-Es más que obvio que pretendes desacreditar mi aporte bíblico (el de Lucas 16:24) con el pretexto de que aquella narración fue una parábola, pero las evidencias que resultan del argumento dado refutan tu pretensión, y por supuesto que Abraham en el sector bieaventurado del Hades, sabía mucho más y mejor que los engreídos fariseos disgustados con las enseñanzas de Jesús. Abraham desde la ascensión de Cristo al cielo ya no habla con las personas atormentadas en el infierno, pero nosotros que somos hijos espirituales del creyente Abraham, testificamos de la realidad a la que muchos tarde despiertan.
Ni nunca habló Abraham a nadie de los atormentados. El tormento nunca existió ni existe, aunque existirá. Este entendimiento es para el que hace caso a la palabra. Tú tratas de sacar una doctrina interpretando el significado de una parábola y echas por tierra la enseñanza bíblica de que somos polvo y cuando morimos vamos al polvo; lo cual está escrito como enseñanza y no como parábola.
Entiende que la escritura dice que Abraham es polvo y volvió al polvo y no a una cárcel de la cual es guardián, llamada paraíso o seno de Abrahán, eso es un chiste tuyo, de mal agrado.
Antes de tu invento acerca del seno de Abrahán, ya la palabra decía que Dios dijo que todo hombre vuelve al polvo y no al Seno de Abrahán, quien aún no existía cuando fue enseñado que el hombre vuelve al polvo.
La escritura dice que el hombre ES POLVO y tú dices que no. Tú dices que es un alma inmortal que va al seno de Abrahán o al que tú llamas tormento y llamas hades. Hades significa “lugar de muertos”. Pero tu opinión es que significa lugar de muertos atormentados en llamas de fuego.
Es bien sabido que el lugar de los muertos es el cementerio y allí están todos los que se mueren y para allí vas tú también. No irás a ningún seno de Abrahán. Tanto justos y malos mueren y van al polvo. Escrito está, no inventes más.
Enseñanza de Dios:
-El que se muere va al polvo al morir. Gén.3:19
Enseñanza de tradiciones humanas:
-El hombre va al paraíso o al infierno al morir.
Enseñanza de Dios:
-El alma que peca muere. Eze.18:4
Enseñanza de tradiciones humanas:
-El alma no muere; se va para el paraíso o para el tormento eterno.
Como ves, puedes engañarte a ti mismo; pero a Dios no puedes engañar. Puedes creer lo que quieras pero no cambiarás la realidad. Todo está escrito, no importa si lo crees o no.
Entonces solamente puedes hacer 2 cosas:
- Aceptar las escrituras
- O dar coces contra el aguijón, torciendo las escrituras y dándole a las parábolas tu interpretación privada, engañándote a ti mismo.