Re: UNA MUJER......
Siempre me llamó la atención estas  cinco mujeres: Maala, Noa, Hogla, Milca y Tirsa.  Las hijas de Zelofehad. Hijo  de Hefer, hijo de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés, de las  familias de Manasés hijo de José. Estas se presentaron delante de Moisés  y delante del sacerdote Eleazar, y  delante de los príncipes y de toda  la congregación, a la puerta del  tabernáculo de reunión, y dijeron:
 Nuestro padre murió en el desierto; y él no estuvo en la compañía de  los  que se juntaron contra Jehová en el grupo de Coré, sino que en su   propio pecado murió, y no tuvo hijos.
¿Por qué será quitado el nombre de nuestro padre de entre su familia,   por no haber tenido hijo? Danos heredad entre los hermanos de nuestro   padre.
Y Moisés llevó su causa delante de Jehová. Y Jehová respondió a Moisés,  diciendo: Bien dicen las hijas de Zelofehad; les darás la posesión de  una heredad  entre los hermanos de su padre, y traspasarás la heredad de  su padre a  ellas.
Y a los hijos de Israel hablarás, diciendo: Cuando alguno muriere sin  hijos, traspasaréis su herencia a su hija. Si no tuviere hija, daréis su  herencia a sus hermanos; y si no tuviere hermanos, daréis su herencia a  los hermanos de su padre. Y si su padre no tuviere hermanos, daréis su  herencia a su pariente más  cercano de su linaje, y de éste será; y para  los hijos de Israel esto  será por estatuto de derecho, como Jehová  mandó a Moisés. Num 27:1-11
Hoy vamos a considerar este relato, que tratan de  las cinco hijas de un  jefe que participó de la conquista de la Tierra  Prometida, Zelofehad.  Aquí se nos habla de dos generaciones de  israelitas. La primera,  compuesta por los que fueron  liberados de Egipto. No tuvieron  suficiente fe en Dios y debieron vagar  durante 40 años por el desierto.  No recibieron la tierra. Pero ahora se hace el censo, en la segunda  generación, para establecer el reparto del territorio, en proporción al  número de miembros  de la tribu, contando los hombres de cada una. Pero  en la familia de  Zelofehad no quedan hombres. Sólo cinco hijas mujeres.  
Vemos que el censo se realiza en el desierto. El pueblo está listo para  entrar a la tierra prometida. Hay una frontera que cruzar. Y aquí están  las cinco mujeres  de una familia sin hombres. Saben que el futuro del  pueblo se juega en  este censo. Si sólo se da tierra a los hombres, su  nombre  desaparecerá.La casa de Zelofehad no tendrá futuro. La  promesa  de Dios de que cada uno habitará en paz en su tierra no se  cumplirá en  ellas. 
Maala, Noa, Hogla, Milca y Tirsa se presentaron  delante de Moisés y  delante del sacerdote Eleazar, delante de los  príncipes y de toda la  congregación, a la puerta del Tabernáculo de  reunión, y dijeron: 
"Nuestro padre murió en el desierto. Él no estuvo en la compañía de los  que se juntaron contra Jehová, y no tuvo hijos. ¿Por qué será borrado el  nombre de nuestro padre de su familia? ¿Por no haber tenido hijos  varones?. Danos  alguna heredad entre los hermanos de nuestro padre".  ¿Dónde se pararon  las cinco hermanas y frente a quiénes?. 
En el lugar más sagrado y  ante las mayores autoridades. Muy decididas  hablan pidiendo justicia .No se rebelan frente a Dios ni a su profeta,  Moisés. Sólo piden justicia. Pretenden una porción de tierra para que el  nombre de su padre no se pierda. 
¿Qué ocurre entonces? ¿Por qué Moisés llevó su causa delante de Jehová?. Y Jehová le respondió? "Bien  dicen las hijas  de Zelofehad; les darás la posesión de una heredad   entre los hermanos  de su padre, y traspasarás la heredad de su padre a   ellas."
Estas mujeres mostraron mucha sabiduria al confiar en Dios y una actitud de respeto al mimo tiempo de valentia ante las mayores autoridades  para que no se le negara esta petición. Todas ellas manifestaron un  principio de confrontación y un espiritu de cooperación perfectamente  equilibrados.
El espiritu de confrontación lo ilustra su ataque a la injusticia, y el  de cooperación, su aceptación de la decisión por los ancianos (Num  36.2-12) de que debian casarse dentro de su propia tribu.
Dios las defendio porque le reconocieron como Proveedor y Libertador.  Ellas ponen de manifiesto cómo sobreponerse en nuestros dias a la  desigualdad mientras se mantiene un espiritu de consagración.