosa. Cuando lo sepamos, quizás será demasiado tarde para dar marcha atrás. Por eso es esencial que la Iglesia tome el protagonismo que le pertenece y, aun a riesgo de ser calumniada, vejada y despreciada por quienes viven ajenos a la misma o incluso por algunos de sus miembros, se comprometa a denunciar el avance de la cultura de la muerte y a promover la cultura de la vida de forma incansable y a través de todos los instrumentos de que dispone. Porque si los que somos cristianos no nos oponemos a lo que ven nuestros ojos, ¿quién lo hará?

Luis Fernando Pérez Bustamante

La izquierda mexicana esta detras de tales "avances" pro aborto, pro homosexualidad so pretexto de la protección a la libre determinación de las minorías.

El discurso es elocuente, los hechos lamentables.

No creo Luis sinceramente que la lucha genuina de los cristianos se gane en las urnas sino en el seno familiar. Al menos en México ya perdimos la batalla, de tal modo que en la ciudad de México gobernada por la izquierda el aborto es legal y el homosexualismo permitido

Esto significa que si por alguna extraña razón veo en la calle no con buenos ojos el que dos homosexuales vayan de la mano o se besen, seré yo no ellos quien habrá atentado contra "la ley de convivencia pacífica", y si por alguna razón les llamara la atención, por ejemplo diciéndoles que eso no es bueno a los ojos de Dios esto puede ser considerado un delito contra dicha "convivencia".

Nadie puede decirles absolutamente nada, pues conforme a la legalidad vigente, ellos y no nosotros "estan en su derecho".

En suma, la ley proteje la libre expresión y la conducta homosexual pero no la molestia ni la indigestión de otros por tales actos.

Lo mismo sucede con el aborto.

En "pro" de la tolerancia se ha creado un estado de excepción en la ciudad de México, donde todo esto y más es permitido.

Pero el problema tampoco lo ha solucionado ni mejorado muchos políticos de la dercha mexicana quienes representan al partido Acción Nacional, debido a problemas de doble moral.

Y es que politizar la moral, la libre decisión y demás, es un tema por demás controversial en una espiral de descalificativos dentro de una sociedad tan heterogenea.

La iglesia tiene su postura díafana y cristalina provida, pro valores y valientemente pone los puntos sobre las ies, pero de eso a que cambie la sociedad dogmáticamente o bien, por la via política es un quehacer muy arduo.

Un saludo.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Oso, dices que la lucha genuina de los cristianos no se gana en las urnas sino en el seno familiar. Bien, estoy de acuerdo en que la educación de los hijos es fundamental y que ahí es donde tenemos nuestro mejor ámbito de actuación. Ahora bien, ocurre que muchas leyes civiles, no sólo las religiosas, tienen un potencial de formación de conciencias muy importante. Es decir, si una ley admite el aborto, el mensaje que recibe la sociedad es que el aborto no es un crímen horrendo. Sabemos que la ley de Moisés fue buena porque hizo de pedagogo que nos llevó hasta Cristo. De igual manera, las leyes de ingeniería social de la izquierda llevan a las sociedades hacia Satanás, de forma clara y abierta. Y en tanto y cuanto que la democracia, al menos en teoría, permite la participación de todos en la vida pública y política, los cristianos debemos presentar la batalla a las tinieblas también en ese área. No podemos dejar la política en manos de los siervos del diablo. La luz de Cristo debe de iluminar también las legislaciones de nuestros países. Al menos, esa debe ser nuestra aspiración.


Conozco la situación en México DF, aunque también sé que son muchos los estados de tu país que se han blindado constitucionalmente contra el aborto, señal de que cuando los cristianos se ponen a hacer lo que deben y son mayoría, las cosas se pueden cambiar.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

La ley tenemos que cumplirla, nos guste o nos disguste. Existen medios para modificarla y libertad para opinar de ella. Pero eso no quita que tengamos la obligación de cumplirla, ni siquiera puede poner como excusa el desconocimiento. (El desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento).

