Reuniendo nuevos aportes y unificando el mensaje:
Un sueño satánico que te aparta de Jesús
Quiero alertarlos de una realidad espiritual que no debemos ignorar. Se trata de la existencia de seres espirituales malignos como lo son Satanás y los demonios.
Son muy variadas las formas que utilizan para apartar a la gente de Dios y de la verdad.
En este mensaje procedo a explicar una de las más malignas conspiraciones satánicas que sufrimos las personas. Utilizo pasajes bíblicos (en negrita) para refutar la actuación del maligno.
Primero entra en acción un falso profeta o soñador de sueños el cual nos habla (a su víctima) de un sueño que tuvo, que le alerta de la posible existencia de una deidad desconocida.
Deuteronomio 13:1-3
“1Cuando se levantare en medio de ti profeta, o soñador de sueños, y te anunciare señal o prodigios,
2 y si se cumpliere la señal o prodigio que él te anunció, diciendo: Vamos en pos de dioses ajenos, que no conociste, y sirvámosles;
3 no darás oído a las palabras de tal profeta, ni al tal soñador de sueños; porque Jehová vuestro Dios os está probando, para saber si amáis a Jehová vuestro Dios con todo vuestro corazón, y con toda vuestra alma.”
Lo que resulta traumático para la víctima es que al poco tiempo después de hablar con el soñador de sueños, la víctima tiene el sueño antes mencionado.
En el sueño se le muestra una imagen de una cabeza que es herida de espada y que luego es sanada.
Puedo decir que la imagen que Satanás le muestra a sus víctimas en el sueño, por momentos se asemeja al rostro de lo que la humanidad hoy reconoce como un extraterrestre.
Esta imagen es llamada en la Biblia la imagen de la bestia:
Juan vio la imagen de la bestia:
Apocalipsis 13:3
“3 Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia,”
El objetivo de Satanás con esta conspiración es apartar a la gente de Jesús, aparentando la existencia de otra deidad desconocida, un dios que no es el Dios que predicó Cristo.
A esto se le suma la entrada en acción de la segunda bestia que se menciona en Apocalipsis 13 que se trata de demonios que se manifiestan en personas que caen de espaldas (al manifestarse el demonio) y traen mensajes de las tinieblas e inducen a la gente a adorar a la imagen de la bestia. (Ver siguiente mensaje: posesión demoníaca)
Los demonios inducen a la gente a que representen la imagen de la bestia:
Apocalipsis 13:14
“14 Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió.”
Los demonios (la segunda bestia de Apocalipsis 13) poseen poderes psíquicos.
Apocalipsis 13:13
“13 También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del cielo a la tierra delante de los hombres.”
Esto es de interpretación literal pero sucede en forma de visión, es decir el demonio le hace ver a la víctima como si se produjera una tormenta de fuego que cae del cielo, pero no sucede realmente, es algo que la persona ve influenciada por el poder psíquico del demonio.
(Satanás y los demonios no pueden hacer descender fuego real y literal desde el cielo a la Tierra como lo podemos deducir del episodio de Elías y los profetas de Baal, cuando los profetas de Baal oraron a sus dioses (Satanás) y no pudieron lograr que estos hicieran descender fuego del cielo para consumir el holocausto cosa que Elías si logró al rezarle a Jehová.)
La Biblia afirma que los que adoren la imagen de la bestia serán condenados.
Apocalipsis 14:6-10
"6 Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo,
7 diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas.
8 Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación.
9 Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano,
10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;"
Quiero recordar que uno de los diez mandamientos prohíbe la adoración de imágenes:
Éxodo 20:4-5
“4 No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.
5 No te inclinarás a ellas, ni las honrarás…”
También leemos en 1 Corintios 10:14:
“14 Por tanto, amados míos, huid de la idolatría.”
[Una prueba de que Satanás posee poderes psíquicos la podemos obtener al analizar el pasaje bíblico de la tentación de Jesús por parte de Satanás:
Lucas 4:5-6
"5 Y le llevó el diablo a un alto monte, y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra.
6 Y le dijo el diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha sido entregada, y a quien quiero la doy."
¿Cómo hizo Satanás para mostrarle todos los reinos de la Tierra en un momento? Es en virtud de sus poderes psíquicos.]
Tomemos consejo de la Biblia:
Eclesiastés 5:7
"7 Donde abundan los sueños, también abundan las vanidades y las muchas palabras; mas tú, teme a Dios."
Otro de los engaños que hacen los demonios a sus víctimas es hacerles pensar que la imagen de la bestia que se les ha mostrado en el sueño es la imagen del rostro de Dios, pero hermanos déjenme decirles que nadie jamás ha visto el rostro de Dios en toda su gloria a excepción de Jesús:
Juan 6:46
“46 No que alguno haya visto al Padre, sino aquel que vino de Dios; éste ha visto al Padre.”
Ni aún Moisés una de las personas que más en comunión con Dios estuvo le vio el rostro a Dios, veamos lo que le dijo Dios a
Moisés:
Éxodo 33:20
“20 Dijo más: No podrás ver mi rostro; porque no me verá hombre, y vivirá.”
Juan dice que a Dios nadie lo ha visto Jamás:
Juan 1:18
“18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.”
Pablo dice que Dios es invisible:
1 Timoteo 1:17
“17 Por tanto, al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén.”
Hay algunos pasajes de la Biblia en que algún personaje dice haber visto a Dios cara a cara, pero es una forma de expresar la intimidad que tuvo con una manifestación de Dios como su ángel, ya que el pasaje de Éxodo 33:20 es claro y explícito con que nadie ha visto el rostro de Dios a excepción de Jesús.
Cuando Jesús dice: “El que me ha visto a mi ha visto al Padre” está diciendo que él es la verdadera imagen del Dios invisible, Jesús es la manifestación más gloriosa de Dios que los hombres han podido ver jamás.
Maximiliano Castagnino.