Usted puede proponer a quien quiera el incumplimiento sistemático de una ley, pero asumiendo las consecuencias de sus actos. La Ley Orgánica 9/1985, de 5 de Julio, despenaliza el aborto en España en determinados supuestos. Ahora se quiere modificar la ley para poner una ley de plazos. A mi la ley de plazos no me convence, pero es lo que hay, y no obligan a abortar si no se quiere.

Otra cosa muy distinta es que, con la nueva ley, los médicos parece ser que pierden esa libertad que tenían antes de elegir (libertad de conciencia). Nuestros gobernantes han determinado que, supongo que porque se lo parece a ellos, la situación que se da en algunas comunidades autónomas (Navarra, como ejémplo más extremo) donde abortar es casi imposible por la negativa de los médicos, debe acabarse porque a ellos les parece.

La solución más lógica que encuentro es realizar un referendum. Si la mayoría opina a favor de una nueva ley de plazos, que esta se estudie y se apruebe. En caso contrario creo que la ley que tenemos puede servir, y siempre podemos modificarla para incluir nuevas excepciones, cambiar los plazos o modificar el texto para evitar que se vea superada por quienes buscan en esta ley un lucro.

En Portugal tuvieron un referendum para modificar su ley del aborto (muy similar a la española) y despenalizarlo (no se cómo está formulada la ley, por lo que no puedo opinar de ella). En España creo que sería inteligente hacer algo similar y evitarse cualquier problema derivado de uno u otro grupo.

Por otro lado, en España los 2 partidos mayoritarios (tanto PP como PSOE) están a favor de modificar (ninguno de los dos tiene intención de suprimir) la actual ley del aborto para evitar ciertos abusos que se cometen por parte de algunas clínicas abortistas (las hay muy poco éticas). Difieren en el modelo que desean, unos critican la ley de plazos (PP) y defienden modificar la actual para "actualizarla" a las nuevas situaciones sociales.


Con respecto al matrimonio entre personas del mismo sexo, en junio de 2004 el CIS hizo pública una encuesta en la que se dejaba claro que el 66% de los españoles estaban a favor de que se legalizasen.

Atentamente Cthulhu.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

La ley tenemos que cumplirla, nos guste o nos disguste, dice Cthulhu. Bien, digamos que el parlamento aprueba que a los que padecen alzheimer avanzado hay que meterles por vena una inyección letal. Entonces los médicos cristianos no podrían negarse a hacer tal cosa. Tienen que cumplir la ley tanto si les disgusta como si no.

Según usted, lo que apruebe un parlamento elegido democráticamente, sea lo que sea, ha de ser obedecido. Da igual que la ley sea inmoral, brutal, lesionadora de derechos fundamentales, etc, etc. Se obedece y listo.

Bien, pues esa concepción de la democracia es sencilla y llanamente la de la victoria del totalitarismo de la mayoría sobre la minoría. Porque estoy convencido de que si ese mismo parlamento aprobara una ley por la que se prohíbe al ateísmo o se condena el adulterio y las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo con pena de cárcel, o que se implantara la pena de muerte contra los que roban lechugas, usted pondría el grito en el cielo.

Recuerden usted que la vida da muchas vueltas. Que lo que hoy es "democráticamente aceptable", mañana puede ser "democráticamente condenable". Cuando el bien y el mal dependen de unas urnas, no hay ni bien ni mal.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

La ley tenemos que cumplirla, nos guste o nos disguste. Existen medios para modificarla y libertad para opinar de ella. Pero eso no quita que tengamos la obligación de cumplirla, ni siquiera puede poner como excusa el desconocimiento. (El desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento).

Usted puede proponer a quien quiera el incumplimiento sistemático de una ley, pero asumiendo las consecuencias de sus actos. La Ley Orgánica 9/1985, de 5 de Julio, despenaliza el aborto en España en determinados supuestos. Ahora se quiere modificar la ley para poner una ley de plazos. A mi la ley de plazos no me convence, pero es lo que hay, y no obligan a abortar si no se quiere.

Otra cosa muy distinta es que, con la nueva ley, los médicos parece ser que pierden esa libertad que tenían antes de elegir (libertad de conciencia). Nuestros gobernantes han determinado que, supongo que porque se lo parece a ellos, la situación que se da en algunas comunidades autónomas (Navarra, como ejémplo más extremo) donde abortar es casi imposible por la negativa de los médicos, debe acabarse porque a ellos les parece.

La solución más lógica que encuentro es realizar un referendum. Si la mayoría opina a favor de una nueva ley de plazos, que esta se estudie y se apruebe. En caso contrario creo que la ley que tenemos puede servir, y siempre podemos modificarla para incluir nuevas excepciones, cambiar los plazos o modificar el texto para evitar que se vea superada por quienes buscan en esta ley un lucro.

En Portugal tuvieron un referendum para modificar su ley del aborto (muy similar a la española) y despenalizarlo (no se cómo está formulada la ley, por lo que no puedo opinar de ella). En España creo que sería inteligente hacer algo similar y evitarse cualquier problema derivado de uno u otro grupo.

Por otro lado, en España los 2 partidos mayoritarios (tanto PP como PSOE) están a favor de modificar (ninguno de los dos tiene intención de suprimir) la actual ley del aborto para evitar ciertos abusos que se cometen por parte de algunas clínicas abortistas (las hay muy poco éticas). Difieren en el modelo que desean, unos critican la ley de plazos (PP) y defienden modificar la actual para "actualizarla" a las nuevas situaciones sociales.


Con respecto al matrimonio entre personas del mismo sexo, en junio de 2004 el CIS hizo pública una encuesta en la que se dejaba claro que el 66% de los españoles estaban a favor de que se legalizasen.

Atentamente Cthulhu.

Legalizar el asesinato de personas esta contra la Ley Natural, no existe etica en asesinar a un ser humano indefenso e inocente, al cual no se le otorga el derecho a la defensa de su propia vida o dignidad humana.Esta contra la Libertad del Razonar en procura del Bien
El objetar de conciencia va mas alla, termina en persecucion,incluyendo carcel o muerte.Nada nuevo en este mundo.

La plebe es ignorante, por lo que el voto supuestamente democratico y legal se ha convertido en un aliado de los crimenes contra la Humanidad o contra el Hombre.Nada nuevo en este mundo.

El PSOE es un partido fervorosamente anticristiano, sobre todo catolico-fobico
El PP no es un partido cristiano, un partido mas, de esos que se someten a la Izquierda, que terminan complementandola.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

La ley tenemos que cumplirla, nos guste o nos disguste, dice Cthulhu. Bien, digamos que el parlamento aprueba que a los que padecen alzheimer avanzado hay que meterles por vena una inyección letal. Entonces los médicos cristianos no podrían negarse a hacer tal cosa. Tienen que cumplir la ley tanto si les disgusta como si no.

Según usted, lo que apruebe un parlamento elegido democráticamente, sea lo que sea, ha de ser obedecido. Da igual que la ley sea inmoral, brutal, lesionadora de derechos fundamentales, etc, etc. Se obedece y listo.

Bien, pues esa concepción de la democracia es sencilla y llanamente la de la victoria del totalitarismo de la mayoría sobre la minoría. Porque estoy convencido de que si ese mismo parlamento aprobara una ley por la que se prohíbe al ateísmo o se condena el adulterio y las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo con pena de cárcel, o que se implantara la pena de muerte contra los que roban lechugas, usted pondría el grito en el cielo.

Recuerden usted que la vida da muchas vueltas. Que lo que hoy es "democráticamente aceptable", mañana puede ser "democráticamente condenable". Cuando el bien y el mal dependen de unas urnas, no hay ni bien ni mal.

Oiga, primeramente si quieren, en España, poner una ley que mate a los que padecen alzheimer, o una que prohiba el ateismo o que afecte a cualquiera de los derechos fundamentales incluidos en la constitución, deberán cambiarla (o dar un golpe de estado). Y para ello es necesario un referendum a nivel nacional. Si entonces se aprueba, pues yo estaré en contra, pero que quiere que le diga, si la mayoría desea eso, puedo patalear, o llorar, pero no mucho más (o tratar de hacer el golpe de estado que antes mentábamos). Cómo ha de ser un cambio constitucional está escrito en la propia constitución, y el proceso incluye un referendum nacional y la aprobación de ambas cámaras. Si en el referendum sale un voto contrario al cambio entonces no habrá cambio, en caso contrario el cambio en la constitución seguirá.

Por cierto, me informé y confirmé (como ya me parecía) que la clausula que obliga a los médicos a practicar el aborto es inconstitucional, por lo que seguramente será recurrida por el PP, si es que llega a ponerse. Sin embargo, en el anteproyecto de ley sólo se dice que la sanidad pública garantizará la práctica del aborto o la financiará en centros privados. No dice nada de que se obligará a los médicos que no quieran a hacerlo, sólo que se garantizará la práctica bien sea en centros públicos o privados.

Obviamente la democracia tiene sus fallos, pero dígame algún otro sistema que sea más justo.

Por otra parte la ley ha de ser obedecida, o en caso contrario atenerse a las consecuencias de los actos. Quiero decirle, que una ley que le parezca injusta puede decidir de motu propio incumplirla, pero que, en caso de que le detengan, multen o le impongan cualquier otra pena por ello, tampoco puede hacer nada por evitarlo.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Legalizar el asesinato de personas esta contra la Ley Natural, no existe etica en asesinar a un ser humano indefenso e inocente, al cual no se le otorga el derecho a la defensa de su propia vida o dignidad humana.Esta contra la Libertad del Razonar en procura del Bien
El objetar de conciencia va mas alla, termina en persecucion,incluyendo carcel o muerte.Nada nuevo en este mundo.

La plebe es ignorante, por lo que el voto supuestamente democratico y legal se ha convertido en un aliado de los crimenes contra la Humanidad o contra el Hombre.Nada nuevo en este mundo.

El PSOE es un partido fervorosamente anticristiano, sobre todo catolico-fobico
El PP no es un partido cristiano, un partido mas, de esos que se someten a la Izquierda, que terminan complementandola.

Oiga, que yo estoy, personalmente, en contra del aborto. Pero la democracia es, a mi entender, el mejor sistema que hemos creado para gobernarnos, con sus defectos, pero a día de hoy el mejor.

El problema del aborto viene de que, legalmente, un feto es persona con derechos en el momento en que nace (siendo sietemesino, o nuevemesino, desde que nace). La constitución española no legisló nada acerca de los neonatos, por lo que cualquier ley corresponde realizarla al parlamento. Puede gustarnos, disgustarnos o lo que quiera, pero es lo que tenemos, y como yo no veo, por ahora, un sistema mejor, pues habrá que apechugar.
 
Re: Caamaño nos pone a los cristianos ante la evidencia

Obviamente la democracia tiene sus fallos, pero dígame algún otro sistema que sea más justo.

¿En qué sentido se refiere con eso de "más justo"? ¿qué criterios debemos usar los cristianos para juzgar la justicia de tal o cual sistema político?

Por ejemplo, ¿qué es más importante para nosotros? ¿el derecho a la vida o el derecho a la libertad política o sindical?

Yo no digo que la democracia sea mala "per se". Lo que sí digo es que si la misma no tiene unos límites morales mínimos, si se salta la ley natural, es tan nefasta como cualquier otro sistema político que haga lo mismo sin urnas de por medio.